Holi!!! Sígueme en Facebook: Wolfmika01

:D

******

Miraba su móvil cada tanto, hacía tres horas que había regresado a casa y no había señal alguna de Lance o de Erika, pero sí de Purral, el purreko tal parecía se había echado una larga siesta en el sofá hasta que su sueño fue interrumpido por la llegada de Mathieu; miraron el televisor un rato, después el busco algo que comer, por primera vez desde que Erika se dio a la tarea de cocinar no había nada de su comida salada o incomible, las pizzas estaban bien rara la vez, pero comerlas era diferente y perdían su encanto.

Por un instante se le ocurrió que podría jugar con Purral y la lámpara de su móvil, pero no era un gato totalmente y realmente aun quería vivir y no sufrir la furia de los purrekos.

La puerta comenzó a abrirse, Mathieu miro hasta que la puerta se abrió por completo, estaba un poco molesto, no solo por tener hambre, sino porque él se mataba trabajando para que ellos salieran y regresaran hasta tarde, por un segundo pensó que ahora era él quien parecía un padre apunto de sermonear a sus hijos, pero, cuando los vio entrar su rostro molesto paso a ser uno de desconcierto. Lance tenia a Erika cargando en su espalda, mientras ella le rodeaba por el cuello sosteniendo unas bolsas.

-Parece que se la pasaron bien. - dijo Purral llamando la atención de los tres. - ¿Fueron a un lugar divertido?

-Un festival chino. - respondió Lance.

- ¡Se fueron a un festival! - Mathieu estaba sorprendido y enfadado. - Se van a un festival mientras yo trabajo.

-Trajimos comida. – se defendió Erika extendiendo la bolsa, Mathieu la tomo rápidamente dejando que los aromas le hicieran olvidar la molestia. - y ¿Qué paso, porque cargas a Erika?

- Se lastimo. - ciertamente no estaba mintiendo, tras besarse ambos regresaron al festival, por mala suerte para la chica al tratar de hacerse a un lado y dejar el paso para los dragones que danzaban, su pie se había atorado con unos lazos provocándole una caída que le lastimo el tobillo.

Con cuidado la dejo sobre el suelo para que pudiera acomodarse en el sofá.

-Prr Lance, respecto a tu pedido, me temo que no puedo traerlos los materiales para la manutención de la pierna del chico.- Mathieu miro al purreko dejado de masticar la pasta que se había llevado a la boca, Lance por su parte solo le quedo mirando esperando una explicación.- No es algo que puedas hacer en la tierra, los elementos mágicos serian absorbidos por la naturaleza, pero no se preocupen, los purrekos no los dejaremos solos.

-La última vez que dijiste eso nos robaste todo lo que teníamos. - dijo Erika, Purral le bufo con enfado.

-No robe, solo tome un pago equivalente, fuimos generosos en donar la mitad por insistencia de la guardia. En fin, tendré que llevarme la prótesis para que en Eldarya reciba su mantenimiento.

-¿Qué hare yo entonces?- protesto el chico.- No puedo quedarme aquí sin hacer nada, sin mi trabajo y horas extras nos botaran de aquí ¿La guardia nos pagara el alquiler?

-No, no se puede, descuida muchacho no te dejaremos postrado todo el día en una silla, mañana recibirás un reemplazo. - Mathieu parecía más tranquilo regresando a comer. - por ahora sería mejor si me das la prótesis y escuchas las noticias que he traído del C.G.

Tanto Erika como Lance habían olvidado ese detalle, habían pasado tan buena tarde que ese asunto parecía haber ocurrido hace tanto, el dragón ayudo a Mathieu a quitarse la prótesis, por un segundo se habían preguntado cómo haría el purreko con esa forma para llevársela; la respuesta fue rápida a su interrogante silenciosa, con la ventana abierta el salto desapareciendo en un parpadeo.

- ¿Cuáles son las noticas? – pregunto, Lance soltó un pesado suspiro, si bien hacia poco ambos habían hablado de Koori, no sabía si hablar de eso frente a Erika sería lo mejor, él no era del tipo de persona que anduviera divulgando los problemas o sentimientos de los demás, además también estaba la situación actual de ellos, darse una oportunidad para que los sentimientos de ambos fueran totalmente correspondidos.

