Tercer capítulo: Cita.

Sus manos temblaron ante tales palabras, soltó una respiración pesada al sentir su corazón latir de manera rápida y desenfrenada. No entendía como él estaba tan relajado frente a él como si no le acabara de decir nada, como si fuera una banalidad invitarlo a salir.

-¿Y-Yo? -se señaló, nerviosamente.

-¿Sí o no? Solo respóndeme -había perdido ese tono dulce con el que se lo había pedido, lo cual despertó a HyungWon e hizo que carraspeara su garganta.

-C-Claro. Me gustaría.

El mayor no cambió mucho su expresión una vez le dio un sí, y sin decir más se fue de allí llevándose su folleto en las manos, HyungWon le siguió con su mirada hasta que él se perdió de su cuadro de visión y fue entonces cuando se permitió soltar un largo suspiro. Inevitablemente una sonrisa también empezó a formarse en su rostro, llevó sus manos hasta sus mejillas sonrojadas, sintiéndolas calientes al contacto.

No era un sueño ¿Verdad?

Se sentía feliz, emocionado y nervioso, pero no tenía con quien compartir esa felicidad. La última vez que le había comentado a NaYeon sobre algún interés amoroso ella siempre le respondía que era probable que solo quisiera jugar con él y su pobre corazón, y aunque sabía que NaYeon no decía nada de eso con la intención de ofenderlo, su selección de palabras muchas veces lo reducían a nada y le hacían sentir como un ser vacío que no merecía ser amado.

Al siguiente día la sonrisa en su rostro era imposible de ocultar, aún no podía creer que el fin de semana se vería con él e irían al festival de los enamorados juntos, era como un sueño hecho realidad. Es que de solo pensarlo le hacía creer que nada era real, era muy bueno para ser cierto, sin embargo, nada podía bajarlo de esa nube, ni las miradas entrometidas que le daban SeHun y su pandilla.

NaYeon se le acercó durante uno de sus descansos a horas, él estaba en la fila de la cafetería esperando con una bandeja por una hamburguesa que había pedido y NaYeon amigablemente se acercó a hacerle la charla.

-Te veo animado ¿Pasa algo? -ella le sonrió, tomando de su botella de agua y con su tape de frutas picadas en mano.

-No, nada en especial -él le regaló una sonrisa sellada, aun así, viéndose esta muy alegre en su rostro con sus mejillas abultadas.

-Yo te conozco bien, sé que estás feliz por algo. Vamos, dime qué es -ambos tomaron asiento en una de las mesas de la esquina, desacomodando sus mochilas de sus hombros.

-¿No tenías que sentarte con tus amigas hoy? -HyungWon cambió de tema rápidamente, tampoco queriendo sonar como un reclamo sonrió a NaYeon una vez hubo terminado su pregunta.

-No, hoy quise sentarme contigo -se llevó un trozo de melón a la boca. -¿Ahora sí vas a decirme que es lo que tienes? -le preguntó a boca llena.

-N-No... Pero si tengo algo que decirte -HyungWon miró de lado a lado, asegurándose de que no había moros en la costa. -Es sobre SeHun.

-¿Oh SeHun tu ex-novio? -dijo NaYeon en un tono más alto de lo que a HyungWon le hubiera gustado, así que le pidió silencio en una seña con su dedo índice. -Lo siento ¿Hablamos de ese SeHun?

HyungWon suspiró mientras asentía a ella, corrió su silla un poco más cerca de NaYeon asegurándose de que la charla no pudiera ser escuchada nada más que por ellos -: Sí, es sobre ese SeHun, sabes que tengo que verlo en algunas clases a él y a su pandilla de inútiles, y últimamente están detrás de mí por alguna razón, siempre los veo cuchicheando a mis espaldas y hace una semana SeHun se ofreció a llevarme a casa.

-HyungWon, ten cuidado con ese chico, sabes que no es de fiar -tal como una madre, sabía que NaYeon le daría un consejo, a voz seria pero amigable. -Sabes tu historia con él.

