-Papa, ¿Dónde te metiste?- Hoseok continuo subiendo mientras tanteaba la gran muralla, pues no podía ver con toda la oscuridad que había. El sonido de gotas caer en el suelo, logro que sus vellos de la nuca se erizaran y mordiera su labio inferior en señal de nerviosismo. Al subir el siguiente escalón, escucho pasos detrás de él y con miedo volteo lentamente, al ver que no había nadie siguió subiendo hasta que casi perdió el equilibrio al pisar el borde del siguiente peldaño. Causo un eco que lo dejo petrificado en su lugar. Si el dueño de la casa lo encontraba dentro de su propiedad, estaba seguro de que no le iría tan bien- Dios...- puso su mano en su pecho y respiro profundamente- debo salir de aquí- susurro.

-¿Hoseok?- oyó su nombre- hijo ¿Eres tú?- cuando Hoseok reconoció la voz de su padre, corrió lo que le quedaba de la escalera hasta dar con una gran puerta.

-¡Papa!- se acercó a la puerta y corrió la mirilla- papa- dijo con lágrimas acumuladas en los ojos- ¿Qu-que haces aquí?- se puso de puntillas para alcanzar mejor la mirilla y coló su mano por ella.

-¿Cómo me encontraste?- pregunto el hombre afligido mientras estiraba su mano y cogía la que su hijo ofrecía.

-¡Estas tan helado!- dijo con espanto- ¡Tengo que sacarte de aquí!- tomo el aro de metal colgado en la cerradura, e intento abrirla, sin éxito.

-Hoseok, debes dejar este lugar- dijo su padre nervioso mientras miraba hacia todos lados- no es seguro- Hoseok lo ignoro.

-¿Quién te hizo esto?- pregunto furioso mientras seguía intentando forzar la cerradura.

-No hay tiempo para explicarlo- tomo a Hoseok de las manos- debes irte... ¡Ahora!

-¡No te abandonare aquí!- dijo casi ofendido- eres mi padre y te sacare de aquí- una brisa helada logra que Hoseok se encoja de hombros y tirite, pero de temor. Escucho la jadeante respiración similar a la de un animal, que se acercaba cada vez más a él y retrocedió hasta pegarse a la puerta. Respiro con dificultad- sé que alguien está allí- dijo, juntando la poca y nada de valentía que le quedaba en ese momento- ¿Quién eres?- entrecerró sus ojos para intentar distinguir a quien no salía de la oscuridad.

-Soy el dueño de este lugar- respondió, aun oculto entre las sombras que las poca antorchas con fuego, creaban. Hoseok abrió la boca, molesto y dispuesto a reclamar.

-Entonces, ¡Usted es el responsable de esto!- grito señalando a la gran puerta- ¡Librete a mi padre! ¡Él no ha hecho nada malo!- Hoseok estuvo dispuesto a acercarse, pero no Yoongi, por lo que retrocedió.

-Te daré una sola advertencia- dijo- ¡Vete!

-¡No!- grito Hoseok- y acércate a la luz, podemos hablar sobre esto- propuso- mi... mi padre no se encuentra bien, y este clima hace que el empeore- trato de explicar sin que su voz casi rota interfiriera.

-Pues no debería haber venido aquí- rugió sonoramente- el entro en mi casa como un intruso y ahora sufrirá las consecuencias.

-Pe-pero- Hoseok paso sus manos por su cabello, desesperado- por favor... él podría morir- abatido, se acercó a Yoongi- yo... yo podría hacer algo.

-No- dijo su padre rápidamente, quien empezó a toser fuertemente- ¡Hoseok!

-Vete- la bestia comenzó a retroceder por las escaleras.

-¡Yo...!- pensó, agobiado- ¡Yo me quedare en su lugar!

-¡No!- grito su padre alarmado. Yoongi se detuvo al cuarto escalón.

-¿Qué dijiste?- inclino su cabeza hacia la derecha mientras formaba una mueca.

-Que yo me quedare en su lugar- Hoseok miro a su padre, entristecido y camino hacia la bestia.

-Hoseok, no sabes lo que haces- su padre intento detenerlo, pero Hoseok no le hacía caso.

-¿Harías eso? ¿Tomarías su lugar?

-SI lo hago, ¿Lo dejaras irse?- Hoseok apretó su mata con los puños y miro a su padre con tristeza.

-De acuerdo- se giró sobre sí mismo y comenzó a subir nuevamente- pero debes prometer que te quedaras aquí... para siempre.

-¡NO!- el padre de Hoseok grito mientras sacaba su mano por la mirilla.

-Lo prometo- Yoongi sonrió siniestramente mientras se acercaba a Hoseok.

-Hecho- dijo una vez estuvo a un metro de Hoseok, quien retrocedió asustado dando un pequeño brinco hacía, nuevamente, la puerta. Reprimió un suspiro mientras miraba a los ojos oscuros de la bestia. Jamás en su vida había visto un hombre así. ¿Quién es? Se preguntó.

