Capítulo 1

Capítulo sin corregir.
Me disculpo por la ortografía y redacción.





Si alguien pidiera describir a Jeon Jungkook todas las personas coincidirían en que era un hombre en letras mayúsculas, era demasiado atractivo, inteligente y agradable, y presidente de una inmensa compañía, pero ademas el haber nacido en una cuna de oro le había otorgado antes de empezar a hacer su propia fortuna una herencia millonaria, todos dirían que era el hombre perfecto, y cualquiera estaría feliz de ser su pareja, pero él no era un hombre fácil, odiaba la falsedad de la gente, no le gustaba juguetear, y sobre todo odiaba las mentiras, era muy sentimental y creía que el amor debía ser color de rosas, esperaba a esa persona que con una mirada le hiciera sentir mariposas en su estómago.

Esa mañana se levantó raramente feliz, había tenido algunos problemas en el trabajo, nada relevante pero le gustaba que todo saliera como él quería, se dirigía a trabajar en un carro deportivo rojo que era en definitiva uno de sus favoritos, vestido de un traje echo a medida que le agregaba aún más atractivo, puso algo de música en la radio cosa que rara vez hacía, la música era ruidosa y demasiado contagiosa, parando en un semáforo, vio que otro carro no había parado, iba cruzando un chico en bicicleta, el cual fue empujado por el imprudente conductor, contuvo el aliento, el conductor se dio a la fuga, y soltando un suspiro vio al chico ponerse de pie con algo de dolor para acercarse a la orilla, varias personas ya habían empezado a reunirse a su alrededor, algunos gritaban que alguien llamara a una ambulancia, no podía ver bien que pasaba, pero tampoco podía detenerse los demás conductores le empezaban a tocar el claxon pidiéndole a gritos que se moviera, y bueno no era su responsabilidad, así que continúo su camino después de escuchar muchos insultos dirigidos a él.

—Jungkook, llegas tarde.

—Solo un poco, Hyung.

—¿Qué pasó? Es raro en mi perfección.

—Presencie un accidente, me quede viendo hasta que tuve que avanzar.

—Wow y no fuiste al rescate, que raro... muy raro... bueno siguiendo con la agenda, tienes dos juntas en la tarde y hay entrevistas para varias vacantes, no se si las manejas personalmente o tu secretaria se hará cargo.

—Que se haga a cargo Erika, ¿Cuáles son las vacantes?

—Amm déjame checar —dijo el joven mirando su tableta—. Son para ejecutivo, auditor, capturador y limpieza.

—¡¿Por que siempre se nos van los de limpieza? —preguntó algo confundido

—Bueno, la mayoría de los que se contratan para limpieza son donceles, y los que casi no tienen preparación.

—¿Qué tiene que ver que sean donceles?

—Vamos hombre, ya sabes, los donceles dejan de trabajar cuando se tienen que casar o tienen hijos, ya sabes el hombre se encarga de proveer y ellos de cuidar la casa

—Eso es anticuado y suena a discriminación

—No lo volveré a mencionar —dijo esta vez serio Jin, Jungkook se había puesto muy serio, recordó que el estaba en contra de todas las opresiones que sufrían los donceles, y tenía un hijo adoptivo que precisamente era doncel.

.

.

.

.

.

.

La familia Kim era una familia normal, tenían un pequeño negocio de aguas termales y no les iba tan bien, pero tampoco les hacía pasar carencias, y afortunadamente les alcanzaba también para poder dar empleos a otras personas. Kim Taeyang y Kim Hyorin tenían dos hijos que ayudaban siempre que podían. El único diferente en esa familia era su hijo Taehyung que era doncel. Ellos no tenían ningún prejuicio pero la sociedad no era igual, en la escuela y con los vecinos, siempre escuchaba que debía casarse y dar hijos para ser feliz, aunque también le decían que debía mejorar su apariencia. Él pertenecía a la categoría de los "donceles comunes", no tenía una gran aparecía, era muy normal, si su credencial no especificara que era doncel tal vez nadie se daría cuenta. Lo único que tenía bueno, a su parecer, era que era muy inteligente y aunque se deprimía contantemente, trataba de no darse por vencido.

Por fin era su oportunidad, se habían abierto varias vacantes en empresas Jeon, tan pronto se enteró hizo una cita, quería el empleo de ejecutivo o de auditor, no quería echarse flores, pero tenía excelentes recomendaciones y su preparación era impecable. Se graduó en una buena escuela, estaba seguro que obtendría el empleo, pon fin podría demostrarle a todos que no necesitaba casarse para superarse, y además lograría callarles la boca que era lo que más quería.