-Si, lo sé -soltó un suspiro por la nariz, dándole una mordida a su comida algo melancólico. La historia de SeHun era algo que prefería borrar.

-Bien, tenemos que estar al tanto de lo que haga, no me trae confianza que ese chico este merodeando cerca de ti nuevamente, nada bueno puede traer.

HyungWon asintió a ella, ambos dejando de lado el tema y creando una charla mucho más amena, cuando el descanso de NaYeon terminó se despidió de él mientras iba con una de sus amigas a su clase predeterminada, él en cambio aún tenía unas horas de descanso así que las aprovechó para adelantar algunos trabajos que, si bien eran para la otra semana, no quería nada pendiente para el fin de semana.

Su nariz se arrugó de felicidad cuando pensó en la ropa que usaría ese día, hace poco su padre le había dado algo de dinero en agradecimiento por ayudarles con la panadería, así que podría comprarse una camiseta nueva para verse lindo y agradable a la vista. Necesitaría también algo de corrector, ya que en esos días un insufrible granito había aparecido en su mejilla y por nada del mundo quería que WonHo notara este.

Al llegar a casa sus padres lo notaron igual de contento, pero al igual que NaYeon no pudieron extraerle nada de información, la cita que HyungWon tenía solo la conocía él y WonHo. Al menos eso esperaba.

Esa noche tampoco él apareció por la panadería, lo cual le entristeció un poco, pero su optimista pensamiento le hacía creer que tal vez estaba algo tímido antes de la cita al igual que él, así que su humor bajo desapareció de inmediato. Sin embargo, el resto de noches él no se apareció tampoco, lo que le empezó a colocar algo nervioso porque pensó que vendría al menos una vez a saludarlo o algo por el estilo, pero en toda su semana no había aparecido ni se veían rastros de él por el vecindario.

La noche de su cita estaba parado en frente de su casa, con su cabello rosa limpio y brillante bajo una boina negra y su camisa cuello tortuga blanca a juego con su pantalón ancho y oscuro, había tomado un poco del maquillaje de su madre y un delineado delgado y suave estaba sobre sus ojos y una tinta roja sobre sus labios. Sus ojos comenzaron a enlagunarse cuando dieron las seis con cincuenta de la tarde y él no aparecía, contando con que el festival empezaba a las seis y media de la tarde.

Tal vez se le hizo tarde, pensó en reiteradas ocasiones, pero su sentido común le decía que era imposible si literalmente él vivía a la vuelta de la esquina, mordiendo su uña dejó escapar una lágrima que se encargó de limpiar rápidamente. Tal vez NaYeon tenía razón y debía resignarse a que los chicos únicamente lo veían como un trofeo, alguien a quien presumir frente a los demás, pero nunca amar, pero ese pequeño desplante por sobre otras muchas humillaciones se sentía más penetrante en su corazón.

Limpiando otra de las lágrimas que escaparon dio un paso atrás dispuesto a irse, sin embargo, en ese mismo instante un auto pasó por el frente que se detuvo unos pasos más adelante debido a la velocidad con la que venía anteriormente, reconocía el flamante auto así que soltó un suspiro largo, viendo a su vecino salir del auto.

-¿Por qué lloras? -no lo saludó, con esa actitud tosca de siempre solo le preguntó ello con voz neutra.

-P-Pensé que me habías plantado -susurró HyungWon, limpiando otra de sus lágrimas que había escapado de su ojo por reflejo.

-Pues ya ves que no ¿Vas a subir o qué?

-Creí que iríamos a pie, el parque... e-el parque no es tan lejos -HyungWon caminó tímidamente detrás de él hasta el auto.

-Si no quieres subirte al auto puedes devolverte a tu casa -rodeó el móvil llegando hasta su asiento de piloto. HyungWon quedó un poco perplejo por su actitud fría y tosca, además de que esperaba al menos que le abriera la puerta del auto, pero solo pasó de largo.