-Hoseok, no hagas esto- dijo su padre- ya estoy viejo... ya he vivido mi vida pero tú...

-¡Silencio!- rugió.

-Lo... lo prometo- dijo en un lastimero susurro, pegando su cabeza a la puerta en señal de derrota. Yoongi tomo firmemente a Hoseok del brazo e hizo a un lado- auch- las garras de Yoongi lograron herir levemente a Hoseok, quien cubrió sus brazos en su mano. Aquella bestia abrió la gran puerta y el saco al padre de Hoseok, yendo escaleras abajo con Hoseok detrás.

-Que llegue al pueblo y que no regrese- lanzo al hombre hacia Jimin y Taehyung, quienes bajaron la cabeza atemorizados.

-Sí, amo- contestaron ambos mientras tomaban rápidamente pero con cuidado al pobre hombre.

-¡ESPERA!- Hoseok grito bajando las escaleras- ¡Todavía no!

-¡Déjelo ir! ¡Déjelo ir!- grito el hombre siendo escoltado por los dos jóvenes.

-¡Papa!- pero antes de alcanzarlo, Yoongi cerro la gran puerta principal. Jimin siguiendo las órdenes de su amo, ato al hombre a la montura del caballo, el cual corrió hacia las rejas y después al sendero, cuando Taehyung golpeo su muslo.

-Amo...- pronuncio tristemente Taehyung cuando él y Jimin entraron en la mansión. Yoongi rugió y fulmino con la mirada.

-Ya se ha ido- dijo Jimin enseguida, para no enfurecer más a Namjoon.

-Señor, ya que el muchacho va a estar con nosotros por algún tiempo...- comenzó a decir Taehyung, tímidamente- usted podría ofrecerle un cuarto cómodo- Hoseok, quien aún miraba la puerta cerrada, se giró y encaro a la bestia con lágrimas en los ojos.

-¡No me dejaste decirle adiós! Nunca más volveré a verlo...- entristecido, cayo de rodillas al duro y frio suelo- papa...- Yoongi, por menos de un segundo sintió empatía por el joven pero no fue suficiente, pues le dio la espalda y camino hacia las escaleras.

-Ven- le llamo- voy a... mostrarte tu habitación- Hoseok lo miro confundido por lo que no lo siguió.

-¿Mi habitación?- pregunto- pero pensé...

-¡Si prefieres quedarte en la mazmorra, pues ve!

-No- contesto rápidamente- no quiero...

-Entonces... ¡Sígueme!- Hoseok miro expectante los cuadros y esculturas rotas y desgarradas que yacían botadas en alguna esquina de la mansión, observo el gran tragaluz sobre su cabeza el cual le dejaba ver el cielo nocturno. Cuando dirigió su vista y entro en pánico al verse solo con esas esculturas -según el- aterradoras.

-Por aquí, señor- dijo Jimin a sus espaldas. Hoseok pego un brinco de la impresión pero agradeció con un asentimiento y sonrisa pequeña- por favor, no pierda al amo- aconsejo en voz baja- no debe enfurecerlo... por favor- agacho su cabeza.

-Hare lo que pueda- intento reconfortar Hoseok. Cuando aquellos dos jóvenes alcanzaron a Yoongi, Hoseok se puso a su lado dejando una considerable distancia.

-Este será tu hogar ahora- dijo Yoongi una vez estuvieron frente a una puerta- eres libre para ir a donde tú quieras... excepto al ala oeste.

-¿Por qué? ¿Qué hay en el ala...?- la bestia dejo de caminar, se dio vuelta, y miro a Hoseok con furia.

-¡ESTA PROHIBIDA!- grito para luego ver la expresión aterrada de Hoseok y calmarse un poco- y nunca deberás poner un pie allí... ¿Entiendes?- Hoseok asiente cabizbajo, intentando no verlo a los ojos y que no note su terror hacia el- dije... ¿Has entendido?

-¡Sí!- se encogió sobre sí mismo, al igual que Taehyung y Jimin pero ellos lo disimularon un poco más.

-Este es tu cuarto- abrió la puerta y dejo que Hoseok entrara- espero que estés cómodo aquí y si necesitas algo, mis sirvientes te atenderán- Hoseok recorrió toda la habitación con la mirada para después darse la vuelta y ver a la bestia.

-Invítelo a cenar- susurra Taehyung a Yoongi.

-Vas a acompañarme a cenar... ¡ES UNA ORDEN!- ruge antes de cerrar fuertemente la puerta e irse. Hoseok corrió hacia ella pero no fue capaz de abrirla si quiera. Estaba aterrado de lo que podría haber al otro lado. Camino a la que ahora sería su cama y se sentó sobre ella.

-Ahora debo... servirle ¿Para siempre?- un nudo se formó en su garganta y sin que se diera cuenta, lágrimas caían por sus mejillas como los copos de nieve que veía por la ventana. Escuchó que tocaban la puerta, y se limpió rápidamente la cara con una esquina de la manta.

