Eso rompió todos mis esquemas que desaparecieron junto con mis ilusiones. Cierto escudarme bajo Jisoo no es lo más ético del mundo pero realmente tenía fé en que por alguna pequeña posibilidad tuviese suerte y no se dieran cuenta de mi presencia.

-¿Se acuerdan de Blake, el chico de Florida del que les hablé? Pues estábamos en su casa y entonces....-paró y me miró intentando descifrar mi reacción- ¿Dahi estás bien?

-Solo quedo yo- fue lo único que pude decir y las tres callaron al instante.

-¡A la es verdad! Prepárate...

-Jennie no me ayudas.

-Si te sirve de consuelo he oído que hay un chico italiano/Coreano nuevo - intentó calmarme Lisa —prometo dejar que lo intentes tú antes.

-Nadie se ha enterado de que ya nos válida para su mierda de competición así que puedo....

-¿Jisoo ya no es virgen?

Genial, lo que me faltaba Ailee se acaba de enterar. Estaba detrás de Jisoo sonriendo maliciosamente.

Esa tiparraca es odiosa, si alguna información cae en sus manos créeme, al día siguiente todo el país, estará en el New York times y saldrá en los informativos de todo el país.

-Ailee mira, si no dices nada yo....- casi no había comenzado la frase y ella ya no estaba, había ido a divulgarlo en aproximadamente dos minutos todo el mundo sabrá que soy la única.

Algún día la secuestrare y meteré en mi desván amordazada, ese momento llegará y pueda que me denuncien por secuestro pero oye, me habré quedado a gusto.

-Cómo la odio, me dan ganas de darla como comida para mis gatos, el señor rufus tiene problemas intestinales y no puede comer carne pero siempre puede escupirle las bolas de pelo en la cara.

-Admito que disfrutaría viendo eso- Sonó el timbre dentro del edificio y sabíamos que teníamos que entrar.

Abrí la puerta lentamente y al notar mi presencia fue como si todo el colegio se girara en mi dirección.

Recorrer ese pasillo fue la cosa más incómoda que he hecho en mi vida pero tenia que cruzarlo para llegar a por mí horario.

Cuchicheos, miradas,gente señalando y un sin fin de detalles más que hacían que deseara tener rayos X en los ojos a lo Superman y partirles a todos por la mitad.

Decidí hacerme la digna y levanté la cabeza intentando ignorar por completo los corrillos que se estaban formando para hablar del tema hasta que llegué a secretaria y deseé volver al pasillo MJ estaba delante de mí solicitando su horario que esperaba que no coincidiera con el mio.

-Hola Dahi ¿Qué tal el verano?

-Bien- respondí cordial- ¿y el tuyo?

-Bien también mi padre ha tenido que entrenar al equipo ya sabes, no quiere admitir que se tiene que jubilar, el fútbol americano es su vida, y pasar de ser uno de los mejores jugadores del equipo a darse cuenta de que se tiene que retirar le duele así que ahora va a ser entrenador.

La verdad es que MJ tras su fachada de deportista egocéntrico es bastante mono y siempre me he llevado muy bien con él...¡No! ¡Cha Dahiara no dejes que se metan en tu cabeza, fijo tiene poderes chungos mentales que ponen esos pensamientos en tu cerebro! Definitivamente ver tanto Netflix me afecta.

-Me alegro de que estes bien y da saludos a tus padres de mi parte.

- Oye...

No le dejé empezar, cogí el papel que me entregaba la secretaria y me di a la fuga como la cobarde que soy.

Corriendo llegué a mi taquilla para poder descargar los libros y por fin pude suspirar tranquila, pero esa sensación duró poco ya que cuando acabé de poner mis cosas noté una presencia alarmantemente cerca de mí.

Cerré la taquilla y ahí estaba JinJin, como siempre impecablemente vestido y con su característica sonrisa traviesa.

-Vaya, con que tu vas ha ser mi compañera de taquilla, no podría estar más contento.

-Hola JinJin yo también me alegro de verte -¡Ironía!

-Sabes, siempre me has atraído, fuiste mi primer objetivo pero como dicen, lo mejor para el final.

-Por favor, por favor te lo suplico no tengas intenciones sexuales conmigo, somos amigos desde hace años que más da que sea virgen o no yo...

-No sabes lo que me pone que me supliques, cuando estés en mi cama lo harás mucho más.

-¡Ahh! De verdad vete a la mierda, no me pienso acostar contigo ni en sueños.

-Oh en mis sueños claro que lo harás, todos las noches tu aparecerás y...

-¿JinJin ya empiezas?

Esa voz, cada vez que la escucho siento que me va a dar un infarto. Mi corazón comenzó a latir a un ritmo frenético. Rocky, su mera presencia hace que mis piernas flaqueen, sienta que se pare el tiempo y solo pueda escuchar el sonido de mi corazón que va a la velocidad de un ciclista que está haciendo el tour de Francia.

Me giré lentamente intentado controlar el rojo de mis mejillas.

-Hola Rocky —fue lo único que pude emitir.

-Dahi te he echado de menos - y me abrazó o dios mío ¡empótrame en el cuarto del conserje! Si, esa soy yo teniendo pensamientos obscenos con él. - perdona a JinJin tiene las hormonas a niveles celestiales.

-¿Y cuando no ha sido así? - dije riendo.

JinJin puso teatralmente un gesto de indignación y Rocky sonrió.

-Dahi, te presento a Moonbin, amigo mío, es italiano/Coreano, sus padres son los embajadores de Italia y se quedará aquí este año.

-Encantada - me acababa de dar cuenta de que había alguien más aparte de Rocky y yo en esta galaxia.

Un chico muy guapo con un bonito pelo castaño claro, los ojos verdes y la forma física de un modelo de calzoncillos me examinaba de arriba a abajo.

-¿Por ella es toda esta movida?

-Hablas como si estuviera sobre valorada -respondí indignada.

-Lo estás, eres guapa y estas buena, pero aparte de eso no hay mucha sustancia.

Su desfachatez me dejó sin saber que decir y sólo pude fruncir el ceño hasta que sin encontrar las palabras correctas solté lo primero que se me pasó por la cabeza.

-¡Quien te crees tu italianini de las narices! ¡Se te ha quedado el cerebro fofo de comer tanto tortelini o qué!

Sonrió mostrándome una perfecta y brillante dentadura.

-¿italianini?

-Sí ¿algún problema?

-Vaya, tienes carácter, pero sigues sin ser interesante.

Creo que me puse roja de ira.

-JinJin sujetame porque juro que me meten en la cárcel por homicidio.

-Con mucho gusto, desde la cárcel no podemos tener sexo.

-Ya nos veremos - fue lo único que dijo el idiota.

-Espero que no.

Rocky se acercó a mi oído.

-Tranquila, en el fondo le caes bien. Me alegra ver que estas bien. -la sensación de su aliento en mi oreja hizo que un cosquilleo recorriera mi cuerpo y un pequeño suspiro se me escapara.

Roja y con más vergüenza que Jennifer Lawrence en su caída de los Óscar tapé ligeramente mi cara con el pelo para evitar que viera que parecía un tomate.

Me guiñó un ojo y se fue.

Morí en ese momento, la sensación de esas cosquillas en mi oído, su colonia ¡Me vuelve loca!

-Dahi, no olvides que cada uno juega de una manera, pero que al final todos juegan. -Soltó JinJin y se fue.

✨✨✨

Amo esta historia 😻