Párrafo 5.

Estaban fuera del hospital, el viento era fresco para esa hora, el atardecer estaba cayendo, cuando se miraron a los ojos, Atsushi estaba serio, Akutagawa preocupado. - Ya sé... con que profesor salías

Akutagawa lo miro sorprendido – oh, no Atsushi debes estar confundido, ese profesor ya no

- Era mi papá...

Akutagawa se quedó sin habla, trago saliva, una muy profunda. No sabía que decir.

Atsushi suspiro profundo - ¿Por qué... salías con Osamu?

- No, o sea sí, pero Atsushi, no, no pienses en eso por favor

- E-es que... mi papá...

- ¿lo olvidas?, eres mi presente y mi futuro

- Es que, ni siquiera sabia que mis padres habían pasado por esto... ¿mi papi lo sabe?

- No sé, la verdad es que no lo sé...

- Y me mentiste, dijiste que mi papá te ayudo, él era tu amante

- Si, de acuerdo cambie la historia, no podía decirte

- ¿y como se que realmente paso eso?

- Atsushi, no te hagas esto, no nos lo hagas, solo cambie el hecho, pero fue el mismo Osamu Dazai que cansado de mi me dio la pasante, dijo que si no la tomaba iba a terminar conmigo, entonces, cuando la tome él se fue y no supe más de él hasta el día que cenamos juntos. Te lo juro Atsushi

- Yo, yo te tenia como un chico valiente y cuando me contaste eso entendí, pero... pero es que es mi papá...

- Atsushi...

- Me duele la cabeza, y mucho. Dame un tiempo para asimilar esto y lo hablamos después. ¿de acuerdo?

- Comprendo, pero ¿Cuánto?

- No me busques, yo te llamaré ¿sí? Ayúdame a llegar con mis padres, me duele en serio...

- De acuerdo, tranquilo. Vamos al auto.

Akutagawa llevo a Atsushi al auto de sus padres, abrió la puerta y cerro, Chuuya conducía así que lo vio por la ventana - ¿te vemos en la casa?

- No, tengo unos proyectos y Atsushi está cansado

- Quiero recostarme papi – pidió Atsushi

- De acuerdo, conduce con cuidado Ryu

- Nos vemos y Chuuya-san

- ¿sí?

Akutagawa suspiro profundo, bajo la mirada – lamento mucho todo... - Chuuya le sonrió. Dazai miro a otro lado y Atsushi tapo su boca evitando igualmente llorar.

- Animo pequeño maleante roba corazones, te veo después.

El camino fue silencioso, y como dijo, Atsushi subió directo a su habitación a descansar. – me preocupa mi niño

- Estará bien, dale tiempo, le llevaré un chocolate caliente con malvaviscos

Chuuya sonrió – eres el mejor padre ¿lo sabías?

- No del todo... - suspiro – ve a descansar, yo lo vigilo un rato hasta dormir

- Gracias

Chuuya fue a su habitación, Dazai fue a la cocina a preparar el chocolate, después de un rato, subió con dos tazas, abrió la puerta mirando a Atsushi sentado en su cama – cielo

- Papá... - le llamo sorprendido – no, no vengas...

- Yo, traigo chocolate caliente, mis manos se quemarán

Atsushi suspiro, Dazai entro dejando una taza sobre la mesa de cama del menor – oye, lo que paso hoy...

- No quiero hablar de eso, no en está casa.

- Estoy preocupado por ti – menciono

- Papá... solo dime, papi ¿lo sabe?

- Lo sabe... - menciono angustiado – pero no sabe quien es exactamente...

- ¿no?

- Piensa que fue Kunikida...

- ¿el profe de matemáticas?

- Si

Atsushi suspiro en grande y se dejo caer en su cama, tapo su rostro y suspiro profundo - ¿Por qué él?

- Era un gran chico, me ponía total atención en todo, cariñoso y atento, en ese tiempo, tu papi y yo pasábamos por este distanciamiento, y el lleno tan lleno de cariño y atención que no pude evitarlo...

Atsushi comenzó a llorar, el mayor lo miro - ¿Qué piensas para llorar así?

