P.O.V Narradora: 

—Dicen que nadie sabe como fue que comenzó todo, pero la realidad es que todos saben que siempre se repetirá.

Claro, no pueden revelar tal cosa a los cuatro niños, Miku y Mikuo Hatsune al igual que Len y Rin Kagamine.

Fueron criados por los sirvientes del castillo, ninguno de ellos sabe algo de sus padres o sus abuelos o sus tíos, ya que lo único que saben es que pronto llegara el día en que todo cambiara en sus vidas, lo que no se esperan es que pueda que el destino del pasado los atormente.

¿Pero de que tendrían que preocuparse? Tan solo son niños alegres, no recuerdan el amor de sus padres porque no tuvieron la edad para entender el cariño que le daban. 

—¡Miku, vamos corre! —Decía entre risas una joven de cabello corto y rubio mientras corría—.

—¡Ya voy Rin! —Dijo mientras corría detrás de ella—.

—¡Las atraparemos! ¿Verdad, Len? —Decía un niño mas alto que los tres de cabellos aguamarina y ojos del mismo color mientras corría detrás de las chicas seguido por otro—.

—¡Dalo por hecho Mikuo, las atraparemos chicas! 

—¡Uy~ que miedo tengo hermanito! 

—¡Ya veras Rin! 

—Oye len, tengo una idea, ve por Miku y yo por Rin.

—¡Bien, te atrapare Miku! 

—Que miedo tengo Len-kun —Dijo corriendo más rápido—.

—¡Te tengo! —Se tira sobre la aguamarina—. Perdiste Miku.

—Jmmm... ¿Eso crees Len? —Lo empuja haciendo que el caiga a un charco de lodo—.

—Eres mala Miku, ¡Ya veras! —La tira de la muñeca haciendo que Miku caiga al lodo—.

—¡Ya veras Kagamine! —Salpicando el lodo al rubio mientras este hacia lo mismo—. 

—Gracias por dejarnos atrás, tuve que cargar a esta floja. —Dijo Mikuo cargando a Rin—.

—Eres malo Mikuo-kun. —Haciendo puchero—.

—Malo, pero divertido. —La tira al lodo—.

—Jmmm. —Le tira una bola de lodo en la cara de Mikuo—.

—Después yo soy el malo.

—Malo, pero divertido, ¿No? Quiero ver que tan divertido eres. —Lo desafío Rin—.

—Oh, ¿Me estas retando, Rin?

—Pues, si así es como lo quieres tomar.

—¡Ya veras! —Se tira al charco de lodo salpicando a todos—.

—Ay hermano, como eres. —Se quejo Miku—.

—Ahora van a ver que tan divertido soy. —Carga a Miku en sus hombros—. ¿Qué tal una guerra de quien cae primero? 

—¡SI! —Dijeron los tres—.

—¡Len cargame! 

-Bueno. —Bufo y cargo a Rin en sus hombros—.

—¡Que comience la batalla! —Dijeron los cuatro niños al unisono—.

—Y así pasaron la tarde los cuatro mejores amigos, todos los días se veían y pasaban la tarde juntos, pero tarde o temprano tendrían que separarse aunque no se imaginaban que ese día, estaba más cerca de lo que pensaban. 

»3 meses después«

—Los jóvenes seguían jugando y riendo ya que el día anterior fue el cumpleaños de Miku, cumplió ocho años al igual que Rin, y Mikuo ya tenia diez años al igual que Len pero Mikuo y Miku eran un poco mas altos que Rin y Len.

Cuando llego la noche los cuatro estaban comiendo un poco del pastel de cumpleaños hasta que cierta visita inesperada llego.

—Disculpe, ¿Están los gemelos Kagamine? —Pregunto un hombre de cabello rubio y ojos celestes—.

—Si, entre y espere aquí que los llamare. —Dijo Haku una sirvienta—.

—Bien, gracias. —Entra y se sienta en uno de los sillones del castillo—.

—La sirvienta subió las escaleras en busca de los gemelos, y una vez que los encontró le dijo que alguien los llamaba, estos solo la siguieron hasta la sala y ella se retiro dejándolos con ese misterioso hombre.

—Buenas noches Kagamines. —Se inclino—. Perdonen si los desperté, pero tengo noticias desde su reino.

—¿Qué paso? —Pregunto Len—.

—Resulta que sin un rey o alguien que este a cargo del reino ocurrirán muchas cosas, ayer parte del pueblo comenzó a quemarse por unos rayos de lluvia que caían por las casas, quemando y destrozando todo, escuchen, sé que son pequeños para tomar este tipo de decisiones, pero todos vamos a ayudarlos en lo que podamos, pero los necesitamos, así que por el bien de su reino. —Se arrodilla—. Les pido de parte de todos que vuelvan... Por favor.

—Len, ¿Qué haremos? —Pregunto Rin apenada—. Estamos bien aquí, pero nuestro reino nos necesita.

