He llegado a la beca y más feliz no me puedo encontrar. Me tiro en la cama con una sonrisa en el rostro y suspiro.

Al mirar a los alrededores de mi dormitorio siento como la tranquilidad y paz llega a mi. ¡Al fin paz!

-Realmente pensé que extrañabas tu hogar-niega repetidas veces Sook, a la vez que comienza a desempacar su ropa.

Me levanto de la cama, borrando mi sonrisa de los labios y ahora hago una mueca. Cruzo mis brazos, al igual que mis piernas y ahora, en este instante le presto toda la atención posible.

Se viene una bomba

-El dormitorio es mi hogar, ese no-replique con las mismas ganas de lanzarle algo.

No era nada nuevo para Sook mi situación en casa. Conocía todos los detalles y problemas desde que nací hasta hoy mismo. Ella es mi diario personal. Por eso me molesta que responda este tipo de cosas.

-La apoyo-Hari levantó su mano con una sonrisa, señalándome-Ya mi casa solo en un apartamento donde tengo mi ropa y cosas

-Toda una vida también-intervino Sully.

Y ahora que la menciono. Cabe destacar que se pasó todo el viaje en silencio, lo cual significa que no me explico absolutamente nada de su situación. Aunque me había dicho que nada nuevo había sucedido. Pero ¡Vamos! Algo debió pasar. No creo que se sigan evitando todo el día.

-Tengo derecho a callar, porque argumentos no me faltan para ganar edta conversación. Mi tiempo es valioso. No lo desperdiciare-me levanto de mi litera, recogiendo mi cabello en una coleta. Ellas se quedan perplejas con su vista, posada en mi persona. Y yo, solo me dedico a caminar directo hacia la entrada.

-¿Tanto extrañabas el dormitorio y ya te vas?

-Ire a ver q Yeonjun, trio de idiotas-espeto con mi cabeza reposada en el marco de la puerta y me desaparezco de allí

-¡Si lo somos tú tambien!-la voz de Sully resonaba por detrás y no hice más que reír.

***********

-¿Puedes creer que de repente empezó a actuar normal? Bueno, no en ese sentido-ladee la cabeza-Yo diría más bien que como una madre normal

Yeonjun no dejaba de observar su celular, y eso me hizo molestar un poco. Solo que me quedé en silencio. No quería estresarlo más o parecer alguien muy fuerte.

Pero si me dolió que no me prestará atención.

No digas nada. Tu solo espera a que el note tu existencia.

Estoy sentada en el borde de la cama de su dormitorio. El está recostado de la pared mientras no suelta los dedos y la vista de la maldita pantalla. Yo también estoy en silencio.

Ya han pasado 5 minutos literalmente. Creo que mejor tomas venganza.

Agarro mi celular con brusquedad, para que note mis movimientos pero ni eso. Lo enciendo, tampoco lo noto, hasta que comienza a vibrar. Una llamada estaba recibiendo en este mismo instante

Mierda, es Jungkook. ¿Y ahora que hago?

¿Que haces cuando alguien te llama?

Vale, voy a contestar.

-Eh....hola-mi voz sonó algo baja.

-¿Donde estás?

-Tranquilo, aún no he pasado al inframundo. Sigo siendo humana-mencione con algo de sarcasmo

-Estas con el cara de Sunyu, ¿cierto?

-¡Que es....!-respire hondo y me contuve-¿que quieres?

-¿No quieres decirme donde estas y yo debo decirte lo que quiero?

-¿Por qué demonios....?-mi celular desaparece de mi mano.

Entro en un ataque de pánico total. Siento mi cuerpo entero temblar y mi respiración, básicamente se quiebra por completo. Yeonjun tenía mi celular en sus manos. Oh, no..

No contestes....

-¿¡Quien demonios eres y que haces hablando con mi novia?!-interroga con toda la furia que pudiese existir.

Me arrimo a su cuerpo y le "intento" quitar el celular.

A quien engañas, no puedes con un hombre que es mil veces más grande en tamaño y cuerpo que tú. Ya déjate de tonterías. Actúa diferente, estúpida.

-Yeonjun suelta el...-Ok, ya había terminado la llamada.

