- Aquí me siento yo- Amandine me miró y negó con la cabeza.

Acababa de llegar a clase y en mi sitio estaba sentada doña "me tocas y me sonrojo". Todas mis cosas estaban fuera del pupitre y estaba metiendo la suyas.

-Entiendo que estes desubicada por que acabas de llegar aquí y todo tiene que parecerte muy confuso pero aquí me siento yo, tú te sientas ahí- señalé el pupitre dónde se había sentado ayer.

Ella negó con la cabeza- Escuchame alomojor no me has entendido bien con lo de que eres francesa: Tú te sientas ahí- volví a señalar el otro pupitre- yo me siento aquí.

-Te he entendido a la primera, pero cuando he venido Marco- se volvió a sonrojar al decir su nombre- me ha dicho que mi nuevo sitio es este.

La cólera comenzó a apropiarse de mi cuerpo y dudé entre a cual de los dos matar primero.

- Me da igual lo que te haya dicho Marco si se quiere poner contigo que mueva su culo y se vaya a otro sitio pero este pupitre es mío.

-Parece que sigues sin compartir con los nuevos ¿las buenas costumbres no cambian señorita Graham?- la rotermeyer estaba detrás de mí con los brazos cruzados.

-Roter...digo señorita Read este es mi sitio y...

-Lo sé pero el señor Ricci me preguntó ayer y yo le di permiso,usted se sentará con la señorita Royce. ¿Le parece bien?

Bufé-si señorita Read

Me senté al lado de Grace la cuál me miraba con su cara de "te lo dije"

-Escuchame cuanto más lo pienses peor te lo digo por experiencia, dolerá un tiempo pero volverás a recomponerte eso sí no le dejes ver que te ha afectado.

La sensación que tenía era rara, cómo si lo que estaba pansando fuera irreal algo que a mí no me podía suceder.

Supongo que es algo que les pasa a muchas adolescentes,ser usados y hacerse falsas esperanzas para luego solo tener humo. Pero realmente nunca pensé que me pasaría.

Toda la clase no pude evitar mirarles figamente. Estuvieron haciendo manitas cada segundo, de vez en cuando Marco me miraba de reojo y sonreía cómo si se le alegrara de mis celos. En esos momentos yo no trataba de ocultarlo así que seguía manteniendo la mirada de "si te descuidas acabas a trozos en una bolsa de basura".

-Liv tienes que dejar de mirarles- la voz de Grace me sacó de mis pensamientos

-La odio, ojalá la induzca un ovni,la saque su pequeño cerebro y la diseque.

-Liv sabes perfectamente que ella no tiene culpa de nada es Marco el que juega con tus sentimientos no Amandine. Además estoy convencida de que si la conocieras te caería bien y...

-¡No! Es sencillamente insoportable "Ay Marco,me ha pasado un boli espera que sonrojo" " Ay Marco que guapo eres" "Ay Marco necesito un macho italiano cómo tú para que salve a una delicada francesa como yo". - dije imitandola y Grace contuvo la carcajada. Lo que más me molestaba era que sabía perfectamente que la culpa de esto no la tenía ella y Grace tenía razón pero de ninguna manera voy a hacerme su amiga y me explique lo que contienen las notas de Marco.

-Pues aunque no lo creas a veces parecías ella.

-¡Grace Royce ese es un insulto imperdonable! Yo jamás he sido tan ñoña.

-Ya ya...en el fondo pensé que de verdad el estaba por ti y que te dijero lo contrario eran celos por que tu hubieras conseguido lo que yo perdí.

-Grace Aiden está por ti se ve a kilometros y tú también estás por él.

Enrojecio y negó con la cabeza- No por su puesto que no yo le odio y a él le gustan todas las chicas de esta maldita clase así que no hay más que hablar.

Puse los ojos en blanco y miré a Paul.

Puede que mis sentimientos por Marco sean una imaginación de mi cerebro para intentar olvidar al que ha sido mi crush máximo desde los siglos de los siglos Amén.