- Lo que me hace a mí, te lo hizo a ti

- No, no para nada...

- Basta papá, no quiero escuchar más

- Pero tu me pediste saber, intento que digieras esto bien...

- No puedo... - dijo llorando – ahora ¿Qué? ¿Qué voy a hacer? No, no puedo papá, no puedo

- Atsushi, tranquilo, respira, duerme un poco ¿salimos mañana a hablarlo más?

- E-está bien pero mañana

- Duerme, y si lloras

- Si, tomaré agua, lo sé...

- Y si no lo soportas

- Iré con papi, pero no le diré

- Gracias...



A la mañana siguiente, Atsushi se despertó temprano, sus ojos estaban hinchados, lavo su cara con agua y con jabón (si, se lava su carita), y se puso ropa deportiva, tomo una maleta y las llaves del auto, ya saliendo, le envió un mensaje a su papa Chuuya sobre su salida. Iba a medio camino con música a todo volumen cuando su padre le llamo por teléfono, Atsushi uso los manos libres del auto – papi

- Cariño ¿en verdad vas a pasar todo el día en el gimnasio?

- Si, necesito oxigenar mi cerebro

- No hables con temas científicos cuando estas triste, no eres una persona seria, tranquilo. ¿te llevo algo de comer?

- No, comeré en el restaurante del gym

- De acuerdo, divertirte y desahógate

- Gracias papi

- Y Atsushi

- ¿si papi?

- Te amo muchísimo, te apoyaré en lo que sea, así que cuando puedas dime, o le llamaré a Ryunosuke

- Si papi, te amo.

Colgaron y a pocos minutos Atsushi logro llegar a su destino. Atsushi comenzó y allí se quedo todo el día, con audífonos y música a todo volumen, llego el medio día y el joven chico por fin se sintió aliviado, reviso su celular el cual había tenido en silencio toda la mañana, únicamente por la música. Tenia 9 llamadas perdidas de Chuuya y otras 13 de Ryunosuke. Suspiro llamándole a su padre.

- Atsushi, ¿terminaste?

- Si, tengo llamadas tuyas y de Ryunosuke

- Si, lo llame por que su papá dijo que tenían que hablar, pero el dijo que primero hablaría contigo

- ¿y papa?

- Salió – suspiro – hijo, en serio ¿Qué esta ocurriendo entre ustedes? ¿tu papá si amenazo a Ryunosuke? ¿estas bien'

- Si papi, hablare con papá.

Colgó y le llamo a su padre, su sorpresa fue verlo llegando al estacionamiento – papá

- Este lugar es el más privado que encontraremos ¿no?

Atsushi suspiro – vamos a comer, tengo hambre

- ¿Qué quieres comer?

- Un sándwich

Fueron a un restaurante familia, allí tomaron asiento uno enfrente del otro, ordenaron y entonces, Atsushi fue quien comenzó – papá

- ¿sí?

- Cuéntame todo, de principio a fin

- Pero Atsushi

- Todo papá

- De acuerdo...




Hace 2 años atrás.

Ryunosuke Akutagawa, estaba en su primer día de clases, algo nervioso, pero siempre teniendo a su lado a su mejor amigo, Tachihara Michizou, su primera clase, era estadísticas y tenían suerte de tener clase con el mejor empresario de Yokohama para una simple clase de estadística. Osamu Dazai.

- Escuche que se caso con un gran empresario con buffet – menciono Tachihara – ese hombre es sexy

- Si, estoy impresionado

- Algún día seamos alfas como él. Sexys y ricos

Akutagawa solo sonrió de pensarlo, claro, cualquiera quería ser reconocido como un alfa guapo y con dinero, los omegas vendrían solos, pero para el azabache fue un sentimiento diferente, fue todo un mes que no podía evitar ver a Osamu Dazai, al dormir soñaba con él, su voz siempre sonaba en sus pensamientos, estaba totalmente ido por aquel alfa.

Conoció a Edgar Allan Poe, un nuevo amigo. El cual lejos de ser ruidoso como Tachihara, podía confiarle muchas cosas - ¿Qué te acongoja entonces?