Tengo el ligero presentimiento de que la maravillosa inteligencia de Jungkook le permitió colgar al escuchar la voz de Yeonjun. Si, bueno, eso lo agradezco.

Una sensación de alivio recorre todo mi ser. Suspiró con tranquilidad y me dejó caer en su cuerpo, menos preocupada.

No te ilusiones. Esto no ha terminado.

-Jungkook, ¿eh? Ese nombre....-intento pensárselo. Soltando el celular. Ah, menos mal no revisó ninguna conversación.

El teléfono, lo habías bloqueado.

Cierto.

-Yeonjun.....-intento tranquilizarlo. Pero...¡A quien engaño! Cuando está enfadado ni yo lo puedo calmar.

-¡Ya recuerdo! ¡Como olvidar a tan apreciado personaje-espeta con aires de sarcasmo. Ruedo los ojos al instante-Ese, es el imbécil, que tuvo el descaro de hablar contigo, con la desfachatez de estas tan cerca de ti, al punto de prácticamente besarte!

-¡No seas ridículo! ¡Solo estábamos hablando!

-¿Hablando? ¿¡De verdad eso crees!? Soy hombre, Hannie. ¡Se perfectamente las intenciones de un hombre y las suyas no eran para nada sanas!

-¡Pues yo he hablado más tiempo con el y convivido, y no es lo que piensas! Siempre crees cuando tengo a un chico cerca que me quiere hacer algo! ¡Ya estoy harta de tus celos sin sentido, Yeonjun!-me aparto de él, ahora me estoy levantando de su cama

-Esta vez es diferente! Si, he actuado como un tonto con otras personas. Soy posesivo, lo sé-afirma con su cabeza, en un ligero movimiento-Pero está vez, es diferente y mucho. Y hablo en serio. Te quiero lejos de el. Es más, comencemos haciendo lo que debí hacer antes-sus manos, se dirigen velozmente a mi celular que estaba encima de la cama, aún y lo atrapan.

El teléfono es colocado frente a mi rostro a la velocidad de la luz y...

¡Oh no! Se ha desbloqueado

¡Idiota reacciona!

-¡¿Que mierda estas haciendo...?!-me arrimo a el e intento arrebatarle el celular, pero está trabajando más rápido de lo que puede. ¡Maldita sea!-Sueltalo, es mi celular, ¡respetame!

Por fin, consigo quitárselo. Pero en su rostro se observa una sonrisa. Lo miro confundida, el celular estaba desbloqueado, no tenía nada. La pantalla de inicio se encontraba lo suficientemente intacta. ¿Que había hecho?

-¡Dime que fue lo que tocaste aquí! ¡Dímelo, Yeonjun!-exclamo ya, sin paciencia alguna.

-Que pena, ahora no podrás llamarlo-sonrio con sorna y se estiro en su cama nuevamente.

Abri los ojos procesando toda la información que fue capaz de llegar a mi cerebro. Y al darme cuenta, reaccionó, de la peor manera posible

-¡¿Te atreviste a borrar su....!?.

-¿Contacto?-termina por mi jugando con el cordón de su sudadera-Si, eso hice. Ahora vere a quien vas a llamar-rio

-¡No tienes derecho a hacer eso!-reclamo con toda la impotencia posible

-Soy tu novio

-Eres mi novio, ¡no mi dueño! No puedes simplemente controlarme así de la nada. Es mi celular y yo decido que tener y que borrar.

-Si ustedes dos se están coqueteando en secreto, al menos disimulen mejor, ¿no crees?-ladea la cabeza, irónico-no tienes que coger tu celular y hacerlo en mi propia cara.

-¡El me llamo primero!-argumente-Tu estabas con tu celular. Probablemente ni siquiera hayas escuchado un cuarto de lo que converse contigo

-Eso es diferente

-¿Por que? ¿Por qué eres tú? ¿Por qué eres un hombre?-me cruce de brazos. Ahora, si estaba completamente molesta. Odiaba sus comentarios machistas-te recuerdo que te besaste con mi hermana y cuando se supone que debía dejarte sigo aquí

-No es excusa.

-Tienes razón, no es una excusa m-asiento-Es una razón. ¿Y quieres saber mas? ¿Que seguridad tengo de que no estabas hablando con ninguna chica? Ninguna

-No puedes...

