I'm mess
—¿Qué tal, Pecas-san? —Jiro saludó a su forma.
—Te dije que me llames por mi apellido. —Aunque a Izuku no le gustó tal cosa.
—Tan aburrido como siempre.
—Tan grosera como ayer.
—Pero por lo menos yo pregunto el cómo estás... Sigo esperando una respuesta.
—Pero... —Había caído en su juego, de nuevo.
—Jaque mate, Brócoli. Jaque mate.
Si bien la sala común era el lugar donde los estudiantes de la clase A se reunían habitualmente a pasar el rato e interactuar con quien sea que estuviera allí, nunca imaginaron ver esta escena: la rockera sentada, con los pies sobre el sillón, cargando su guitarra y tocando algunos acordes, mientras, Midoriya, uno de los más tímidos de la clase, fruncía el ceño por los comentarios de la chica.
—En fin, ¿qué necesitas de mí? —La chica empezó a jugar con los jacks de sus orejas.
—Tú sabes lo que has hecho.
—Oh. —Disimuló sorpresa—. Estás enojado porque todavía no te devuelvo tus poleras y abrigos.
Mina iba a saltar de la emoción y a atacar con preguntas exhaustivas al par, mas, Toru, con toda la fuerza voluntad del mundo, la detuvo. Había sido iluminada con una corazonada que lo mejor estaba por pasar, así que, dejaría que la conversación fluyera con naturalidad hasta el punto que todo se vuelva incómodo.
«Todavía no, Mina. Presiento que esto será una mina de oro.»
Ahí ella entraría junto con la rosada a hacer la situación más incómoda de lo que será.
—Aparte de ese gran detalle, hay algo peor que has hecho a mis espaldas.
—No sé a qué te refieres. —Le restó importancia, ya que, así el pecoso se molestaría más—. Estuve todo el día aquí, tranquila. —Cabe recalcar que eso era lo que ella quería.
—Que raro. —Se acercó a Kyoka—. Hace poco te vi hablando con Aizawa-sensei sobre quien sabe qué.
—¿Estabas al pendiente de mí? —Llevó sus manos a su pecho—. Pensé que me querías, pero no al punto de estar enamorado de mí.
—¡J-Jiro-san! —Exclamó con cierto rubor en las mejillas—. ¡¿Por qué le dijiste a Aizawa-sensei sobre lo que hacemos en las noches?!
Solo Kyoka sabía a qué se refería, por eso sonrió hasta el punto que una pequeña risa escapase de sus labios. Pero, para el de la clase, quienes se encontraban escuchando detrás de la pared que separaba la sala y la cocina, casi explotan en un mar de gritos. Con solo decir que a Tsuyu se le escapó un "Kero" de la sorpresa.
Mina y Toru saltaban en silencio, agarradas de la mano e imaginando como Izuku y Kyoka se volvieron adultos antes que ellos.
Tenya iba a entrar a resondrar si no fuera porque Ochako y Todoroki lo detuvieron. Ambos querían escuchar más.
Mineta y Denki reaccionaron con celos. Momo podía jurar que ambos estaban llorando sangre y pidiendo explicaciones a dios sobre la suerte del peliverde. Ignoró ello al instante, ya que, la conversación se había reanudado.
—¿Acaso te avergüenzas de los actos ilícitos que hacemos todas las noches desde hace un par de semanas? Pensé que eso significaba algo para ti. —Sobreactuó su sentir—. No sabía que eras ese tipo de hombres, Árbol-san.
—Deja de bromear. —Izuku ni se dio cuenta del doble sentido—. Y llámame por mi apellido.
—Cuando aceptes mi oferta.
—Más bien, amenaza.
—En sí, fuiste muy duro conmigo desde entonces. —Recordó como él destrozó su celular, los regaños y lo seco que eran sus respuestas ante el tema de la banda—. Todavía me debes un celular nuevo ahora que lo recuerdo, pero... No te preocupes por eso, creo que tener algunas de tus poleras en mi armario equivalen lo mismo.
—Tu armario a este paso parecerá el mio, debes devolverme algu-. —Y volvió a caer en su juego—. ¡Jiro-san, no cambies de tema!
