-Entonces ¿que te parece? -pronuncio sonriente Mitsuki al mirar correr a hima por el lugar.

- ¡Es mejor que estar encerrada! -Decía animada recorriendo todo el lugar entre saltos animados y búsquedas de rocas.

Con una sonrisa en cara sujeto la mano de Mitsuki sorprendiéndolo y haciéndolo Sonreír al mismo tiempo, mire a Hima alejarse y enseguida me acerque a los labios de mi pareja.

Él rio - ¿Que haces?

-Nada raro, besándote -Dije animado.

Acercándolo por las mejillas seguí besándolo un rato, ahora mismo Mitsuki es el único que me distrae de iniciar a hacer una locura, sujetandolo por la cintura lo atraigo mas a mi, sus labios siguieron los mios hasta notar nuestras respiraciones cambiar, entonces se alejo de mi toque y sonrió conteniendose.

- ¿Quieres ir a dar una vuelta? -pronuncia tomando mi mano.

-Claro -Digo animado.

En nuestro caminar Hima paso muchas veces a nuestro lado mostrándonos piedras que iba encontrando en el lugar, la mayor parte del tiempo trate de mirar a Mitsuki pues cada que miraba a Hima recordaba a nuestros padres, él parece notarlo enseguida pues no tarda en llamar mi atención. Manteniendo la mirada en el mar a nuestro alrededor sólo puedo suspirar.

- ¿Pusiste una barrera a nuestro alrededor? -pregunte curioso sin despegar la vista del mar.

-Por cualquier cosa, no quería que... -su mirada bajo -mi padre iniciará una lucha aquí, me vería obligado a luchar contra él, y eso... No me agrada.

- ¿Contra él? -pregunte curioso apretando su mano.

-Se que en un principio no lo hice en la villa, pero no puedo dejarlo lastimarte... -sus ojos ámbar vienen a mi -Eres mi luz Boruto, y no podría dejarlo lastimarte ni una vez mas.

- ¿Aun cuando sea tu padre... -baje la mirada y entrelazando mi mano con la suya lo miro -lo atacarías?

Con una sonrisa tranquila en su rostro simplemente asiente con sinceridad... Algo feliz mire el mar a nuestros pies, Mitsuki... realmente seria un gran sacrificio ir contra su padre, él, que tanto lo ama... Lo respeta...

- ¡Ni san! -pronuncia animada Hima.

- ¿Que pasa? -pregunte regresando la mirada a ella.

Mitsuki volvió la mirada por igual -¿Ya te aburriste?

-Un poco -rie divertida - ¿Puedo entrar al agua o algo?

-Si, la barrera esta un poco lejos, deje un tramo para poder divertirnos -Dice sonriente mirándome -No es muy hondo... -se dirije a Hima -Hay unos trajes de Baño en mi habitación ¿podrías...

Antes de siquiera terminar Hima ya había corrido en busca de los trajes de baño, entre mi risa me recargo un poco del cuerpo de Mitsuki mientras mi mirada se mantiene al cielo, él abraza sus piernas y con esa sonrisa de costumbre mirar el mar frente a nosotros.

- ¿Que haremos luego de que todo termine Mitsuki? -bajo la mirada decaída -No creo ser capaz de volver... No podría.

-Podríamos simplemente irnos -pronuncio disminuyendo su sonrisa -Hay un mundo más haya del que conocemos... Pueblos... Ciudades... Estoy bien informado de ello, tengo dinero, fácilmente podríamos junto a Himawari ir a otro lugar... Y dejarlo todo atrás.

- ¿Dejar de ser Ninjas? -pregunte curioso mirando su cara seria dirigirse a mi.

-Se que no te agrada la idea... A mi tampoco del todo, pero... Mudarnos a otra villa seria...

-Si, lo se... -me incorpore posando mi mano sobre la suya -realmente seria muy problemático y... Seguiría recordándolos, bueno... No lo se -sonrio hacia él -cualquier lugar al que vaya mientras sea contigo...