-¿Quién es?- pregunto pero antes de pararse a abrir la puerta, está ya se había abierto.

-Seokjin- aquel joven de peli naranja se presentó con una sonrisa que logro disipar un poco el dolor de Hoseok- pensé que tal vez necesitabas una tacita de té.

-Gracias- contesto- quizás si necesito una.

-Nada como una taza agradable y caliente de té para levantar el ánimo- le volvió a sonreír cálidamente- espere que ya le hago su t... ¡Jungkook!- grito al darse cuenta que su hermano no estaba con el- este niño- dijo negando con la cabeza mientras salía de la habitación- ven, hay que darle al invitado una taza de té- Hoseok no pudo evitar reírse un poco, le resultaban algo graciosas las exageradas expresiones de Seokjin- me disculpo por mi hermano, es algo tímido cuando se trata de conocer gente nueva.

-No te disculpes- dijo Hoseok- oh, no me he presentado- se sentó erguido sobre la cama- mi nombre es Jung Hoseok, pero pueden decirme Hoseok.

-Tus modales Kookie- susurro el peli naranja.

-Mi... mi nombre e-es Kim Jungkook- hizo una reverencia- un gusto.

-Y yo soy Kim Seokjin- hizo una pequeña reverencia- es grato el haberlo conocido.

-Lo mismo dijo- Hoseok sonrió- saben... no me va eso de ser muy formal- admitió- pueden llamarme solo Hoseok, no señor que me siento más viejo de lo que soy- Seokjin rio abiertamente mientras Jungkook preparaba el té en silencio.

-¿Qué tal si lo llamamos, Hobi?- propuso Seokjin.

-Creo que eso me gusta más- dijo Hoseok- ¿Qué opinas Jungkookie?- Jungkook se sobresaltó al oír su nombre en diminutivo, por lo que se sonrojo.

-E-está bien para mi...- cabizbajo le entrego la taza a Hoseok.

-Gracias- Hoseok dio pequeños sorbos a su te mientras escuchaba como Seokjin se quejaba de lo fría que estaba la habitación.

-Tendré que hablar con Jackson para que arregle esta habitación- susurro para sí mismo.

-¡Alguien dijo mi nombre!- grito un rubio mientras abría la puerta logrado azotarla contra la pared, Hoseok de la sorpresa pego un salto que hizo salpicar él te- oh... lo siento- se disculpó nervioso- mi nombre es Wang Jackson, es un placer conocerlo Hoseok.

-Gracias- le sonrió amablemente- o hyung, como prefieras.

-Pues... no tienes pinta de un hyung- Hoseok rio ante la confianza de Jackson.

-Wang, contrólate- advirtió Seokjin.

-Cierto- raso atrás de su cuello, dejando al descubierto su muñeca- lo lamento, suelo dejarme llevar algunas veces- Hoseok observo aquellos dibujos de enredaderas en su muñeca y tomo la propia, pues de solo verla le causo inquietud.

-No importa realmente- dijo Hoseok- bueno, a mí por lo menos no me importa- dejo la taza de té sobre el pequeño corrido- estaré aquí un buen tiempo así que debo llevarme bien como todos ustedes.

-Y bueno... vine hasta aquí por que escuche mi nombre- hablo Jackson.

-Sí, te nombre porque esta habitación esta tan fría- dramatizo mientras sobaba sus brazos con fuerza.

-Oh, de eso yo me encargo- Jackson puso sus manos en la cintura y sonrió- me encargare de que esta habitación sea la más acogedora que hayas visto en tu vida, pero después de que bajes a cenar con el amo.

-Sería muy lindo de tu parte- dijo Hoseok levantándose de la cama y caminando hacia la ventana- pero no voy a bajar a cenar.

-No seas tonto- rio Jackson con Hoseok. Jungkook solo miraba tímidamente a sus hyungs sin saber realmente que hacer- por supuesto que lo harás. Ya oíste lo que el amo dijo- Hoseok se volteo con el ceño fruncido.

-¡El podrá ser tu amo... pero no es el mío!- golpeo la orilla de la ventana, causando que las risas pararan de inmediato- perdón- se disculpó rápidamente mientras suspiraba- esto es demasiado para mí- Jackson y Seokjin se miraron unos segundos, sintiendo empatía por Hoseok.

-Yo... yo creo que fuiste muy valiente al haber hecho esto, hyung- dijo Jungkook después de todo el silencio, se acercó a Hoseok y tomo levemente su mano- fue muy admirable.

-En realidad- dijo Seokjin- todos pensamos eso.

-Amo demasiado a mi padre como para dejarlo aquí- Hoseok mordió su labio y se apegó a la ventana.

-Animo hyung- Jackson le toco el hombro- sé que todo parece muy triste ahora, pero no desesperes. Estamos aquí para ayudarte...

-Gracias- llevo sus dedos a sus mejillas, y retiro las lágrimas- gracias por ayudarme.

Espero les guste❤️
¡Gracias por leer!