Capítulo 4: Primera clase de... ¿DCAO?
En el capítulo anterior.
— ¿Tengo monos en la cara o parareis de mirarme algún día? -Digo algo borde y algunos empiezan a hablar entre ellos y olvidarse de mí.
— Blaise no molestes, yo solo le pregunte algo a "Isabella Bookos, la nueva". — Dijo Burlon mi nombre— Responde, ¿qué tipo de sangre eres? — Los dos chicos que estaban a mi lado rodaron ojos, al ver su pregunta.
— Nacida de muggles, porque tienes algún problema "Hurón albino". — Dije molesta, se escuchó un "Uuuh" de parte de los que estaban escuchando y este enrojeció de momento y me apunto con su varita.
— No sabía, ¿qué había sapos les gustase el rosa? —Dije en un susurro, pero algunos que estaban a mi lado me oyeron provocando que se rieran.
— Theodore Nott, encantado de conocerte —Me guiño un ojo el castaño, a lo que yo solo rodé ojos por eso— y él es Blaise Zabini. — Señalo el moreno que estaba al lado mío.
— Encantado bella, Bella. — Sonrió este— Y el idiota este de enfrente, es Draco Malfoy. — Se acercó a mi oído y me susurro algo— No lo molestes mucho, no te conviene.
— ¿Qué quieres asquerosa sangre sucia?
"Para Isabella Books.
PT: Te regalamos una lechuza, son muy útiles para llevar la correspondencia. No tiene nombre así que tú se lo puedes poner." Leí el contenido y la dejo en la cama.
— Buenas noches, Iris. —digo, cayendo en los brazos de Morfeo.
Capítulo 4: Primera clase de... ¿DCAO?
Mi móvil empezó a sonar dando comienzo a un nuevo día, abrí mis ojos perezosamente y estire mi mano para desactivar la alarma de este y me incorpore en la cama, definitivamente no había sido un sueño.
Estaba en otra habitación que no era lamia, ni siquiera había ventanas, y mi cuarto no tenia toques verdes con serpientes. ¿Quien fue el modista? Escucho un chirrido, enfoco mi mirada hacia donde provenía el sonido y vi a la lechuza que me regalaron.
—Buenos días, Iris. —le sonrió al ave, para después levantarme de la cama, y irme al baño, esta habitación por lo que vi estaba preparada para que no tuviera ningún problema con mi "secreto". Una muggle como ellos decían, una persona sin magia, debía de ser la primera persona en años que entraba sin ser un mago o bruja.
Me metí en el plato de ducha y sentí el agua caer por mi cara la cual resbalaba, terminé de ducharme, y me vestí con el uniforme que ya tenía el toque de la casa a la que pertenecía. Este iba a ser mi atuendo si hacia bien mi trabajo. Cepille mi cabello color carbón pulido y salí de la habitación después de coger unos libros que marcaba mi horario escolar, ya había que algunas clases no las iba a poder dar, no tenía magia así que era obvio que iba a poder darlas.
Me encontré a Theodore parado en medio de la Sala Común, parecía que me había esperado porque este se acercó a mí.
—Buenos días, Bella. —Me saluda alegre—Blaise se adelantó para pillar sitio en el Gran Comedor. —Me explicó seguido del saludo.
—Buenos días, Theodore. Entiendo, pero no tenias porque esperarme. —Le dije, ya que podía haberme atrasado y habría desayunado él.— Podría haberme atrasado y no habrías desayunado tú.
Subimos escaleras, doblamos, ayer no me di cuenta que hicimos tanto, creo que estaba todavía en Shock.
Llegamos al Gran Comedor y me senté al lado de Blaise, todavía había gente que me miraba raro y sorprendidos. Les salude a cada unos y me dispuse a tomar mi desayuno, la magia todavía me sorprendía. Y no había hecho más que empezar.
Todo iba bien hasta que alguien se aclaraba la garganta detrás de mí, haciendo que volteara la cabeza hacia atrás para mirar de quien se trataba, era la mujer falsa esa que se parece a un sapo vestida de rosa.
—Señorita Brooks, quería avisarle que podra asistir a mis clases de Defensa Contra las Artes Oscuras, ya le contaré ha habido cambios en el programa. —Me explicó la sapo rosa, esa clase seguro era una clase que no debía de dar, lo intuía, pero yo solo asentí con la cabeza y se fue.
—Eso quiere decir que darás DCAO con nosotros, lo más seguro sea porque ahora no hay prácticas, sino que teoría, una estupidez bajo nuestro punto de vista. -Dijo Blaise, para seguir desayunando.