Mina se había desmayado a causa del calor que sentía por la conversación, mientras que Momo y Toru la ventilaban. Todoroki creó un poco de hielo y lo puso sobre la frente de Ashido. Ambas chicas lo vieron con una mirada de agradecimiento.
Por otro lado, Ochako noqueó a Iida para que este no interrumpa lo que parecía ser una escena de cualquier anime romántico de bajo presupuesto.
Kirishima miraba a Katsuki hacer palomitas de maiz para ver y escuchar lo que quedaba de conservación. Por más que el rubio dijera que Deku podía irse a la mierda con su romance adolescente, el chisme fue más fuerte que él y si alguien era más fuerte que él, tenía que superarlo, por esta misma razón se quedó. Tal vez si se pone aburrido la discusión logre ganar.
Y a Tsuyu se le volvió a escapar otro "kero".
—Oh, vamos, tenía que decirle a Aizawa porque me descubrió por las cámaras de seguridad. —Jiro respondió.
—Entiendo eso.
—Si lo entiendes, ¿cuál es el problema?
—El problema viene cuando Aizawa-sensei me llama a su oficina para decirme que un pajaro morado le contó que yo también tenía mis aventuras por las noches. —Cruzó los brazos, esperando una disculpa o que, por lo menos, ella admitiera la culpa—. ¿Algo que decir?
—El capitán debe hundirse junto a su tripulación. —Por lo menos lo admitió. Claro, a su forma.
—Yo no soy capitán de nadie.
—Lo sé, marinero. —Le guiñó y volvió a concentrarse en la guitarra.
—Por tu culpa soy un desastre en este momento.
—Exageras, este no es el final de tu vida, Pecas.
Si hubiera estado más atenta, hubiera visto como una vena sobresalía en la frente de Izuku. Estaba enojado, por lo que, se acercó más a ella hasta el punto de llevar su mano sobre la guitarra, apartándola.
—Puedo ver las llamas que hay en tus ojos.
—¿Por qué crees?
—¿Arden tan fuertes porque quieres que sienta tu amor?
—Disculpa la palabra, pero, no te hagas la tonta conmigo.
Y si ambos estuvieran más pendientes de lo que hay a su alrededor, hubieran escuchado el grito ahogado colectivo de dieciocho personas.
—Que vulgar, Brócoli-kun. —Kyoka abrió la boca sorpresa y llevó su mano sobre la misma.
Hasta Todoroki, en su inexpresividad, parpadeó, creyendo que podría tratarse de un sueño, de esos raros que tenía de niño.
—Sabes que puedo decir cosas peores, pero, no lo voy a hacer porque pueden escucharme. —Seguía siendo incrédulo de la realidad—. ¡Eso no viene al caso! —Sacudió la cabeza—. ¿Por qué lo hiciste? Me echaste a la boca del lobo. Además, mentiste, acordamos que mantendríamos este secreto hasta graduarnos.
—No, nene, tal vez parezco una mentirosa, pero, lo hice por un bien mayor.
—Reducir la mitad de tu castigo no es una buena causa para mí en estos momentos. —Apretó el puño, esperando por una respuesta más clara.
—Está bien. —Suspiró—. Te diré lo que pasó. —El pecoso no dijo nada—. Anoche tardé. Pasé por la cocina, confiada en que nadie me vería, pero, por alguna razón, a Aizawa se le ocurrió la brillante idea de poner una cámara extra justo en el punto ciego de las anteriores. Por eso me atrapó. Después de clase me llamó a su oficina y tuvimos esa charla.
—¿Qué más?
—Descubrió todo en una sola noche, ¿puedes creerlo? Dónde, cuándo y con quién, pero, no tenía idea de ti. Ninguna sospecha.
—Y para que el castigo no fuera tan fuerte, me exhibiste.
—Bueno, es verdad que quería estar más tiempo contigo, así que el castigo compartido no sonaba tan...
—¿Qué? —Gracias a no sabe quién, Izuku no pudo entender bien lo que Kyoka decía en este momento.
—¡Nada!
Todavia pegados en la pared, Ochako y Momo se miraron sorprendidas sobre lo audaz que era la pelimorada, a la vez que Sero rodeaba de cinta a Mineta y Denki, para que estos no fueran contra Midoriya. Había prioridades y saber que sucedería es lo primero en aquella lista.
