Hola mis seguidores,para empezar me quiero disculpar por mi ausencia últimamente en cuanto mis historias pero estaba recuperándome porque al parecer había salido positivo en la prueba del covid-19 desde mediados de abril, pero ya estoy bien y he vuelto con energías recargadas para traerles esta y mas de las historias que disfrutan sin más comenzamos.

Discleimer: Naruto no me pertenecen sino al maestro Kishimoto.

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Entrenando a Tayuya.

Capitulo 1: Entrenamiento.

Repite después de mí, 'Soy una Zorra, mi dueño es Naruto'. Di esto cincuenta veces y serás recompensada — le dijo una voz alegre, y Tayuya solo gruñó.

Pasaron unos diez de los minutos de este 'mundo' y, de repente, una vez más, Tayuya se dobló de dolor cuando algo pareció freír su ser. Ese tono alegre se repitió por séptima vez desde que Tayuya llegó a este mundo — ¡Voy a matar a ese idiota por enviarme aquí!—Ella maldijo a todo pulmón.

"¡No, no, no! ¡Mala zorrita! ¡Naruto es tu dueño! ¡Nunca atacas a tu dueño! ¡Atacar a tu dueño es malo!" Esa voz se lo dijo y experimentó una mayor cantidad de dolor.

"Repite después de mí, 'Soy una zorra, mi dueño es Naruto'. Di esto cincuenta veces y serás recompensado — le dijo la alegre voz y la pelirroja solo gimió suavemente, jurando mentalmente vengarse de Naruto por hacerle esto.

Tayuya no pudo encontrar la energía para "sentarse" en este "mundo". A pesar de que pensaba que sus nervios iban a estar demasiado fritos por la última conmoción, seguía sintiéndolos como si fueran la primera conmoción que tenía. La chica se sacudió una vez más porque estaba sorprendida ahora que el tiempo asignado había expirado.

"Repite después de mí, 'Soy una zorra, mi dueño es Naruto'. Dígalo cincuenta veces y será recompensado ". Le dijo una voz alegre.

¡Maldita sea! — Tayuya maldijo en privado, pero se había cansado demasiado de sorprenderse y finalmente repitió la fase, tratando de decirlo lo suficientemente rápido a pesar de que le dejó un mal sabor de boca. "Soy una Zorra, mi dueño es Naruto. Yo soy una Zorra, mi dueño es Naruto ...

Se detuvo después de decirlo cincuenta veces y después de unos segundos, fue recompensada al verse envuelta en una sensación suave y reconfortante que también pareció calmar sus nervios — ¡Se le puede enseñar! ¡Felicitaciones! Para ser recompensado una vez más, repita diez veces la fase 'Soy una Zorra' o 'Mi dueño es Naruto" — Dijo en tono alegre la misteriosa voz y Tayuya gruñó mientras esa agradable y reconfortante sensación se desvanecía.

Al final, Tayuya decidió decir 'Soy una Zorra' diez veces ya que lo vio como el menor de dos males y traería una recompensa más rápido que el otro —Soy una Zorra. Yo soy una Zorra ...

Ella se detuvo en la décima vez y ese sentimiento reconfortante regresó. Tayuya se sumergió en el sentimiento durante los siguientes minutos antes de que esa voz alegre comenzara a hablar una vez más —¡Buena chica! ¡Dilo otras diez veces! — dijo la odiosa voz, y la sensación de placer se desvanecio. Tayuya gimió, pero después de un minuto, hizo lo que se le ordenó. El placer de la recompensa parecía durar más y más.

Después de hacer esto por lo que se sintió como dos horas, la voz tenía una nueva tarea para ella. — ¡Buena chica! ¡Ahora es el momento de que trabajes en la fase "mi dueño es Naruto" diez veces para obtener tu recompensa! — ella solo gimió, esa era mucho más difícil de decir.

La recompensa se desvaneció, lo que le informó a Tayuya que se le daría otro conjunto de instrucciones — (¿Qué más quiere esta maldita voz?) — se preguntó mientras se 'recostaba' sobre su espalda.

¡Tiempo de una prueba! — La voz declaró y Tayuya se estremeció, recordando las últimas pruebas y cómo las había fallado, ya que requieren que responda las preguntas rápidamente, sin dar ni un tiempo para pensar en las respuestas o apresurarse.

