Ashley en multimedia

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—¿Qué haces aquí?— preguntó Ashley mirándome mal

 Y justo tenía que encontrarme con la zorra más zorra.

—Yo...

—Qué bueno que llegas, jugaremos a la botella.— dijo Chase, otro amigo de Stella

—No... yo... debo irme.

—No...— Ann me detuvo—la regla es que si entras, te quedas.

  No me jodas... No pueden obligarme.

—Ann tiene razón, debes quedarte.— dijo Chase

 Suspiré— está bien...

 Creo que es mejor que estar allá con mis hermanos ¿no?... Y no sólo eso, quiero molestar un poco a Ashley.

—No, está bien... no podemos obligarte, si quieres irte, pues vete.— Ashley se cruzó de brazos

—¿Pero de qué hablas, Ashley?... tú fuiste la que colocaste esa regla, y todos estuvimos de acuerdo.— dijo Lucas

—¡Bien, hagan lo que quieran!— dijo molesta

 Sonreí al ver cómo logré molestarla.

—Ven.— dijo Chase

 Lo seguí hacia donde estaban las demás personas sentadas en el piso

 Y adivinen quién está aquí... Adivina adivinador, si, así es, Jace. 

 Si... no podría ser más incómodo.

 Tomé asiento al lado de una chica, cuyo nombre desconozco.

—Bien, yo empiezo.— dijo la chica antes de girar la botella

 La botella se detuvo en... Lucas.

 Ambos sonrieron y se dieron un beso... ¿beso? corrección, un GRAN beso.

—Yo lo haré.— dijo Ashley

 La botella giró y giró y se detuvo en.... Chase,

 Se acercaron y comenzaron a tragarse, literal.

 Los miré con el ceño fruncido... ¿no se supone que Chase es el mejor amigo de Jace?

 ¿Ok...?

—Bien, bien, bien...— Jace los detuvo— mi turno.

 Rodeé los ojos. Simplemente me molesta su manera tan arrogante de pronunciar cada palabra que sale de su estúpida boca.

 La botella comenzó a girar y...

 No me jodas, esto tiene que ser una broma... ¿broma? debí haberlo supuesto, mi vida es un completo desastre.

 Todo esto es culpa de Abby, jamás volveré a hacerle caso en mi vida. 

 Como ya deben saberlo, es obvio que la estúpida botella, girada por la estúpida mano del estúpido de Jace Anderson se detuvo en mí.

—¿Qué esperan?... bésense.— dijo Lindsay

 Hice una mueca y miré a Ashley, la cual me fulminaba con la mirada.

 ¿En serio tengo que hacerlo?

—Terminemos con esto.— Jace tomó mi rostro y comenzó a besarme

 ¿Por qué le estoy siguiendo el beso?

 ¿Y por qué me está gustando?

 Que alguien me responda, por favor.

 Jace y yo fuimos separados bruscamente. 

—¡¿Scarlett, qué haces?!— Austin me miró mal

 Lo miré perpleja. Ups...

—Y tú, ¿qué hacías besando a mi hermanita?— miró a Jace— ¡Es una niña, te mataré!— intentó acercarse a él

—¡Austin, ya basta! vamos...— lo tomé del brazo y salimos de la habitación

—¿Qué haces aquí?— me miró molesto

  Rodeé los ojos— ¿Qué crees que hago?... ¿desde cuando eres mi padre, Austin?— pregunté

—¿Por qué estabas besándote con ese idiota?

—Es sólo un juego, ya para...

—¡Austin!— Justin se acercó a nosotros con Stella y Sky— mira a quienes me encontré...

—¿Scarlett?— dijeron los tres a unísono

—¿Sky?— pregunté

—¿Qué hacen aquí?... no puedo creer que las tres desobedecieran a nuestro padres y vinieran a la fiesta— dijo Austin— especialmente tú...— señaló a Sky— tienes 13 años, no puedes venir a fiestas de universitarios, es peligroso... ¿qué tal si te violan o te hacen daño?

 Sky rodeó los ojos— Eso no va a pasar, Austin...

—¿Y tú que sabes?— preguntó Justin

 Austin suspiró— Sólo vámonos.

—No pueden obligarme a irme, tengo 18 años, soy mayor de edad.— dijo Stella

—¿Por qué no le dices eso a mamá o papá? ellos no te dejaron venir porque mañana tienes escuela.

  Stella se cruzó de brazos.

—Vamos.— dijo Justin comenzando a caminar

—Esperen, no puedo irme sin decirle a Abby y a Adam.— dije

—Búscalos y diles que nos vamos... pero rápido.

 Caminé hacia donde estábamos al principio de la fiesta y para mi suerte, ellos se encontraban allí.

—Oye... ¿dónde estabas? estuvimos buscán... Oh, oh...— dijo Abby al ver a los gemelos  
 

—Si... oh, oh...— dijo Austin

***

 Después de llevar a mis amigos a sus casas, llegamos a la nuestra. Todos entramos silenciosamente. 

—Haremos algo...— susurró Justin— no les diremos nada a nuestros padres, pero ustedes no lo volverán a hacer... ¿trato hecho?— preguntó

 Las tres sonreímos.

—Trato hecho.— dijimos

—Bien,— dijo Austin

 Cada quién se dirigió a su habitación, como si nada hubiera pasado...

***

—Sky, ¿no te quedarías en la casa de Molly?— mamá frunció el ceño

—No... me sentía algo mal así que le dije a Justin que me fuera a buscar, pero ya estoy bien.

 Mamá asintió no muy convencida.

—¿Y tú...?— papá me miró— ¿no ibas a dormir en la casa de Abby?— preguntó

—No... resulta que terminamos el trabajo antes, y el papá de Abby me trajo, cuando llegué era un poco tarde y ya ustedes estaban dormidos, así que no quise despertarlos.— mentí

 Mis padres asintieron.

 Austin me guiñó el ojo. 

 Esa es la razón por la que amo a mis idiotas.

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