capítulo 7: un mal día parte 2.

Edgar: ¿que significa esto?.

Ambos me quedaron mirando confusos. Bibi parecía la más molesta aqui.

Bibi: oye tú, ¿que te has creído eh?.

Sandy: no entiendo...

Edgar: ¿por qué te estás besando con esté tipo?. No lo entiendo.

Bibi: ¿disculpa?. ¿Por qué yo debería darte explicaciones?. -enarcando una ceja con mucha molestia.-

Edgar: porque tú... -me quedé en silencio sin saber que responder.-

Mierda. Creo que no debí meterme. Ahhh pero ganas no me faltan de golpear a ese Sandy.

Bibi: escuchame bien niño igualado. -se pone en frente mío.- no te metas en mis asuntos. ¿Te quedó claro?. Ahora esfumate.

Sandy: oye tranquilo, no te echo nada para que me vengas a empujar...

Edgar: ¿ah no?. -me acerco peligrosamente hacía él, ignorando a Bibi.- no te vuelvas acerca a ella. -lo señaló con mi bufanda amenazante.-

Sentí un empujón de parte de Bibi.

Bibi: ¡¿oye que te pasa?!. -se puso enfrente de él.-

Edgar: no deberías estar con Sandy, es tan diferente a ti...

Bibi: ¿que?. -me mira con el ceño fruncido.- Sandy puede ser mi novio, amante, amigo con derecho,lo que sea. No te tengo dar explicaciones. Bye niño rarito. -toma del brazo de Sandy para luego marcharse.-

No logró entender. Si ayer yo y Bibi estábamos platicando de lo más bien, pensé que ella gustaba de mi...

¿Bibi estará con Sandy?.

No. Eso no me cave en la cabeza. Es totalmente ridículo.

El ramo de rosas que traía en manos, lo tiré al suelo con frustración. Ese arenoso no puede ser mejor que yo. Me sentía tan molesto ahora mismo, tengo que hacer algo... si... tengo que hacer algo, no puedo quedarme con los brazos cruzados, pero por el momento no tengo ideas en la cabeza. Lo único que quiero ahora es tomarme un trago,si un trago es lo que nesecito. Miré la cafetería de Bull's, la verdad no quiero toparme con esos bravucones, mucho menos con ese cuervo.

Mejor me iré a Barley's. Ya llegando al lugar, me dirigí hacía unas mesas apartadas de los demás. Quiero estar solo.

Barley: ¿desea algo muchacho?.

Edgar: si, deseo un trago... -digo desganado.-

Barley: esta bien. -se va.-

¿que tengo que hacer ahora?. No pensé que Sandy sería mi competencia, creí que Crow lo sería... ese cuervo igual me da mala espina.

Barley: muchacho aqui tiene. -me ofrece una piña colada.-

Tomó aquel vaso y empiezo a beberlo. Necesitaba un trago para aclarar mi mente. Es que aún no me cave en la cabeza como Bibi se besaba con ese arenoso. Vaya día de mierda. Doy otro sorbo a mi trago.

???: hola.

Escuche una voz detrás mío.

Edgar: ¿Spike?. -digo confuso.- hola supongo...

Spike: eres el amigo de Colette, ¿verdad?.

Edgar: si, supongo que si...

Spike: quería pedirte algo...

Edgar: ¿que cosa?.

Spike: ¿puedes conversar con Colette?. Es que... yo tuve una cita con ella y le pedí que fuera mi novia, pero tal parece que la incomode...

Edgar: -ruedo los ojos con tal fastidio.- eh tenido un día de mierda, para que tú me vengas a decirme que yo sea tu cupido.

Spike: no,no,no... Solo pensé que tú podrías hablar con....

Edgar: ¡no me molestes!. -lo interrumpo.- estoy de muy mal humor en estos momentos.

Spike: l-lo siento. Entiendo... solo quería que me hicieras ese favor. - decia desanimado- es que quiero mucho a Colette, es la única que me quiere tal y como soy.