-Si quiero, si quiero -se subió con rapidez al auto, asegurándose el cinturón de seguridad una vez dentro del auto.

El camino fue silencioso, HyungWon hacía preguntas sueltas como ¿Te gusta el algodón de azúcar? o ¿Cuál es tu juego mecánico favorito? Pero WonHo siempre le respondía secamente diciendo que no le agradaba que algodón de azúcar por ser tan rosa y nunca había subido a un juego mecánico. HyungWon luego de unos minutos prefiero callar y seguir el corto camino en silencio, al llegar nuevamente bajó del auto el solo mientras el mayor caminaba delante suyo.

-¡Hola! Bienvenidos al festival de los enamorados -una amable chica los saludó efusivamente, lo cual ocasionó que HyungWon sonriera, pero para WonHo fue algo molesto. -¿Desea la feliz pareja donar algo extra para un nuevo hogar de ancianos? -ella les mostró una caja que tenía unos billetes ahí puestos, HyungWon rebuscó en sus bolsillos mientras que su pareja salía adelante sin esperarlo.

-E-Espérame -dejó su billete en aquella caja y corrió detrás de su acompañante, ambos empezando a recorrer el lugar. -¿Qué quieres hacer primero?

Él únicamente se encogió de hombros mientras caminaba desinteresadamente a su lado, HyungWon se sintió un poco juzgado al estar caminando junto a él como un extraño cuando todos los que pasaban a su lado iban tomados de la mano o agarrados del brazo. Soltó un suspiro bajo mientras seguían dando vueltas por el parque hasta que misteriosamente WonHo se paró en el lago, le extrañó en un principio, pero decidió quedarse ahí a su lado mirando las ondas que el viento creaba en el agua.

-¿Tienes hambre? -preguntó luego de unos minutos incómodos. -Hay un puesto de hot dogs aquí cerca ¿Con qué sueles comer el tuyo?

-¿De que diablos estás hablando?

-¿No te gustan los hot dogs tampoco? -HyungWon inclinó su cabeza un poco en modo de incógnita.

-No sé qué serán esas cosas, pero se oyen asquerosas -frunció sus labios, visiblemente molesto para HyungWon.

-Es solo una salchicha en medio de un pan -respondió bajo, escondiendo sus manos detrás de su espalda mientras miraba sus zapatos. -Pero si no quieres hay muchas otras cosas.

-No quiero comer -le respondió él nuevamente con el tono seco y cortante. Mirando con fijeza de nuevo el lago y la luna de vez en cuando. -¿Cuántas personas habrá aquí?

A HyungWon le desconcertó un poco la pregunta, mirando algo perplejo al mayor que no despegaba su mirada del agua. Era algo difícil de calcular, pues mucha gente estaba esparcida al rededor del parque y desde donde estaba no lograba verlos a todos.

-No lo sé, tal vez alrededor de unas doscientas o más -rascó levemente su mentón. -¿Por qué te da curiosidad eso?

-Me refiero a cuántos enamorados habrán... Su energía es fuerte.

Su selección de palabras era completamente rara, al menos para HyungWon, pero no le tomó mucha importancia porque de verdad WonHo le gustaba mucho -: Diría yo que la gran mayoría, estamos en el festival de los enamorados después de todo ¿No?

El mayor asintió, dejando a HyungWon con una gran incógnita pero que sabía jamás tendría una respuesta, ese hombre era inusualmente misterioso y no sabía que tan bueno podría ser eso, pero lo único que sabía era lo mucho que eso le atraía. Soltó un suspiro enamorado mientras seguía mirando el lago, tal vez la cita no había sido tan romántica como a él le hubiera gustado, pero estaba feliz de estar con él, entendía que sus gustos no podían ser iguales contando también con la diferencia de edad.

Después de todo él ya era todo un hombre, HyungWon y apenas había salido de la pubertad.

