—Yeonjun....

Las manos me temblaban. Yeonjun estaba con ojeras realmente notorias en su rostro. Sus ojos se encontraban un poco enrojecidos y podía escuchar a la perfección la forma en la que sorbía su nariz.

Un nudo se me formó en mi garganta. Era imposible ver esto. Yeonjun nunca había estado de esta forma ante mis persona.

Y entonces, me abrazó, lo hizo muy fuerte que apenas pude reaccionar. No entendía el por qué, pero solo correspondí; sin embargo, seguía sintiendo ese sentimiento de culpa.

—É-el, murió, Hannie.....—susurra. Su voz estaba entreocortada, era como si estuviese a punto de llorar—Lo siento mucho, por todo.

No, por favor. Esto no puede estar pasando. Su abuelo no puede....

Me separo de él y lo veo. Sus lágrimas corren por sus mejillas. Cada segundo que pasa me hace sentir aún peor.

—No tienes que disculparte, Yeonjun—murmuro—Quien debe hacerlo soy yo. No debí desaparecer así de la nada....Mira lo que he provocado...—bajo la cabeza

—No—me detiene cuando estaba a punto de murmurar algo—Yo soy un imbécil, siempre te termino haciendo daño y solo estoy recibiendo mi karma.

—¿Karma? Yeonjun...no veas la muerte de tu abuelo de esa forma por favor....—me duele el pecho—Estaba enfermo....no tenias la culpa.

—Siempre....siempre estuve pendiente de él, hice lo mejor que pude. El se estaba recuperando....yo...No se que hacer sin mi abuelo—vuelve a tirarse a mis brazos.

—¿Hace cuanto fue?—pregunto

—Unas horas después que te fuiste de mi apartamento....—vuelve a susurrar—aún no puedo aceptarlo—cierra los ojos con fuerzas, intentando no llorar.

Lo tiro a mis brazos con fuerza. Mi abrazo se hace demasiado acogedor para él, porque lo siento calmarse cuando siente la envoltura de mis brazos en su cuerpo. Acaricio su cabello y permito que recueste su cabeza en mi hombro.

Y vuelvo a sentirme lo mierda que soy.

¿Como pude hacer esto? ¡El estaba llorando como loco por la muerte de la persona que lo crió toda su vida y yo besándome con Jungkook!

¿Que clase de persona me he vuelto?

—Lo siento Yeonjun...por desaparecer....estaba...enfadada, en serio.

—No lo sientas—responde sin quitar su cabeza de mi hombro—Solo me quedas tu como mi familia, no puedo perderte a ti también

Eres ahora lo único que le queda. No puedes hacer esto

—No me perderás—aseguro—Estoy aquí para ti.

—Prometo ser el mejor novio del mundo

—Ya lo eres—sonrio mientras acaricio su espalda

—No. Voy a ser mejor que eso. Lo juro. Todo por ti. Te amo, Hannie...—se pone frente a mi. Sus palabras causan un golpe que me atormenta aún más mi conciencia.

Y no soy capaz de decir nada. Me preocupo por su reacción. Sin embargo, es lo que menos le importa, porque se inclina a besar mis labios con ternura.

Y eso solo me hace tomar una decisión.

Debo alejarme de Jungkook, tengo que olvidarme de todo rastro de gusto que tenga con él. No puede seguir formando parte de mi vida.

Mi hogar siempre ha sido Yeonjun. No puede cambiar así, por otro chico que no le importa nada y que ni siquiera estoy segura de que hable en serio. No, cuando tengo a alguien que ha sido mi lugar seguro desde que lo conocí.

Y ahora, es mi turno de ser el suyo.

Semanas después

—¡Por supuesto que se ve mal!

—¡Eso has dicho con los 8 conjuntos anteriores!—se queja mi hermana.

—No sabes combinar tu ropa aún. Estás demasiado grandecita para esa tontería. ¿No te das cuenta?

—Pues yo pienso que a Taehyung le gustará de cualquier manera.

Ruedo los ojos.

Estoy tan aburrida acostada en mi cama mientras veo el debate interno y externo de Hari, al prepararse para una simple cita con Taehyung. A veces me estresa un poco.

—¿Sabes que es lo que yo pienso?

—No estoy en tu mente, que yo sepa.

—Pues en mi opinión deberías ponerte ese vestido negro.

—¡No! ¡Está muy revelador!

—Deja de ser tan insegura con tu cuerpo. ¿Para que lo tienes si no lo usas?