- ¿tienes novio? – pregunto

- Si, no. La verdad no

- Vamos, cuéntame

- Sus padres son algo así como algo famosos, y el sigue siendo menor de edad, es un precioso omega adorador de los dulces, es algo hermoso

Akutagawa sonrió nostálgico - ¿Qué te ocurre Akutagawa? No sueles estar así

- Tengo un problema interno...

- ¿Qué ocurre?

- Me gusta un alfa.

- ¿Qué? Pero siempre quisiste trabajar duro y vivir feliz con un omega

- Si, no es por eso, escucho su voz y me vuela la cabeza, su mirada es tan seria y sexy y

- ¿de quién hablas?

- Un alfa de ultimo año

Poe suspiro – bien amigo, si te gusta, inténtalo

- ¿debería?

- Si no ¿Qué? La vida es un riesgo y si no te gusta, ya lo intentas ¿no? Sería una gran experiencia o el amor de tu vida 

- Tienes razón, pero no digas nada ¿sí?

- Ni tu de mi pequeño

- Secreto de amigos es sagrado

- De acuerdo.

Esa misma tarde, Akutagawa estaba decidido, tenia clase en la tarde con Dazai, espero a que la clase terminará. Se acerco al castaño – joven Akutagawa, ¿ocurre algo para que te quedaras a final de la clase?

- Dazai-san, usted es un alfa

- ¿en verdad? – pregunto burlón y comenzó a reír – no lo había notado, ¿lo sabrán los demás?

- Dazai-san, ¿quisiera salir a comer conmigo?

Dazai lo miro sorprendido y comenzó a reír – Akutagawa, estas registrado como un alfa ¿me equivoco?

- No, esta en lo correcto, quiero cenar con usted

- Bien, cenare contigo y después me dejaras en paz, esa mirada intensa tuya en clase también

- De acuerdo, pero si le gusta la cena conmigo, me dejará cortejarlo

Dazai se soltó a las risas – bien

Aquella noche fueron a cenar a un restaurante de sake y ramen, fue sencillo, Akutagawa le ponía total atención a cada palabra, Dazai solo se desahógame del abrumador trabajo escolar con el empresarial, lo duro que era el trabajo y lo fastidiado que estaba sin nada de cariño de su pareja. El estrés estaba matándolo, pero esa noche con copas encima y buena comida se dejo llevar.

Al final, quedo tan borracho que Akutagawa lo llevo a su departamento, le quito los zapatos y lo dejo descansar. Por la mañana, Dazai despertó asustado, miro al azabache cocinando - ¿y tu que haces? – cuestiono

- Buen día, anoche se emborracho muchísimo – menciono – ya casi está el desayuno

- ¿eh? – Dazai se levantó, fue a lavarse la cara y suspiro podía recordar todo, todo lo que hablo y se sintió avergonzado

Salió del baño viendo al azabache servir, se ruborizo ligeramente - ¿lo hiciste?

- Si, se cocinar

- Je, mi pareja hace mucho que no cocina

- ¿en verdad? ¿Por qué siguen juntos?

- Tenemos un hijo, un pequeño

- ¿en verdad? No lo imagino con hijos

- Si, bueno... Realmente no es mío, pero lo adoro como si viniera de mi

- Usted es muy tierno Dazai-san

Volvió a ruborizarse y comenzó a reír - ¿Qué sentido tienes tú pequeño Akutagawa?

- Solamente pensaba que, en la vida, lo tierno y sexy no se lleva, pero de encontrarlo, es el paraíso, usted es un paraíso

Ahora se soltó a las risas, - ¿Qué tipo de coqueteo es ese?

- Pero ¿funciona no?

- Probablemente, tenía mucho sin reír así

- Me alegra saber eso.

Tuvieron su segunda cita dos días después, un sábado en la noche, Akutagawa llevo a Dazai al bosque, allí disfrutaron del cielo estrellado, platicando más.