-¿Por que no te quito también tu teléfono y borro el número de tu mejor amiga con quien pasas tanto tiempo?

-Tu eres mi novia, no ella .

-Lo mismo digo-enderezo la vista hacia otro lado que no fuera su rostro. Estaba odiando esta conversación.

-Ese Jungkook es...

-¿Diferente?-completo-¿y ella no? ¿Por qué yo si y tu no?

-Esta conversación no tiene sentido.

Si, eso fue lo ultimo que escucho salir de su boca. Se levanta de la cama, y se dirige a donde estoy parada. Llega a mi, me toma de la cintura y me besa bruscamente. Me aparto de él, molesta. No quiero eso, por supuesto que no, ¿ahora? Para nada

Desaparecer es la solución.

Con toda la fuerza que existía dentro de mi, lo empuje hacia atrás, despegándome de el. La acción había sido tan rápida que, luego, Yeonjun se tocó los labios, con confusión. Me miró extrañado y se acercó a mi

-¿Que crees que haces?-le pregunto alejándome

El se vuelve a acercar, nuevamente, sacándome el mínimo de paciencia que me quedaba. Con sus manos me empujo hacia la cama y caí, sentada, entonces lo vi quitarse la camiseta.

-Solucionar está discusión

No. Se a donde va a llegar esto.

No lo permitas, por lo que más quieras.

-¿En serio estás pensando en esto de esa forma, Yeonjun?-me levanto de la cama, con asco y me aparto. Comienzo a recoger todo lo que había afuera

-Ya, venga. Es lo mejor, relájate

Maldito. Esto no puede ser.

-¿Estas bromeando? ¿Tienes idea de lo que acabamos de hacer?-cuestiono desconectada. O más bien sin creer está actitud

-Si, llevamos una semana sin vernos y días son hacerlo. ¿Que mejor reconciliación que esta?

-¡Los problemas no se resuelven así! Acabas de hacer un montón de idioteces en menos de una hora! Estoy más que molesta contigo. No quiero tener nada contigo

-Hannie....-me agarró el brazo pero lo solté con brusquedad.

-No, Yeonjun. No hay persona mas cansada y harta de esto que yo. ¡Todos nuestros malditos problemas, siempre los quieres resolver con sexo!

-Eres mi pareja. Por favor, Hannie-hizo una mueca y negó repetidas veces

-Es que....¿No te das cuenta? Ahí está el problema. ¡Piensas que soy tu puto objeto de satisfacción y así me quieres usar. Soy tu novia, no algo que puedas usar y desechar solo para tener placer. No te pertenezco, y por eso no puedes actuar de esta manera tan cinica y cobarde, ¡joder! ¿Que mierda te está sucediendo? No se quién eres, este no es el chico que me conquistó, este no es....-negue y comencé a caminar

-¿Te irás con el, verdad?-lo escuché por detrás-por eso no quiere nada conmigo. Esta claro. Y por supuesto, usas este tema como excusa

Apreté los labios de la rabia que contenía todo mi cuerpo. Respire profundo, inhalando paciencia. Todos mis sentidos se normalizaron y ahora, estaba decidida a decir una última palabra antes de irme.

-Analizalo todo, Yeonjun. Yo no perderé mi tiempo discutiendo contigo. Tu eres el único que sabe la repuesta a esa pregunta.

Y con toda la impotencia del mundo, mis pies se comenzaron a mover en la direccion que estuviera fuera de ese maldito dormitorio. Ni siquiera le lancé una última mirada antes de salir. Ya yo estaba dirigiéndome hacia otro sitio.

Yeonjun. Estoy tratando de recordar que te quiero y que es a ti, a quien se supone que debo de tener a mi lado, pero realmente.

Esta todo yéndose a la mierda, por su misma culpa.

Agarre mi celular y busque entre los contactos que aún me quedaban a alguien a quien llamar.

-Hoseok....-dije con la voz un poco fina.

-Hannie, brillante como el oro-su voz dulce me saca una sonrisita-a su servicio

-Quien no te quiera....-susurro-¿Puedo hablar contigo sobre algo?

-Estamos todos en casa reunidos. Ven hacia acá-su aviso me hizo alzar las piernas en dirección a la calle y, obviamente ya me encontraba caminando.

