Liv

Todos eran muy grandes y estaban rodeándonos <<asique esto es la presentación>>. Mis hermanos y yo no nos separábamos ni un centímetro el uno el otro. De pronto todos comenzaron a acercarse, miramos a papá que se notaba muy nervioso, y eso nos puso nerviosos a nosotros. ¿Acaso será verdad lo que dijo Rissa? ¿Ya nadie nos hará daño?

— No teman pequeños...ya nadie les hará daño. Solo vienen a conocerlos

Una vez que los demás se fueran, papá se nos acercó un tanto mas tranquilo.

— Ahora todo estará bien...vamos a casa...gracias por todo Rissa... — dijo mientras caminaba con nosotros delante de él

— Esta noche habrá cacería, Saga. Todos deberán ir, o al menos eso es lo que Ciro quiere. — papá se detuvo de golpe y miró a Rissa — podrías traerlos aquí, ya que me quedaré para cuidar a mis cachorros.

— Está bien, los traeré conmigo mas tarde. — nos miró nuevamente — andando.

Después de la muerte de mamá y la mitad de mis hermanos, papá se había vuelto más callado, no era tan enérgico como antes, apenas jugaba con nosotros, y solo pasaba el tiempo pendiente de cualquier cosa o sonido que pasara por cerca de nosotros. Era algo triste de ver.