En otras palabras, probaron para ver qué tan profundamente creía ella en los conceptos que este mundo le estaba 'enseñando'. Sabía que le estaban lavando el cerebro, pero se había acostumbrado tanto al placer y la sensación de satisfacción que la recompensa le dio que no pudo resistir ...

"¿Quién es una zorra?"

"¡Yo!"

"¿Quién es tu dueño?"

"¡Naruto lo es!"

"¿Una buena zorra ataca a sus dueños?"

"¡No!"

"¿Tú eres una?"

"¡Zorra!"

¡Buena chica! ¡Respondiste todas las preguntas correctamente! ¡Disfruta tu recompensa! — Dijo la voz alegre.

De repente, Tayuya se inundó con el triple de los niveles habituales de placer y las voces susurrantes comenzaron a decir y repetir en un tono suave y tranquilizador — Soy una Zorra, mi dueño es Naruto. Obedezco a mi dueño en todas las cosas — los suaves susurros se convirtieron en un suave zumbido y la adormecieron.

¡Buenos días, zorrita! ¡Hoy vamos a estar entrenando tu comportamiento! Sin embargo, primero una prueba. ¿Tu eres una?.

Tayuya se despertó parpadeando y registró la pregunta —¡Zorra! — dijo ella.

¿Tu dueño es?.

"¡Naruto!"

"Buena niña."

El familiar placer se apoderó de ella.

Cuando empezó a desvanecerse, se dio cuenta de que llevaba algo. Atrás quedó el atuendo ninja normal que había usado el primer día, reemplazado por un traje rojo y negro brillante. Le encerró las manos, inutilizando sus dedos, y un chequeo reveló el mismo diseño, casi como una pata, también envolvió sus pies.

Además, había nueve colas gruesas y brillantes de punta negra que salían del traje justo debajo de la parte baja de la espalda. Y, concentrándose en su rostro, vio que había un hosico de algún tipo.

"¿Estoy... vestida como un Zorra? ¿Qué demonios es esto?"

Repite después de mí, diez veces — dijo la voz, Tayuya esperó, preguntándose qué sería esta vez. — Di, 'No llevo nada', o 'los zorros tienen patas. Soy un zorro Tengo patas.

¿Qué? — Dijo Tayuya — maldito rubio oxigenado, ¿me pusiste en esto? ¿Qué intentas hacerme? ¡Voy a-aargh! — gruño la pelirroja ante el choque eléctrico que recorrió su cuerpo

¡Niña traviesa! ¡Las zorras no atacan a sus dueños! Repíteme cien veces: 'Las zorras no atacan a sus dueños. Mi dueño es Naruto.

Con los músculos ardiendo por el castigo, Tayuya comenzó a hablar lo más rápido posible — Las zorras no atacan a sus dueños. Mi dueño es Naruto. Las zorras no atacan a sus dueños. Mi dueño es Naruto...

Para cuando terminó, había perdido la cuenta, pero la calidez relajante del placer que la recorria se sentía incluso más intensa de lo normal.

¡Mucho mejor! Ahora di : 'No llevo nada', o 'las zorras tienen patas'. Soy una zorra Tengo patas '. Diez veces."

Tayuya no veía otra salida más que obedecer a la misteriosa voz — No llevo nada, no llevo nada ...

[Días después].

"¿Tú eres una?"

"¡Zorra!"

"¿Qué llevas puesto?"

"¡Nada!"

"¿Qué tienen las zorras?"

"¡Patas!"

"¿Quién es tu dueño?"

"¡Naruto!"

"Buena niña."

[Un mes después].

"Las zorras tienen cola. Soy una zorra Tengo colas — repitió Tayuya, por vigésima y última vez, cuando el placer la invadió.

¡Buena niña! Ahora, ¿qué más tienen las zorras?

"¡Patas!"

¿Y?

¡Un hosico! — dijo Tayuya, respondiendo sin pensarlo.

