Narra Jungkook

-Deben dejarlas. -mencionó el ceo observandonos a ambos. Es que si, también llegó a mis oidos el posible futuro de unas dos o tres chicas del grupo, pensaban transferirlas de empresa y Shin Hyuk quiso dejarnos en claro unos cuantos puntos debido a los informes de los superiores.

-Pero... -habló hyung contrictado.

-Es por su bien, déjala ir Hoseok. -nos miró- Deben hacerlo, no es momento para esto chicos. Ambas empresas son pequeñas e insignificantes, tal vez sea nuestra última oportunidad y si vamos a debutar a un grupo, necesito que esten totalmente concentrados y dispuestos a que funcione. ¿Lo entienden?

-Si -susurramos cabizbajos, ambos reverenciamos uno al lado del otro para salir de la oficina del ceo.

-Hyung... -le miré- ¿tú crees qué...? -no podia decirlo, me dolia decirlo. Enronces senti como me planeó con pesar.

-Debo hacer unas llamadas... -asenti y le vi avanzar.

Me encamine deprimido y contrictado, es que me siento tan agusto con ella, pero me piden que la suelte, no es como si me gustará pero... duele y no logró comprender del todo este sentimiento.

-Kookie~ -aquel timbre agudo y dulce, me dolía. Ella se encontraba hablando sin detenerse ni por un momento, se veia emocionada y feliz, pero no logré oir ni una sola palabra, sólo observé sus labios moverse sin parar ni emitir sonido alguno- ¡Oppa! -chasqueo sus dedos en mi rostro- Despierta... ¿estás bien? -le miré desenfocado.

-L-lo siento Eunbi -toque su cabeza y me miró intrigada, ¿desde cuándo la tocó? Aleje la mano lentamente y con el ceño ligetamente fruncido.

-Kookie, ¿seguro estás bien? -me miró con ojos de cachorro preocupado, asenti para avanzar- ¿a dónde vas~? -preguntó con pesar pero no respondi sólo avance observando la palma de mi mano abierta.

Jung Eun Bi, se volvió alguien especial para mi... ¿es por eso qué me esta doliendo tanto la posibilidad de no volver a verla? El imaginar tan sólo la idea de...

Apreté con fuerza mi mano, volviendola un puño cerrado.

De perderla...

Narra Hoseok

-Ho-Hoseok... -oi el timbre de Eunbi detrás de mi, en otros momentos hubiese brincado de la alegría en el lugar, pero ahora, se siente tan desolado.- Hyung... -voltee para dedicarle una débil sonrisa que interceptó rápido- ¿Estás bien? -fruncio el ceño preocupada.

Asenti- Lo lamento Eunbi, pero debo de ir hacer algunas cosas... -pero su mano me detuvo.

-¿Po-podemos hablar un momento? No te robare mucho tiempo, lo aseguró. -se veia nerviosa y apenada, la última vez que vi a alguien asi, me enteré que sufría de la garganta.

-¿Estás bien? -tome sus hombros y frunci el ceño preocupado analizando su rostro, ella asintió lentamente perdida en mis ojos preocupados. Suspiré para soltar sus hombros de apoco- Que bien... -la seguí hasta una de las salas desocupadas- ¿Y bien? -mis ojos se abrieron al oirle hablar de repente- ¿Co-cómo dices? -me encontraba en un ligero trance.

-M-me gustas... me gustas Hoseok -inclino su cuerpo en una torpe reverencia, una en que su largo cabello azabache ocultaba su rostro avergonzado, pero el timbre de su voz sonaba tan nervioso y tímido, que me impedía inhalar el aire como correspondía.

-Yo... -queria abrazarla y cuidarla, confesar que me gusta aún más, ¡mucho más!

-"¿La arruinaras antes de comenzar siquiera?"

Pero sus palabras duras y claras volvian para vaciar un balde de agua fria, no, helada, llena de una cruda realidad que no puedo evitar. Apreté mis puños con fuerza, no podia permitirme ser egoista con ella.

-Lo siento, pero no estoy preparado para una relación Eunbi y tú... -lo primero que vino a mi mente fue una tonta y absurda excusa, nuestra diferencia de edad- sólo eres una niña, realmente lo siento... -reverencie aun apretando mis puños con ira y melancolía. Sólo para reincorporarme y aún observarla con su cabeza gacha, impidiendo que la vea.

