𝗔𝗱𝗮𝗿𝗮 𝗠𝗶𝗹𝗹𝗲𝗿:
Después de esa horrible situación en la fiesta no quise salir de mi cuarto ni ir a la escuela, ya que el primer día de la semana que fui me encontré con miles de miradas que me juzgaban, otros que me tenían lástima y otros que solamente me escaneaba con la mirada, así que esa vez tomé la decisión de no ir a la escuela por unos días, no podría decir que caí en depresión pero me sentía fatal por lo que Dylan me había dicho, si realmente quería decirme eso creo que lo hubiera podido hacer en privado, no era necesario que lo gritara a los cuatro vientos y me humillara de tal forma.

𝗡𝗮𝗿𝗿𝗮𝗱𝗼𝗿 𝗼𝗺𝗻𝗶𝘀𝗰𝗶𝗲𝗻𝘁𝗲:
El capitán del equipo de basquetbol estaba en los vestidores, quitándose el uniforme de deporte para ponerse su ropa de diario, ya que el entrenamiento había terminado.

—Hey—el rubio pegó en uno de los casilleros provocándole un susto a su amigo.

—Eres un tarado—comento el bronceado.

—¿Cómo vas con eso?—preguntó mientras apuntaba el ojo morado de su amigo.

—Me duele pero no es lo mismo—alzo los hombros.

—¿Sabías que eres un idiota?—cuando obtuvo la atención de su amigo, el cual estaba en el celular texteando algo, continuó hablando—si no querías a Miller a tu lado se lo hubieras dicho en privado.

—Carajo ¿Tú también?—dijo poniendo su atención nuevamente en su dispositivo móvil—Si la quería Rafa.

—¿Entonces?—dijo el chico recargado en uno de los casilleros.

—Fui impulso besar a esa chica—dejo su celular a un lado—siendo sincero siempre quise a Adara.

—¿Tanto la querías que también la engañaste en la fiesta de Natalia?.

—¿Cómo sabes eso?—comento el que estaba sentado totalmente desconcertado.

—Por Dios—Rafael se sentó a un lado de su amigo— los chicos me dijeron que te besaste con una chica, y según te sentiste culpable y fuiste a besar a Adara.

Se creó un silencio totalmente incómodo, ninguno de los 2 pronunció nada, el rubio pensaba en como su amigo era tan idiota como para engañar a tal chica y Dylan se preguntaba el porque había hecho tanta tontería, le había costado casi 1 años conquistarla como tal, hasta que por fin pudo estar con ella, sentía una felicidad que nunca había experimentado, el chico decia que Miller era esa chica con la que podías ser tu mismo, no importaba si te comportas como un niño pequeño, si te comportabas como un adolescente con problemas familiares, Adara Miller te aceptará tal y como fueras.

Dylan estaba conciente que había perdido a una persona que realmente lo apoyaba hasta en lo más estúpido, no sabía si después de todo el alboroto que armó Adara lo perdonaría, dudaba en si arriesgarse.

—¿Cómo reconquistar a una chica?—le pregunto a su amigo, Rafael solo volteo a verlo un tanto desconcertado.