Puede que si tengo algo con él Marco deje de importarme.

Así que hechando mano de esa seguridad repentina que me sale en algunos momentos decidí acercarme a Paul.

Me incliné poniéndome a su lado de tal manera que dejaba unas maravillosas vistas de mi culo a la persona que se sentaba en el pupitre de atrás que por una casualidad nada intencionada era Marco y a su lado Amandine.

-Hola Paul- medio susurre intentando poner voz de intensa cómo si fuera una chica Bond.

-Hola Liv yo...-y automáticamente su mirada bajó hasta mi escote ya que tenía los primeros botones de la camiseta desabrochados.

-Sabes...ya no tengo la regla.- Porfavor que pille la inderecta o esto va a ser tremendamente vergonzoso.

Pero lo entendió porsupuesto que sí y me sonrió pícaro.- ¿Quieres quedar para estudiar el domingo?

Sus ojos dejaban reflejado que no íbamos a estudiar y fue entonces cuando dudé

-Marco no entiendo esta ecuación- la irritante voz de Amandine disipó mis dudas.

-Por supuesto- le dije coqueta- ¿te viene bien en mi casa a las seis?

Se acercó un poco más a mí y susurró en mi cuello- perfecto.

Quise darme la vuelta para ver a Marco pero al girarme no estaba.

-¿Me dejas pasar?- dijo frío a mi lado

-Puedes pasar por cualquier otro sitio resuelta que esta clase es muy grande.

-Olivia déjame pasar- parecía muy enfadado,supongo que lo de sacarnos de quicio es mutuo.

-No- le reté

Puso los ojos en blancos y pude ver que una pequeña sonrisa luchaba por salir en él aunque consiguió contenerla.

Yo volví a mi conversación con Paul hasta que unos segundos después un cuerpo me aplastó contra la mesa y lo sentí:Su erección,estaba cachondo ¿Por mí o por la manitas con Amandine? Yo le había puesto el culo en la cara pero....

-¡¿Pero a ti que te pasa?! Casi me axfisias

-Si me hubieras dejado pasar no lo habría tenido que hacer-Le dio un sorbo al café que llevaba en un termo y me miró fijamente intentando averiguar mi próximo paso.

-Sabes que te digo, no tienes remedio- puse los ojos en blanco y comencé a examinar las marcas que había en mi cadera por haber sido apretada con fuerza contra la mesa de Paul. El cuál las rozó levemente.

-¿Te has hecho daño?

Negué y él siguió acariciando con las yemas de los dedos las marcas.

En ese momento noté que alguien derramaba un líquido sobre mi espalda.

No me hizo falta girarme para saber quien había sido

-¡A ti que te pasa!

El cerró el termo- ha sido sin querer últimamente estoy un poco torpe

-¡Lo has hecho a propósito!- me quité la chaqueta de la escuela que ahora estaba llena de café.

- ¿y por qué iba a desperdiciar mi café favorito en tirartelo? Eres demasiado egocéntrica deja de pensar que todo lo que hago va dirigido a ti.

Maldito estupido

-Sinceramente creo que por celos- demasiada casualidad que haya sucedido justo cuando hablo con Paul

Soltó una pequena carcajada sarcástica- Liv para estar celoso deberías gustarme cosa que para tu disgusto no siento- Auch duele- Has sido una más o menos diría yo por qué has sido tan estrecha que nisiquiera hemos llegado a tener sexo.

K.O no sabía que decir, me temblaban las piernas y las lágrimas amenzaban con salir encuanto interara hablar y mis pequeñas esperanzas se apagaron definitivamente.

-Marco te has pasado...- Paul se levantó en actitud defensiva y yo le puse la mano en el pecho para frenarlo.

- ¿Quieres hacerme daño?- me miró confuso y no respondió-Por que llamarme estrecha y decir que no sientes nada por mí no me afecta en absoluto-Mentira- Es cierto que pensé que eras distinto pero te repito nunca he sentido nada por ti te guste o no ya es hora de que lo aceptes.

Me di la vuelta y me fui