|Capítulo Dos|
Decidado a: Zara21365
Si alguien quiere, no dude en pedirla.
(...)
El mas alto de la habitación frunció el ceño, alzando la vista hacia Kuroko y el de blanco, había como un campo de fuerza transparente que si ponias atencion mirabas el reflejo, era algo duro y parecía impenetrable, el de cabellos morados, pico varias veces el enorme campo que cubría exactamente los dos cuerpos y quizá un poco mas, el objeto hacia ruido como si fuera de cristal
Los presentes del lugar abrieron los ojos bastante sorprendidos mirando el campo, mientras que Murasakibara se quejaba sobando su roja nariz por el golpe, ya que ese campo era bastante duro
El Angel estaba escondido detrás de Kuroko abrazandolo por detrás escondiendo su rostro en el cuello del más chico temblando mientras que el fantasma de Teiko miraba igual de sorprendido el dicho, ¿campo de protección quiza?
Daiki levanto un balón del suelo mirando bastante curioso y lo arrojo al campo, como este imagino el balón botó sin siquiera hacerle un rasguño, por el debido rebote el balón fue directo a impactar con el rostro de alguien
- ¡Aominecchi! - Chillo el rubio cayendo de sentón al suelo con la nariz sangrando y la misma área del rostro roja, literalmente lastimada, la tapó con sus dos manos quejándose jadeando de dolor
El Angel levanto la vista sorprendido escuchando los quejidos y sollozos del rubio, claramente el pobre no sabia que Kise podía llegar a ser muy dramático, y que solo estaba exagerando, al no saber el campo de fuerza desapareció y se acerco arrodillandose frente al rubio
- Angelcchi - Susurro el de ojos dorados mirando al de menor estatura por algunos centimetros, este le miraba con estos mismos ojos cristalizados por el dolor
- Disculpa, ¿me dejarias ver? - Cuestiono el de ropas blancas mirando preocupado la sangre salir de la nariz de este
El rubio fruncio el ceño un poco extrañado pero igual el Angel le trasmitia una paz y confianza muy curiosa, que le hizo asentir, quitó sus manos mirándolo curioso
- Gracias - Sonrio el de blanco con esas sonrisas angelicales, el de cabellos rojos llevo su mano a la frente de Kise y cerro los ojos
Los demas de la Generacion De Los Milagros miraron a los dos confundidos, pero de nuevo volvieron a abrir los ojos extrañados, al ver que la mano en la frente lastimada de Ryota comenzo a brillar, pero ese brillo hacia que no pudieran mantener la fija vista, mas bien les hizo mirar a otro lado
Ya un poco ofuscados por ese brillo parpadearon dirigiendo su vista hacia abajo, sorprendentemente la herida y la sangre, ya no estaban, no habia rastros ni nada, como si casualmente nada hubiera pasado
- Angelcchi - Susurro Kise mirándose en un espejo, alzando un poco su flequillo - ¡Gracias! - Sonrió el rubio lanzandose encima del de cabellos rojos abrazándolo con mucho cariño
Este de nuevo se asusto una vez mas moviendo sus alas cubriéndose con ellas usándolas como un escudo frente a el, pero a decir verdad al rubio le parecieron súper cómodas, era como estar acostado quizá en una nube, no. Incluso eran mucho mas suaves
- Kise, ya deja al Angel - Salto a la defensiva Aomine jalando del sueter al de ojos dorados que se quejo cuando dejo de sentir la suavidad de esas hermosas alas
- Son tan suaves... - Susurro Ryota con una sonrisa y ojos brillantes, quedandose acostado en el suelo en un medio trance mientras se abrazaba a si mismo
Kuroko de inmeadiato se acerco al angel tocando su hombro con cuidado de no hacer algun movimiento brusco que asustara al otro - Angel-kun, lamento el comportamiento de mis compañeros, por favor no se asuste - Movio su mano un poco y con cuidado
Taiga bajo un poco la defensa a la vez que sus alas y sus facciones se relajaban poco a poco, y asentia, pero aun estaba temblando un poco por el incidente con todos - E-Es-Esta B-B-Bien
El chico mas palido del lugar sonrio minimamente- Ahora, ¿que tal si nos dice su nombre? - Cuestiono el de ojos celestes, con una sonrisa tratando de trasmitirle confianza al ángel
Y al parecer funciono ya que este sonrió un poco, tiernamente dejando con un ligero sonrojo a todos, el Ángel relajo sus facciones echando un suspiro - U-un placer... - Tartamudeo un poco este poniéndose rojo de sus mejillas - Y-yo...S-soy Kagami Taiga - También se presento el Ángel con un poco de miedo mirando a los demás tembloroso
Tienes un lindo nombre Angelito - Fue el primero en reaccionar Aomine mientras estiraba su mano y acariciaba el cabello del menor, sin intenciones mayores
- Daiki, basta, lo estas asustando - Comentó Akashi le replico en sabe cuantas veces mientras le amenzaba con sus tijeras
- K...Kagami-kun, ¿tiene hambre? Puedo traerle algo de comer de la cocina - Comentó Kuroko tocando su espalda moviendo su mano tratando de calmarlo, vaciló un poco si tenía un nombre precioso
- ¿Cocina? Eh, creo que yo podría... ¿M-me dejaría cocinar algo Kuroko? - Cuestionó el bello ángel mirándolo con inocencia a la vez sus labios formaron puchero
Tetsuya ante esa cara y expresión claramente no pudo decir que no, asintió con la cabeza y lo llevó de la mano a la cocina, en parte se gano cinco miradas celosas
- Chicos, necesitamos hablar sobre el ángel - Sentenció Akashi haciendo señas para que se sentarán.
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