El Joven de tez morena solo vivia el momento con sus emocionados latidos acelerados, disfrutando cada vez mas ese pequeño contacto fisico como mental, algo que hasta ahora no se dio cuenta de que era la medicina perfecta, las razones de aquel beso eran inexplicables, pero la logica solo sobraba ante tal ilucion, las razones no importaban, lo espontanio del momento volvia mas libre a su alma en desesperación, sin duda aquel Principe era la cura a todos sus dolores y penurias, no importava lo insignificante que fuera a los ojos del mundo, porque el sabia que era alguien especial para aquel Chico de anteojos, eso era incluso de mas valor que todo lo que lo rodease.

El tan simple echo de recordar esas tiernas y melancolicas palabras salir de los labios de su contrario, lo tenian pensando, razonando tratando de  buscar una respuesta, pero ahi estaba el atrapado en el firme abrazo por  su cintura, atrapado en los incontables sentimientos sin sentido, esas palabras solo sirvieron para conquistar mas a ese sensible corazón, sus penas fueron disipadas con tan solo el resplandor de su mirada, y el fulgor de sus espontaneas frases dichas en un suspiro de necesidad para su dañado pejuicio mental.

El atardecer que afirmava la inestabilidad de ese fragil momento en ambos, rodeados de prejuicios los cuales satisfacer, ahora eso no importaba, ambos estaban ocultos del mundo quienes lo criticaban, el beso seguia con total normalidad, con suabudad y delicadeza, de pronto el Joven de tez morena sintio como lo acercaba mas hacia su contrario, parecia como si el Chico de cabellos rizados estubiera echo para encajar de maner perfecta entre los brazos del Joven de lentes, ¿Acaso habia manera de negar que eran perfectos entre ambos?, la respuesta se explicaba sola. El aire empezo a faltar, eso significaba que se separarian, lo bueno nunca dura para simpre, esa frase era tan real, pero no habian segundas opciones.

Al mismo tiempo que se alejaron, se perdieron en el profundo resplandor de sus ojos, nunca se cansarian de apreciar su tal profundidad, era lo mas especial para ellos, el pensar que no estaban perdidos, y que la perdida en sus vidas ya no estaba, pues consiguieron a quien los complementaria, "El creer que nuestro encuentro fue nada mas que casualidad, te vuelve en alguien tan unico para mis sentidos, tu precencia nunca pasa desapercibida por mi mirada, lo atrayente en ti no me deja despegarme de tu lado, mi conciencia siempre me pregunta ¿Que diablos me hiciste?, lo unico que se es que me tienes perdidamente enamorado" fue el insolito pensamiento de Joven de tez morena, las dudas acerca de esa cuestion eran tan innumerables, que todo se volvía tan confuso.

—¿Puedes dejarme quererte?— Pregunto Sang-Woo una vez que se sentia seguro de sus palabras.

Ali tenia la respuesta clara, puede que sea inseguro pero cuando se trata de estar al lado de el Príncipe, las dudas desaparecen.

—Mi respuesta no es diferente a lo que mi corazón desea— Dijo con la intención de confundir a su contrario, mirandolo con una esplendida sonrisa.

—¿Y que es lo que desa tu corazón?— Pregunto, al parecer entendió a la perfección a lo que se refería su contrario.

—El tenerte conmigo— Hablo de manera corta y de forma dulce, esas tres palabras cortas y precisas, tenian un significado mas relevante de lo que parecia.

—Eso era lo que quería escuchar, y es mas reconfortante viniendo de tu dulce voz— Dijo Sang-Woo con una sonrisa de lado, para consiguiente retirar una de sus manos de la cadera de su contrario, para acariciar esos finos labios enfrente suyo.

El niño pequeño al cual quería tanto, estaba aquí con esa misma prencencia la cual solo emanaba esperanza con su sonrisa, los pasados tiempos en los que jugaban en este jardín el que a su edad se les hacia inmenso, y algo totalmente inexplorado, y ahora estaban en el mismo lugar, esta vez para demostrar que el tiempo no era una dificultad para reunirse una vez mas, pero siempre hay interferencias, por el momento todavia no habían aparecido.