"¡Si! Ahora, para obtener una recompensa extra, repite cincuenta veces "Las zorras tienen colas, patas y hocico. Soy una zorra Sé que soy una Zorra. Sé que tengo colas. Sé que tengo patas. Sé que tengo hosico. Sé que soy un zorro porque tengo colas y patas y un hocico, y sé que tengo colas y garras y un hocico porque soy una zorra ".

Tayuya parpadeó, saliendo de su ensueño por un momento ante la longitud del mantra esta vez.

"¡Mejor apúrate!"

Tayuya trató de descomponerlo para recordarlo — Las zorras tienen colas, patas y hocico — ella lo sabía — Soy una zorra — eso era obvio... ¿no? — Sé que soy una zorra. Sé que tengo colas. Sé que tengo patas. Sé que tengo hosico — ella pudo ver el motivo de todo eso — Sé que soy una zorra porque tengo colas, patas y un hocico, sé que tengo colas, patas y un hocico porque soy una zorra — y eso era solo lógica. Entonces era obvio después de todo — Las zorras tienen colas y patas y un hocico...

El placer se desvaneció, después de un tiempo inusualmente largo.

Has sido una muy buena chica. Ahora es el momento para la siguiente etapa de su entrenamiento.

Las zorras pueden sentarse. ¿Puedes sentarte?.

Tayuya se movió a una posición en cuclillas sobre sus rodillas, con las colas colocadas torpemente detrás de ella.

¡Ese es un buen comienzo! Buena zorra.

Hubo un pequeño cosquilleo de placer. Sin embargo, nada parecido a lo normal, y suspiró molesta.

Cuanto mejor esté sentada, mejor será la recompensa.

A través de prueba y error, la ex kunoichi se acomodó en una buena posición sentada.

Buena zorra. Recuerda esta posición. Cuando te digan que te sientes, toma esta posición.

Ahora acuéstate.

[Días después]

"Soy una buena zorra, Naruto es mi dueño. Tengo rasgos de zorro, no rasgos humanos. Camino como una zorra, duermo como una zorra, como como una zorra. Tengo patas de zorro, colas de zorro, hocico de zorro".

Tayuya dormía acurrucada con la cola cerca de la cabeza. Las voces tranquilizadoras y el placer la mantuvieron adormecida en un sueño profundo, que nubló su mente incluso cuando estuvo, brevemente, despierta durante los períodos de sueño.

Pensar en Naruto me hace feliz. Siempre obedezco a Naruto.

Soy una zorra, soy una zorra. Cuando se me ordenen, puedo convertirme en una zorra bípeda. Debo obedecer a Naruto. Naruto es mi compañero, Naruto es mi dueño, Naruto debe ser obedecido.

"Soy una buena zorra. Soy un buena zorra. Yo siempre obedezco ".

Tayuya se movió levemente mientras dormía, las palabras perforaron su mente.

"Pensar en Naruto me hace sentir tan caliente".

¡Levántate!

Tayuya se movió rápidamente, arrodillándose con sus patas delanteras entre sus rodillas traseras y mirando ligeramente hacia arriba, y sus colas extendidas detrás de ella en varias posiciones.

¿Tú eres una?

"¡Zorra!"

¿Lastimas a Naruto?

"¡No!" — A estas alturas, la sola idea la sorprendió un poco.

Si te sientes feliz. Mueve las colas.

Las colas se movieron, independientemente de su cuerpo. Se necesitó mucha concentración para mantenerlos funcionando bien, debido a la cantidad de estas.

¿Puedes hablar humano?

"¡No!"

"¿Que estas hablando?"

¡Zorro! — La palabra, como todo lo que estaba diciendo, estaba empezando a convertirse en una especie de aullido.

¿Entiendes humano?

"¡Si!"

"Los zorros tienen colas y ..."

"¡Patas y hocico!"

"¿Quién es tu dueño?"

"¡Naruto!"

"¿Qué hacen los dueños?"

"¡Lo que sea que ellos quieran!"

"Ponte de pie, zorra".

Tayuya se puso a cuatro patas.

"Da una vuelta."

El paseo fue una peculiar combinación de animal y sensual. La voz la había guiado cuidadosamente a través de cómo caminaban los zorros, dándole más placer cuanto más se acercaba. A estas alturas, era casi perfecto.

Pero mientras caminaba, la Kunoichi comenzó a resurgir de debajo de la cómoda mente de zorro. Algo simplemente se sintió mal ...

