Me encontraba en mi casa, frente al espejo, maquillaje un poco corrido y algo despeinada.

Había sido una noche loca, mi madre me pidió ir a un evento, asistí, allí encontre a Adam de frente y entendí la causa de su viaje.

Cuando salía estaba por llamar a un uber cuando el apareció en un auto con una sonrisa.

-Te llevo.-Indica y abre la puerta del copiloto, accedí ya que realmente quería ir a casa y debiamos aparentar ser novios, igual como actuamos en la cena.

Me dejó en mi casa, extrañamente, fue muy caballero, cuando estaba por bajarme habló.

-Isabelle, necesito un favor gigante.-dice nervioso.-Se que debes odiarme o algo.-Indica.-Pero lo necesito, enserio.-agrega.

-No te odio.-aclaré.-Sólo me metiste en muchos problemas.-Le explique.

-Lo se.-Suspira.-pero por favor, ayúdame.-pide.

Me explicó todo, había una pequeña fiesta de uno de sus amigos, sería su bienvenida, el debía llegar de Europa con su novia, la modelo quien era hija de unos grandes diseñadores.

Al ser la pareja increíble, una explosión y la que llamaba más la atención, accedí, ya que muchos pensaban que seguíamos juntos.

Lo ayudé, pero con condiciones que el aceptó, al principio todo era calmado, una simple fiesta,  pero en un momento quizo besarme para demostrar nuestro "amor" al mirar al lado vi a la hija de David asi que me aparte, pero el insistió, seguimos bailando, luego tome un trago, estaba tan nerviosa que lo necesitaba.

Todo se empezó a descontrolar, empecé a beber demasiado.

Después no recuerdo mucho, se que al llegar a casa me largué a llorar por fallarle a Daniel a quien estaba ayudando al fingir ser su novia, además lo había arruinado y por tener que ser obligada a estar con Adam.

Ahora estoy aquí, me metí a bañar, tome una pastilla y mée quedé en mi casa todo el día sin hacer nada, con suerte almorcé.

A la noche tocaron la puerta, mire un poco y vi a daniel, le abrí dejándolo pasar, todo estaba callado.

—ella jura que me engañaste.—Dice sentándose en el sofá.

—algo asi fue.—Dije con duda.

—Descuida, no importa, le invente otra cosa.-Dice suspirando.—¿estas bien?.—pregunta.

—Si.—Dije.— supongo que mañana estará mi castigo.—Explique.

—no.—Me sonríe.—le hable a tu madre, con ayuda de alessa le dije que estabas conmigo en una fiesta organizada por el novio de la hija de mi mánager, por si le llegaba un rumor, ya que en la misma fiesta había un conocido que trato de inventar cosas para dejarte mal.—Explico.

—Gracias.—lo abracé

—por cierto, me dijo que llega mañana.—me indica.—la iremos a buscar juntos.—Añade y besa mi mejilla.—ve a dormir.—Finaliza.

—No quiero estar sola.—Confesé

—Nadie te dijo que estarías sola.—muestra su mochila, que no había visto de lo distraída que estaba.

Nos fuimos a dormir obviamente en cuartos diferentes, hasta el otro día temprano, desayunamos juntos y me ayudo a preparar unos cupcakes.

Luego nos fuimos al aeropuerto, el estaba nervioso mientras yo estaba demasiado ansiosa por ver a mi madre.

—Alli viene.—Dije después de un buen rato buscándola, corrí a abrazarla.—Te extrañé mucho.—Dije sin soltarla.

—también te extrañe cariño.—Me abraza.—¿el es daniel?.—Pregunta a lo que me volteé.

—Si.—Dije, y caminamos hacia el.—Daniel te presento a mi mamá.—Le dije y el sonrió.

—Es un gusto conocerla.—Dice el sonriendo.

—El gusto es mío.—Dice mi madre y le da un corto abrazó.

Nos fuimos a casa, mi madre por el momento no me decía nada sobre el, pero se notaba que le agradaba ya que hablaban bastante, lo había invitado a quedarse pero daniel tenía cosas que hacer.

—Le prometo que en cuanto pueda le avisaré.—Dice el con una sonrisa.—Fue un gusto, pero ya debo irme.—Se despide de mi madre y va hacía mi.

—te acompañó a la puerta.—Dije y caminamos hasta ella.

—nos vemos.—Me sonríe y besa mi frente.

—gracias.—bese su mejilla.—Nos vemos.—le Sonreí y se fue.

Al volver a la cocina mi madre estaba probando uno de los cupcakes.

—ésto está delicioso.—Dice y me pasa uno.

—Los hicimos con daniel en la mañana.—le comenté.

—se ve que es un buen chico.—Me sonríe.—Si quiere algo mas contigo tiene mi aprobación siempre y cuando te cuide y respete.—Afirma.

—mamá sólo es mi amigo.-Dije probando el cupcake y algo sonrojada.

—Uno nunca sabe las vueltas de la vida.—Dice sonriendo.

Ignoré su comentario y seguimos hablando de su viaje, hasta que se fue a descansar.

Empecé a revisar mis redes sociales, donde encontré demasiados rumores de mi "novio" daniel.

Algunas fans me tenían como lo peor del mundo,asi que subí una story.

"Nadie sabe lo que sucede en mi vida actualmente, excepto mis cercanos, por favor dejen de tirar odio sin razón, no me conocen y aún así me juzgan, dejen los rumores, no solo me afectan a mí"

La publique y mi celular ya había empezado a sonar, di algunos likes, comente algunas fotos hasta que me quede dormida por una hora, luego de eso mi madre fue a despertarme.

—Tienes una audición.—Chilla emocionada.—¡vamos arriba!.—Ánima.

No entendí mucho, pero me levante, me hizo colocar ropa comoda y salimos a quién sabe dónde.

Llegamos a un edificio, al entrar vi que era una academia, me dieron un tour por ella, tenían clases de actuación, clases de danza, clases de artes, clases de música.

Era fantástico, mi madré me llevo a una oficina donde me presentaron al director.

—Tu madre presume tu talento para el baile, por lo que necesitamos ver si es así.—Dice el caballero.

Me explicó algunas cosas, prepare una corta coreografía y se la presente a el junto a unos profesores.

—te quedas.—Dice el director mientras todos los demás lo apoyan.

Al salir de allí mire a mi madre como si todo fuera un sueño, pero no lo era, realmente había pasado, solo que recién lo estaba asimilando.