Para su tercera cita, simplemente fueron al cine, fue algo más tranquilo, y esta vez Dazai fue quien se intereso por el azabache, al ir a comer, Ryunosuke le conto sobre su familia. – ellos solo esperan que sea un gran alfa con un buen trabajo pero todo esto de trabajar me tiene estresado en grande, ser un chico grande y protector, yo lo entiendo pero también quisiera que alguien me proteja a mi

- Comprendo tu punto, es difícil ser el alfa pero no siempre piensan en eso, mi pequeño se esta educando de esa forma, siendo autosuficiente sin depender de un alfa

- ¿es un omega?

- Si, es un buen chico, un chico tierno y amable pero su papa está siendo rudo para sus relaciones, lo educa de tal forma de que no se deje por cualquier alfa que llegue.

- La verdad, me siento un poco incomodo de hablar de esto, pero te entiendo

- Si, lo entiendo, pero... me gusta poder hablar contigo. Mi pequeño es todo mi mundo, incluso si mi pareja me dejará, alejarme de mi pequeño sería mi mayor sufrimiento. Gracias por entenderlo

- Puedes decirme lo que quieras – menciono – entonces, ¿seguimos?

- Si, por supuesto

En aquella cita fue su primer beso, ninguno de los dos se emocionó, pero se sentían cómodos. Tres días después, Dazai tuvo que cancelar su clase por ir por su hijo, Akutagawa le molesto aquello pues iban a salir después, y después de eso, Dazai quiso reagendar su cita, pero el azabache tenía planes con sus amigos haciéndolos pelear.

Terminaron en el departamento de Akutagawa discutiendo y un pasional beso los llevo a más, no hubo mucho que planear, Dazai le emocionaban las peleas, así que Dazai tenia el dominio, tardaron un poco, pero sabían por donde ir, al final Akutagawa fue quien termino cubriendo la espalda del castaño con un par de rasguños, mientras el mayor limpiaba sus lágrimas.

Al finalizar, se quedaron acostados boca abajo y boca arriba - ¿estas bien? – pregunto Dazai

- Si, ¿y tú?

- Si, también.

- Lamento enojarme

- Si, yo también me puse como niño

Se miraron un momento y comenzaron a reír, después de eso, sus citas eran casi diarias, Dazai no le molesto tener el papel de aportador, Akutagawa también solía pagar, pero estaba cómodo con Dazai, lo mismo con Dazai quien estaba acostumbrado a un esposo quien era dominante, Akutagawa solía ceder rápido haciendo todo más rápido y relajante para ambos.

Llevaban siete meses, estaban descansando en la cama cuando Akutagawa por fin lo dijo – Dazai-san

- ¿sí?

- ¿Cuándo dejará a su esposo?

- ¿Qué?

- Si, cuando dejara a su esposo

- Bueno, Akutagawa, tu y yo todavía no avanzamos mucho

- ¿no?

- ¿tu cómo te sientes?

- No lo sé, me gusta pensar que hacemos algo prohibido

- Si, es más emocionante ¿no?

- creo que si – suspiro – bueno, haga lo que quiera

- comprendo...

Después de esa conversación, Akutagawa tuvo un enorme proyecto, se volvió muy popular y los omegas revoloteaban entre él, aunque eso no le intereso al azabache, el castaño se sentía frustrado, entonces, las peleas volvieron

- ¿Qué te cuesta dejar a tu esposo?

- ¿y tú? ¿Qué hay de ti lleno de omegas por todos lados?

- Ni siquiera les hago caso

- Y mi esposo a mí tampoco

- O sea que su esposo le hace caso ¿volverán?

- Pues sí, es mi esposo

- ¡es suficiente! Le dices o yo mismo le diré

Tuvieron aquella discusión un gran tiempo y se distanciaron, por algún motivo los problemas de Dazai con su esposo se fueron resolviendo mientras el castaño se ocultaba de Akutagawa, había comenzado a pasar tiempo en su casa y con ello se resolvieron varias cosas. Dazai tomo la decisión de dejar la escuela, pero antes de hacer el anuncio fue con el azabache a su hogar. Entro, conocía la contraseña

Akutagawa estaba en la sala estudiando - ¿Qué haces aquí? – cuestiono

- Akutagawa, tengo algo que decirte

- ¿ahora qué? ¿vienes a besarme para que no vaya con tu esposo?

