Era sábado por la mañana y ambos erizos se encontraban desayunando un delicioso cereal que la pelirosa obligó al azabache a comprarlo, estaba aburrida de tomar esos horribles licuados nutritivos que hacía shadow.

Aunque al azabache le costará admitirlo, el cereal estaba muy rico, no estaba de acuerdo en comer cereales con demaciada azúcar pero siempre se pueden hacer excepciones.

El erizo tenía el día libre, no habría entrenamientos con su equipo y no tenía que ir a practicar ese bailé, lo peor era que ese día en la tarde tenían que ir al auditorio a bailar.

Eso es lo que le preocupaba al azabache, tener que ponerse en ridículo frente a la gente que iría a verlos, aunque nadie más sabía que el iría a bailar a excepción de las madres de la escuela eso era una buena noticia.

-Shadow, crees que podemos ir a algún lugar juntos?.-pregunto la pelirosa hacia el azabache con una sonrisa amigable.

-¿Algún lugar?, Bueno..no tenemos nada que hacer, así que si,¿Donde te gustaría ir?.-pregunto ahora el azabache, de lo cual se arrepintió al saber a dónde quería ir la menor.

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Pov Shadow

No puedo creer que esa niña me trajera a un lugar como este, "El castillo de las princesas" se supone que los dos tendríamos que disfrutar el momento pero ella solo piensa en si misma.

Después de cruzar esa enorme puerta color rosa con flores al rededor, Amaya echó a correr hacia los juegos mientras yo me quede solo y observando mientras se iba, varias mujeres se dieron cuenta de mi presencia y no tardaron en empezar a hablar en voz baja sobre mi y Amaya.

Encontré una mesa con sillas al rededor que se encontraba vacía, decidí sentarme a mirar a Amaya desde lejos, no me iba a quedar parado todo el rato a esperarla.

Saque mi celular y comenze a mandar mensajes, el tiempo pasaba y se volvía aburrido hasta que sentí alguien tocar mi hombro.

-Shadow, que sorpresa encontrarte aquí.-gire mi vista hasta encontrarme con una coneja color miel.

-La pregunta es,¿Que hace usted aquí?.-la mire de arriba abajo, aún no se me quita la molestia del entrenamiento anterior, se cree mejor que yo solo por saber bailar.

-Lo mismo que usted al parecer.-dirigió su mirada a ambas niñas platicando, no sabía que Amaya se llevará bien con la hija de vainilla, pero la niña no tiene la culpa de que su madre sea tan amargada.

-Bueno, no sé cómo pude dejar que esa niña eligiera el lugar a donde ir, este lugar es un horror sabe? ¡Hay un millón de niños sacándose los mocos o llorando por todas partes!.-comento de manera frustrada, ya estaba molesto y un terrible dolor en mi cabeza crecía cada vez más.

No soporto estar en un lugar con demaciados niños, prefiero tener a Amaya mil veces que a cualquier otro.

¡Ni siquiera sé cómo es que puedo soportarla si se parece tanto a su madre!.

-Bueno tranquilízate shadow, no es para tanto una vez que te acostumbras, además creo que podrías aprovechar tener más momentos con ella no crees?.-me dedicó una mirada sincera, tiene razón, pero que puedo hacer? Meterme con ella en la piscina de pelotitas?, ¡Eso jamás!.

-¡Shadow!,¡Tienen un lugar donde podemos peinar muñecas!, Tenemos que ir, ¡vamos!.-amaya tomo mi mano y me jalo hasta llegar a una habitación de un color morado con estrellas en el techo y varias mesas donde se encontraban madres junto con sus hijas peinando cabezas de princesas.

En serio, en que me metí.

-Escogí está para los dos!.-la pelirosa se sentó en una pequeña mesa y agarró la cabeza que estaba sobre la mesa, había varias cosas para adornar el cabello y un cepillo color rosado con brillos.