—Porque mamá me obligó a traerlo. Si quieres te lo regalo ahora mismo

—¿Sabes que quiero de regalo? Me encantaría que te lo pusieras—sonrío y está empieza suspirar.

—Prefiero las opciones que te he dado.

—Vas a una CITA no a clases, Hari. Vamos, ponte eso, te queda lindo—insisto.

—¿Estas segura?—agarra el vestido y se mira en el espejo—No...no lo sé.

—Oh, si lo sabes. A Tae se le saldrá la saliva de la boca cuando te vea—rio

—Iugh—exclama. Pero es muy descuidada al hacerme creer otra cosa

—¿Sientes asco? ¿Y por qué el sonrojo?

—¡Ya! En vez de estarme acusando, deberías ir con tu novio algún lugar y dejar de estar tirada en esa cama.

—Eso haré—sonrio

—¿Y por qué sigues así?

—Lo estoy esperando—replico con tranquilidad mirando mi celular

—¡Pero cambiate de una vez!

—Soy rápida—sonrio

—Ojala Sook estuviera aquí....—dice con un puchero—es más fácil de convencerte o tal vez sea su actitud que siempre termina logrando que la obedezcas

—Y hablando de eso....¿Donde esta?

—Ni idea. Desapareció esta mañana, se veía bastante arreglada

—¡Ah!—tiro la almohada a cualquier lugar de la habitación—esa maldita no me quiere contar el misterio que se oculta

—Si te consuela, ni Sully lo sabe

—¡Soy su mejor amiga, debería saberlo!—exclamo molesta

—Lo único que se, es que la veo muy feliz desde que empezó con esos comportamientos raros. ¿Crees que este teniendo una cita a escondidas?

—¿Cita? Sook odia las relaciones. Debe ser otra cosa.

—¿Como estás tan segura? Todos al final caemos por alguien

—Es imposible. Ya nos lo hubiera dicho, ¿no?

—Tiene el ego muy alto. Puede tener miedo de que la juzguemos

—Yo haría de todo menos eso.

—Tranquila, lo descubriremos tarde o temprano—sonrie y se echa un poco de perfume. —ya me voy—lanza un beso al aire y termina desapareciendose, dejandome en una crisis mental.

*********

—¿Que película quieres ver?—pregunta mi novio jugando con nuestras manos.

—Misterio y aventura—respondo con el género

—Pensé que elegirías terror—masculla entrecerrando los ojos mientras sonríe

—Estoy cambiando la oferta. Hoy mi día no es para eso.

—Claro—niega riendo—Se perfectamente que es porque no quieres que me ría cuando te asustas

—Si, ¡también!—añado—Se supone que me tienes que abrazar, no reírte en mi cara. ¿Tienes idea de la vergüenza que pasó con todos?

—Tampoco así...yo si te abrazo....después de que me ría, pero lo hago

—Sigue siendo malvado de tu parte.

Yeonjun ríe y sigue caminando junto a mi. Llegamos a la parte de la venta de entradas, donde empieza a comprarlas.

Me quedo observando levemente como mi novio paga todo. No obstante, comienzo a escuchar un alboroto por detrás.

Desvío la cabeza y veo un montón de gritos desesperados de personas. ¿Que demonios está pasando aquí?

—¿Que sucede...?—pregunta la dependiente mirando todo confundida.

La multitud empieza a venir directo acá y luego me sorprendo.

Jungkook estaba caminando entre ellas.
Siento la forma en la que mi corazón late con fuerza al verlo con esa sonrisa que le da a las personas que se emocionan por el y no puedo evitar deslumbrar me por la manera en la que se ve caminando, tan jodidamente bien.

Aún no me ha visto, pero se perfectamente que no pasará nada bueno cuando lo haga.

Las cosas entre él y yo durante estas semanas han estado ligeramente tensas. Aunque eso sea algo normal para nosotros a estas alturas, debo agregar que la tensión ha intensificado desde que decidí alejarme por completo de él y evitarlo. Pero él no ha dicho nada al respecto. Simplemente se lo ha tomado como un cambio más a su vida y normal.

Mi mano empieza a ser apretada con fuerza. Observo a mi lado a Yeonjun. Estaba molesto cuando se dio cuenta que Jungkook venía en dirección a nosotros.

—Me...lastimas—susurro con dolor.

Yeonjun suelta mi mano preocupado y la toma entre las suyas para acariciarla.

—Lo siento...—dice.

Ya no están nuestras manos entrelazadas, pero no puedo evitar bajar la mirada a su izquierda, que la tiene hecha un puño mientras ve a Jungkook.