-Koori.- dijo Lance, Mathieu casi se ahogaba con la comida, Koori ¿Qué pasaba con ella? Por el oráculo, esperaba que nada malo. - Koori tuvo una lectura donde presagiaba desgracia para nosotros.

-¿Qué tipo de desgracia?

-No lo sabemos Mathieu, pero es lo que Huang Hua quiso advertirnos lo antes posible por eso Purral vino a darnos el mensaje, tenemos que andar con mucho cuidado, no sabemos para quien fue la advertencia, mucho menos que tipo de desgracia seria. – dijo Erika.

-Bueno...-el que Mathieu pasara la mano por su cabello ya era una costumbre tanto que si no lo hacía no podrían reconocerlo. - puede ser que la desgracia ya pasara. - ambos le miraron sorprendidos por esas palabras.

-Podrías ser más específico. - pidió Lance.

-Bueno, Erika se lastimo, yo llegue tarde con tres pedidos y me los van a descontar. – Erika sonrió por eso, el humor de Mathieu siempre podía aligerar el peso de las cosas.

-No sabemos a qué desgracia tendremos que enfrentarnos, pero solo debemos recordar que a partir de ahora teneos que andarnos con mucho más cuidado que antes. - Erika se levantó del sofá para colocarse a un lado de Lance colocando una mano sobre su brazo.

-Mathieu, cambiando de tema, tenemos algo que decirte. - Lance miro a la Aengel, sería que le diría sobre ellos. - Lance tendrá un trabajo temporal. - tal vez no.

- ¿Trabajar? Pensé que no querías que se arriesgara por su ignorancia a este mundo. - Lance se cruzó de brazos mirando a la chica quien soltó una pequeña risa nerviosa.

-Aprendió bastante rápido, incluso ya hace las compras solo desde hace tres semanas, pero, aun no es un hecho se propondrá en la junta vecinal.

- ¿Trabajo de qué exactamente?

- Maestro de defensa personal para los niños, el otro día enseñe a una niña a defenderse y su madre lo propuso de inmediato, si la idea es aceptada pronto poder ayudar un poco más. - el chico levanto los hombros, bueno al menos ya no cargaría solo con los gastos por un tiempo.

Erika fue a su habitación ya era tarde y habían tenido una noche llena de emociones, la sensación de los labios de Lance sobre los suyos le hizo sonreír mientras recordaba el momento con una sonrisa.

La mañana siguiente fue diferente para ellos, nuevamente habían recibido un paquete por parte de los purrekos, era una caja grande rectangular, lo primero que pensaron era en la prótesis de Mathieu. Lejos de estar equivocados cuando abrieron el paquete definitivamente si era el reemplazo de la prótesis, pero no lo que se esperaba, si era un reemplazo muy simple...humano.

-¿De verdad?- pregunto mirando aquella cosa, estaba tan acostumbrado a la anterior que no la sentía como una prótesis, sino como si nunca hubiera perdido la extremidad, pero con lo que Purral le mandaba no podría siquiera moverse a como estaba acostumbrado.

-Tendrás que usarla Mathieu, es solo un reemplazo hasta que Purral mande la que tenías antes. - el chico resoplo inconforme, mientras comenzaba a ponerse aquello, al ponerse de píe e intentar dar unos cuantos pasos se tambaleaba, el equilibrio no era el mismo más logro dominarlo poco a poco.

Lance le ayudo a a bajar las escaleras para evitar un futuro accidente y que fuera él a quien la desgracia llamaba, pocas eran las posibilidades de que Mathieu rodara por las escaleras y se rompiera el cuello, tal vez solo se lastimaría las costillas, nada grave.

Tal y como había dicho la madre de la niña proponer la idea de que sus hijos recibieran clases de defensa personal por las vacaciones había sido aprobada por todas, Lance miraba desde el segundo piso, algunas de las mujeres lo miraban de tanto en tanto murmurando cosas, se habría sentido incomodo de no ser a que ya estaba acostumbrado a ese tipo de reacciones por parte de las mujeres de la Tierra. Erika por su parte se sentía un poco incomoda ante el hecho de que hablaran de su "esposo" al final los pequeños comenzarían al día siguiente con su nueva actividad de verano.