El Príncipe tomo la mano de su contrario con delicadeza llevandolo a una banca de aquel jardín, encerados en una charla rodeada de experiencias que se les venian a la mente sin explicacion alguna, el Chico de anteojos se encontraba atorado en un embrollo mental, pensando en como contarle que todo empezó desde que eran unos niños pequeños divagando en la mejor edad, en la cual las penurias y preocupaciones no invadian su mundo lleno de imaginación, era una pena que todo eso se halla esfumado de manera tan rápida, decidió disfrutar de la tranquilizadora charla, entre leves risas y uno que otro momento en que sus manos se entrelazaban entre si, mesclando sus emocines, era el mejor momento guardado en sus memorias, aparte de aquel memorable beso.

La noche no tardo en dar llegada a sus hermosas estrellas, las cuales iluminaban con una luz débil aquel patio, ambos seguían en una charla amena y cómoda, algo de lo que podían decir que era su momento de paz y libertad.

—Creo que te perjudique en tu trabajo el dia de hoy, lo siento Ali— Dijo el Principe un tanto apenado, bajando la mirada con culpa.

—No se preocupe, usted me acompaño toda la tarde, los recuerdos siempre se guardaran en mis memorias— Dijo en Chico de tez morena, para despues voltear a verlo, y deducarle una sonrisa.

Sang-Woo siempre terminaba atrapado en esos inesperados intercambios de miradas, y se le hacia imposible controlar los latidos de su desesperado corazón, esta vez las estrellas resplandecian en su bello y delicado rostro, y la luna se encontraba aliniada en el eje perfecto de iluminación, ambas combinadas en el momento preciso, solo formaban la dosis exacta como para que le diera un ataque al corazón, el Rostro de piel canela iluminada con la luz de las estrellas, y el resplandor de la luna reflejado en aquellos oscuros ojos que se le hacian tan hermosos, y lo mas peligroso, su esperanzadora sonrisa, la cual era tan contagiosa que no pudo evitar sonreír, y que sus mejillas se tornaron de un rojizo notorio para la mirada, ese Chico de cabellos rizados encajaba a la perfección con la inmersa oscuridad de la noche, porque volvían su simple presencia en algo mucho mas deslumbrante para sus sentimientos.

Solo aprecio lo que la vida le regalaba de frente, era tan precioso y valioso, que todo en aquel Joven de tez morena se asemejaba a un hermoso paisaje, uno al cual nunca podias dejar de mirar, aquel que explotaba una revolución en tu interior, una batalla desencadenada en el sin fin de pensamientos y los gritros no paraban de resonar en el eco de su sudconsiente.

"Nunca dejas de jugar con la delicada cuerda de mis emociones, desencadenas tanto dolor y alegría en mi interior, tu sonrisa asesina a mis pensamientos logicos, y alimenta a los que solo me llevan a locura, deja de desordenar la hipotesis creada por mi mera existencia, se conciente del daño causado por tu presencia, liberame del mar de ideas y conflictos que solo tu creas, dale libertad a mi mente en pena, y para de lastimarla con tus arebatos de mi corazón, Mi chico de ojos estrellados y de sonrisa esperanzadora, solo deja de llevarme al borde de lo maniatico y liberama del desatre en mi campo de batalla ahora llamado ecos de conciencia, causada por ti, se que sonara contradictorio pero a la vez deseo que me mates con todo el amor que tienes para brindarme, asficciame con tus poeticas palabras y arrebata mi vida con tus insaciables besos, con los cuales quiero morir acompañado"

Eran los conflictivos y confusos pensamientos de su conciencia, todas sus contradicciones, aciertos y dudas lo llevaban a callejones sin salida alguna, sin escapatoria, sin lugar a donde ir, todo causado por su voz y su soñadora mirada y toda la perfección que irradiaba consigo, todo a causa de Aquel magnifico Chico de piel color canela.

Por su lado el Joven de la mirada soñadora no paraba de ver a aquel Chico de ojos aperlados, tenias un pequeño brillo que los volvia tan especial a sus ojos, una cúa va sin fin de la cual no tenia alternativa de escapar, y esos asimetricos labios color carmesí, que solo lo llamaban a llenarlo de besos, y esas mejillas tan blancas como la nieve, donde en ese momento habia un notorio sonrojo, lo volví al tan iresistible  para su mirar, solo hacian desear acaricialas y nunca se cansaria, y ese asesino flequillo suyo, el cual decendia por su rostro tampando la mitad de su ojo, lo hacia ver tan guapo, ese Príncipe de ojos iresistibles y la sonrisa encantadora, lo estaba volviendo adicto a solo verlo a el.