—Dijiste algo sobre compartir el castigo para-.
—Mira, sé que me equivoqué esa vez. —Cambió de tema olímpicamente—. Pero, lo hice por una buena razón: Aizawa me prometió que podía ir a hacer mis cosas en la noche sin temor a ser castigada, siempre y cuando mis calificaciones no bajen. Es una buena oferta y lo sabes, es por eso que tuve que incluirte en la ecuación.
—¿Cómo así?
—Tuve que consultarlo contigo, pero, tenía miedo que el profesor se arrepintiera de su decisión y actué como mejor me parecía. A pesar del castigo, tenemos vía libre de hacer más travesuras por las noches sin tener que preocuparnos por un maestro amante de los gatos. —Se levantó hasta quedar frente a él, mirándolo a los ojos a pesar de la diferencia notable de altura—. Oye, sé que he sido un dolor de trasero para ti y que solo te he causado dolor, pero, no sería capaz, nunca, de traicionar tu confianza por más que me ofrecieran conocer a mi banda de rock favorita. —Sintió cómo un par de manos se posicionaron sobre su espalda—. ¿Q-Qué?.
—Gracias.
Izuku se sintió tonto al no haber confiado en ella. Tantas aventuras juntos en menos de un año y secretos compartidos.
—O-Oye, suéltame. —La chica tartamudeó.
—Unos segundos más. —Respondió.
Si por Izuku fuera, se quedarían así por un buen rato, pero, los jacks de Kyoka hicieron que rompa el abrazo mucho antes de lo que quería.
—Si-i quieres agradecerme, acepta lo que te pedí. —Ocultaba su rostro con sus jacks que daban círculos al aire, además que esquivaba cualquier contacto visual.
—No.
Y el pecoso se fue del lugar, dejando a una chica avergonzada parada en frente del sofá.
Kyoka pensaba que si seguía en los brazos de Midoriya, se hubiera derretido y pegado a él por siempre. Aunque tal pensamiento no duró mucho, porque se dio cuenta de la ausencia del chico que segundos atrás le agradeció de forma cariñosa.
—¡Pecas-san! —Gritó y fue a perseguirlo.
Se dio cuenta tarde que el abrazo fue una distracción para evitar la confrontación a la propuesta de Kyoka. Lo que ella no sabía que es que, aparte de eso, Izuku huyó más que todo por pensar en lo linda que ella se veía con el rostro sonrojado.
Mientras tanto, los ajenos al romance no paraban de hacerse la misma pregunta desde que miraron con atención la interacción casi tan espontánea como de dos amigos que se conocían de toda la vida: ¿Desde cuando Kyoka e Izuku se volvieron cercanos?
No lo sabían, pero esperaban más de ello por un buen tiempo. Después de todo, solo faltaba la parejita de la clase para hacerles recordar que todavía son adolescentes, a pesar de que una invasión en su primera semana de clase, la pérdida del Símbolo de la paz, el rescate de una niña que conllevó una pelea contra los yakuzas, el descubrimiento de que uno del grupo era el traidor y una guerra casi perdida digan lo contrario.
Y bueno, volví. Y que mejor que un nuevo cap a las 3:43 am. Para que no se pierdan las costumbres más que todo.
En fin, adivinen qué? Fui extorsionado por una persona para revivir. Así que, este capítulo es dedicado para mi mejor amiguitagggg Notoneblonde.
Ya cumplí, ahora no jodas porfis.
Bueno, estoy Feliz. Hay varias razones de por sí, pero, en Primer lugar por haber escrito esta wea en menos de una noche a causa de que el capítulo que tenía pensado publicar no lo terminé a causa de que se me volvió tedioso acabarlo. O sea, lo tenía planeado desde hace más de un Mes y no lo concluí.
Lo bueno es que salió esta idea y al fin pude hacer algo.
En segundo lugar, quiero decir que Te detesto blonde lptmr, noches sin dormir por sentirme culpable por dejar esta wea abandonada por meses.
Y bueno, quiero decir que los Amo, o sea, a los que siguen leyendo esto a pesar de mi ausencia.
Eso es todo, me gana el sueño y estoy hablando weas de más.
Soy DekuSama07 y muchas gracias por leer.
Psdt: unanse a mi server de mierda.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top