-De acuerdo.

Sin contar los miseros segundos en los que estuve plantada allí, conseguí moverme lo más rápido posible, en pocas palabras, a lo que llaman la velocidad de la luz, justo para llegar al lugar donde, últimamente soy feliz

************

-Eh....¿Por qué esperamos tanto para conversar?-inquirí curiosa sentada encima de la cama de Hoseok.

Llevaba unos 20 casi 30 minutos en el apartamento, y aunque algunos estaban en sus habitaciones, me quedé conversando prácticamente todo ese tiempo con Namjoon, mientras Hoseok "preparaba las condiciones de au habitación".

-Un psicólogo no puede atender a sus pacientes en una sala sin arreglar-se acomoda frente a mi en la cama, con un panfleto en sus manos.

-Terminare diciendo esa frase en mis proyectos finales, ya verás-advierto. Mis manos juguetean con los dedos de la diestra.

Así parezco que tengo una crisis ansiosa.

-¿Por donde quieres empezar?-Consulta con la mirada fija en mis órbitas. Estaba distraída con la almohada que conseguí olvidar que íbamos a conversar.

Me remuevo en el espacio-colchon, y consigo acomodarme.

-Por ti-replico. Noto el asombro en su mirada. Sin comprender, algo extrañada y un gesto bastante gracioso-Hey, sin esa cara-una risita se torno en mis labios-solo quiero ayudar.

-Se supone que este es mi trabajo-articula, aún frunciendo su entrecejo-¿Cual es el tema del cual estás queriendo hablar, Hannie?

-Bueno, creo que no lo dije bien-aclare mi garganta-¿Necesitas hablar conmigo sobre Sully?

Oh dios, creo que el simple hecho de mencionar el nombre de su mejor amiga lo ha dejado sin términos para responder. Mi vista es capaz de reflejar la forma en la que su cuerpo se tensa por completo e incluso, logro sentir como la cama tiembla un poco, debido al movimiento que causa. ¿Estaba asustado? No lo se. ¿Nervioso? Seguro.

-Hoseok....-repito. Debía hacerlo, por su silencio, notorio-No puedes evitar este tema, tendrán que hablarse y tocarse en algún momento

-¿Es necesario conversar sobre este tema?

-No es mi intención meterme, solo quiero saber cómo estás. Ya me he enterado de todo.

Lo noto pensativo. Sus pies se mueven de un lado a otro y además, se encuentra observando un punto en específico. Entonces, vuelve a hablar:

-No quiero evitar este tema. Pero la verdad, no te noto muy bien. Hablemos, sobre ti.

-Estoy bien, tranquilo-sonrio, así la este fingiendo un poco.

-Ni que los pacientes fueran a diagnosticar a sus doctores-niega repetidas veces-venga ya

-A todo esto... -menciono, curiosa-¿Y....Jungkook?

Cuando quieres, puedes, maldita estúpida.

Solo fue una pregunta

-No está por aquí-reaponde. Siento un nudo hacerse en mi garganta y me entristezco.

Cuerpo contradictorio

-¿S-si, pero está en su habitación, verdad?-Se que suena estupido, pero tengo una esperanza, por mas pequeña que parezca

-Realmente no te ha contado nada sobre el-niega repetidas veces. Lo veo bajar la cabeza a sus manos con frustración. Algo dentro de mi me dice que aquí hay algo fuerte-No, no te contaré. Yoongi tiene razón

Maldita intriga. ¿Que demonios sucede con Jungkook?

-¿Pero qué mierda sucede?-pregunto harta. Este asunto cada día crece-¿Que es lo que Jungkook debe contarme? ¿Y por qué no está aquí? ¿Esta en Busan?

-Este asunto no me confiere, Hannie-lamenta-No es el momento. Jungkook es totalmente responsable de proteger sus asuntos personales.

-¿Si quiera puedes decirme donde está?

-No. ¿Por qué tanta necesidad de conocer su ubicación actual?-curiosea. Me remuevo inquieta, por la pregunta. Eso no me lo esperaba.

Y tampoco tienes idea de que responder. Casual

-Esto es muy extraño. Solo quiero....saber, es muy misterioso. Jungkook...