No me queda de otra más que pasar el tiempo con ella, busque con la mirada alguna silla que pudiera usar pero no había ninguna, incluyendo las madres tenían que usar esas pequeñas sillas.

Suspiré rendido y me senté en una color azul, esperaba que no se rompiera pero no fue así, que alivió.

-Tienes que cepillar su cabello y hacerle dos colitas, y luego tienes que ponerle un par de broches.-se acercó a mí entregándome el cepillo y los broches junto con ligas.

-¿Como se supone que haré eso?.-dije mientras miraba el cepillo y las ligas.

-Es fácil, solo tienes que pasar el cepillo de esta forma.-agarro el cepillo que tenía y comenzó a cepillar el cabello, luego le quitó los nudos y después me lo devolvió, lo hacía muy fácil.

-Bien..-lo tome y repetí lo mismo que ella, observaba a las madres y como lo hacían, lo lograban de una manera muy fácil, son expertas.

-¿Ahora entrenas a tu padre para que logré peinarte amaya?.-pregunto vainilla cerca de nosotros, se encontraban en otra mesa y se acercaron a nosotros mostrando la cabeza de la muñeca.

Le hicieron algo llamado trenzas, dudo que yo pueda hacerlo bien a la primera, aún así su comentario no me causo nada de gracia, se nota que se está burlando de mis intentos.

-¡Asi es!, Quiero que aprenda a peinarme para esta noche.-hablo entusiasmada, se nota que ella tiene grandes expectativas sobre mi, eso me alegra pero a la vez me hace sentir mal, no creo que pueda cumplir con todas.

Y menos si el cabello de la muñeca se atora con los broches! Además su cabello está corto de un lado y largo del otro! Le hice dos coletas y una quedó más larga que la otra.

¡¿Que clase de calidad es esta?! Cómo esperan que a uno le salgan iguales, pésimo lugar de verdad, no volveremos aquí, es más, saliendo dejaré alguna queja.

-Bueno, los dejamos entonces, no se olviden estar a tiempo a las nueve de acuerdo?, Nos vamos al rato.-la coneja se despidió tomando la mano de su hija abandonando el lugar.

Estuve practicando con Amaya sobre los distintos pintados que había que hacerle a la muñeca, fueron difíciles y más con esta muñeca y su calidad.

Al final lo logramos y decidimos irnos de ese lugar, me alegra tanto haber terminado, me acerqué a una empleada y le dije algunas cosas sobre la calidad de sus muñecas, despues me explico que la muñeca no tenía el cabello mal cortado.

Como si fuera a creerle, solo inventan excusas para no comprar nuevo material.

Saliendo del lugar, Amaya se detuvo frente a un poste de luz, al parecer había un cartel pegado ahí, me acerqué para verlo también.

"Pista de hielo" es publicidad para invitarte a patinar, Amaya parecía querer ir, sería una buena idea llevarla?, Supongo que no se lo espera.

Tome su pequeña mano y nos dirigimos al estacionamiento, subimos a la camioneta, parece que ella quiere ir definitivamente, pero no me ha dicho nada.

Comence a manejar en dirección a la pista de hielo, no quedaba tan lejos, cuando llegamos al lugar Amaya abrió los ojos como platos al notar a la gente patinar sobre la pista, había muchos padres con sus hijos, algunas caídas y gente patinando como profesionales.

Amaya apretó mi mano con fuerza mientras caminabamos hasta llegar a la taquilla.
El tipo se sorprendió por verme y luego le entregué el dinero, el me entrego un par de patines de nuestras medidas y se los entregué a amaya mientras recogía mi cambio.

Nos sentamos en unas bancas para ponernos los patines, no fue difícil, pero lo complicado era caminar con esas cosas hasta llegar a la pista, sosteniéndose de las bardas logré llegar a la entrada junto con Amaya.

Se veía asustada, tal vez era su primera vez patinando, sostuve su mano y poco a poco fui adentrando a la menor al centro de la pista, ella se tambaleó un par de veces pero nunca se resbaló, al poco tiempo comenzó a patinar correctamente.

