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Bucky y Crystal llegan al apartamento con el hombre tomándola en brazos. Al bajarla y cerrar la puerta con seguro la castaña se quita los zapatos y procede a besar hambrientamente al pelinegro acorralándolo contra la pared.

-No te lo había dicho pero ese traje negro me vuelve loca, me fascina...- vuelve a besarlo y la chica procede a sacarle el saco.

-Y tú te ves perfecta con ese vestido que he querido quitártelo por cierto desde que entraste con él al juzgado- responde y vuelve a besarla.

-Ahora puedes hacerlo, querido esposo, ahora soy tuya y tú eres mío por todas las de la ley- lo besa intensamente y ambos sin soltarse van hacia la sala y caen sobre el sofá. Bucky yacía encima de ella sin aplastarla y besándola sin detenerse, bajó a su cuello y luego vuelve a sus labios.

-Prometo adorar cada centímetro de tu cuerpo querida esposa, sin prisa, despacio voy a hacerte mía y solo mía. Te amo- la mira con una gran adoración. 

-Yo también te amo Bucky, tus ojos, nunca los vi con ese brillo tan especial...- sonríe levemente acariciando su mejilla.

-Pues, solo estoy viendo lo afortunado que soy al casarme contigo, el tenerte asi... Tengo toda la vida para demostrarte eso-Crystal sonríe complacida- ahora solo voy a quitarte esa ropa y amarte como nadie nunca lo ha hecho- el hombre procede a besarla nuevamente.

Crystal comienza a desabrochar su camisa negra y se lo quita dejándolo con el torso desnudo. El ex Winter Soldier se acerca a ella, comienza a besar su cuello en lo que baja con cuidado el cierre de su vestido y lentamente comienza a bajarlo hasta la falda dejando ver sus pechos. El pelinegro bajó de su cuello con besos hasta ellos para comenzar a devorarlos lentamente con la boca y la lengua haciendo gemir lentamente a la castaña, estimulando sus pezones con lametones y succiones aumentando la intensidad de los gemidos de la mujer.

El sargento sube a su cuello y la princesa aprovecha para desabrochar el cinturón del pantalón para poder después quitárselo pero antes de quitarle el pantalón la acuesta en el sofá y termina de quitarle lentamente el vestido dejándola con solamente una braga de encaje puestos.

-Déjame sentarme detrás de tí, nena- la chica obedece y hace espacio al hombre para sentarse detrás de ella y apegarla a él- Relájate- susurra en su oído y comienza a masajear sus pechos lentamente y su esposa empieza a gemir-Gime para mi, princesa mía- besa su cuello y su hombro mientras que la castaña cierra los ojos disfrutando de sus caricias y masajes en sus senos.

-Me encanta esto...- gime la chica nuevamente y el hombre la toma de la barbilla y la besa con salvajismo robándole el aliento.

-Abre las piernas todo lo que puedas- pide al separarse, Crystal obedece y el hombre hace un lado sus bragas para empezar a masturbarla con lentitud haciéndola gemir con fuerza- Eso es, nena-acelera sus movimientos-siente como papi toca y acaricia tu mojado y palpitante sexo- introduce un dedo y comienza a penetrarla con él haciendo más intenso los jadeos y gemidos de la castaña- escucharte hace que quieran reventarme los pantalones...- acelera e introduce otro dedo haciendo jadear y gemir más alto a la chica sin parar- ¿Estás lista para otro dedo más, princesa?- pregunta el pelinegro maliciosamente y la castaña asiente sin dejar de gemir y jadear y la chica grita al sentir un dedo más entrar en su feminidad.

Bucky con la otra mano comienza a estimular su clítoris en lo que acelera una y otra vez sus movimientos dentro y fuera de la castaña que tenía la respiración hecha un lío- Te haré correrte como nunca, nena...- se detiene de la nada y se levanta de detrás de ella no sin antes acostarla en la cama, terminándose de quitar los zapatos, los pantalones y el bóxer, quedando completamente desnudo ante sus ojos.

Crystal se mordió el labio al observar la erección enorme de su esposo y este volvió a colocarse encima de ella en el sofá para besarla y empezar a rozar su miembro con su feminidad aun cubierta por las bragas volviendo a hacerla gemir y poco a poco retomando la sensación placentera antes de llegar al punto máximo, el hombre se levantó y tomó uno de sus pies para empezar a besarlos lentamente y poco a poco subir por sus piernas dejando lentas caricias a su paso erizando la piel de su esposa. Bucky subió hasta su pelvis y sin dar más vueltas comenzó a besar su feminidad aún con las bragas, cosa que cambió en segundos ya que el hombre rápidamente lo deslizó por sus piernas quitándosela completamente y volviendo a besar cada centímetro de su ser con fuerza.