"¡Siéntate!"

El cuerpo de Tayuya respondió por su mente confusa, inclinándose hacia adelante y apartando la cola.

¿Esperarlo? Pensó, dándose cuenta de repente de lo que acababa de pasar. ¡Eso es increíble! Naruto, tú ...

"¡Ruega!"

Regreso a la posición sentada, pero con una de sus patas, no, manos arriba. Tayuya se escuchó a sí misma emitir un quejido lastimero.

"¡Buena zorra!"

Oh, pero eso se sintió tan bien. Solo oír ser llamar así... ¡ No, concéntrate!

"Ponte de pie, zorra".

Esta vez, se puso de pie como lo haría un zorro ... no, como lo haría un humano. La kunoichi hizo una mueca mental ante su desliz.

"Da una vuelta."

No había nada animal en este paseo: era puramente sensual, calculado para mostrar sus rasgos de la mejor manera posible. Y la estaba haciendo sentir bien .

Te sientes feliz. Mueve la cola.

Tayuya no entendía cómo podía hacerlo, ¿no era el traje solo de látex?, pero las nueve colas comenzaron a moverse de forma independiente.

Baila.

De alguna manera, Tayuya seguía siendo ella misma.

Había sido difícil, ya que la voz le dio la larga y compleja secuencia de pruebas, evitar simplemente ceder al placer y obedecer como un buen zorro obediente y estúpido.

O, mejor dicho, no hacer nada más que obedecer. Su cuerpo actuó por ella, haciendo lo que la voz ordenaba, como debería hacer un buen zorro. Era un pensamiento independiente lo que era difícil, especialmente cuando el placer la inundó por ser un buen zorro una y otra vez.

Pero lo que sea que Naruto tenía reservado para ella, el nombre le causó otra punzada, incluso solo por pensarlo, no podía ser bueno. Tenía que encontrar una forma de escapar.

¡Hora de dormir!

Casi gimió al darse cuenta de lo que eso tenía que significar.

Gire tres veces y acurrúquese en su cola.

Todavía a cuatro patas, Tayuya se subió a una gran canasta acolchada que no había estado allí hace cinco minutos. Se dio la vuelta tres veces, tratando de ignorar los pulsos de placer con cada vuelta completa, y luego apoyó el hocico en sus colas largas y tupidas.

Un placer más reconfortante se apoderó de ella y las voces comenzaron a susurrar en sus oídos.

Naruto es un buen dueño. Soy una buena zoryro. Las buenas zorras son obedientes. Obedezco a Naruto en todas las cosas.

Tayuya solo tenía que permanecer despierta. Para ignorar las voces que le decían cómo ser una buena zorra.

Ella tenía que ...

Parar? ...

Buena zorra soñolienta. Las zorras duermen cuando se les dice. Las zorras se despiertan cuando se les dice. Las zorras hacen lo que se les dice.

Su mandíbula se abrió en un enorme bostezo, y sus colas se movieron adormiladas.

No, pensó ella. Tengo que escapar.

Duerme, zorra.

Eres una buena zorra. A veces, te comportas como una zorra traviesa. Cuando te comportas como una zorra traviesa mereces ser castigada por ser traviesa. Pero lo traviesa que eres cambia con el castigo.

Si no te comportas como una Zorra, eso es muy malo. Nunca haces eso.

Si te comportas como una zorra traviesa, puede que no sea malo. Puede que disfrutes del castigo.

Podrías ser traviesa si Naruto no te dice que no lo hagas. No serás traviesa si Naruto te dice que no lo hagas.

¡Buenos días, zorro!

La cabeza de Tayuya se ladeo mientras luchaba por despertarse.

¡Es hora de que desayunes!

Pensando en ello, cuando pudo concentrarse lo suficiente para pensar con claridad, se le ocurrió a Tayuya que no había comido en todo el tiempo que estuvo aquí.

Había habido otras cosas en las que pensar, y sin las punzadas normales de hambre se le había olvidado, especialmente cuando dominaba el lado zorro de ella.

Pero ahora había dos cuencos cerca de su canasta. Otra mueca mental (su canasta. Ni siquiera había visto la cosa hasta anoche)...