-¿Sientes algo por el?-me interrumpe

-¿Como que si siento algo por el? Hoseok, estoy en una relación.-hablo. Busco la forma de que no se note mi nerviosismo, pero mi cuerpo se mueve inconsciente. Mis pies están sobre la cama, moviéndose de un lado a otro. Mierda

-No recuerdo que las relaciones tengan una imposición de sentimientos-se encoge de hombros-Te he visto y analizado. La forma en que lo miras, lo buscas inconscientemente, hablas con el tan natural, que hasta nos sorprende tu capacidad de mantener una conversación con el durante tanto tiempo, e incluso, pasas el tiempo que toda chica anhela en sus sueños

Maldición. Tenía tanta razón. Hoseok podía parecer infantil, pero estudia psicología, y, créanme, que estudia a las personas por naturaleza. Y lo admito, no había mentira en sus palabras. Pero odiaba con mi alma, tener que mentirle, sobre todo, porque no quiero que esto se extensa más de la cuenta.

-Mi relación es muy complicada, Hoseok. No se ni siquiera como definir lo que hay entre los dos. No es amistad, no es amor, no es odio. Sinceramente esto, es peor de lo que pensé. Pero no es así, creeme.

-Jungkook desaparece en los días especiales, debes estar actualizada sobre esto, probablemente, ya te lo han contado, porque ha sido tan obvio que el rumor se esparce-replica-Si, se donde está, pero esto es más complicado de lo que ves y escuchas

-¿Que quieres decir con ello?

-Hannie, eres mi amiga, pero Jungkook también. No creo que te agradaría la idea de contarle algo muy intimo tuyo a una persona en la cual no le has dado ni los detalles.

A quien engaño. La razón que hay en sus palabras es tan fuerte que me duele. Sin emabargo, esto no quedará así. Me enteraré tarde o temprano que oculta este chico.

-¿Y cuando verán a Jungkook? ¿Ya han hablado con el?-cuestiono. Olvido el tema al instante lo saco.

-Nadie se comunica con el en estos momentos-se detiene y baja la cabeza, ubicándola entre sus brazos-No podemos

-Entra en un ataque de ira. Odia que lo llamemos, el no lo hace con nosotros. Ya nos ha advertido, que esos momentos son de soledad.

-¿Jamas ha llamado a alguien? ¿Intencionalmente?

-Para nada. Y ya se ha vuelto una costumbre

-¿Nunca, nunca?-vuelvo a interrogar-¿Ni aunque estuviese al borde de la muerte?

-Prefiere morir allí-contesta suspirando-Ya hemos aprendido a convivir con ello y respetarlo.

Me muerdo la lengua sin darme cuenta. Estoy demasiado nerviosa. Hoseok ha convivido con Jungkook durante demasiado tiempo. Es obvio que está diciendo la verdad.

Solo hay un detalle. Algo que no sabe nadie. Y créanme que estoy más que desconcertada.

Si Jeon no contesta ni recibe llamadas durante estos periodos....

¡¿Por qué me llamó a mí?!

*****************

Hoseok y yo hemos terminado de conversar hace un rato. No tengo idea de cuánto tiempo estuvimos dentro de esa habitación. Pero la verdad, es algo que aún ando digiriendo. Claramente mi mejor amiga fue tema de conversación, sobre todo cuando él y yo tenemos la capacidad de conectar al instante, tanto que podemos cambiar de un tema a otro sin problema alguno

-¿Estan entrenando ahora que empezó el año?-pregunta Sook jugando con su pulsera

-No mucho, hemos estado algo complicados con los nuevos exámenes-responde Namjoon-Esperaremos a que regrese Jungkook

Ojalá no fuera tan mencionado. Todo estuviera mejor, pero no, estoy destinada a joderme con este tipo.

Me encojo en un ovillo en mi asiento y miro a Ruby con algo de ansiedad. Los problemas que estorban en mi mente estresan mi estado.

Puede parecer algo sin sentido, pero si, un peluche en forma de conejo, cambia mis emociones y me hace sentir mejor con tan solo mirarlo

Y si, es cierto. Es el peluche de Jungkook.

-¿Y si jugamos a la vuelta?-pregunta Seokjin matando todo hilo de pensamientos que se había formado en mi cabeza.