-¡Joder, Bucky!...- murmura la chica entre gemidos y jadeos.

-Disfruta mi nena, tenemos todo el día- comienza a penetrarla con la lengua y la chica aprieta fuertemente la almohada con sus manos jadeando una y otra vez-Eso es, buena chica. Quiero que te corras en mi boca como nunca- vuelve a realizar su labor e introduce un dedo en su interior de nuevo mientras lame su feminidad y succiona por momentos haciendo jadear a la mujer. La Inhumana comenzó a arquear su espalda disfrutando de la boca de su hombre en su zona más sensible hasta que en medio de gritos y jadeos termina llegando a la cima del placer en la boca del ex soldado que succionó con fuerza su clímax.

Instantes después Bucky volvió a recorrer su feminidad un poco más con su boca y lengua y subió con besos lentamente hasta sus labios y se recostó encima de ella para seguir besándola con pasión. Se separaron y el pelinegro la miró con profundo amor antes de acariciar su cabello y su frente con la mano de vibranio. Crystal lo miró con una sonrisa y éste le corresponde acariciando su barbilla y mejilla.

-Te amo, Crystal- murmura el pelinegro en sus labios con una sonrisa
-Te amo, Bucky- responde la castaña de la misma manera y el hombre procede a besar sus labios comenzando a rozar su erección lentamente sobre su feminidad mientras la abraza a él sin alejar sus labios de los de la Inhumana en ningún instante. Minutos más tarde el sargento se levanta y extiende su mano hacia la chica, para levantarla lentamente, apegarla a él y otra vez besarla mientras la toma en brazos y caminar con ella hacia la habitación.

La deposita en la cama y comienza a contemplar su cuerpo desnudo y sube junto a ella para nuevamente colocarse encima y volver a besarla. Comenzó a acariciar suavemente su piel y de nuevo formó fricción entre su miembro y su feminidad. La mujer quería al pelinegro dentro de ella pero no había prisa, tenían todo el día y las sensaciones que el hombre le estaba haciendo sentir eran indescriptibles. Bajó a besar su cuello y luego levantó su cabeza para mirarla.

-Eres la mujer más preciosa del universo Crystal, y no lo digo solo porque estamos casados, lo digo porque de verdad es así, te amo tanto mi hermosa princesa- Crystal con una sonrisa coloca uno de sus manos sobre sus mejillas.

-Eres el amor de mi vida, eres tan sexy y guapo en todos los sentidos, eres tierno, es el mejor cumpleaños que he pasado en toda mi vida y cada año quiero pasarlo así, gracias Bucky, te amo demasiado mi príncipe-ella lo besa y aumenta la velocidad del intenso roce haciendo gemir una y otra vez a su esposo, que al cabo de un par de minutos termina llegando al orgasmo en medio de jadeos sobre su boca. Al recuperarse, este la mira con una sonrisa y acaricia su cabello.

-Voy a hacerte el amor muy lentamente mientras te beso una y otra vez a partir de este instante, déjate llevar princesa, disfruta de este hombre que este día solo se enfocará en complacerte- el ex soldado vuelve a besarla por enésima vez y entra lentamente en ella en medio de intensos gemidos y jadeos. Comenzó a embestirla con un poco de velocidad y aumentar la intensidad de sus besos, mientras que la castaña acariciaba su espalda, sus nalgas y gimiendo en su oído se encontraba en el mismo cielo al sentir miles de sensaciones que solo su esposo le provocaba, Crystal lo amaba, lo amaba con todo su ser.

Y la pasión terminó por desatarse minutos más tarde, Bucky embestía con fuerza a la chica que yacía frente a él, que también se movía con frenesí, estaban sentados en la cama abrazados y mirándose fijamente mientras se movían una y otra vez. Los dos gemian sin parar, se acariciaban y cuando estaban a nada de llegar, ambos vuelven a la posición inicial y el hombre aumentó la fuerza de sus embestidas, Crystal cerró fuertemente los ojos llegando al orgasmo poco después gritando el nombre de su ahora marido y al cabo de unos instantes más él también llegó a la cima del placer dentro de ella. Ambos dieron la vuelta y la princesa aún unida al sargento coloca su cabeza sobre su pecho intentando normalizar su respiración.

