Camila's POV

Si es cierto que vivimos en un mundo donde lo que más abunda es las mentiras entres otras cosas. Pero lo que a mi no me gustaba era que me mintieran, no mentiría si dijera que nunca me habían mentido, si lo habían hecho y por eso puedo decir que no es agradable. Dinah me dijo que las casualidades pasan sin avisar, también me dijo que en esta vida hay diversas señales que esta misma te pone en tu camino, lo que tu debes decidir con esas señales es si seguirlas o no. Eso me estaba pasando en este mismo instante con la chica de ojos verdes, ella llegó sin avisó con su sonrisa perfecta, con su mirada penetrante y con esos malditos ojos verdes que llenan esa mirada que al final te deja intimidada con tan solo mirarte. Su caminar tan seguro y perfecto te dan ganas de salir corriendo hacia donde ella está y preguntarle más sobre ella. En el instante que su mirada verde se conecto con mi mirada marrón hubo una conexión sin sentido y tan solo esa mirada me basto para querer saber saber más sobre ella.

Ahora después de reflexionar sobre lo que pasaba con ella me di cuenta de que al final estoy más confusa, no se si la conozco de alguna parte, fue mi amiga o algo más, no lo sé, es una problema no saber con exactitud que es lo que me pasa con Lauren. Notaba que ella actuaba raro cuando estaba a mi lado, se nota nerviosa como si quiciera decirme algo, he llegado a pensar que ella y yo nos conocimos en otra vida, es ilógico la verdad, pero no puedo sacar esa posibilidad de mi mente.

Notaba como las hojas caían sin vida hacia el césped, me encontraba en la parte de atrás de la biblioteca de Ally, decidí tomar un poco de aire libre, dentro del local se encontraban demasiadas personas que apenas recuerdo. Estaba sentada en una banca cerca de unos árboles hermosos, la belleza de la naturaleza era sensacional, simplemente perfecta, tenía una verde lleno de vida y de mucha paz, este verde me recuerda a ella. Lauren, esa chica que no deja de salir de mi mente, este día se mirada muy linda con ese vestido negro que estaba muy tallado a su figura, ¿Lauren tendrá a alguien en su vida?, tiene que ser, ya que es una gran mujer, talentosa y muy hermosa, cualquiera quisiera estar con ella. ¿También tú?, sacudí mi cabeza y deje ese estúpido pensamiento que llegó a resumbar en mi mente, era absurdo que yo pensará así. Simplemente fuera de contexto. Era... Algo. Maravilloso.

-Las personas preguntan por ti allá dentro, ¿sabes? -dijo una voz rasposa y muy linda para mi parecer. Me di la vuelta y a mis espaldas estaba Lauren muy sonriente, se acerco a mi.

-Simplemente quería respirar un poco, ya sabes dentro se siente una presión... -de mis labios salió un suspiro de frustración contenida. La ojiverde no dejaba de sonreí con esos perfectos labios rojos.

-Si, te entiendo. Es lindo el lugar, ¿no crees? -me señaló con su dedo el bosque, ella aún estaba parada a mi lado.

-Si, muy bello, siéntate.

-Mi padre decía que el mejor lugar para pensar y para recordar cosas era simplemente el bosque cerca de los árboles verdes. -la quede mirando por unos minutos, sus ojos estaban fijos en los árboles, en su voz se notaba un poco de nostalgia.

Ella decidió sentarse a mi lado mientras se acomodaba en silencio, quizá ella haya perdido a su padre o sólo lo extrañaba, lo podía notar en su mirada, notaba una tristeza y mucha emoción con un poco de nostalgia. Con cuidado a no asustarle acerque mi mano a la de ella y le di una caricia, ella me miro con esos ojos verdes, pero esta vez estaban un poco apagos, más lo normal.

-De seguro tu padre es un hombre muy sabio.

-Si, lo es, él me enseñó las cosas bellas de la vida, esas pequeñas y bellas cosas de la vida -ahora ella me regalo una hermosa y radiante sonrisa, de esas que llenan tu corazón de alegría y de cariño.

-Mi padre me enseñó muchas cosas, gracias a él soy lo que soy ahora -mire a los árboles y ahora era mi turno de mostrar nostalgia.

-Los libros de tu padre son muy buenos ¿sabes? -me volví a ella y la mire, ella tenía una sonrisa tímida, era como si lo que había dicho estaba mal.

-¿Lees libros de mi padre?, ¿Pero como...?

-Si, son lindos -ella miraba a los árboles y sonreía y abrió la boca para seguir hablando -Cuando estas cerca de esa persona que el destino te han mandado y sientes que estando a su lado todo a tu alrededor se detiene, ese... Ese es el verdadero amor...

-Vivir sin ella, esa es una frase de ese libro.

-Si, me encanto, siento que... En el encuentro otra parte de mi que está perdienda. -sus ojos era brillantes con los rayos del sol, mostraban alegría y mucha pasión.