***~~~***~~~

Aquella sensación de miedo ante algo superior lo embargaba, aquella energía era difícil de ignorar, la fuerza de un dragón para los humanos era simple de ignorar, los más receptivos lo llábana la sensación de peligro inminente. Los Dragones, Brujas, Elfos, todo aquello relacionado a la magia no era más que simples cuentos o leyendas, si supieran que tan equivocados estaban; había visto en las noticias el hecho de que un fanático de los paisajes había tomado la foto de un dragón junto con sus crías caer en alguna parte de un bosque, no había más que una fotografía que lo mostraba, aunque fuera de lejos, él sabía que era real y de cierta forma reconocía a la criatura, pero no a las crías.

La rabia que abrazaba todo su ser le hizo despertar todos aquellos instintos de venganza, si era quien pensaba y no estaba equivocado, tenía una gran ventaja sobre aquel dragón bastardo, aquel que lo obligo a huir de su mundo y rebajarse a la vida humana, adaptarse a ellos y ser privado del uso de su magia ¿Podía existir mayor humillación que esa? Tomando un puñal sobre la pequeña y desgastada mesa de madera lo arrojo contra el recorte de diario que había pegado en un tiro al blanco dando justamente donde se encontraba la imagen del dragón, primero se ocuparía de él y después se ocuparía de esas crías.

-Hierva mala nunca muere, pero sí que se reproduce rápido.

***~~~***~~~

Una semana, había pasado una semana desde que Lance comenzó a dar clases de defensa personal usando de vez en cuando a Erika para enseñar ciertos movimientos básicos de defensa, el que parecía ser más funcional y divertido para los niños era cuando tenían que cruzar las piernas alrededor de la otra personas y sus brazos en la otra pierna para evitar que el agresor pudiera llevárselos, Erika había visto a niños en el refugio entrenar de la misma forma, solo que ellos usaban la técnica para derribar a su oponente. También Lance había desarrollado una técnica en la cual jugando con los pequeños en el patio les enseñaba a defenderse.

Realmente ese dragón sabio tratar con niños. Al principio solo era la Aengel quien miraba desde el segundo piso o a veces sentada en las escaleras, con forme pasaron los dos primeros días, las madres comenzaban a ver fuera de sus respectivos hogares, inclusive la rubia de la otra ocasión, ninguna decía nada y cuando Erika les miraba se excusaban torpemente diciendo que solo querían ver que sus hijos estuvieran bien. Para cuando las cuatro horas habían terminado los niños comenzaron a alegar, definitivamente Lance simpatizo mucho con los niños en poco tiempo.

-Regresen a casa nos veremos mañana. - Erika comenzó a bajar las escaleras lentamente con una botella en las manos, los niños se dispersaron por el lugar, algunos subiendo por las escaleras contrarias y otros saliendo del edificio.

-Sabes no me sorprendería que algunas de la nada dijeran que son madres solteras. - Lance sonrió de medio lado aceptando la botella de agua.

-Tampoco te sorprendería que me pidieran ayuda para subir las secadoras. - la chica en respuesta le golpeo ligeramente en el hombro.

-Tampoco me sorprendería que fueras el causante de la mayoría de divorcios en menos de siete meses.

-Tampoco es necesario me vigiles mientras hago este trabajo. - aquel pequeño juego entre ambos era entretenido, las miradas de las demás mujeres no eran para nada discretas, Erika no necesitaba siquiera levantar la mirada para descubrir a las señoras murmurando entre ellas la suerte que la Aengel tenía por tener un "esposo" como Lance.

Por su parte Lance tenía un oído demasiado fino, no tanto como el de Nevra pero si lo suficiente para escuchar los murmullos, estaba acostumbrado sí, pero no a que hablaran de esa forma sin motivo alguno, una idea cruzo por la mente del dragón, si ellas querían un motivo para cuchichear hasta tarde se los daría. Tomando a Erika desprevenida, Lance la atrapo con un brazo por la cintura para acercarla a él y besarla; su acción no solo había provocado la sorpresa que esperaba en Erika, sino que también los cuchicheos habían aumentado, incluso ya no eran nada discretos, el pequeño grito entre celos y sorpresa no se hizo esperar por parte de ellas.

Erika correspondió el beso antes de separarse lentamente de él con las mejillas sonrojadas.