Una de ellas estaba etiquetada como 'Comida de Vixin', y la otra 'Agua de Vixin'.

Tienes hambre.

De repente, lo hizo. De hecho, Tayuya se sintió hambrienta. Sin embargo, no fue suficiente para evitar pensar en una pregunta en particular: ¿quién era Vixin?

¿Era ella?

¿La zorra no tiene suficiente hambre? — Los cuencos desaparecieron, desvaneciéndose casi como un sueño.

Tayuya se sobresaltó un poco hacia ellos.

Demasiado tarde, zorra.

Ahora, repita diez veces "Soy una zorra hambrienta", "Las zorras comen cuando pueden" o "Naruto me llama Vixin. Es un buen nombre. Es quien soy ".

Tayuya se tomó un momento para deliberar. "Soy una Zorra hambrienta"

Lavantate.

Su cuerpo fluyó a su posición con una facilidad flexible, y un latido de placer la recorrió. "Soy una zorra hambrienta. Soy una zorra hambrienta... — Con cada palabra, el dolor en su estómago crecía.

¿Cuál es tu nombre?

"¡Vixin!" — Tayuya medio ladró, deseando no cometer un desliz. Si lo hiciera, si se refiriera erróneamente a sí misma como por su nombre humano, solo tendría aún más condicionamiento. Y eso sería malo, porque le tomaría más tiempo tener la oportunidad de obedecer a Naruto.

No, para escapar.

¿Las zorras tienen?

"¡Colas y patas y un hocico!"

Pero un plan de escape sería complicado. Quizás si ella saliera de alguna manera ...

¡Hora de almorzar!

Al instante, Tayuya comenzó a salivar. Tenía la intención de intentar aguantar, sabiendo que si seguía rechazando la comida, entonces algo tendría que compensar eso, pero los cuencos apenas tuvieron tiempo de aparecer antes de que ella metiera el hocico en la comida, engullendola de un bocado, las colas se menean ferozmente y las oleadas de placer la recorren.

Buena zorra, Vixin.

Después de recobrar el sentido, Tayuya se dio cuenta de que comer la comida como un zorro sentó un precedente peligroso. De ahora en adelante, tendría que seguir así o arriesgarse a quedar expuesta.

Ella podría salirse de este predicamento lamiendo más tranquilamente en el agua, aunque incluso que el placer envía como la voz aprobado de su bebida. Ella se preocupaba por las drogas, pero a estas alturas la idea de una "mera" comida drogada parecía casi normal.

Después del almuerzo, la voz le enseñó cómo saltar. En conejos, en enemigos, en Naruto.

Espera.

Con el vientre pegado al suelo y los pechos tocándolo, la zorra se arrastró hacia adelante a través de un bosque.

¡Salta!

Sus patas traseras la impulsaron hacia un resorte hacia adelante, sus patas chocaron en el mismo lugar exacto, donde el conejo virtual había estado hasta entonces.

Muy buena zorra.

El triple del placer habitual se apoderó de Vixin, y se recostó para saborearlo hasta que desapareció.

Tayuya se reafirmó en su mayoría una vez que el placer desapareció, aunque no sin un esfuerzo mental aterradoramente duro. Caer en la personalidad de Vixin había estado sucediendo cada vez más a menudo desde que se había ganado un nombre, y cada vez que lo hacía era más difícil recuperar su independencia.

Se apresuró a cenar sin notar el sabor y repitió frases hasta que llegó la hora de acostarse.

Las buenas zorras tienen collares. Quieres un collar, Vixin. Sabes cómo es tu collar.

Tu collar hace que sea imposible resistirse. Tu collar está hecho para atrapar zorras y hacerlas obedecer a sus dueños.

Tu collar tiene un cristal verde. Te encanta ese cristal, Vixin. Te hace sentir tranquilo y dócil.

Quieres ganarte el collar haciendo feliz a Naruto.

Dormir. Despertar. Comer. Práctica.  Cazar. Comer. Aprender. Dormir, era la rutina habitual de Tayuya, profundizando el dominio de su personalidad zorruna

Vixin aprendió a caminar de forma sensual, tanto como zorro como como humano.

Aprendió a ronronear o emitir un gruñido de satisfacción que tenía el mismo propósito.