Nos quedamos en silencio, nuestras miradas hablaban más que nosotras mismas, el marrón y el verde se junto y haciendo así una explosión de sensaciones nuevas para ambas, no podía aún entender como puede existir una chica así de perfecta como ella lo es, era perfecta que dolía, sentía que dolía por que no podía estar junto a mi o eso era lo que evitaba pensar. Ella mordió su labio y lo hizo en modo de nerviosismo, me encantaba verla así de inocente y de tierna, sus mejillas estaban en un tono de rosado llegando el rojo, se estaba sonrojando.

-Tus ojos cambiaron de color... -le dije sin dejar de verla. Ella sonrió como si le daba un poco de gracia lo que había dicho.

-¿De que color están? -preguntó con una hermosa sonrisa. Me acerque un poco más para ver mejor el color de estos.

-Son verdes muy claros. -ella sonreía tan maravillosamente que me sentía morir en ese instante.

-Son así cuando... Cuando estoy viendo algo hermoso -me sonroje al instante y sonreí, mi sonrisa mostraba nerviosismo.

-¿Siempre coqueteas con las chicas? -una risilla nasal salió de su parte.

-No, creeme que no... Contigo es diferente... Ya que eres perfecta y única.

Me quede en silencio mientras notaba su sinceridad en sus bellos ojos, sentía algo dentro de mí, algo que habían despertado esas palabras que ella me había dicho, era como dejavú, o quizá era solo mi mente que me estaba jugando una pasada. Lo que importataba era este momento y en que ella había expresado su cariño en esas hermosas y coquetas palabras. Aún nadie decía nada, nadie de las dos, simplemente dejábamos que nuestras miradas hablaran entre sí, Lauren era una chica muy interesante y muy segura de sí misma y eso me agradaba de las personas que se lanzarán sin miedo y que lo hicieran de corazón. Ella era una artista famosa y muy talentosa, el día que la vi en la televisión fue totalmente genial, ese día note su mirada verde y su incomparable mirada intimidante.

-Ya casi se acerca el verano -dijo ella mientras apartaba su mirada de mi, los árboles me robaron su atención.

-Si. ¿Prefieres el verano, invierno o primavera? -sinceramente su risa será mi sonido favorito.

-Verano.

-¿Por qué? -escuché su risilla y me pareció tan linda.

-Sabía que lo preguntarías... Pues por que en esa época voy a la playa y veo muchas chicas en traje de baño -mi sonrisa se borro por una extraña razón, no podía creer que Lauren era así, era obvio que sabía sus gustos hacia las chicas, pero nunca llegué a imaginar que ella fuera así.

-Genial... -me moví un poco incomoda en mi lugar de la banca, ella lo noto y me miraba.

-Aunque prefiero ver a escritoras hermosas...

-No digas nada, ya lo arruinaste -ella estaba asombrada por mis palabras, después Sonrió y se tranquilizó.

-Soy artista Camila, me encanta apreciar la belleza de las cosas y de las chicas.

Me levante con un poco de incomodidad, por alguna extraña razón no me agradaba lo que ella estaba diciendo, lo decía como si se trataba de algo normal, y no lo era. Camine lejos de la banca hasta que sentí que ella me tomó del brazo, me di la vuelta y la tenía frente mío, su sonrisa estaba más hermosa de lo normal.

-Perdón si te molesto mi comentario, no quise hacerlo, la verdad es que no voy a la playa y mucho menos me gusta el verano -la quede mirando. -Solo era una broma.

-Eres una tonta, ¿sabes? -mostré mi mirada molesta.

-Si, lo soy, pero soy más tonta cuando estoy a tu lado... Te ves más hermosa cuando te enojas, ¿te lo habían dicho?. -no podía saber con exactitud que me pasaba con Lauren, con tan solo sus palabras me tenia a sus pies, tal vez es así como conquista a las chicas o no lo se.

-No, no me lo habían dicho...

-Pues ya lo sabes -sin pensarlo ella se acerco y me dio un beso en mi mejilla, cerré mis ojos y disfrute ese momento cuando sus labios tocaron sin aviso mi mejilla fue maravilloso, pero a la vez confuso y doloroso. Me aleje de ella, descanse mi frente contra la de ella y suspire.

-No lo hagas...

-¿Hacer que, Camila?.

-Esto... Me confunde Lauren -no me había dando cuenta que mis manos atrevidas estaban en su pecho, pero no hacía nada fuera de contexto. Dolía la confusión que ocasionaba ella con sus palabras.

-Yo... Lo siento... No... -se notaba preocupada y muy arrepentida.

-Yo... Quizá deberíamos entrar.

Me aleje de ella y no la mire y camine, ella estaba siguiendo mis pasos, la podía escuchar. Me dolía y eso lo note al instante en que sentí sus labios presionar mi mejilla y también su olor a menta de su aliento me llevó a otro lugar que no sabía con exactitud, era como si ese olor lo había sentido antes. Algo tenía Lauren, ella quizá era parte de mi vida y nadie me lo había dicho o quizá ella solo le guste estar a mi lado y yo me estoy creando tontos "recuerdos" de ella y yo juntas en una anterior vida. Si, eso es, solo debo dejar de imaginar y crear cosas que no son.