Edgar: ah.. -digo desinteresado.-

Spike: si. Bueno en fin. Espero que Colette me diga que si acepta ser mi novia, lo deseo mucho.

Este cactus, ¿que hace contándome su vida?. Como si me importará.

Edgar: si, si, Colette te va ser caso porque por lo que veo esta loca por ti. -dije.-

Spike: esta bien. Ya no te molesto más. -dicho eso se va-

Ya me estaba abrumando este cactus. Yo no estoy para ayudar a nadie, mucho menos ser cupido de alguien. Suficiente tengo con mis problemas, que para ayudar a otros.

Penny: ¿Edgar?, hola. -veo como me saluda dirigiéndose hacía mi mesa.-

Éste día no puede ser más del asco.

Edgar: ahh hola. -saludó.-

Penny: -se sienta en mi mesa.- ¿que tal?.

Edgar: mmm, bien supongo...

Penny: ¿seguro?.

Edgar: si.

Penny: ¿no te incómodo verdad?.

Edgar: ahh,no,no, no claro que no. -digo con sarcasmo.-

Penny: ay, menos mal. -decia aliviada.- Es que enserio me siento aún un poco avergonzada por aquel incómodo momento que te hice pasar.

¿acaso no entiende que no me gusta su presencia?.

Edgar: bueno... eso ya paso, ¿no?.

Penny: si... quiero empezar de cero contigo. Eres un brawler genial.

Edgar: si lo sé, soy un brawler genial. -digo airoso.-

Penny: tu bufanda me parece espectacular. ¿Tiene vida propia?.

Edgar: ehh, pues, si.

Penny: vaya, que genial.

Edgar: bueno, tengo que irme. -me levanto- mañana tengo que trabajar.

Penny: ¿domingo?-se dijo extrañada.-

Edgar: si. No me queda de otra. -respondí.-

Penny: antes que te vayas, dime una cosa... ¿Como puedes soportar a Colette?.

Lo mismo me pregunto yo.

Edgar: mmm, no lo sé.. -me encojo de hombros.- ahora si me voy. Adiós.

Dicho eso me retiró del lugar lo más rápido posible. Vaya día que tengo.

Llegué a casa. Mi cabeza me estaba dando vueltas. Entró a mi habitación y me acuesto en mi cama. Me sentía cansado, y mañana tengo que volver a trabajar en nuestro único día de descansó. Éste día se hizo más mierda al ver a Bibi y Sandy besándose. Me revienta que ese arenoso toqué los labios de esa chica que ni se lo merece.

Tendré que sacar a Sandy de mi camino, sea como sea.

Sentí vibrar algo. Era mi teléfono. Lo saqué de mi bolsillo y contesté.

Edgar: ¿hola?.

Colette: ¡hola!.

Su voz chillona me hizo doler el oído.

Edgar: ¿Colette?, que me haces llamando a está hora, por si no lo sabías son las doce.

Colette: tenía que llamarte para hacerte recordar, que mañana hay trabajo.

Edgar: Colette, eso ya lo sé.

Colette: ahh y que lleves algunos juegos de mesa para pasar el tiempo, no querrás estar aburrido toda la noche.

Edgar: lo único que llevaré es mi almohada. -dije en broma.-

Colette: entonces yo me encargó de los juegos de mesa. ¡Te aseguro que la vamos a pasar muy bien!.

Edgar: si tu lo dices...

Colette: oye, ¿estas bien?.

Edgar: si. ¿Por qué la pregunta?.

Colette: solo quería saberlo. ¡Me da gustó que estés bien!.

Edgar: ¿tú estás bien?.

Colette: ¡sii!.

Edgar: perfecto. Ahora si Colette déjame dormir y mañana nos vemos. Chau. -colgué.-

Ahora si a descansar. Mañana tendré un día pesado....

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top