CAPITULO 46

CAPÍTULO 46

Escucho las campanas indicando que ya podemos pasar, por lo que la miro una última vez sonriendo.

— Hannah, ¿eres feliz? — pregunto mirándola a los ojos.

— Si Manfrid, soy muy feliz — me dice con una sonrisa.

Al escuchar eso solo asiento con la cabeza y empezamos a pasar hasta el altar, Hannah me eligió a mi para acompañarla hasta el altar donde le dejaría con Taemin, por lo que con mucho gusto acepte, no puedo negar que aun siento dolor, sin embargo, sé que es lo correcto para mí y también para ella.

— Tranquila — le susurro — Estas muy hermosa.

Al acercarnos veo como Taemin solo la mira a ella, e inmediatamente sus ojos se cristalizan para deslizarse unas lágrimas por sus mejillas. No necesito más pruebas para decir que él la ama demasiado.

Al estar frente al altar y antes de entregarle a Hannah en sus manos solamente puedo decir:

— Cuídala y hazla feliz — digo sonriendo para dejar la mano de Hannah y entregarla a Taemin.

Camino de regreso, sintiendo a la vez un gran alivio, felicidad, dolor, pero me digo a mí mismo que está bien, que es necesario hacer esto debido a que debo iniciar de nuevo, enfocarme en mi y tal vez podré encontrar a una chica indicada para mí, el cual la voy a amar mucho más que a mi vida.

Simplemente el destino no quiso vernos juntos y solo seremos amigos.  

Al salir completamente necesito refrescar mi mente para luego volver a la ceremonia, por lo que me siento en la vereda de una calle solitaria muy profundo en mis pensamientos.

— Tú también debes ser feliz, algún día sé que me presentaras a la chica indicada — me dice con una sonrisa mientras la estaban maquillando.

— Algún día — susurro para mí mismo.

No sabía que el amor dolía así, durante estos largos meses me he puesto a reflexionar sobre el amor, a veces puedes pensar que una persona es tu destinado, que tarde o temprano se van a encontrar y la vida los unirá.

Pero a veces creemos que la persona que hemos conocidos, que es amable con nosotros que nos apoyó y está presente en los momentos que más la necesitas, solamente piensas que ella es el amor de tu vida y te vas enamorando poco a poco, primero te ilusionas pensando que algún día serás su novio, porque incluso mismo tu cuerpo puede creer que es amor, sintiendo gran nerviosismo cuando la vez, pero el corazón no miente, muy en el fondo podemos saber si es amor o solamente nos aferramos a un amor que no puede ser.

Y eso es lo que me paso, me aferre a la idea de que debo estar con ella, pero ella no me miraba como yo lo hacía, en sus ojos solo trasmitían amistad, pero en los míos el amor. No puedo negar que me ha costado aceptar la realidad, pero es necesario, no puedo seguir aferrándome a ella, por lo que la he dejado ir poco a poco.

Como Amy me decía, de ahora en adelante la vere como una hermana, ella es una persona especial para mí, así que ya no me duele como antes, solo es un dolor que va pasando poco a poco, por lo que al sentirme mucho mejor solo sonrío.

Es momento de dejar ir este amor... 

Al ingresar nuevamente a la boda y esta vez muy relajado y bien conmigo mismo solamente puedo contemplar a la hermosa pareja que están en el altar.

— Mi querida Hannah, desde el momento en que te conocí, supe que eras la persona con la que quería pasar el resto de mi vida. Eres mi mejor amiga, mi vitamina, mi chica de mejillas rojas, y sobre todo eres el amor de mi vida. Prometo que siempre te amaré y cuidaré, en los buenos y en los malos momentos, en la enfermedad y en la salud. Prometo que seré tu mayor apoyo y tu mejor compañero. Hasta que la muerte nos separe, te amo — dice Taemin y me siento tranquilo al escuchar eso.  

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