—Ya me voy, ¡deséenme suerte! —gritó a sus padres.

—Estás muy guapo, cariño —dijo su madre al verlo con un traje sencillo.

—Con cuidado, hijo —dijo su padre.

—Lo tendré mamá, papá.

El camino era corto así que decidió ir en bicicleta, lo que no conto es que un carro se pasaría el alto, trato de frenar sin lograrlo, solo sintió el empujón y como caía.

—¡Ah! —gritó una mujer.

—¡Rápido! ¡Alguien llame una ambulancia!

—Ouch... —Se logró levantar algo adolorido, para acercarse a la acera y sentarse en un lugar más seguro.

—¿Estás bien? —preguntó un chico.

—Estoy bien. Solo fue un golpe.

—Deberías esperar a la ambulancia, ya se les llamó.

—Estoy bien, enserio. —Trató de levantarse, pero un mareo lo hizo volver a sentarse.

—Espera la ambulancia, el conductor escapó. Tal vez deberíamos llamar a la policía.

—No, no es tan serio, ¿Dónde está mi mochila? —Volteó con la mirada tratando de ubicarla.

—Esta allá. Ahora te la traigo.

—Gracias, me llamo Taehyung.

—Yoongi.

Taehyung alcanzó la mochila revisando con rapidez se dio cuenta que sus papeles se habían arrugado, por que no uso un sobre mas reforzado, soltó un suspiro mirando la hora, demonios era muy tarde, tenía que irse,

—Debo irme, es muy tarde.

—Debes esperar. Estás herido, no tarda en llegar la ambulancia. Si quieres te llevo después a donde tengas que ir, dejé mi motocicleta allá.

Taehyung estaba en un dilema, perdería la entrevista y por nada del mundo debía pasar. La ambulancia no tardó en llegar y afortunadamente solo era un fuerte golpe, le dieron algo para dolor, y le recomendaron ir al hospital para un chequeo completo por si acaso.

Como dijo el chico que acababa de conocer lo llevo en su motocicleta a las empresas Jeon, no tenía opción su bicicleta quedo inservible. No tardaron casi nada en llegar, agradeciendo e intercambiando números se apresuro a entrar, aún podía llegar, justo cuando llegó a recursos humanos escuchó su nombre.

—¿Kim Taehyung?

—¡Soy yo, soy yo! —Gritó corriendo mientras se acercaba, la chica lo miró con mala cara.

—Adelante.

—Gracias.

Taehyung entró a la oficina y al sentarse entregó la carpeta que llevaba con sus documentos. La chica miraba todo con una cara seria, para luego voltear hacia él, barriéndolo con la mirada.

—Bueno, tiene buenas recomendaciones, pero los puestos que solicita ya están ocupados, además...

—¿Además?

—Disculpe que lo diga, ¿pero se ha visto cómo viene?

—Sí, sé que vengo un poco sucio, pero es que acabo de tener un accidente —explicó brevemente con algo de vergüenza—. Si es por eso, juro que cuidaré más mi apariencia.

—Parece que no lo entiende. —Se acomodó un poco los lentes que usaba. —La ropa que usa no es la adecuada para solicitar un puesto de este calibre. Miré su ropa, ¿No se le ocurrió venir con un traje más formal? ¿Algo mas elegante? La gente pensará mal de nosotros si nuestros empleados visten como pordioseros.

—Yo... —Tae bajó la mirada, viéndose.

—Y no solo es eso —continuó ella—, su solicitud está arrugada y llena de tierra, ¿Cómo podría confiársele papeles importantes? Y sobre todo, usted es un doncel. —Taehyung frunció el ceño ante eso último.

—¿Eso que tiene que ver? Tengo la preparación y los documentos que lo avalan. Los requisitos para el puesto no decían que debía ser varón para solicitarlo.

—Eso es por que se sobreentiende. No puedo darle un puesto importante para que después lo abandone cuando quiera irse a parir hijos

Taehyung se quedo con la boca abierta, ¿Era en serio? Ella era una mujer también, podía renunciar para casarse o tener hijos, ¿Era diferente con los donceles?

—Bueno eso es todo. Si quiere trabajar en empresas Jeon puedo darle la plaza de conserje. —De su escritorio sacó unos papeles para dárselos.— Aquí tiene el contrato, léalo y si acepta firme. Luego preséntelo con la encargada de recepción, ella le dirá qué hacer.