~¿Práctica? Me parece a mí o esa mujer no le agrado que viniera, ella debe de saber de mi condición muggle, como todos los profesores del lugar. Es algo sospechoso.~ Me dije para mí, pero una conversación me llamo la atención.
—Tenemos clase con San Potter, veremos cuanto dura en clase.—Dijo alegre una clase.
—Solo debe de decir que el Señor Tenebroso, regresó.—Dijo otra chica que estas al lado, ¿quien era ese señor.?
—Imagino que no conoces nada de nuestro mundo, verdad Isabella. —Dijo el rubio que se encontraba frente a mí, maldito hurón, y que sí no se quién es, ni que me importase.
—Lo importante para ella es saber que él, se ocupara de ella. —Continuó la chica de antes, que tenía cara de perro. ~Ocuparse de mí, a que se refiere. ¿Quiere matarme pero si no me conoce?~
—Eres una sangre sucia, en sucias a la noble casa Slytherin... —fue detenida cuando Theodore me tomo del brazo haciendo que me levantara.
—Vayámonos Bella, tenemos clase en poco. —las miro mal, y nos fuimos del gran Comedor, Zabini nos siguió junto con Draco y otros dos, los cuales no sabía el nombre todavía.
Hubo un silencio incomodo, quería aclarar mis preguntas, pero supe que era mejor hablar con alguno de los adultos para responderlas, si no podrían sospechar por preguntas tontas. Entramos a una clase muy larga en la cual había alumnos con otro uniforme, era de color rojo, dedicó que era Gryffindor como la noche anterior. Algunos me miraban un tantos extrañados. Ni que tuviera un cartel encima de mi cabeza que dijera "Aquí una muggle dando clase". Intimidaba.
Me senté en un pupitre aislado, aunque más bien todos estaban separados, así que no pude sentarme con Blaise y Theodore, a mi lado había un chica castaña con pequeñas ondulaciones en el pelo, llevaba el uniforme de Gryffindor. No sabía que decir así que solo solté un "Hola", esta me miro no extrañada
— Se nota que eres nueva, y nacida de muggles. —Dijo la chica castaña.— Soy Hermione Granger, ¿y tú eres Isabella Brooks, cierto?— otra vez volví gruñí, que no se enteran que no me gusta mi nombre.
— Bella, por favor. Isabella suena extraño. -La corrijo, y esta dio una mirada hacía la puerta.
—Ten cuidado que Umbridge, no se enfade contigo. —Ya la tenía en mi contra, viendo que dejara que de clase de DCAO no hay duda de eso, sonreí a la castaña.— Soy Hermione Granger, de Gryffindor.
—Encantada Hermione, y como ya sabes soy de Slytherin. ¿Por qué dices era obvio que soy nacida de muggles. —Le pregunto, intentando ocultar mi nerviosismo, y si me descubrían antes de la primera semana de estar.
—Tu casa, no suele hablar con gente como yo, te habrían puesto al corriente. —Su mirada se dirigió a la puerta— Ahí viene Umbridge. No es bueno enfadarla. —Dijo esta mirando al frente.
Yo asentí con la cabeza y le di la bienvenida como todos. ¡¡Buenos días profesora Umbridge!!. La clase prosiguió, parece que la profesora la tomo con un chico de Gryffindor, tenia los ojos verdes y una marca en la Frente, solo supe que se llamaba Potter, por el bramido de furia de Sapo Rosa, como la había apodado yo, y le puso un castigo. No sabía que tenía que hacer ya que solo dijo que tenía que ir en su despacho. El castigo fue impuesto en mi punto de vista injusto, ya que el chico decía que un tal Lord Voldemort si había regresado pero esa mujer no estaba de acuerdo, algo me decía que mentía, luego que esta clase sin practica no servía para nada, yo también lo pensé por el nombre de la materia. Esa mujer hacía lo que quería, pero yo no podía hablar, algo me día que con esa mujer no lo hiciera.
La clase finalizó, y Blaise junto con Theodore se acercaron a mí, ellos me preguntaron que me había parecido, yo les respondí "Aburrida", y era verdad. Tenía muchas dudas en mi cabeza, alguien tendría que responder me las, y quien era esa persona que todos tenían tanto miedo, ¿Quién era Voldemort? Sería la misma persona que ese Señor Tenebroso. ¿Qué ocurría en esta escuela o más bien en el mundo de los magos? Pareciera que los magos no soportan a los muggles, y eso significaba que lo hiciera no serviría para nada.
Perdón por tardar tanto en actualizar, me encuentro de exámenes y no podía escribir por falta de inspiración. Gomene.
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