Algo lejos del grupo veo a Thomas atando las sogas de su traje.

Me acerqué a él tratando de que nadie prestara demasiada atención.

-- Thomas... Te importa si te saco algo de sangre -- el castaño se vio algo asustado por mi pregunta.

-- ¿Para qué? --

-- Necesito tu sangre... Es especial, lo sabes, ¿Por qué crees que Brenda está tan sana después de tanto tiempo? -- se sentó en una de las sillas cercanas y me extendió su brazo -- ¿Recuerdas lo que hizo Mary con ella? -- le pregunto apretando su brazo con una de mis manos mientras y la otra buscaba la vena perfecta para eso.

-- Algo así... Mezcló algo transparenten, parecía drenarla -- su voz se detuvo cuando la aguja entró en su piel -- Después la unió con otro líquido que hizo que fuera azul -- retiré el afilado objeto lleno de sangre y coloqué una bandita adhesiva.

-- Gracias -- le agradezco aunque esa explicación me sirvió poco y nada, Pero no podía exigirle algo a su cabeza sin memoria. Solo sabía que la había drenado.

-- No hay de que -- se levantó tomando su arma.

-- Thomas -- lo detengo de su caminata -- Si Newt comienza a comportarse violento, cuando sepas que ya no es él, noquealo... No importa lo que haga o te diga, noquealo y espera a que yo llegue -- me vé extrañado sin saber por qué mis palabras -- el virus de la llamarada te hace ver a todos como tus enemigos, llegará el momento en el que Newt ya no te reconozca, ni a ninguno de nosotros. Haz lo que digo, ¿Bien? --

-- Bien -- confirma bajando el casco del traje que usaría.

Camino aparentando normalidad, detrás mío siento a Thomas caminar empujando a Teresa que va a lado mío.

Un guardia se coloca frente a nosotros parando nuestro paso, nos indica con la cabeza un lado y lo seguimos.

Caminamos más adentro y de un ventanal otro guardia se mira, adelantando los pasos y colocándose frente nosotros.

Teresa pone su huella en una pantalla y nos da acceso a unas escaleras.

Thomas baja tratando de cuidar que no venga nadie y Gally comienza a desarmar una de las cajas de información.

Observo el reloj en mi muñeca, yo tenía el tiempo contado.

Una tos llama mi atención, Newt se quitó el casco de guardia revelando su rostro pálido y sudoroso.

-- Tranquilo -- me acerco a él -- estarás bien... De eso me encargo yo -- le aseguro sintiendo su mirada cansada.

Gally terminó y estaban por irse, pero yo dí la vuelta lista para salir.

-- ¿A dónde vas? -- pregunta Gally.

-- ¡Vayan, ya saben a lo que yo vine! -- ellos asienten a mí, recordando porque traigo este uniforme y salgo de las escaleras con naturalidad.

Camino tratando de no llamar mucho la atención.

-- Doctora -- me saluda uno de los practicantes de enfermeros, lo identifico por su gran carnet en el cuello con la palabra "Practicante".

Gracias a Dios, por eso no me reconoce como una verdadera doctora.

Solo asiento la cabeza tratando de aparentar normalidad, como si todos los días personas como él me saludaran.

Avanzo dejándolo atrás sintiendo su mirada en mi espalda.

Dando vuelta en un pasillo se enciende una alarma, considerando a quienes están por estas paredes es muy probable que hayan sido ellos.

Diez minutos después recorro un pasillo donde hay bastantes doctores, doctoras y enfermeros.

Justo frente mío, dos chicos caminaban tranquilos. Les dediqué una mirada cómplice y pude apreciar como sutilmente movían la cabeza. Sí, todo estaba llendo relativamente bien. A excepción de que ya no llevaban sus máscaras que protegían sus rostros, dejando a la vista de todos esa carota que tienen.

Llamaban mucho la atención, Pero lo apuesto no les quitaba lo idiotas.

Dí vueltas por más pasillos, abandonando salas enteras. Iba caminando algo apresurada, más disparos que antes se escucharon y muy cerca. Mi rostro pasó de apurado a asustado y me detuve abruptamente girando rápido y tratando de ser lo más silenciosa posible.

Frente mío al final del pasillo estaba Janson, de espaldas y dando órdenes a un grupo de guardias armados.

Debo apurarme.

Entré a un laboratorio verificando que estuviera solo, hace algo de tiempo la alarma de incendio se había encendido, por lo que la mayoría de instalaciones de encontraban solas de doctores y enfermeros.

Me agaché rápido cuando escuché disparos del pasillo que atravesaba fuera del laboratorio, un grupo de guardias atravesaron corriendo. Pero por el rabillo del ojo ví una sombra acercarse, entró a la sala con pasos sutiles.

Solo tenía conmigo un bisturí en la mano, ¿Qué demonios podía hacer si está persona tenía un arma?

Estaba apunto de levantarme a atacar cuando escuché un grito.

-- ¡Señor Janson! ¡Están aquí! -- la rata salió corriendo apurada ignorando la sensación de que alguien estaba en el laboratorio que tenía.

De la que me salvé.

Gracias Dios, hoy sí tenías ganas de verme.

No, hoy no tenía ganas de verme para nada.

Estaba desesperada ahora.

-- ¡No, no! -- golpee la mesa enojada -- ¡Mierda! -- mi respiración era acelerada, solo quedaba muy poca sangre de todo el bote médico que me había dado Thomas.

Las lágrimas empañaron un poco mis ojos, era la última oportunidad. Si fallaba, también le estaría fallando a Newt.

Respiré por unos minutos calmando mi acelerado respirar. Cálmate. Cálmate.