Tenía ganas de levantar su mirada y poder sanar cada una de sus lágrimas, pero me temía no poder detenerme y terminar por confesarme, besando sus tiernos y dulces labios. También conocía que la dureza y terquedad de Hwang Eun Bi le impedirán levantar la vista y mostrar debilidad, entendía que debía de irme y dejarla sola, por más que partiera mi alma el hacerlo, se que era por su propio bien y eso no quitaba el dolor.

Tragando duro y con la opresión en mi pecho, voltee lentamente para alejarme de ella y tomar aquel picaporte, sabiendo que al cruzar aquella puerta, su futuro estará a salvo, aunque me odié por esto más adelante.

[....]

Yoongi hyung no contesta mis llamadas y ha estado faltando unos días, realmente estoy preocupado y le necesito aqui conmigo.

-¿Qué pasó? -Namjoon se acercó preocupado- Te noté todo el día mal, ni siquiera Young pudo hacerte sonreir... ¿qué ocurre?

-Debo... debo dejarla... -susurre con un nudo inevitable en la garganta, uno que atore todo el maldito y largo día. Eunbi no volvió a las prácticas ni vocales, ni de actuación, menos a la de danzas; me odié por haberme ido sin intentar consolarla, por más que ella se avergüenza, debia haberlo hecho. Soy un maldito estúpido.

-Pero... -fruncio el ceño sin comprender, ni saber que decir.

-Ellas debutarán pronto, el ceo me confirmó... que están pensando debutar un girl grup con la empresa vecina... -mi voz fluia tan quebrada- y le pidieron algunas trainers... -y lo hice, quebre al fin.

-N-no lo sabía... hyung... -su palma se hizo sentir en mi hombro.

-Debo hacerlo -cerré mis ojos con fuerza- es por su bien, por su... -mis labios temblaron- sueño... -las lágrimas recorriendo las mejillas, el pecho se contrajo y la respiración se desnivelo.

-Estoy aquí... -senti sus brazos rodearme en un un calido abrazó que en serio necesitaba- esta bien hyung...

Narra Eunbi 🎶

Las lágrimas ardian, dolía en verdad.

-T-tu... m-me gus... me gustas oppa -mí vista era gacha, mis mejillas ardían.

Mis mejillas arden, sentia todo mi rostro caliente, el sabor salado y amargo no cesaba.

-"No estoy preparado para esto Eunbi, una relación equivale a mucho y... tu eres sólo una niña, lo siento en verdad" -se disculpó para marchar.

Me siento tan desgastada, el móvil no deja de sonar y sonar, lo patee sin más. No tenía fuerzas para hablar con nadie.

-"Me importas pequeña." -sonrió calidamente.

Aquella sonrisa que esta merodeando por mi mente, que tan hermosa y deslumbrante me resulta, duele tanto...

La puerta de mi habitación se hizo oir- Eunbi, abre por favor... -golpeo y movió el picaporte un par de veces- Eunbi no me iré de aqui, abre la puerta ahora... ¡por favor! -solloce aferrada a mis piernas.- La rompere... lo haré... Eunbie... prima... -los golpes y ruidos cesaron, lo agradecí.

Pero ella llegó abriendo la ventana luego de un rato largo, al parecer trepo aquel árbol para con dificultad poder ingresar a la habitación, sus rodillas estaban raspadas y sus manos lastimadas. Pero sin dudarlo si quiera por un momento, se acercó hasta mi para abrazarme en silencio y si, sólo pude aferrarme a ella.

-Crei... que lo encontré... me enamoré, mi primer amor -rei atorandome con las lágrimas- pero... estoy cayendo... y duele tanto unnie... él.. él rompió mí corazón... -ella acarició mi cabello y sobo mi espalda intentando consolar el llanto.

-Si no te das por vencida e intentas, tal vez podrías alcanzarlo... -me aferre con tanta desesperación a ella, tanto hasta que las lágrimas se secaron y cai rendida en un sueño profundo sobre su regazo, sintiendo sus caricias en cada mechon de mi cabello.

Gracias, mi mejor amiga, prima.