-Tal vez no si sea el responsable de separaciones. - dijo. - pero si seré responsable de que te ocurra un accidente por culpa de mujeres viudas en circunstancias sospechosas y quedar viudo y disponible. - ¿Aquello era una broma? Erika simplemente soltó una pequeña risa negando con la cabeza.

-Estas disponible, pero ellas no lo saben, y para quedar viudo, primero tendrías que estar casado realmente. - dijo Erika recalcando aquello último.

-Puede entonces que me lo plantee seriamente contigo.

Esas palabras hicieron que Erika se enderezara completamente, la sonrisa en sus labios había desaparecido para mirarlo totalmente incrédula, aquello...aquello ¿Era algún tipo de propuesta? Si bien ella le confeso comenzar a sentir algo por él, él ahora decía que quería casarse o algo parecido con ella. Lance subió las escaleras dejándola ahí parada con miles de preguntas en la mente, disfrutaba de verla en ese estado de confusión, un poco avergonzado también se preguntaba por qué dijo aquello, si bien lo dijo sin pensar, siempre era honesto en cada una de sus palabras, hasta ahora no le había mentido a Erika para nada; lo que había dicho era una proposición, si, y si se lo pensaba con esa chica a la que había puesto en peligro más de una vez en el pasado.

- ¿Hablas enserio? – la pregunta a sus espaldas lo sorprendió, estaba tan metido en sus pensamientos que no escucho llegar a Erika. - No me gustan ese tipo de bromas Lance.

-Lo siento, pero no es una broma, ante que digas algo déjame hablar. - Pidió, la chica asintió cruzando los brazos bajos su pecho esperando que él siguiera con lo que tenía que decirle. – Me pediste tiempo para aceptar tus sentimientos y a la vez yo correspondiera, que ambos estuviéramos seguros de lo que sentíamos el uno por el otro. Tal vez me estoy precipitando, pero... si soy honesto, si tuviera que compartir el resto de mi vida con alguien, tal vez sería contigo.

- ¿Seria? ¿No estas totalmente seguro?

-La pregunta correcta seria ¿Tu estas totalmente segura de lo que sientes? – negó, sus sentimientos eran confusos, lo quería, pero ¿De qué manera lo hacía? Fingir ser un matrimonio era una cosa, besarse y tomarse de la mano no los hacia oficialmente una pareja.

Erika acorto la distancia entre ambos por la diferencia de alturas ella se colocó de puntitas para rodear el cuello de Lance con sus brazos y tomar posesión de sus labios con los propios, le gustaba él, le gustaba besarlo, le gustaba que cualquiera de los dos tomara la iniciativa y el otro no dudara en corresponder. Pero, él tenía razón ella no estaba del todo segura y decir que lo amaba era demasiado pronto.

-Solo hazme un favor, no me atormentes con esa clase de preguntas, no quiero dudar. - antes de que él pudiera siquiera responder alguien llamo a la puerta, seguro era alguna de las vecinas... como las odiaba.

***~~~***~~~

Mathieu pateaba uno de los muros tras el local, no le gustaba esa prótesis, era incomoda, se sentía más un robot que una persona, incluso los robots eran más interesantes, si su pierna falsa tuviera un compartimiento para guardar un puñal, o fuera mecánicamente perfeccionada como en las películas con GPS, armas, y todo tipo de utensilios practicó no se quejaría, más aquello era demasiado pedir, piernas que se transformaban en motores que hacían a su usuario volar solo era algo que podía existir en las películas de acción. Soltando un cansado suspiro se giró para regresar y con suerte lo mandaran a una entrega, más al girarse dio un gran salto producto de la sorpresa evitando gritar también por aquello.

- ¡Hola Mathieu!

-S-suzette.- la chica de ondulado cabello marrón y ojos azules sonrío ampliamente cuando Mathieu dijo su nombre, la chica tomo uno de los mechones de su cabello comenzando a enredarlo en uno de sus dedos.

- ¿Qué haces aquí? – pregunto. - pensé que habías salido a algún pedido y me puse un poco triste, no te vi partir.

-Tomaba un pequeño descanso. - respondió de una forma ligeramente seca. - ahora mismo iba a ver si me necesitaban.

-La verdad es que hoy es un día muy tranquilo, la jefa se plantea el hecho de cerrar temprano hoy. – Salir temprano, la idea le agradaba realmente, pero sabía que había algo más y la forma en que la chica jugaba con su mechón de cabello y mal intento de coqueteo la delataban. – me preguntaba si ¿Quieres salir conmigo?