Bien... Seguí con lo mío, ya no me importaba si alguien entraba y me lastimaba, lo único que quería era no desperdiciar esta oportunidad.

Diluí la sangre y la drené. Suspiré con el corazón galopando como loco, mis manos, temblando, vaciaron la sangre en uno de los tubos.

Un par de lágrimas se salieron cuando el color rojizo cambió al contacto del líquido transparente que estaba en el tubo. Ahora era azul, un azul intenso y claro.

Tomé el tubo y lo puse en la jeringa blanca, lo dejé en la mesa y comencé a quitarme la ridícula falda suelta que traía, bueno, ridícula para la ocasión porque realmente me encantaban. Quité los botones de mi camisa blanca quitándomela también, dejando al descubierto una playera de resaques deportiva abajo.

Bajé los pantalones sueltos que tenía ajustados en los muslos y me quité los horrendos tacones por unos tenis más cómodos.

Estaba lista. Guardé la jeringa en mi bolsillo y salí corriendo por el pasillo con algo de temor a encontrarme más guardias.

Pero en vez de eso, todo los hombres estaban en el suelo, así que no me fue difícil conseguir un arma.

Camine por algunos corredores más encontrandolos vacíos en su totalidad.

Una explosión sacudió todo el edificio, me asomé por uno de los ventanales y lo que ví me sorprendió a horrores.

-- La ciudad -- no podía hacer otra mas que susurrar, sentía mis manos temblar un poco y el miedo creciente en mis venas. Todo estaba siendo un caos allá afuera

Salí a las calles encontrando una guerra misma entre hombres de Lawrence y guardias de C.R.U.E.L.

Corrí entre las calles evitando morir en el intento.

Me cubrí de una explosión cercana que voló infinidad de escombros.

Una voz me detuvo de mi carrera. Era Teresa.

Estaba tratando de convencer a Thomas de ir con ella, pero Teresa solo lo queria para conseguir la cura.

Malas noticias para tí idiota, está competencia ya la gané yo.

Ya tenía la cura. Yo lo había descubierto, le había contado a Thomas sobre eso también, exactamente las mismas palabras de Teresa, no creo que sea tan tonto como para irse con ella.

Me preocupé y corrí de nuevo. Sí, Thomas sí era tan idiota para ir con ella.

Atravesé infinidad de tiendas y locales.
Mis pies ya dolían como nunca y mi respiración cada vez era más agitada.

¿¡Dónde demonios estaban!?... A lo lejos escuché gritos y jadeos.

Entonces los ví.

Estaban en las estaciones del metro, aceleré el paso y Thomas lloraba, el rubio estaba en el piso con los brazos abiertos boca arriba

-- ¡Thomas! -- grité apenas atravesé el umbral de las puertas.

Él me volteó a ver y sus ojos parecieron brillar más de lo que ya lo hacían por sus lágrimas.

-- ¿Lo conseguiste? --

-- ¿Qué le hiciste? -- Newt estaba sin moverse -- ¡Thomas que le hiciste! -- lo tomé de los hombros asustada.

-- Lo noqueé -- suspiró Thomas -- justo como me dijiste --

-- Bien -- me arrodillé al lado del cuerpo del rubio y tomé su mano derecha -- gracias, Thomas -- clavé la aguja en su piel, levanté mi mirada para verlo a los ojos.

-- Yo no hice nada... Tú fuiste --

-- Me diste tu sangre, fue por eso que todo esto es posible... Gracias --

Mis ojos se llenaron de lagrimas cuando pude ver cómo las venas hinchadas y oscuras del cuerpo de Newt se desvanecían en unos segundos.

La sangre que corría por un corte en su mejilla, espesa y oscura, no tardó en salir más rápido y clara, limpia. Sin virus.

Abracé el cuerpo del rubio hacia mí, besando su frente aliviada. Estaba bien.

Escuché pasos apresurados detrás mío.

Cuando volteé mis ojos se encontraron con los suyos.

Ahí estaba, todos estos meses solo habían servido para lastimar su cuerpo, y eso me entristecía, me enojaba, me enfurecía, me hacía querer ir y matar lentamente a Janson y Ava.

Pero ahora, justo ahora, ya no importa eso, porque él estaba aquí. Mi Minho se acercaba lentamente a mí.

Toqué su mejilla queriendo comprobar que fuera real y no otra broma de mi cabeza.

Y sonreí cuando el calor bajo mi palma aumentó considerablemente.

Lo jalé de la cintura acercándolo a mí y con mi mano en su mejilla lo besé.

Lo besé como quería hacerlo desde hace tantas horas, días, meses.

Metí mi mano pro debajo de su camisa apretando la piel de su cintura para después acariciarla con cariño. Cómo lo extrañaba.

Nos separamos por la falta de aire.

-- También te extrañé, shank -- me susurró como si hubiera leído mis pensamientos.

Reí al ver su respiración agitada por el beso anterior.

-- Te amo, idiota -- sus ojos se abrieron de más por mis palabras. Parecía que no esperaba eso.

-- Yo también te amo, linda -- habló sin titubeos haciendo mi corazón saltar. Se acercó a besarme de nuevo está vez siendo él el que apretó mi cintura.

Solo está vez me dejaré de él.

Gally, Sarten y Brenda cargaron como pudieron al Newt inconsciente del suelo.

Minho comenzó a caminar jalando mi mano, pero yo me detuve al no escuchar pasos atrás hacia nuestra dirección.

-- ¿Thomas? -- detengo el caminar del chico, que parece apurado por salir -- ¿A dónde vas? --

-- Necesito buscarla -- susurró el chico corriendo fuera.

Por favor, Thomas, no hagas ninguna estupidez.