CAPÍTULO 41

Ingreso a la casa de mi padre, puedo ver que la mesa está muy bien decorada, después de pensarlo mucho estoy aquí, hace dos días hable con Hannah y de la cena que tendría el domingo, por lo que es necesario estar aquí, es momento de descubrir quién es esa mujer que siempre esta con una sonrisa y aparenta ser una buena persona.

— Llegaste, ¡sabía que vendría! — dice Emma caminando hacia mi dirección para darme un abrazo.

— Es bueno verte de nuevo Taemin — escucho la voz muy aguda de Fátima.

Me separo del abrazo de Emma para encontrarla frente a frente, han pasado muchos años madrasta, años en lo que desde un inicio me advirtieron de ti, pero hice caso omiso a ello porque quería dejar el pasado, sin embargo, ahora que mi pasado está más claro, no puedo ver qué clase de persona sin sentimientos eres, una persona que arruina la felicidad y que ahora no merece ser feliz por todo el daño que ha cometido.

— Es un gusto volver a esta casa — digo mirándola a los ojos.

No puedo mentir, una pizca de miedo invade mi cuerpo, pero cada vez que pienso en Hannah y cada gota de lágrima que derramaba mientras me contaba la verdad, siento tanta furia, además, también fuiste la responsable de la muerte de mi madre y nunca te hiciste responsable del dolor que me has causado debido a la pérdida de un ser querido, alguien que tanto apreciaba, así como la muerte de la abuelita de Hannah.

Es un horror que en el mundo existan este tipo de personas, el cual nos hacen daño y solo actúan en beneficio propio sin importarles las demás personas.

— Bueno, ahora que has llegado hijo, tomemos asiento — menciona mi padre detrás de Fátima.

 Tampoco tu fuiste capaz de descubrir la verdadera mujer que tienes a tu lado padre, simplemente te segaste por la belleza, pero nunca viste lo que hay en ese corazón tan sucio y podrido, no puedo defenderte, porque fuiste tu quien decidió creer a esa mujer y no a mi madre, además tú sabias que esas fotos eran editadas, entonces por que causaste tanto daño a mi madre, ella era inocente. 

Me invade la rabia por todo mi cuerpo, sin embargo, sé que debo controlarme, aun no es el momento, debo de esperar y procesar cada palabra que puedo decir.

Mientras disfrutan de la deliciosa comida que está en la mesa, siento una mirada penetrante en mí, por lo que miro rápidamente hacia el costado de mi padre quien está al frente mío, para verla de nuevo, esos ojos tan negros profundos sin ningún brillo, cuanta maldad reflejan. 

— ¿Cómo te está yendo con la compañía querido Taemin? — dice Fátima — Tu padre confía mucho en ti por eso dejo la compañía a tus manos, espero — se detiene al hablar — que no estés teniendo ninguna distracción — me mira y toma un vaso de vino.

— Claro que no Tía Fátima, Taemin se está esforzando mucho — interrumpe Emma al hablar.

— Me alegro escuchar eso querido hijo — me sonríe mi padre.

— Y si tuviera alguna distracción, eso no le incumbe a usted señora, después de todo, como lo mencionó — tomo un sorbo de vino para después hablar — la compañía está en mis manos y no en las suyas.

Después de una charla no muy cómoda, decido irme de la mesa para sentarme en uno de los muebles de la sala, al esperar unos minutos mi padre ingresa para sentarse a mi lado.

— Hijo, han pasado muchos años, es momento de que le hables con respeto a mi comprometida — dice poniendo una de sus manos en mi espalada.

— Lo sé, pero tampoco voy a permitir que tu comprometida irrumpa en mis planes ni en mi vida padre — le digo mirándole a los ojos — quizás en la tuya si se interpuso, pero en la mía no lo hará.

— Taemin por favor — quita su mano de mi espalda — Fátima nunca se interpuso en mi camino, simplemente ella me abrió los ojos.  

— Padre, no puedo creer que hayan pasado los años y tu sigas segado — susurro.

— ¡He escuchado suficiente Taemin! — se pone de pie.

— También yo padre, ya escuché suficiente.

— Fátima ahora es la única persona quien yo amo.

Solamente puedo reír, este hombre simplemente esta segado por lo que el asimila lo que es amor, pero realmente sabe el concepto.

— ¿Única? — pregunto para ponerme de pie y mirarlo — ¿Entonces tampoco me amas a mí?, además, ¿me estás diciendo de que nunca amaste a mi madre tal como te amo ella a ti?

— ¡No hables de ella cuando esta mi comprometida en esta casa! — sentencia.

— ¡Pues lo hare!, ¿acaso no te acuerdas de que siempre a pesar de cada golpe que le dabas te decía que te amaba?, pero tu simplemente no le creíste porque eres un hombre que no conoce lo que es el amor.

— ¡Es suficiente Taemin! — siento un golpe en mi mejilla.