—Estoy más calificado que esto, yo...

—Eso es todo, cierre al salir.

Con un poco de coraje y sintiendo que las lágrimas caerían de sus ojos salió de la oficina. Se dirigió a los baños, encerrándose en un cubículo no pudo evitar que las lágrimas cayeran, creía que esa empresa apoyaba el trabajo igualitario. Pasaron varios minutos en los que lloró sin poder evitarlo, le daba mucho coraje esta situación. Cuando pudo calmarse leyó el contrato, ganaría apenas una decima parte que lo que ganaría en otro puesto. Resignado pensó en aceptar, necesitaba trabajar y quitarles un poco de carga a sus padres, y si lo veía por el lado bueno, ganaría mas que en un trabajo de medio tiempo.

Luego de lavar su rostro y esperar a que lo rojo de su rostro desapareciera para que no se notara que estuvo llorando, salió del baño y se dirigió hacia donde la grosera mujer lo había enviado.

—Disculpe —dijo a la chica de la recepción.

—Dígame, ¿En que puedo ayudarlo? —respondió ella con una amable sonrisa en sus labios.— Oh, eres el chico que llegó corriendo.

—Uhm.. sí. Vengo a entregar el contrato para la plaza de conserje.

—Conserje, déjame ver. —Revisando los documentos frunció el ceño al darse cuenta. —¿Estás seguro que es la plaza que te dieron?

—Sí... —dijo algo desanimado y la chica soltara un suspiro.

—Deberé reportar a ésta mujer de nuevo, tal vez ahora sí la corran. —Hizo una mueca.

—¡No, no, está bien! —Dijo algo alarmado.

—No está bien. Tienes toda la preparación, los otros candidatos que han venido para los otros puestos que solicitaste no tienen ni la tercera parte de todo tu historial.

—Está bien, en serio. Tal vez podría ascender después, ahora me conformo con estar dentro... —Bajó la mirada jugando con sus dedos, hasta cierto punto era verdad lo que decía.

—¿Estás seguro? —Alsó la ceja no muy segura. Nadie en su posición aceptaría un puesto tan bajo.— Podría pasarte directamente con el jefe, le explicarías y seguro te da un trabajo acorde a tu capacidad.

—No, en serio, aunque se lo agradezco. No quiero empezar con el pie izquierdo.

—De acuerdo. —Suspiró derrotada.— Ya veremos que se puede hacer... —murmuró en voz baja, mientras hacia todo lo que debía hacer. —Bien, aquí tienes tu gafete, se te dará un uniforme y puedes presentarte el lunes.

—Gracias.

—Nos vemos el lunes.

Taehyung salió sin tantos ánimos, pero bueno tenía trabajo, era mejor a nada. ¿Ahora qué le diría a su familia? Bueno, primero tendría que ir al hospital, se haría el chequeo por si acaso, mejor estar seguros.

.

.

.

.

.

.

Salió tarde del hospital, al llegar a casa vio que todo se encontraba demasiado silencioso, abrió la puerta y le cayó sobre la cara serpentinas.

—¡Ah! ¡¿Qué es esto?! —dijo sorprendido y a la vez asustado.

Dentro de su hogar, estaban todos sus amigos y familiares, todo estaba decorado y la mesa se encontraba repleta de comida.

—Es una fiesta de celebración —respondió con alegría su madre—. Te quedaste con el trabajo, ¿verdad?

—Ah..yo... —Se sintió nervioso con todas las miradas posadas en su persona, ¿Cómo decirles que era un conserje?— Sí, sí, claro que sí. Tengo el trabajo. —Sonrió. Mentira no era.

—¡Cuéntanos todo! —dijo su hermana menor. —¿Conociste a ese adonis que tendrás de jefe?

—Bueno, tenia la mejor preparación de los demás candidatos, por eso recibí el puesto... y eso es todo. Empiezo el lunes, y no, no lo conocí.

—¿Ves, amor? Te dije que las empresas Jeon no discriminaban —dijo su madre a su padre.

—Sí, me equivoqué —respondió este algo cohibido. —Felicidades, hijo.

Sus familiares y amigos continuaron celebrando toda la noche, estaban felices del éxito de su amado hijo y amigo.

El también celebró, la verdadera prueba empezaría el lunes, pero mientras se divertiría con el festejo de su familia.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top