Con una sonrisa sobre sus labios avanza con lentitud sujetado mi mejilla para iniciar un profundo beso, de pronto ya se encuentra a horcajadas sobre mi deslizando sus pálidas manos por mis cabellos, Sonrío encendido y deslizo mi mano por sus caderas acercando su cuerpo a mi.

- ¡Mngh! -suspira alejándose del beso un segundo.

- ¿Que pasa? -pregunte animado aferrando mi mano a su cuerpo, deslizando mi mano por su espalda hasta su nuca - ¿Mm?

-Solo... -limpia con delicadeza la saliva que escapo de nuestros labios -Me sorprendió un poco.

Sonreí y acercándome de nueva cuenta volví a probar sus labios con mas delicadeza. Mi corazón late con fuerza... Diablos... Necesito...

- ¡Jutsu clones de sombras!

Sorprendido Mitsuki me miro con duda - ¿Que...

-Hima debe quedarse con alguien aquí afuera -sonrei levantándome y ayudándolo.

- ¿Que dices? -pregunta aun sin comprender.

Lo jale sin mas dejando a nuestros clones fuera, para entrar a la guarida y dirigirnos a mi habitación para solo cerrar la puerta. Sorprendido mantiene su mirada sobre mí, y yo solo avanzo a sus labios presionándolo contra la pared, nunca hemos tenido nuestra primera vez en esto, siempre nos interrumpían con misiones, o bien... Él me pedía parar.

-Oye -pronuncie separándome un segundo de su cuello - ¿Porque dormimos en habitaciones separadas?

Avergonzado solo desvía la mirada -No lo... Se...

Sonreí subiendo entre besos por su cuello, besando sus labios - ¿Y si dormirmos juntos a partir de ahora?

-Como... Como quieras -Dice avergonzado.

Sonreí, realmente me encanta cuando se sonroja de ese modo, viajando por su pecho entre besos lo escuche suspirar animado con el ambiente.

- ¿Porque estas haciendo esto? -pronuncio aferrándose a mis ropas.

-Por que... -sosteniendo su pierna a lo alto de mi cadera Sonreí a sus labios -Nunca lo hemos podido hacer bien antes.

Con un suspiro se aferro a mis mejillas uniendo sus labios a los mios. Poco a poco nuestros cuerpos se unian más, nuestras ropas caían al suelo y relamiendo mis labios termino por levantarme de encima suyo tragando grueso ante su figura delgada y apenas marcada frente a mí, su piel pálida se contrae con vergüenza apenas nuestros miembros se tocan y suspirando deslizo mi mano por su pecho sintiendo sus pezones debajo de mi palma, él suspira profundamente y desliza su mano por mi brazo hasta tocar mi pecho.

-Te amo...

La sorpresa me llena de emoción, sonriendo a más no poder solo puedo dejarme caer sobre él abrazando su cuerpo desnudo al mío y alejándome un poco para unir nuestros labios en un beso.

-Es lo... -me separo levemente de sus besos -mejor que me has podido... -rio contra sus labios -Decir...

Él ríe entre su alejar, de pronto se incorpora permitiéndome aún estar entré sus piernas cerca suyo.

- ¿Que ocurre? -cuestiono sujetandome de sus piernas.

- ¿Quieres ir arriba o... Abajo? -avergonzado baja un poco la mirada.

Un poco sorprendido, solo sonrío y sujetando su mejilla me acerco a sus labios besandolos con cariño.

- ¿Y si voy abajo? -me acerco mordiendo su labio - ¿Que tal si voy abajo? ¿Te gustaría? ¿Quieres hacerlo?

Tragando grueso no puede emitir palabra y solo asiente atontado, pero de pronto vuelve en sí, sin más me tumba en la cama haciéndome reír y estirando su brazo saca un bote de loción del mueble de noche, divertido solo lo atraigo a mis labios mientras escucho el abrir de la loción y siento el líquido frío resbalar por mi vientre.

