cuando la reunión de la ONU termino, España se dispuso a ir a hablar con su hija, no la encontró en el templo de la ONU, pero supuso donde estaría.

Chile estaba en su casa, maldiciendo a su padre, y su hermano Argentina, ¿por que tenían que hacerle la vida mas difícil de lo que estaba? 

quiso no seguir pensando en eso, fue a la cocina y se preparo un chocolate caliente y con un paquete de galletas, se sentó en el sofá y se puso a ver una película. necesitaba relajarse, la película iba empezando cuando tocaron el timbre.

-quien mierda me webea ahora...

detuvo la película y fue a abrir la puerta, encontrándose con España, este le sonrió con ternura y le dijo:

-puedo hablarte hija.

Chile se hizo a un lado dejando le pasar, España entro a la casa, Chile dijo:

-que te trae por aquí?

-a preguntarte... ¿por que no aceptáis a Argentina como vuestro prometido?- pregunto el español

-creí que era obvio...- dijo la Chilena

-es por Japón? Verdad? - pregunto España

-si... estoy enamorada de el- dijo ella

-ya veo... pero no sacaras nada con amarlo... créeme hija mía, este amor solo te traerá desgracias. -dijo España

Chile le miro sorprendida, pero se enfado diciendo:

-como puedes decirme eso...?

-quiero evitar que cometas un error- dijo el español

-como puedo cometer un error si el me ama? -dijo Chile

-solo diré... no estés tan segura de ello. -dijo España emprendiendo retirada.

Dejando a la chilena con dudas, pero no sobre japón si no sobre su padre y Argentina, ¿estarán planeando algo para separarlos? si era así no lo iba a permitir.

volvieron a tocar la puerta, pero la chilena que estaba sumida en sus pensamientos no escucho a la primera, fue a la segunda vez, que despabiló y fue a abrir la puerta y se topo con Japón, ella le miro y le sonrío diciendo:

-hola.

-puedo entrar- pregunto Japón.

-claro pasa- dijo Chile dejando le pasar

una vez dentro, se sentaron en el sofá Japón noto que sobre la mesa de centro había una taza de chocolate caliente a medias y unas galletas, el dijo:

-me ofende que no me hayas invitado a comer galletas.

-lo siento es que...-dijo Chile intentando explicar

-descuida solo bromeo. -dijo Japón sonriendo

Chile le sonrió con ternura, de pronto Japón la too de la cintura y la atrajo hacia el diciendo:

-te amo tanto... 

-yo también te amo Japón.- dijo Chile sonriendo

Japón la abrazo y hundió su rostro en el cuello de la chica, y se embriago con su aroma, Chile se sonrojo al sentir la respiración del nipón sobre su cuello. mientras el, ya estaba sonrojado, los deseos de hacerla suya eran muchos.

comenzó a deslizar su mano por la cintura de Chile.

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Continuará.