-Eres el amor de mi vida, Crystal, te amo tanto mi hermosa princesa, para siempre- besa su frente y el hombre sale de ella.

-Y yo te amo a ti mi amor, te amo para siempre príncipe- lo abraza, le da un pico y vuelve a recostarse sobre su pecho.

...

-¿Como la estás pasando, preciosa?- sonríe el hombre en la mesa acariciando el cabello con ternura, la Inhumana feliz va junto a él y se sienta sobre sus piernas, ambos tenían una bata puesta mientras comían el pastel que el pelinegro había comprado por el cumpleaños de la castaña la noche anterior.

-Excelente, gracias a ti- sonríe y come otra cucharada del pastel- Tenía un poco de hambre, esto está delicioso- comenta mientras bebe su vaso de leche.

-Yo igual, esto está muy bueno, solo había desayunado y han pasado horas de eso- deja un beso en su cuello y se separa para mirarla- He estado pensando y... ¿Qué te parece ir de luna de miel?- la chica lo mira con una sonrisa.

-Pues me gusta la idea, me gustaría ir contigo a la playa pero una donde nadie nos moleste, tengo una fantasía en mente- lo mira pícara.

-¿Cuál es esa fantasía, princesa?- pregunta jocoso mientras chica lo mira con una sonrisa se acerca y se lo dice al oído- Joder, me gusta. Hay que hacerlo- le da muchos besos en la cara.

-No puedo creer que te haya gustado- lo mira incrédula y este se detiene.

-Todo lo que venga de ti y lo que eres tú enterita, me gusta preciosa- la chica empieza a reír- ¿Qué?-la mira divertido y ella se calma pero conserva la sonrisa.

-Que nunca imaginé que tu y yo terminaríamos así, juntos, enamorados y recién casados- lo mira algo apenada.

-La verdad yo tampoco, pero a veces la vida suele ser tan impredecible que nos coloca en lugares que nunca pensamos que vamos a estar- acaricia su barbilla, empuja levemente el pastel y los vasos vacíos y la voltea para sentarla encima de él quedando frente a frente.

-Tienes razón-responde algo excitada mientras el hombre le baja la bata desde los hombros hasta su cintura dejándola desnuda en la parte de arriba y lentamente comienza a besar y lamer sus pechos- ¿Qué haces?- pregunta nuevamente  sintiendo su boca adorar sus pezones.

-Volviendo a hacerte el amor, princesa- responde el ex soldado con la voz ronca y la levanta para luego volver a la habitación.
...

-¡No!- Jaslene despierta del coma en el hospital con gritos y comienza a llorar. Pietro se acerca adormilado y le toma de la mano preocupado, era de madrugada.

-Por fin despertaste nena, ¿que tienes?- pregunta temeroso al verla tan inquieta.

-Pietro, Crystal está en peligro. Vienen por ella, él me lo dijo- solloza- Strücker me provocó el accidente- lo mira con dolor.

-Tranquila, Jaslene- El peliplateado la abraza-Ya lo sabemos- añade.

-Es que no lo entiendes, Pietro, te harán daño a ti, y a todos. Él me pidió que les preparara el terreno- llora- Tienes que decírselo a los demás- advierte.

-No entiendo nada. Jaslene, ¿Qué está pasando?- la rubia lo mira con dolor. Tenía que decirle la verdad antes de que Strücker vuelva a lastimarla y proteger a su madre y hermana.

-Perdóname Pietro, pero soy una ex agente de HYDRA- El hombre abre los ojos como platos y rápidamente llama al resto del equipo exceptuando a Bucky y a Crystal que no podían ser ubicados, pues sus móviles estaban apagados.

-Ya está por amanecer...- Bucky abrazaba a Crystal en la tina de baño llena de agua tibia ambos descansando y disfrutando de sus cuerpos desnudos.

-Gracias por este cumpleaños tan hermoso, Buck- agradece la castaña con una sonrisa refugiada en los brazos del pelinegro.

-Fue el primer cumpleaños que pasamos juntos y de muchos que pasaremos juntos por el resto de nuestras vidas amor, tenía que ser especial- besa su frente.

-Y lo fue, mi amor. Sin duda lo fue- lo besa intensamente- ¿Una más antes de dormir?- pregunta sonriendo al separarse.

-No podía decirte que no teniendo tu hermoso y sensual cuerpo abrazado al mío en la tina- comienza a besarla con ternura y la castaña se coloca sobre el ex soldado para nuevamente entregarse a él antes de asomarse el alba.