Han pasado más de cinco años en que siento nuevamente el golpe de mi padre, él no ha cambiado absolutamente nada, sigue siendo el mismo hombre agresivo, jamás creí que a esta edad el me seguiría pegando, pero ya lo he soportado tanto que estoy tan indignado, o miro nuevamente y puedo ver en sus ojos tanto arrepentimiento.

— Es una pena padre que te reúses a ver la verdad, ya no soy el mismo niño que antes donde me podías pegar — mis ojos solo pueden trasmitir ira — Eso fue en el pasado.

— Taemin — ingresa Emma — Taemin por favor tranquilízate, esta cena no es para estar peleando — toma de mis brazos.

— Lo se Emma, es una cena fantástica — menciono para sentarme nuevamente — Padre, podrías por favor moverte, necesito ver la televisión — informo.

Luego de unas cuantas horas, y escuchar unas disculpas de su parte fue a acostarse a dormir, al igual que Fátima y Emma, por lo que me quedé solo en la sala, fui a traer la botella de vino que había en la mesa para despejar mi mente y olvidar simplemente por unos segundos lo que acaba de pasar, aun siento un dolor leve en mi mejilla, no me imagino lo que mi madre pudo haber sentido.

Grave error pensar en ella justo teniendo una botella de vino, por lo que solo tomo unas cuantas copas, ya que pensé nuevamente en mi chica especial, ella es la que me da fuerzas para seguir continuando con esta vida, por lo que dejo de tomar y estoy dispuesto a irme a dormir hoy aquí estoy seguro de que me despertare temprano para salir de esta casa. 

Reviso mi celular y me percato de la hora, ya es la media noche, tan rápido pasó el tiempo, subo las escaleras, para encontrarme en el segundo piso e irme a mi habitación.

— ¿Verdad? — escucho una voz a unos pasos de mi hasta que parece enfrente mío — ¿Qué te reúses a ver la verdad? — cuestiona nuevamente esa mujer — ¿de qué verdad hablas Taemin? — me mira con esos ojos tan negros.

— Eso a ti no te debería importar — digo para seguir mi camino, pero su mano en mi brazo me lo impide.

— ¿Qué sabes tu Taemin? — dice — ¿acaso insinúas que yo estoy segando a tu padre? 

— Eso deberías respondértelo tu misma, o ¿debería decírtelo yo? — me safo de su agarre para verla a la cara.

— Oh Taemin — se ríe en mi cara — nunca debiste meterte en cosas que a ti no te importa — me restriega en la cara.

— Claro que me importa, y me importa mucho más cuando son de las personas especiales para mí.

— ¿Tu madre y Hannah? — dice riéndose y yo asiento — yo no tuve nada que ver en eso — menciona.

— Si claro, como tu digas, pero yo lo sé todo — me acerco a ella generando que ella tenga miedo — absolutamente todo y no me quedare callado, eso tenlo por seguro — observo sus ojos con sorpresa.

— Así es, después de todo sabía que este momento vendría, pero nunca pensé que sería tan rápido — sonríe nuevamente — eras un niño muy curioso — me dice así que no soporto más esta conversación por lo que me dirijo a mi habitación.

— ¡Así es yo estuve ahí! — sus palabras hicieron que me detenga — es más, yo fui quien arrollo a tu madre — me doy la vuelta al escuchar eso, pero veo en su rostro ni un poco de arrepentimiento.

— ¿Estas feliz? — digo caminado nuevamente hacia ella.

— Pues diría satisfecha, tu madre era insoportable para mí.

— Simplemente no pudiste creer que ella era mejor que tú en todos los aspectos — digo enojado.

— Por eso lo hice, no la soportaba.

— ¿Y Hannah? — pregunto.

— Esa niña — se ríe — es una llorona yo le advertí después de todo y ella no me hizo caso por eso su abuelita ya no está con ella — aprieto mis puños con furor, pero necesito saber algo más.

— El celular, los correros, ese correo que enviaste, todo fue planeado por ti, quisiste que me interesa en Emma, en tu sobrina, pero eso fracaso incluso en el extranjero, entiende que mi corazón ya tiene dueño — sentencio — quiste que atuviera con ella porque eso te beneficiaria especialmente a ti.

— Estas jugando con fuego Taemin — se acerca poco a poco a mí y yo retrocedo — y te vas a quemar, sabes mucho así que, no me dejas otra alternativa — miro sus ojos y con ello una sonrisa.

Estoy confundido por sus facciones, no sé lo que trama ahora, por lo que no quiero seguir hablando con ella ni siquiera mirarla, quiero dar un paso para retirarme pero inmediatamente me empuja con sus dos brazos en mi pecho haciendo que pierda el equilibrio, no me había percatado que estaba justo en las escaleras, por lo que seguidamente siendo dolor en todo mi cuerpo al estar rodando hasta que llega un punto en donde siento un golpe contra el piso directamente en mi cabeza y voy cerrando los ojos poco a poco.