-¿Te gusta mucho la luna? Está muy bella esta noche, pero no hay estrellas -tocó su hombro, tratando de llamar la atención del otro hombre. -¿Te gustan las estrellas también?

-¿Qué has de saber tú sobre estrellas? -él le respondió, por fin mirándole.

-Mucho. Yo estudio astronomía -HyungWon le sonrió. -Me gustan las constelaciones, aunque es difícil encontrar una.

Cuando el hombre mantuvo por más de un minuto su mirada en él, sonrió. Si había atraído su atención por tanto tiempo sabía que el tema le interesaba, así que se extendió un poco en el tema de las estrellas y los satélites naturales, él no hablaba mucho, pero podía notar que le prestaba atención ya que no desviaba sus ojos de él.

-Bueno, ese es el punto científico, sabrás que en realidad las estrellas tienen diferentes significados para todos. Por ejemplo, en la religión cristiana tiene un significado diferente, ya sabes, después de todo una estrella guío a los reyes magos hacía el mesías.

El mayor asintió levemente ante sus palabras, HyungWon sintió cálido en su pecho al ser escuchado tan atentamente, no hablaba con muchas personas sobre sus gustos aparte de NaYeon o sus padres, que, aunque no le comprendían la mayoría del tiempo, estaban dispuestos a escucharlo. Esta vez, sintiéndose más cómodo, tuvo la confianza de pedirle a WonHo que lo acompañara a comprar algo de comer, su estómago rugía y el olor de la comida solo le revolvía el hambre.

-Este algodón de azúcar es azul, dijiste que no te gustaba el rosa -le extendió uno de los palillos con el caramelo, WonHo miró extrañado la comida hasta que olfateó este de cerca, haciendo que HyungWon riera por su actitud tan repentinamente tierna, y así WonHo se atrevió a darle un mordisco al dulce. -¿Rico?

El distraídamente asintió, sintiéndose repentinamente fascinado por lo rápido que dicho dulce se había diluido en su boca, así que se atrevió a darle otro bocado. HyungWon rio, ahora concentrándose en su algodón de azúcar mientras nuevamente le daban una vuelta al inmenso parque.

-Lo pensé mejor y comemos luego de que hayamos subido algún juego, nunca subas cuando acabas de comer porque te puedes vomitar, a menos de que quieras subir al tren que nos da un paseo por el parque.

WonHo lamió sus labios luego de saborear el dulce, dispuesto a responderle, sin embargo, antes de que pudiera hacerlo sintió un jalón fuerte en su brazo seguido de un "¡Cuidado!" proveniente de HyungWon, seguido de eso sintió una fuerte ráfaga de aire que la bicicleta a toda velocidad dejó cuando pasó muy cerca suyo.

-Ese chico parece que no tuviera ojos -se quejó HyungWon cuando vio de lejos al inconsciente ciclista. -Casi te lleva por delante.

-¿Por qué me tomaste del brazo? -su tono era molesto, soltándose de inmediato del agarre que el pelirosa aún mantenía sobre su brazo.

-Porque... Podría haberte pasado algo, esa bicicleta venía muy rápido -su tono había disminuido, sintiéndose pequeño ante el reclamo del mayor.

-¿Y eso qué? Era yo, no tú, no debiste haberte preocupado.

-Solo... Me importas, por eso lo hice -punteó HyungWon, quedándose luego callado mientras comía el poco algodón de azúcar que le quedaba.

WonHo arqueó una de sus cejas, mirando al alto que ahora tenía las mejillas rojas, sin embargo, no comentó nada más y siguieron su camino por el parque hasta que dieron con el dichoso tren que les daría el paseo.

Durante el trayecto HyungWon no habló mucho, pero disfrutaron de la brisa que esa noche hacía, al menos HyungWon lo sintió así, pero cuando bajaron del tren el mayor comenzó a arrastrarlo del brazo.

-Tenemos que volver al lago, he estado perdiendo el tiempo contigo, tengo que hacerlo antes de que se acabe el festival.