Despues de aquella imprevista mirada no se dirigieron la palabra, ambos se sentian avergonzados como para acerlo. Después de unos minutos estaban de vuelta en los pasillos de palacio, eran tan abrumadores por su amplio espacio, pero lograron llegar a su habitacion, cada uno tomo su camino y se vistieron, para ahira estar en frente de la cama y sonrojarse al pensar en sus insanos deseos carnales, solo se acostaron cada uno en la esquina contraria dando la espalda a el otro, a pesar de su declaracion aquella tarde su miedo no les permite acercarse,pero eso no era odsraculo para sus impulsibas mentes.

El día siguiente llego, esta vez con nubes densas, y claramente una nieblina se dibujo en el cuelo de un color plomizo, al parecer el frío habia sido bastante, por ambos Chicos se envontraban aferados en un abrazo abrigador, una vez habrieron sus ojos se puesieron nerviosos pero no se distanciaron, una llamada interrumpió su amanecer juntos, Sang-Woo tubo que responder sin opción alguna.

Se paro de la cama, y agarro el molesto teléfono vibrando, para ver que era Sea-Byeok como siemore llamando en el momento menoa oportuno.

—Agg que paso ahora Sea-Byeok— Respondió de mala manera y con notorio enfado.

—Nuestros padres estarán fuera por tres días, no posemos desaprovechar esta oportunidad, fueron a un viaje de negocios, en dos horas te veo afuera, necesito que llevas a ese Chico que se llama Ali, bueno nos vemos— Dijo de manera rapida, para después cortar la llamada de manera adrudta.

Dejando haciendo a un Sang-Woo pensativo y confundido, parado en medio del cuarto cundo una cara de total condición, afortunadamente solo duro unos segundos y salio de su trance.

—Ali necesito que nos acompañes a mi y a la Princesa a un viaje, iremos a tu poblado, pro favor podri— Su cintrario lo interfirio.

—Eso no se pregunta, claro que si iré, bueno voy a prepararme— Dijo entrando al baño para darse una ducha y vestirse.

Sang-Woo solo lo miro y río por la ternura que le causaban sus expresiones.

—Solo tenemos dos horas, debes apresurarte— Dijo casi gritando, para que el Chuco de tez morena pudiera escucharlo.

—Si me apurate!— Grito igual el como respuesta.

Sang-Woo hizo lo mismo y entro al baño principal, pues si esta era mucho mas grande que la secundaria, se ducho y se disouso a prepararse.

Despues de una hora ya estaban listos para su viaje, faltaba media hora pero entre mas rápido mejor, al llegar abajo tomaron un auto de los muchos que habían, y entraron a este, ambos Jóvenes en la parte inferior del auto y en la parte delantera se encontraba la femenina al mando del volante, sin duda a elle le encantaba conducir.

—Ponganse los cinturones, tal vez maneje rapido— Dijo ella de msnera seria, vio por el retrovusor y una vez se aseguro se que tuvieran los cinturones puestos, avanzo.

Apenas piso el acelerador, casi se dan un dolor en la frente, pues tomo impulso de golpe, y por seguridad ambos chicos se sostubueron de alguna cosa ahí para no chocarse, hací fue como se encaminaron a su pequeña aventura de carretera.

Ahí estaba el comienzo del túnel, que daba habiso de que estaban serca de su destino de llegada, una vez se percataron del brillo al final del túnel, el Joven de cabellos rizados no pudo evitar sonreír, estaba de vuelta en el pueblo que le habia dado de todo sin pedir nada a cambio, en esa comunidad la cual lo habia visto crecer. Estacionaron el auto en la entrada del poblado, el Joven de tez morena salio de este con un sentimiento de nostalgia, respirar el aire ahí se sentia tan diferente, era tan fresco y renovado, solo empezo a mirar a su alrededor y ligro encontrar con la mirada a una bella Chica parada a poca distancia de el.