- Algo mejor

- No quiero sexo de compasión, ya no quiero nada contigo si vas a seguir casado. 

- Una pasante

- ¿Qué? ¿pasantía?

- Si, es un gran laboratorio – menciono sentándose a su lado – se que he sido un aprovechado, lo nuestro fue emocionante pero acaso ¿nos gustamos?

- Esa ha sido mi duda todo este tiempo, mi amigo me convenció con la frase "si te gusta que bien y si no, lo habrás probado" aun no creo que esto sea amor, pero esto es molesto, no me gusta ser un amante. 

- Lo sé, pero – extendió los papeles – está pasantía es durante la duración de tus estudios, si lo pasas, te quedas con el trabajo, es bien pagado, seguro y te asegura un buen futuro, no tendrás que esforzarte tanto, el trabajo cubrirá tus estudios y solo son un par de clases a la semana

Para Akutagawa brillaron sus ojos, algo en el dejo su cuerpo relajarse y miro al castaño – Esto... es increíble, gracias Dazai-san

- Pero debes prometer algo

- ¿Qué ocurre?

- Busca el amor, y no le digas a mi esposo por favor

Akutagawa sonrió – no le diré a su esposo, y si no es usted, seguiré buscando un buen chico

- Trato

- Trato

Actualidad.



- Al día siguiente deje la escuela y no supe más de Akutagawa, me deslindé de la pasantía, y pues tampoco tenia el trabajo de la escuela. Comencé a pasar tiempo contigo, con Chuuya, y el tiempo paso – menciono – sinceramente ya no recordaba del todo a Akutagawa.

- Bien, entiendo...

- ¿lo entiendes?

- Si, lo entiendo – suspiro – pero no estoy listo para esto, para ver a Ryunosuke o a ti

- Es el pasado Atsushi, fue un desliz... tu novio, Ryunosuke es bueno

- Si, es bueno, pero no puedo con esto – suspiro – necesito que le digas a papi

- ¿Qué?

- Dile a papi

- No, Atsushi, no puedo hacer eso

- Y yo no puedo ver a mi novio sin pensar que lo cogiste – se quejó – dile a papi

Dazai suspiro – bien, pero debes hablar con Ryunosuke también tu

- No me des ordenes

- Atsushi

- ¡no me des ordenes! – grito, tomo sus cosas y se fue

Dazai volvió a suspirar profundo.


Atsushi conducía devuelta a casa, la música estruendosa, sus ojos llenos de lágrimas, todo era terrible, todo en su cuerpo temblaba, apenas y podía respirar. Atsushi llamo a su papi – Atsushi

- Papi

- Atsushi no te escucho ¿estas conduciendo?

- Si

- Atsushi, cálmate, estaciónate y bájale a la música

- Pero papi

- Atsushi ¿Dónde estás?

- Cerca de la playa

- Voy para allá.

Atsushi se estaciono, bajo del auto y se metió en la playa, no podía parar de llorar, estaba nervioso, su cuerpo temblaba, y fue allí donde se encontraron – Atsushi, oye Atsushi – le llamo el azabache

- Ryu ¿Qué haces aquí?

- Paseaba por el parque y vi tu camioneta, al asomarme te vi aquí en la playa, no te vez bien ¿necesitas ayuda?

- No, no estoy bien, papá no quiere decirle a papi, y tu... aah no sé que estoy haciendo

- Atsushi, ¿en verdad quieres decirle a tu papi Chuuya?

- Si

- Yo entiendo que es difícil, también estaba en shock cuando vi que era tu padre – menciono - ¿puedo sentarme?

- La playa es libre

Akutagawa se sentó a su lado, Atsushi volvió a llorar – eres un alfa ¿no? ¿Cómo te dejaste manipular?

- Atsushi, ¿te recuerdo algo?

- ¿Qué?

- Tu eres un chico defensor de los derechos, para ti vale más un corazón que si es omega o alfa ¿no es así?

