Hola Nicolle. ¡Felicitaciones por haber obtenido el segundo lugar en el concurso [Des] EncantadoresXV!

Contanos Nicolle, aparte del disparador ofrecido por el concurso ¿cuáles fueron tus fuentes de inspiración para crear la historia "Mi gallina rosa"?

Busqué cómo debían ser unos quince años perfectos y luego escribí todo lo contrario a eso, ja, ja. Me basé en historias reales, anécdotas de mis amigos y de los cumpleaños a los que fui. Me hice una pregunta: ¿Qué sería lo más extraño que se podría regalar a una quinceañera? De ahí nació Rigoberta y la fiesta de Marianela.

Respecto a tus personajes, ¿cuál es tu favorito? ¿Qué características vuelven al personaje especial?

Existe un empate entre Rigoberta y Octavio. Ella, porque es quien da la chispa a la historia y alegra la vida de los demás. Cuando era niña me gustaba jugar con las gallinas en la casa de campo de mi abuela, así que le tengo un cariño especial a Rigo.

En cuanto a Octavio, me da gracia la forma en la que es tratado por su prima, y a pesar de todo sigue ahí, apoyándola. Quiere a Marianela tal y como es, cosa que me parece adorable. Además, fue quien crio y llevó a Rigoberta; eso es algo que debemos agradecerle.

¿De dónde surgió la idea de regalar una gallina? ¡Queremos una Rigoberta en nuestras vidas!

Estaba leyendo la consigna como por centésima vez, buscando una forma de introducir a Octavio. Me pregunté: «Oh, ¿por qué no le lleva una canasta de huevos o algo así? Ya que su familia los vende.»

Esa misma noche, por alguna razón, con una amiga terminamos contándonos anécdotas sobre gallinas. Fue como un click. Para la venta de huevos hacían falta gallinas, así que se me ocurrió que en lugar de regalarle una canasta, le diera a Rigoberta.

Uno de los requisitos del concurso era que la historia debía contener humor y juvenil en partes iguales, ¿con cuál de los dos géneros te identificás más y por qué?

Siempre he preferido historias con protagonistas chicos en lugar de adultos, así que ya estoy un poco acostumbrada a leer y escribir sobre el género juvenil. Me gusta mucho porque siento que abre mil posibilidades a todo tipo de historias y, al mismo tiempo, permite que los lectores se identifiquen y se introduzcan en el libro.

Todavía me acuerdo, por ejemplo, cuando cumplí dieciséis y me imaginé en cinco sagas diferentes, o cuando a los diecisiete pensé: «Este año encontraré a mi novio vampiro.»
Sigo siendo adolescente de corazón, por lo que disfruto bastante escribir el género juvenil, ja.

Las bases del concurso estaban repletas de desafíos, como la incorporación de elementos adicionales, ¿te resultó compleja su inclusión en una historia que además debía cumplir con un límite de palabras? Ahora que tenés experiencia en esta área, ¿podrías brindar algún tips de escritura para los autores que se encuentran con este tipo de dificultades?

Lo que más me costó fue pegarme al límite de palabras. Aunque 3,000 a primera vista es bastante, la inspiración aparece y el texto se convierte en 10,000 palabras. Es ahí cuando se empieza a borrar y acortar, lo que vuelve el desafío incluso más entretenido.

En cuanto a los elementos adicionales, antes de escribir la historia hice un boceto general, donde anoté todo lo que debía agregar, como una lista. Eso lo facilitó bastante, ya que tenía una idea general sobre dónde meter a la banda, a Octavio e incluso al vampiro sexy.

Lo que más les recomiendo es hacer un esquema básico y tener una idea sobre lo que van a narrar. Aunque a veces parece tedioso o incluso aburrido, es muy útil al momento de escribir, incluso si es una historia corta. De esta forma, se crea el esqueleto de la obra, y solo falta agregar los detalles.

Finalmente, nos gustaría que compartas alguna frase o escena cómica de la historia o, por qué no, alguna indiscreción referente a los personajes principales que no sepamos. ¡Necesitamos chisme! 

Aunque suene descabellado, muchas escenas de "Mi gallina rosa" están basadas en la vida real. La primera, que es una de mis favoritas, es cuando Rigoberta vuela al auto de Vladimir. Esto mismo pasó hacía muchos años con unos conocidos míos. Pasábamos por una calle poco transitada, tranquilos con la vida, cuando una gallina apareció de la nada y se coló por la ventana. Empezó a agitar las alas y golpeó a los que iban adelante. La sacamos poco después, pero fue una experiencia que no olvidaría nunca.

Otra anécdota interesante es la del pastel. Eso ocurrió en un cumpleaños al que asistí, y lo recuerdan cada año.

¡Gracias por la entrevista! Espero que disfrutaran leer sobre Marianela y Rigoberta :) Con un poco de suerte, sus dulces dieciséis serán un poco más normales.

Gracias Nicolle por tu tiempo. Te deseamos muchos éxitos. Y ustedes, querida comunidad, no olviden pasar por esta cómica historia.