-Lo siento. – respondió sin dudar de una manera amable. – pero no puedo tengo asuntos que atender en casa.

-Pero...-la chica hizo un puchero. – ayer dijiste que tu hermana se había enfermado, dos días antes que habían tenido un fallo eléctrico, y la semana pasada que su nevera había explotado ¡Siempre pones excusas! – Mathieu rodo los ojos, Suzette actuaba como una novia celosa y las indirectas de que no quería salir con ella parecían no funcionar en lo absoluto. - nunca quieres salir conmigo ¡¿Eres Gay?!

- ¡¿Qué?!- su exclamación le hizo retroceder con espanto, por qué demonios la chica pensaba eso. - ¡¿Por qué?!

- Porque habría otro motivo, cualquiera de aquí no dudaría en salir con la hija de la dueña, y tú sí. – claramente, si entendía las indirectas, el que pensara que era Gay era casi cómico, de no ser que por poco le produce un paro cardiaco. – eres gay, solo dilo.

-No soy gay, Suzette, no he mentido. - bueno sí le había mentido para no aceptarle ninguna salida entre ellos. – es verdad que tenemos problemas en casa, pero esta vez juro que no puedo salir tenemos un evento importante.

-¿Qué evento?

-Es familiar.

-¡MATHIEU ES GAY!- grito, el chico se sonrojo enteramente de vergüenza y molestia tapándole la boca rápidamente.

-Maldita sea Suzette, NO SOY GAY... - tenía que pensar en una excusa rápida y buena para librarse de la locha chica, la excusa de la nevera no le serviría otra vez, tal vez podría fingir una futura separación entre Erika y Lance, no, en todo caso él no tendría nada que ver en eso, una fiesta, si, podría ser. – ayudare a mi hermana a organizar una cena.

-Cena ¿Para qué? – verdaderamente parecía una novia celosa y lo pero... ¡Ni siquiera era su novia!

-Cena para, es algo de familia. – la morena parecía a punto de volver a gritar. – ¡Aniversario de bodas! –exclamo, lo primero que había pensado era en una cena para un bebé ficticio, pero Erika pudo haberlo matado por eso. - sí, voy a ayudarle a organizar eso y por eso estaré ocupado los próximos cuatro días y la noche de la cena estaremos todos

-Un aniversario solo se celebra en pareja ¿Por qué vas como mal tercio?

-P-por qué... porque vivo con ellos. - ella levanto una ceja. – y por mí es que se conocieron, se casaron y me dan alojo, además valdrá la pena para no comer la comida incomible que prepara mi hermana.

Los ojos azules de Suzette se iluminaron mientras cruzaba sus manos en forma de rezo, Mathieu pensaba que por el hecho de mencionar la mala comida de su "hermana" imagino por un segundo que la chica lo dejaría tranquilo y para mañana lo sorprendería con una comida sorpresa, era mejor que comer pizza a diario, ya comenzaba a aburrirlo.

-¡Puede ser una cita doble! – exclamo, la leve esperanza de una comida decente desapareció.- ¡Puedo hacer las reservaciones, será un lugar elegante y romántico! ¡SI! Ya puedo imaginarlo tu y...los cuatro en el mejor lugar de todos.

-Suzette Suzette tranquila, no es una cita, es una ammm

-Deja de ser algo intimo para una pareja cuando el hermano acude con ellos a la cena de aniversario.- le interrumpió, tenía un buen punto.- ¡Ya se! Será en el mismo lugar donde mi padre llevo a mi madre en su cumpleaños, será en cuatro días aun puedo hacer la reservación. - sin dejar siquiera que Mathieu dijera nada la chica desapareció corriendo.

No solo estaba a punto de acudir a una cita a la que no quería, sino que estaba metiendo en aprietos a sus amigos.

-Erika y Lance van a matarme...

***~~~***~~~

Koori luchaba contra Karenn tratando de quitarle la hermosa tiara plateada con cristales azules, la vampiresa no había podido contenerse ante semejante joya, la tiara no era de plata, y los cristales no eran de zafiro puo, pero eso no quitaba que fuera hermosa.

-¡Karenn, ya démelo!- exclamo la kitsune corriendo tras de ella.

