Fly
Ni un "me gustas", pudo decir, ni un momento dramático en el que se va confesandólo, ese chico que quería aprender a volar sólo, sin tener que ser escogido como discípulo para forjar su futuro, sin depender de un amor que nunca fue realidad.

❛Con el tiempo lo aprendí❜

Y después de seis años cuando los héroes triunfaron de nuevo, y Black quedó sumido en un hoyo; Zamasu lo logró.

Volar nunca fue tan divertido, y tan complicado, siendo un completo desconocido entre los humanos desde que revivieron, no sabía el porqué, aveces sabía que era obra de los héroes de siempre para no tener rencor en la historia. Su vida nunca fue más misteriosa, un ser como él no pasaría desapercibido en la tierra, se escondía y se ganaba la confianza de sus amigos, no quería ver la vida pasar, pero sí lo hacía, al ser inmortal nunca tuvo un amigo que lo apoyó toda la vida. Bueno, sí, algunos amigos lo apoyaron toda su vida, la que vivieron y desvanecieron.

Era el castigo de sus errores, errores que le costaban toda la vida.

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En otro lugar muy cercano por coincidencia, se encontraba un hombre solitario por decisión, ambicioso en un pasado, con logros demasiado imposibles, Black se había vuelto inmortal con las esferas del dragón de otros universos; si lo crees  estúpido él no, su mayor satisfacción para remediar ese dolor y vacío era esperar a ver la humanidad derrumbarse por sí sola. Entonces al fin se daría la razón propia, y podría buscar a Zamasu y a todos los demás para mostrarles que no tendrían que haberlo detenido, que buscaba humanidad, y la humanidad no implica desear el dolor futuro de la misma, pero seguro algún día lo harían así.

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Zamasu salía a comprar el pan de la mañana, lo remojaría en la leche con chocolate en polvo, el pan sería dulce y el chocolate, caliente.

No era demasiado satisfactorio, no había salido a comer en días, un mes aproximadamente, salió con la típica chaqueta negra que le cubría el rostro a través de sus cuantas sombras, no le gustaba pues no se consideraba esos payasos que se escondían en una de esas.

Pero esa mañana no fue igual a todas antes de que pasase ese mes, todos tenían mascarillas, tapabocas, cubre bocas cómo lo quieras llamar, era horrible, en cierto modo se veía terrorífico.

Algunos lo miraron, ya no era el único chico sospechoso por cubrirse, no sabía el porqué y lo primero que pensó fue en el estado del aire de esta mañana en el país, lugar, era muy frecuente que los humanos ensuciaran el planeta desde hace años, y se podría esperar a que alguna vez les obligaran a cubrirse nariz y boca.

Apenas puso un pie dentro de la tienda, después de mirar a las personas con tapa bocas, desde los cristales de la fachada, cuando algo lo jaló del antebrazo, lo llevó al lado contrario de la tienda, ya que estaba situada en la esquina de la calle, y tapó la boca de Zamasu. En ese momento él se alteró, podía hacer algo ahora, pero se alteró porque nadie le había hecho usar su fuerza ruda en mucho tiempo, sin problemas después de cinco segundos calmado sabría que por ser inhumano se safaría del agarre; cuál fue su ahora desesperación cuando el sujeto no movió un dedo cuando Zamasu intentó quitar la mano de su boca.

ー no te preocupes, yo sí tengo las manos limpias ー dijo el sujeto con una voz familiar, que Zamasu reconocería entre muchas.

ー¡mm!....ー trataba de hablar, sabía que era Black.

ー te dije que se destruirían por sí solos, solo te lo vine a aclararー susurró en el opuesto a su oído.