Creo que esto se está saliendo de control

—Oye....—me inclino hacia él—Podemos venir otro día si quieres. No tienes por qué sentirte incómodo.

—No, en absoluto, cariño. —se relaja un poco y sonríe—prometí cambiar y eso estoy haciendo

—Pero....

—Tranquila...—sonrie—observa esto.

Y siento el terror, porque mi novio es capaz de cualquier cosa. Y se perfectamente que lo que menos quiere es que Jungkook esté aquí.

—Yeonjun que....—me corta, cuando empieza a hablar

—¡Hey, Jeon...!—sonrie y llama la atención del pelinegro que ni siquiera se había dado cuenta de que estábamos en el lugar.

Jungkook nota mi presencia. Empiezo a sentir un poco de miedo al ver la forma en que nuestros ojos hacen contacto visual.

A diferencia de las veces en que nos hemos visto, esta es con Yeonjun, y la forma en que me mira, dice que se siente completamente molesto con la situación

Y el hecho de que Yeonjun—mi novio—lo esté invitando a que se acerque.

—Hola...—dice con frialdad y viene hacia nosotros

¿Como puede ser tan valiente para hacer eso?

—¿Como te va? He escuchado que los entrenamientos han sido bastante duros

—Si....la relación de ustedes también, ¿no?

Mierda. Esto no me está gustando para nada.

—Yeyo...—intento decirle algo, pero vuelve a cortarme.

—¿Nuestra relación?—rie y sus manos se dirigen a mi cintura. Me apega con fuerza a su pecho y entrelaza a la vez nuestras manos—Va mejor que genial—sonrie arrogante

—¿Seguro? Cuando las relaciones van más que bien significa que hay algo mal—alza las cejas retante

El ambiente cada vez se pone más terrorífico a mis ojos. Las miradas que se dan entre los dos tan desafiantes me conmueven, porque me da miedo que suceda algo que por supuesto, no quiero.

—Yeonjun, si quieres nos cambiamos de película....—le digo por lo bajo y él niega

—Por supuesto que no—sonrie y con las entradas en la mano me hace ir directo a la sala, dejando a Jungkook atrás.

Se perfectamente que esto para Yeonjun no es tan calmado como el intenta que parezca. Conozco perfectamente sus emociones y está explosivamente celoso.

Acaricio su mano con la intención de tranquilizarlo, en lugar de eso, me da una sonrisa tranquila, pero se que solo está fingiendo.

Llego finalmente a la sala de película. Empieza a llenarse bastante y me quedo helada. Yeonjun no suelta mi mano, mientras me lleva a la séptima fila del lugar, que está un poco vacía.

Y me siento, pero veo que Yeonjun sigue de pie mirando un punto en específico, con el ceño fruncido.

—¿Que sucede? ¿Viste algo que no te gustó?

—No, olvidalo. Cosas mías—se sienta a mi lado y se recuesta de mi. Lo siento un poco extraño, aún así.

Ignoro sus palabras y me concentro en mi mente que no deja de divagar en el asunto del anterior encuentro entre Jungkook y Yeonjun.

No me gusta para nada lo que está pasando.

—¿Yeonjun?—una voz femenina resonó en mis oídos muy cerca. Alcé mi ceja sin comprender, de inmediato.

Efectivamente. Frente a mi había una chica, un poco alta, cabello castaño con mechones rubios. Sus ojos eran bonitos. Bueno, ella completamente lo era.

La favorita de Dios. Si.

Un momento, Hannie. ¿Ella llamó a Yeonjun?

—¿Hyemin?—los ojos de Yeonjun se abrieron. ¿Tan sorprendido estaba?

—Eh...hola...—salude tímidamente.

—Amor, ella es Hyemin—mi novio la señala, la chica mueve sus manos ligeramente en señal de saludo—mi amiga.

—Un placer—se inclina y yo lo hago desde mi asiento.

—Es mio—respondo

—¿Que...hacías por aquí?—pregunta él

—Venia con una amiga, pero se tuvo que ir. Así que supongo que veré la película sola.

—Sientate aquí—la invito para que lo haga, del lado de Yeonjun que obviamente es a quien conoce.

—Oh, bueno—con un poco de timidez lo hace y se coloca al lado de mi novio.

—¿Y preferiste ver la película sola?—pregunto curiosa

—Si.—replica—mi deportista favorito entrará a esta sala—dice con emoción

Está hablando de Jungkook, ¿verdad?

¿Es una broma? ¿Además de que está en el mismo lugar que yo tiene que entrar aqui?

¿Que demonios tiene la vida en mi contra?