- ¿De dónde sacaste eso? -cuestiono por lo bajo.

-Ha... -baja la mirada deslizando su mano por mi vientre -Lo usabamos para dar masajes.

-No te creo que eso haya durado tanto aquí -acaricio su mejilla sintiendo bajar su mano - ¿Lo compraste apenas?

-Solo pensé -confieza avergonzado -que estaríamos mucho tiempo solos aquí.

Mi risa se ve detenida por sus dedos que se adentran en mi interior, abrumado por la sensación mantengo mis piernas abiertas a su cadera y mientras besa mi pecho lo siento seguir alistando aquel lugar. El silencio es relevado por mis respiraciones profundas, por el sonido de aquel líquido en mi parte baja, por sus besos, mis quejidos al aire... Mi pene esta tan erecto que me estoy volviendo loco, y él parece percatarse.

-Ya han entrado tres dedos... Quizá ya pueda meterlo... ¿O quieres que tenga las cuidado? Puedo esperar y prepararte más.

Su pene erecto se frota con el mío, y entre el desespero los sujeto entre mis manos y cerrando los ojos comienzo a frotarnos juntos.

-Quiero que lo metas ya -pido desesperado.

Mitsuki traga grueso ante mi petición, pero sin más termina asientiendo y con cuidado posa su miembro en mi entrada, frotándose al rededor como tentandome... Él sonríe a mi desespero y yo solo puedo morder mis labios mientras sujeto sus brazos, entonces lo siento entrar, poco a poco su miembro se desliza en mi interior causando la rigidez de mi vientre, y una sensación extraña que me llena el cuerpo... Duele un poco, pero de verdad está tratando de ser cuidadoso, y yo estoy tratando de relajarme.

-Quiero que me beses.

Sus labios uniéndose a los míos, su pulgar acariciando mi barbilla con la mayor delicadeza mientras sus caderas empujan con suavidad permitiéndome acoplarme a su forma. Sus manos se deslizan desde mi cadera hasta mi pecho palpando a profundidad cada músculo de mi cuerpo y entonces sus labios se alejan como no queriendo lo. El movimiento de sus caderas es suave y profundo, cuidadoso, mientras sus mejillas se mantiene rojas y muerde sus labios del placer, encantado con esa imagen suya solo puedo mover levemente mi cadera pidiéndole más, y Mitsuki lo entiende pues poco a poco su vaiven aumenta la intensidad obteniendo mis gemidos en rencompesa, entre el sudor de nuestros cuerpos y su fricción, sus leves besos, nuestras caricias al cuerpo contrario... Él sube mi pierna a su hombro y en desespero muerde mi muslo haciendo erizar aún más mi piel, su mano frotando mi pene y mis manos aferrándose a él y las almohadas. Nuestros suspiros y gemidos en el aire.

- ¡Mngh, Aaah! ¡Me voy... Me voy a venir!

- ¡Mngh, yo también... -musita tratando de contenerse.

Mis caderas y las suyas siguiendo el juego y su miembro tocando aquella parte que me hace erizar por completo, un gemido totalmente extraño sale de mi boca, pero ni siquiera me da tiempo de avergonzarme porqué terminamos viniendo nos casi al mismo tiempo. Su cuerpo termina sobre el mío con la respiración agitada entre suaves y cortos besos, entonces río sobre sus labios acariciando su mejilla.

-Yo también te amo Mitsuki.

Él sonríe complacido y solo asiente volviendo a besarme. La verdad, me importa poco lo que esté pasando con su padre fuera de esta isla, Hima está bien, él está bien, y yo los tengo a ambos y eso me hace feliz, no necesito más... Y quizá Mitsuki tenga razón, lo mejor sería irnos de aquí, lejos de los ninjas, lejos de las villas, a tierras nuevas quizá... Pero juntos.