Me incorporo y decido prestarle más atención al tema. Aún así, sigue rondando toda esta maldita basura en mi mente.

-¿Vuelta?-cuestiono. Me remuevo en mi asiento-¿Que tipo de juego es y de que va?

-Lo hacemos en equipo, el que más vueltas de por el juego gana-responde-tienes que atravesar obstáculos, pasar por lugares, si es la policia, te quedas en cárcel, o realizas hipotecas, ya sabes, lo básico.

Fruncí el ceño automáticamente.

-¿Ese juego no es....?

-Monopolio-responde Yoongi-si, solo que este idiota nunca memoriza el nombre

Seokjin refunfuña molesto y se va de la sala. Namjoon queda mirando el espectáculo suspirando y luego, decide hablar.

-Genial. Utilizaremos un tablero imaginario-sonrie fácilmente Namjoon usando sarcasmo

-Esta en el cuarto de Jungkook-Taehyung se encoge de hombros

-Claro. ¿Y como mierda vamos a abrir?-espeta Jimin-¡El único que la sabe es el!

-De hecho....hay otra persona que la sabe-Hoseok se hace notar en el salón-¡No soy yo, vale! Me refiero a que lo escuche decir que había alguien más que la conocía en caso de emergencias.

Todos se quedan asombrados. Abren su boca, prácticamente todos los chicos, como si estuvieran recibiendo la noticia menos creíble que existiera.

Y lo peor. Se han girado, directamente para verme a mí a los ojos. Bueno, está claro, yo se la clave, pero de ningún modo pienso entrar sin su permiso

-¡Ya dejen de observarme!-reclamo-No entraré al cuarto de Jungkook, es su privacidad

-Pues entonces dila y lo hacemos nosotros-opta Yoongi

-Es en caso de emergencias. Por el momento no ha sucedido nada-lo defiendo

-Hey, esto es una emergencia-se cruza de brazos Taehyung-Hannie, anda. Jungkook no sabra, disimulamos y mentimos genial-levanta el pulgar

-¡No, no, no!-me cruzo de brazos y hago una postura recta, no puedo dar señales de debilidad. Estoy completamente seria.

*************

Vale. Se que soy una débil. Estoy consciente de ello. Pero realmente, me sentí algo presionado por sus rogos. Créanme, que todos los dioses que existen, son testigos de que les he pedido que Jungkook no se entere de nada.

Entro al cuarto de Jungkook. No estoy cuidando el silencio de mis pasos ni nada por el estilo. Simplemente estoy tratando de que todo quede igual como está.

Hoseok, me ha dicho que el tablero de Monopoly, está encima de su mesa.

Me dirijo con pasos sigilosos intentando no tropezar con nada, debido a mi torpeza y por suerte, logro controlarme.

El cuarto de Jungkook, no ha sido nada nuevo para mí. Tengo el privilegio de decir que ya he entrado aquí algunas veces y no comprendo la razon por la cual este chico ha tenido la confianza en darme la clave.

Llego a la mesa donde está su computadora y algunos de sus trofeos en las esquinas. Ahí está el tablero de Monopoly. Esbozo una sonrisa inmediatamente y lo agarro.

Oh no, se ha caído algo

Me agachó para recoger el pequeño pedazo de papel que estaba por el suelo y lo vuelvo a poner en su lugar. Sin embargo, mi vista se desvía inmediatamente a lo que estaba escrito. No por curiosidad, sino porque mi nombre estaba escrito ahí.

¿Que demonios hacia la palabra Hannie en esa hoja?

Por un golpe de desgracia, consigo leer el papel que casualmente estaba escondido debajo del tablero y ahí encuentro un escrito, o una nota. No tengo idea de quién es.

Se perfectamente que esto pasaría. Porque eres todo lo que estoy seguro de que puede ser, Hannie. Si realmente quieres saber la razón por la cual quiero hablar contigo, deberás venir a esta direccion.

-¿Que demo....?-leo la dirección. Era el lugar del que había hablado Hoseok, que estaba aislado de todo.

Mi mente lo proceso algunos segundos. Me encontraba incrédula y sorprendida. Sin embargo, mi mente llamaba a otra cosa.

Debía ir allí.

Yo iría a por Jungkook.