-Bien solo déjame ver que tal me queda, préstamela unos días quiero decirle a Purriry que me haga una idéntica, pero a mi gusto.

-Dile a Purral y que le diga a Erika que te compre una, esta me la mando a mi. - logrando recuperar su tiara, la kitsune comenzó a limpiarla algo que hizo que Karenn se cruzara de brazos ofendida por eso.

-Conozco a Erika de mucho más tiempo que tú y a ti que apenas conoce le manda un regalo de la tierra. – ciertamente si estaba muy molesta por eso, se suponía ambas eran amigas de antaño.

-Pues no lo sé Karenn.- internamente ella tampoco creía que ese regalo era de Erika, cuando Purral apareció frente a ella con la tiara dijo que era Erika quien la mandaba solo para ella, el problema era que el aroma impregnado no era el de ella sino de Mathieu.

Colocándose frente a un espejo se colocó la tiara dejando que la piedra más grande quedara en medio de su frente, era realmente una joya hermosa, aunque fuera una imitación. Rápidamente sacudió la cabeza quitándose la tiara para extenderla a la vampiresa para que se la probara, Mathieu, porque tenía que pensar en él justamente y más que él le mandara un regalo tan hermoso.

-Tienes razón le mandare una carta a Erika con Purral, voy a reclamarle y que me traiga muchas de estas en colores para combinar, los humanos tienen cosas lindas rara vez.

-S-si...Karenn, si tuvieras que elegir quien de los tres debe de regresar ¿A quién elegirías? - la pregunta descoloco a Karenn dejando la tiara sobre le pequeño tocador de madera blanca, elegir a uno para regresar a Eldarya, no era algo que se hubiera planteado.

-No lo sé, los tres son amigos nuestros. - explico.

-Lance es un jefe de guardia. - comenzó Koori. – Erika la salvadora de Eldarya y Mathieu, es solo un humano, si lo piensas mejor, dos de tres son importantes.

-¿Quieres decir que Mathieu no te importa?

-Para nada, quiero que los tres regresen, pero... Huang Chu me había hecho esa pregunta y realmente no supe que responder. - Karenn soltó un pesado suspiro sentándose junto a ella en la cama.

-Confieso que jamás nos habíamos enfrentado a algo como esto, perder a tres de los nuestros en una misión por culpa de un portal que aparece de la nada, sé qué hace siete años muchos que estaban de lado de Lance durante la guerra fueron exiliados a la tierra, Purral dice que los seres mágicos pierden todo su poder conforme pasa el tiempo. Seguramente es lo que Huang Chu quiso entender Lance es un ser mágico puro no tiene sangre humana.

-Si, tal vez a eso se refería.

Koori resoplo, era verdad, la Tierra y Eldarya eran mundos diferentes, Erika y Mathieu estarían bien, pero Lance era otra cosa, tal vez a eso se referia Huang Chu, aun así, ella no podía estar tranquila, también necesitaba a Mathieu, era un...amigo especial.

***~~~***~~~

Hace tiempo que Mathieu había hecho el comentario que Erika y Lance parecían actuar como sus padres, apenas entro el olor a quemado lo abrazo, seguramente esa noche comerían algo carbonizado por la Aengel, Lance se encontraba lavando y secando los platos, mientras Erika estaba frente a la estufa intentando despegar algo de un sarten, a penas el dragón lo vio le hizo un gesto con la cabeza a modo de saludo.

-¡Lo logre!- exclamo Erika.

-¿Qué lograste?- pregunto el chico dejando sus cosas sobre el sofá.

-Erika quiso hacer algo simple para cenar.- respondió Lance dibujando un gesto de desagrado con la mirada.

-Cenaremos huevos revueltos. - dijo la chica dejando el platón sobre la mesa, Mathiei muro la mezcla del amarillo del huevo con el negro de lo quemado, seriamente tenían que hablar de su modo de cocinar.

-Chicos, bueno...estoy en problemas. - ambos se tensaron por aquello, tendría que ver con la predicción de la que fueron advertidos, Mathieu se sentó a la mesa pensando exactamente en sus palabras.

-Yo tendré una cita. - Erika rodo los ojos por pensar que era algo serio y Lance respiro tranquilo, aunque algo molesto por eso.

-Eso no es un problema ¿Qué paso con Koori? - pregunto Lance.