-¿Qué dices? -HyungWon aún seguía extrañado por la selección de palabras que su cita usaba constantemente, lo dejaban perdido.

-Solo vamos a lago, o quédate aquí, haz lo que quieras -de repente soltó su agarre en HyungWon, sintiéndose estúpido al pedir al chico que lo acompañara.

HyungWon sin embargo le siguió ciegamente, su actitud tosca podía molestar a cualquiera, pero HyungWon sabía que solo era una fachada, nadie que en realidad fuera tan apático hubiera comido un algodón de azúcar con él como si de un gatito se tratara. Lo vio detenerse unos pasos más adelante, frente a un gran anuncio, HyungWon se acercó notando la publicidad.

-¿Los conoces? Son los Mon Scouts, van a sacar una caricatura basada en sus hazañas -HyungWon se acercó mirando la gran fotografía con los cinco superhéroes en dibujos animados. -Son geniales, yo sé todo sobre ellos.

Sintió al mayor tensarse a su lado una vez esas palabras fueron dichas, se giró lentamente hacia él dándole una mirada seria, HyungWon cerró sus labios momentáneamente hasta que vio un atisbo de sonrisa en sus labios.

-¿En verdad sabes todo sobre ellos?

HyungWon vaciló un poco con su mirada, bueno sabía muchos datos curiosos que había visto en internet, no sabía si eran completamente ciertos. Finalmente asintió a él, con lo que sabía suponía que podría informarlo sobre quiénes eran los héroes de Seúl.

-Tendremos que vernos más seguido entonces, me gustaría que me hablaras más de ellos.

HyungWon sonrió mientras escondía las manos detrás de su espalda, luego de eso salieron del festival ya que WonHo le había dicho que la luna ya no estaba en el punto que necesitaba y lo que había planeado se había arruinado. HyungWon lo encontró extraño de nuevo, sin embargo, no lo tomó mucha importancia porque nuevamente WonHo lo tenía de la mano arrastrándolo por todo el lugar.

La mañana siguiente fue una de sus más alegres, esa mañana no había utilizado base en su rostro para ocultar sus pequeñas espinillas ni lo moreno de su piel, se sentía lindo tal y como estaba. Se despidió de sus padres con un fuerte abrazo antes de ir a la parada de autobuses.

Sin embargo, el ambiente de su primera clase se sintió algo pesado, por lo menos para él era así, ya que algunos de sus compañeros estaban mirándolo más de lo debido. Se sintió un poco cohibido, tal vez si debió usar su base de maquillaje y no haber ido tan al natural a su universidad, pero no había nada que hacer así que tendría que aguantar el cotilleo de los demás.

-Oh, esta vida de universitario es tan dura, ojalá yo tuviera un hombre mayor que me invitara a salir tal y como hace HyungWon.

Su garganta se secó al escuchar el malintencionado comentario que uno de los amigos de SeHun, seguido de eso escuchó varias risas, no solo provenientes de ellos si no del resto de sus compañeros. HyungWon miró con ojos bien abiertos al grupo de la esquina que estallaba en risas al ver su reacción.

¿Cómo se habían enterado de eso?

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*pat pat* a mi por
dejar esta historia
tan abandonada.

en fin,
las actualizaciones
de esta historia si
les aviso que
pueden ser un
poco lentas,
probablemente
cada quince días.

pongo esta historia
con actualizaciones
más lentas que el
otro proyecto que
estoy realizando por
una simple razón;
este no va a ser un
fic tan largo.

diría yo que tendrá
unos diez capítulos,
tal vez uno o dos
más por si me
extiendo, pero
este va a ser un fic
corto.

¿qué piensan de
wonho? ¿qué
creen que esconde?

¿creen que hyungwon
va muy rápido?

si los mon scouts
fueran reales ¿cuál
de ellos sería su
favorito?

hablando de
superhéroes
también ¿quién era
su power ranger
favorito/a? la mía
era la amarilla.

nos vemos pronto,
besos y abrazos.