Era Arlen su ex novia, la chica que le habia brindando tantas alegrias en el transcurso de los años, no pudo evitar sonreír, el la queria como una amiga, corrió hacia ella y la sororendio con un abrazo. La Chica de cabellos ondulados no evito quedar sorprendida ante la acción, aquello la confundio.

—Te extrañe— Dijo el en su oído mientras la rodeaba con sus brazos.

Al notar de quien se trataba no tardo en corresponderle, era reconfortante estar en los bazos del otro, pero a la femenina le quemaba por dentro en echo de pensar que ya no tendrá a ese resplandeciente Joven a su lado la seguía llevando a la agonía, su corazón no soportaba mas el dolor sabia que si no se distanciaba ya no quedria soltarlo, Arlen termino con el abrazo y solo le dedico una sonrisa, ambos empezaron a reír y a charlar como siemore lo hacían, por su partre Ali se sentia cómodo entando en la comoañia de su "Nueva amiga" por asi decirlo.

Por su parte el Príncipe los miraba desde una distancia algo vorta a ellos, unas punzadas en su pecho se hicieron presentes, sentía como le ardía aquella herida causada por la imagen en frente suyo, el no era alguien que demostrara sus celos, pero por aquel Joven de tez morena lo haria todo hasta el limite de lo imposible, cuidaría y atesoraria esos recuerdos de su amor de juventud siempre aunque pareciera mas doloroso, no interesaba el precio, en tal de mantenerse a su lado haría lo que fuera necesario.

Sang-Woo se acerco a ambos y jalo el brazo de Joven de cabellos rizados acercandolo a el, no pudo evitar que sus impulsos lo manipularan en ese momento, el era igual que todos, tenia emociones, sentía celos y era egoísta con lo que quería y aquel Chico de tez morena no seria la esepcion, acerco a su contrario hacia su pecho, y laano que tenia libre la dirijii al mentol de este haciendo que lo mirara directo a los ojos, esto dio resultado pues los cachetes de su contrario no tardaron en tornarse rojas, demostrando hací que era de el.

Su actitud fue cruel y egoísta, eso era mas que notable, sus intenciones eran dejar en claro algo y lo logro ¿Pero a que costo?. La femenina al ver aquello no pudo evitar que sus emociones se desbordas en en lágrimas, claramente lo aruino todo, Ali no era de aquellos que guardaran rencor, pero cuando se trataba de sus amigos los defendía, puede que el Joven de anteojos le guste y que lo ame de manera profunda, pero no le da derecho a lastimar a los demás.

—Arlen tranquila, estoy aquí, se que es difícil lo entiendo, pero recuerda que yo seguiré atesorandote en mi conciencia y corazón— Dijo Ali alejandose de Sang-Woo, para ir donde la femenina y consolarla— Sang-Woo por favor pidele perdón— Le pidió con ojos que emanaban tristeza.

—Lose fui— Se detuvo un momento, no queria admitirlo, pero era lo mejor, no queria tener un roze con su contrario— Fui cruel al hacer eso, y perdona me por favor, solo que es dificil para mi controlar mis impulsos.

—Tranquilo, no importa, solo yo, ya no podía soportar mas guardar todo lo que sentia y colapse— Respondio ella entre sollozos y secandose las lágrimas.

Ali se acerco a ella y seco sus lágrimas de su rostro con sus manos, Sang-Woo esta vez supo como manejar sus impulsos y solo apretó un poco sus puños, suspiro y dejo que los sucesos pasaran con normalidad. Después de un momento el Chico de tez morena logro calmar a Chica de cabello ondulado, la acompaño a su cabaña y le dijo que se tomara un descanso.

Mientras el Joven de piel morena se encontraba ocupado, Sang-Woo y Sea-Byeok estaban en la búsqueda de su hermano, no conocian sus rasgos, pero lo intentaban.Na sabian que una trajedia sucederia cuando volvieran a su Reyno, lo único que les quedaba era dejar el futuro a los secesos del imprevisto destino.

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Primero que nada espero esten bien y que pasen muy bien estos ultimos dias del año.

Bueno estube algo ocupada y poreso me retrase en subir capitulo, se que este no me quedo bien pero bueno es lo que hay.

Dicho eso yo me despido, Bye :3