- S-sí, pero...

- En ese momento no me importo que era, era un hombre guapo y atento – menciono

- Quiero... escuchar tu versión, por favor

- ¿seguro?

- Si

- Bien... apareció en mi ultima clase, su voz era perfecta calma en mi mente, cada día esperaba el final de mi clase, jamás le dije a nadie, pero Edgar mi amigo

- ¿el novio de Rampo?

- Si, le dije que me sentía atraído por alguien y el sin saber quien o que era, solo me dijo que debía arriesgarme sin arrepentirme, y la verdad, Dazai-san me hacia dejar pensar que son "un alfa" que debo mantener la familia, crear estatus, todo eso. Con el solo me relajaba y podía ser... un chico, un chico normal

- Si, entiendo...

- Ahora, me siento como un chico normal y capaz de manejar una empresa, una familia, pero también depender de mi pareja, eres un chico tan fuerte, soportando todo esto y queriendo arreglarlo y comprenderlo. Estoy totalmente consciente del hecho que jamás lograré compensar el dolor que estas sintiendo, pero si puedo hacerte sentir mejor, jamás tuve la intención de dañarte a ti o a tu papi, ni siquiera a tu padre.

Atsushi volvió a llorar, Akutagawa comenzó a acariciar su hombro, siguió llorando hasta que Chuuya llego, Atsushi se había quedado dormido sobre Akutagawa – Ryunosuke, que bueno que estabas por aquí

- Fue mejor que me llamarás para avisarme, lloro hasta dormirse

- Lo llevaré a casa ¿puedes llevar el auto de Atsushi?

- Si, lo veo en su casa

- Gracias...

Chuuya llevaba a Atsushi en su auto mientras Akutagawa conducía el de Atsushi, ¿Cómo llegó a la playa? Bien, estaba en casa de Edgar y este lo llevo. Dazai llego antes que ellos y al verlos solo trago saliva. – Dazai, llévalo a la habitación, estoy cansado

- Si, de acuerdo Chuuya

Dazai tomo a Atsushi, pero Ryunosuke los miro – creo que debería llevarlo yo, Atsushi... dijo que ustedes dos tenían algo que hablar, lo dejaré y volveré

- Ok, esto ya me tiene mal, quiero saber que está ocurriendo Osamu – pidió Chuuya

- Bueno... - trago saliva – vamos a sentarnos, esperamos a Ryunosuke

- De acuerdo.

Ryunosuke llevo a Atsushi a su habitación, acaricio su cabello peinándolo y sonrió – En verdad, te amo Atsushi... - menciono. Tomo su mano y apretó – te adoro demasiado – añadió limpio un par de lagrimas en sus ojos – resolveré mi gran enrollo.


Akutagawa bajo nuevamente a la sala totalmente nervioso, Chuuya y Osamu estaban sentados en ella, se acercó quedándose parado y con las manos delante – Siéntate Ryunosuke

- Prefiero quedarme así Chuuya-san

- Chuuya, lo que te contaré debes dejar que lo terminemos todo, y entonces, puedes hacer lo que quieras

- De acuerdo, es un trato, pero los pateare si es algo que lastima a Atsushi

- De acuerdo, eem – Dazai miro a Akutagawa

- Chuuya-san, Dazai-san le revelará quien fue su amante

Chuuya se quedo con ojos grandes, miro a Akutagawa sorprendido - ¿tu... tú sabes de eso?

- Si, Akutagawa lo conoció – dijo Dazai

- ¿po-por eso lo querías fuera? ¿por eso Atsushi esta sufriendo tanto? – Chuuya tapo su boca – ay por dios le dijeron de eso...

- Si, hablamos con él... - dijo Dazai – le dije quien fue mi amante y por qué, Atsushi lo sabe todo

- Aay por dios Osamu – se quejó Chuuya - ¿Cómo puedes hacer eso dos años después? Ya quedo en el pasado, te perdone y él no se había enterado

- Chuuya, debíamos hacerlo por que... mi amante, mi amante... 




...

¡Gracias por leer!

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