-Koori ¿Qué tiene ella que ver? - pregunto Erika.

-Nada, no es nada. - Mathieu lanzo una mirada seria a Lance. - el problema es que ustedes tienen que ir conmigo.

-¿Ah?

-La hija de mi jefa tiene días invitándome a salir y le he puesto miles de excusas, le dije que te ayudaría a organizar una cena de aniversario con tu pseudo esposo, pero Suzette dijo que dejaba de ser un festejo intimo si yo iba.

-Y esta en lo correcto ¿Por qué irías a tu a una cena de aniversario?

-El problema es que Suzette ya hizo las reservaciones para ustedes y nosotros, trata de poner más excusas, pero temo por mi trabajo.

-Mathieu, mentir con cosas como esa no es lo correcto, nos metes en problemas a nosotros. - Lance tenía razón, no era un problema grave, pero si los metía en prietos, bastante tenían fingiendo ser algo que no eran.

- Bueno, queda otro detalle. - confeso pasando una mano por su cabello. - cuando me dijo dónde y la hora yo le dije que...

-¿Qué? – preguntaron ambos.

-Erika está embarazada y te lo iba a decir esa noche. - confeso, el silencio se hizo de repente y el ambiente se tornó muy frio.

Unos segundos después Mathieu se levantó a prisa de la mesa tirando la silla en el proceso, Lance también lo hizo para sujetar a Erika de la cintura con un brazo y con la otra mano libre le sujetaba por lo alto la mano que apretaba con fuerza el mango de la sarten, cabía destacar que ante los movimientos bruscos la cena de esa noche ahora estaba en el suelo.

-¡Mathieu date por muerto!

-¡Lo dije sin pensar! – se defendió arrinconado.- ¡Estaba desesperado por librarme de ella!

-¡¿Y ahora me tengo que embarazar por tu culpa?! – exclamo, sus mejillas se coloraron dejando de moverse de manera tan brusca buscando liberarse de Lance.- ¡MATHIEU!

-¡CALLENSE! – grito Lance soltando a Erika empujándola hacia la ventana.- Mathieu esta vez fuiste lejos comprometiéndonos de esa manera, pero nos salvaste de comer una porquería.

-¡LANCE!- grito Erika lanzando con fuerza el sarten al suelo.

-Lo siento, pero es la verdad, te esfuerzas, pero realmente no creo que los huevos con vinagre sean algo comestible. - dijo más tranquilo siendo él quien ahora pasaba una mano por su cabello. – quiero una buena razón para no ser yo quien te arroje por esa ventana.

-Hasta antes de que encontraras un trabajo temporal era yo quien cargaba con todos los gastos, ir un día al cine no equivale a nada. - dijo serio el chico. – no les he pedido ni un solo favor, lamento por mentir con eso, pero temo que si sigo rechazando a Suzette pueda perder el trabajo.

-Es una razón válida. - Erika parecía más tranquila, aunque el comentario de Lance de su comida le había molestado. - ¡Bien! – exclamo. - iremos a fingir que es nuestro aniversario, pero no voy a fingir estar embarazada si nos volvemos a topar con esa chica.

-Puedes fingir una falsa alarma. - opino el dragón Erika asintió simplemente.

-Iré por unas hamburguesas... son unos malagradecidos, yo les cocino con mi mayor esfuerzo. - dijo con evidente puchero mientras tomaba su chaqueta para salir.

Mathieu había visto pasar su vida frente a sus ojos dos veces a causa del asesinato inminente de la salvadora de Eldarya, primero con sus manos y ahora con un objeto de cocina, si de ahora en adelante no pensaba mejor en sus palabras pronto terminaría colgado del poste más alto, Lance por su parte se apresuró a ir a dar alcance a Erika, no quería dejarla ir sola, no cuando la advertencia aún seguía latente.

Notas finales:

¿Propuestas? Justo cuando Erika nota que Lance se lleva bien con los niños Mathieu sale con esas cosas xD ¡Se viene cita doble! Y un misterioso personaje aparece. Koori parece estar pensando en Mathieu no solo como un amigo, aunque ella lo diga ¿Qué hará Koori si se entera que Mathieu tuvo una cita con otra persona?

Espero les gustara el capitulo.

Dudas, preguntas aclaraciones lo que sea, todo es bienvenido.

Hasta la próxima actualización.