Dormir, una actividad muy importante para la gran mayoría de ser vivos, al hacerlo nos permite descansar nuestros cuerpos y nuestras mentes, reiniciar nuestros ciclos internos, y permitir que nuestras heridas curen más rápidamente, sin duda alguna una de las necesidades más básicas e importantes del los seres vivos, junto con comer, beber y respirar, y justamente nuestro visitante dormía plácidamente sobre una cama demasiado rústica, un colchón hecho de materiales suaves, hojas, paja, entre muchos otros, todo envuelto en una tela bastante básica y cuero animal, todo primitivo pero funcional

Al despertar nuestro visitante, su reacción fue extrañamente serena, se encontraba bastante cómodo en ese colchón, y el ambiente del lugar era bastante relajante

Se examinó rápidamente, sus moretones casi habían desaparecido, su dolor físico casi no estaba, y la herida en su hombro había cerrado sin problemas

Intento levantarse, pero sin mucha suerte, estaba cansado, curar le había costado mucha energía, a duras penas y si pudo sentarse en la cama

Miro el lugar, no sabía si era porque no estaba del todo bien las otras veces pero la cueva parecía ser otra, esta cueva era relativamente grande, y con claras señales de que alguien habitaba en ella, vasijas de agua, estanterías con algunos libros, velas iluminando el lugar, entre otros elementos que nos hacen cuestionarnos en que época tecnológica se encuentra este mundo que el visitante empieza a conocer

A los momentos unos pasos se escucharon, el visitante miró en la dirección de los pasos, y vio que ahí venía la silueta, quien seguía vestido de la capa y capucha, pero también consigo traía un saco colgando de su hombro, y una tabla que sujetaba con ambas manos, al acercarse el visitante vio lo que había en ella, pescado, cocinado a fuego

La silueta se sorprendió un poco al ya ver recompuesto al visitante, pero no le tomó mucho tiempo ofrecerle una de las presas de pescado cocinadas al visitante, ni tampoco le tomó mucho ofrecerle agua, cosas que el visitante sin dudas aceptó, pueden que sean comidas ajenas a su mundo, pero la necesidad era quien mandaba ahora

La silueta viendo como el visitante comía sin problemas lo traído, y además lo comía con ganas, dejo caer el saco al piso, lo abrió y mostro que estaba lleno de presas de pescado de diferentes tipos y algunos crustáceos, el visitante se asombró al ver tanta comida junta, pero primero tenía que terminar la que ya tenía ahora

La silueta hizo un fuego en un punto de la cueva más cercano a la salida, saco unas ollas de greda y en ella puso agua y los crustáceos, dejando que se cocinen, tomo algunas presas de peces y los empezó a cocinar al fuego, ¿En qué estado tecnológico estaba la silueta? se preguntaba el visitante, pero, ¿Realmente importa eso ahora?, para nada, así que siguió comiendo y bebiendo más agua

El tiempo paso y la comida estaba lista, todo muy simple pero no se podía ser quisquilloso, el visitante empezó a comer sin freno, mientras la silueta observaba fijamente al visitante, ya cuando la comida casi se acabo el visitante vio a su cuidador, y repitiendo las palabras que dijo la otra vez

"Thank you"

El cuidador solo quedó ahí, observando, pensativo

El visitante hizo una expresión de duda, dijo unas cuantas palabras en su lengua inentendible, seguido de un brillo azul de un aparato a su costado, y finalmente dijo

"Do you understand me?"

El cuidador se quedó viendo la situación, sin inmutarse, el visitante volvió a decir cosas en aquel lengua suya, y después dijo

"¿Me entiendes?"

Tampoco hubo respuesta del cuidador, y así siguió intentando

"Вы понимаете меня?"

"你了解我吗?"

"skilur þú mig?"

Y después de varios intentos, finalmente reaccionó el cuidador, respondiendo con movimientos hechos con sus manos

El aparato brillo un momento, y después el visitante hablo

"Who are you?"

A lo que el cuidador, pensándolo un momento con duda, termino haciendo señas con las manos

"Frank"

El aparato brillo, y luego el visitante dijo

"Frank, is your name"

El cuidador asintió en señal positiva

"My name is"

Y seguido de ello el visitante hablo en su idioma inentendible, diciendo su nombre el cual nunca se entenderá con claridad

Aún con aquella duda, el protector simplemente cogio un vaso de agua, algo que comer, y aún con la capucha y ocultando su rostro, disfruto de su comida

Quien lo diría, que, aunque apenas se puedan comprender entre sí, dos seres podrían disfrutar de un momento de paz y tranquilidad como si nada