Aprendió qué poses eran buenas.

Le enseñaron a no pensar en que no tenía pelo. Las zorras tenían piel de látex.

Le enseñaron a ser una buena zorra.

Ella era una buena zorra.

Ella era una zorra obediente.

Era una buena zorra ...

Se abrió una puerta.

Vixin abrió los ojos y vio que estaba en su canasta en la casa del Maestro.

¡La puerta se había abierto! ¡Eso significaba que el Maestro estaba en casa!

Vixin se levantó y caminó, correctamente, hacia la puerta. Al ver a Naruto, frotó sus pechos hacia arriba y hacia abajo, gruñendo-ronroneando.

"Buena chica" — dijo, rascándola detrás del cuello. El placer que le indujo ese simple acto fue brutal, cuando se combinó con el elogio, casi la hizo caer.

"Zorrita, Vixin".

Sus oídos se animaron y se puso de pie sobre sus patas traseras, sintiendo el conocimiento de cómo hacerlo fluir dentro de ella.

"Vamos a verte bailar".

Las nueve colas de Vixin se ensancharon detrás de ella mientras bailaba y giraba, haciendo alarde de sus pechos cubiertos de negro y su culo resbaladizo ante su maestro.

"Excelente. Buena zorra. Ahora, zorra Vixin ".

Cayó hacia adelante, repentinamente mareada sobre dos piernas.

"Sientate."

Tayuya sintió que recuperaba su conciencia borrosa y confusa. No estaba segura de cuánto tiempo había estado fuera, pero había pasado un tiempo ...

De repente, se despertó de golpe.

Ella acababa de terminar de comer comida para zorros y Naruto la estaba elogiando por ello.  Ese bastardo estabahaciéndola sentir muy bien ...

Aferrándose a su rabia, Tayuya se recompuso, gruñó y trato de arremeter. Perú su cuerpo no reacciono.

"¡Zorra traviesa!" — Naruto dijo, no del todo desagradable, desde una puerta — "¡Si sigues actuando así, no conseguirás tu collar!"

Metiendo la mano en un bolsillo, lo tomo, y los ojos de Kushina se clavaron en el brillante cristal verde azulado.

"Lo quieres, ¿no?"

Fue tan hermoso. Nada más importaba.

Después de casi diez minutos de mirar fijamente el cristal que se balanceaba suavemente, Tayuya parpadeó y negó con la cabeza para aclarar su mente — "¡Detente!"

"Tienes que entender" — dijo Naruto, todavía con voz persuasiva, Quería convertir a la Kunoichi de Otogakure en algo incapaz de escapar. Y la mejor manera de hacerlo era convertir la en una zorra. Una linda y obediente zorra — ¿Qué tienen los zorros?

"Colas y patas y un hocico" — respondió Tayuya automáticamente.

"Y tú tienes colas, patas y un hosico, ¿no?" — Naruto dijo, balanceando el collar suavemente.

—Bueno ... sí, pero...

Así que debes ser una buena zorra. Y eres una buena zorra, ¿no?

Tayuya trató de concentrarse — "Sí" — se escuchó a sí misma ladrar.

"Y las buenas zorras obtienen sus collares. Quieres tu collar, ¿no?

Con un aullido y un movimiento de cabeza. Tayuya sintió que sus colas se movían ansiosamente.

Naruto se inclinó y abrochó el collar alrededor de su cuello —"Ahí tienes".

La reconfortante luz verde se extendió por su mente, ahuyentando a todo pensamiento que no fuera el de una zorra buena y obediente.

"Ahí vamos," — dijo Naruto, acariciando la oreja de Vixin — "Ahora, date la vuelta".

La zorra se acostó ansiosamente y luego se dio la vuelta.

"Buena zorra. Ahora, ofresete, para sellar tu destino como mi linda y obediente zorrita".

Vixin abrió las piernas y volvió a mover la cola a un lado, temblando de ansiedad.

Ella era una buena zorra y obedecía a su amo.

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Y corte, espero les guste esta historia, la estuve pensando y escribiendo durante mi periodo de cuarentena para más contenido como este pidanlo en los rewies sin más kurasano'o se despide.

Ja ne.