Ella tomaba mi mano mientras yo la guiaba en la pista, es un momento que voy a
recordar, se le veía tan feliz al igual que yo, mucha gente se abría paso para dejarnos pasar.

Fue divertido pasar tiempo con ella, cuando Amaya se cansó de patinar, salimos de ese lugar y fuimos a comprar un helado, ambos estábamos sentados en las bancas de un parque.

Ambos nos quedamos observando unos patos, el momento era tranquilo hasta que ella hablo.

-Shadow, ¿Por que dejaste a mi madre?.-pregunto tristemente con sus orejas agachadas.

No esperaba esa pregunta, supongo que se la tenía guardada para un momento como este.

¿Qué es lo que debería decirle exactamente?, Probablemente siempre creyó que yo era una mala persona que abandonó a su madre, no quiero que me vea de esa manera..como explicárlo.

Estuve algunos minutos en silencio hasta acomodar las palabras adecuadas para ella.

-Tu madre y yo teníamos problemas, cuando apenas estaba entrando a un quipo profesional me pasaba más tiempo entrenando que en la casa, además ella tenía sus viajes ayudando a otras personas, nuestros horarios eran diferentes y...casi siempre discutíamos...después no se que pasó que ambos decidimos que era momento de separarnos.

Observé a Amaya y su reacción era neutral, no sé si a hablado sobre esto con Amelia pero su reacción me dice que es muy probable que ella le haya dicho otra versión.
El problema es si será una version buena o mala de mi.

-Pero, te aseguro que nunca sabía que tu madre estaba embarazada, si lo hubiera sabido te aseguro de que nunca la hubiera dejado irse, no quiero que pienses que te abandoné..yo nunca sería capaz de hacerle eso a tu madre ni a ti.-la menor se acercó hasta mi y me abrazó ocultando su rostro en mi pelaje, parecía estar llorando.

Correspondí al abrazo, acariciando su cabello, no crei terminar así con ella de esta manera, no tenía la intención de hacerla llorar.

-Me alegra escucharlo de ti.-se alejó limpiando sus lágrimas.-Mamá me dijo lo mismo cuando le pregunté por ti, pero de vez en cuando lo dudaba, lamento haber dudado de ti shadow.

-No te preocupes, está bien, tenías tus motivos, no me conocías.-le dediqué una sonrisa sincera, hace mucho que no sonreía de esta manera.

Recordé por un momento los momentos que había tenido con Amelia, desde nuestra boda hasta el día que se marchó de la nuestra casa.

Cómo me arrepiento por haberme separado de ella.
No me gustaría dejar de estar con Amaya, pero me gustaría volver a ver a Rose.

Seguimos abrazados por un par de minutos hasta que se separó de mi, era tiempo de volver a casa ya casi era hora para la presentación, caminabamos hacia la salida del parque hasta que sentí una mirada desde lejos.

Sentí como si alguien nos estuviera observando, y a decir verdad ya sentía algo desde hace rato, gire mis vista buscando a alguien pero había demaciada gente aún, encontrarle sería difícil.

Supongo que debe ser algún paparazzi, es mejor irse rápido.

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-Parece que lo tiene bajo control.-hablo una pelirosa mirando desde los árboles hacia ambos erizos subir a una camioneta.

Los había encontrado en la pista de hielo y no pudo evitar escuchar su plática, aunque sé resistió las ganas de correr y abrazar a su sobrina.

Ya era momento de que ella también se preparará para ir a la presentación, faltaban solo dos días para que el avión de su hermana llegará, aprovecharía todo ese tiempo para seguir a ese par.

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¡Hey! ¿Que es esto?, ¿relleno? Bueno en realidad no, solo quería que shadow y Amaya tuvieran su momento para aclarar sus dudas v:

¿Están emocionad@s? xd pronto llegará Rose y quién sabe que es lo que suceda después.

Espero poder actualizar pronto para que no se queden con las ganas :v