—Pero para eso... —Miro a Rin con miedo y angustia—. Tenemos que comprometernos con los del reino dorado, y ya sabes quienes son.

—¡PODEMOS COMPROMETERNOS CON ALGUIEN MAS, LEN! —Grito mientras lágrimas corrían por sus ojos—. No quiero casarme con Nero, es un egoísta y presumido que siempre trata de conquistarme y su hermana Neru es igual solo que esta loca por ti. Tú estas enamorado de Miku tanto como yo de Mikuo.

—¡Rin! —La toma de los hombros—. Me duele, pero no podemos pensar solo en nosotros, esta nuestro reino y no tenemos padres o abuelos que puedan encargarse del reino. —Dijo mientras pequeñas lágrimas salían de sus ojos—. No podemos comprometernos con ellos porque ellos se aman mutuamente. Rin, quisiera ser el esposo de Miku en el futuro, pero ellos ya están comprometidos hace tiempo, y eso lo sabes.

—No es justo, amo a Mikuo, Len... Mucho... —Decía mientras abrazaba a su hermano mas y más lágrimas derramaba—.

—Rin... —Susurro—. Escucha, nos casaremos con Nero y Neru pero luego, haremos un cambio de planes.

—¿Len?... ¿En que estas pensando? —Susurro Rin—.

—Tú solo sígueme el paso, te aseguro que Mikuo estará contigo y Miku estará conmigo, es solo cuestión de tiempo. —Beso la frente de su hermana y con un tono firme le dijo al hombre—. Regresaremos esta noche, solo deje que preparemos nuestras cosas.

—Claro, los estaré esperando en el carruaje. —Hizo una reverencia y salio afuera—.

—¡Len, explícame que es lo que vas hacer!

—Es simple. —Se acerco a ella y le susurro—. Tú sólo se paciente.

—De acuerdo, cuento contigo.

—Solo hay que esperar, serán un par de años, pero juro que conseguiremos estar con ellos, cueste lo que cueste. Ahora vamos a preparar las cosas e irnos.

—¿Irse a donde? —Preguntaron ambos agua marinos—.

—Oh, Mikuo, Miku... Es que tenemos que regresar a nuestro reino por los problemas que hay. —Dijo Len con un tono apenado—.

—Mikuo-kun, Miku-chan... ¡Los extrañaremos mucho! —Grito llorando Rin—.

—Oye... —Mikuo se acerca a
Rin y se agacha un poco—. Las princesas tan lindas como tú no lloran, Rin.

—Mikuo-kun. —Se tira sobre él abrazándolo fuerte—. Idiota... ¿Prometen que no nos olvidaran?

—Nunca podríamos olvidarlos. —Dijo Mikuo cargando a Rin como una princesa—.

—¡Mikuo, bájame! 

—No sin antes hacer esto. —Haciéndole cosquillas en la panza de Rin—.

—Len... —Dijo Miku—.  Ustedes... Tampoco nos van a olvidar, no?

—Claro que no Miku, siempre estaremos juntos pero a una larga distancia.

—Len... —Lo abraza—. Los extrañare... Mucho...

—No te preocupes Miku, les prometemos que nos volveremos a ver. —Correspondiendo el abrazo de Miku—.

—¡Len tenemos que apresurarnos! —Dijo Rin subiendo las escaleras—.

—Bien, ya voy. —Le da un beso en la frente a Miku y sigue a su hermana—.

P.O.V Len:

—Guardamos todas nuestras cosas y salimos afuera, de repente comenzó a llover un poco así que nos despedimos de Miku y Mikuo y subimos al carruaje, los saludamos por la ventana hasta que los perdimos de vista, Rin de a poco se fue durmiendo en mi hombro, me quite el saco y la cubrí con el para que no tenga frió, mientras que yo miraba por la ventana y una sonrisa salio de mí mientras pensaba en cuando crezca para poder estar con Miku.

—Solo son un par de años para que volvamos a vernos Miku... Solo espera...

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Kyofu: —Holiaaa :D perdón si no seguí pero no estaba de buen humor como para seguir, pero eso ya no importa. Quería decirles que esta historia sera un lió bastante grande porque... No mejor no les adelanto nada de lo que va a pasar, me gusta dejar suspenso, además no les quiero arruinar la historia pero eso si, si hay algo que no entiendan pregunten porque después no van a entender, desde ya les digo que por ahí no van a entender la historia, se los digo para que puedan leer y entender porque sino mandan a la mierda la historia, ahora quedo claro, Alumnos? xD

Ustedes: —Seeeeeeh profesora Kyofu.

Kyofu: —Después no me digan nada si no entienden eh xD... En fin, bais~

(☞ﾟヮﾟ)☞GRACIAS POR LEER ☜(ﾟヮﾟ☜)

[Editado✔]