→ Conmigo
Sanha revisaba una y otra vez su teléfono, su padre cada hora le decia lo mismo, que aún estaban esperando por ver que es lo que sucedería. Eunwoo y Minhyuk lo habían acompañado toda la tarde y se habían marchado hace unas horas, pasada las doce de la noche.
Jugo un poco con Roa y los bebes quien empezaban a caminar mucho más, para poder distraerse y no pensar ni preocuparse.
Tomo un baño caliente, reviso su teléfono una vez más, no tenía noticias desde hace dos horas. Con un enorme suspiro se acostó en la cama de Bin luego de ver por el bien de los mininos. Dio vueltas y vueltas, eran casi las tres y media de la madrugada y no podía dormir, necesitaba a Bin a su lado.
Rendido, se levanto y camino hasta la cocina y preparo un poco de té.
Unos minutos más tarde, sentado en la isla, sintio ruido fuera del departamento, unos segundos despues pudo ver el rostro de Bin tras la puerta.
- ¡Bin! - corrio hasta él y lo abrazó con fuerza - ¿Estas bien? ¿Te hicieron algo? ¿Te hirieron?
- Mi amor, estoy bien. Solo un poco
cansado - sonrio.
- No pude si quiera dormir, estaba tan preocupado. ¿Que sucedió? ¿Tendrás que volver allí? Dios, no me imagino que debiste sentir con todo esto.
- No tendré que volver, todo esta solucionado, no hice nada de lo que me acusaban.
- Lo se, mi amor, lo se, por su puesto que no. Pero tenía miedo de que no pudieran probarlo, Dios, ¿Por que esa idiota hizo eso? no, sabes que, no hablemos mas de eso, estas aqui, estas aquí.
- Lo estoy. bebé. Abrázame más, me hiciste falta - Sanha lo volvió a abrazar con fuerza - ¿Cómo están mi hija y mis nietos? - sonrió.
- Están bien, ahora durmiendo.
- Creo que los acompañaré - bostezo - Pero primero me duchare.
- ¿Comiste? Puedo prepararte algo.
- No, gracias, solo quiero dormir.
- Esta bien. Te prepararé un baño ¿Quieres?
- Si, mi amor, muchas gracias.
- No es nada, amor - dejo un beso
dulce en su boca y camino hasta el baño.
Bin sonrió, mientras lo veía caminar, de verdad estando en aquel lugar solo quería tener a Sanha al lado y abrazarlo, habían pasado tan solo horas y lo había extrañado. Luego de echarle un ojo a los gatitos y a Roa, se dirigió a su habitación para buscar ropa limpia, mientras pensaba en lo agradecido que estaba con Sanha y su padre, en lo afortunado que era al tenerlos ahora en su vida, mas allá del día horrible que tuvo, sonrió feliz, nunca se arrepentiría el estar con Sanha aún así la vida le dijera que eso era incorrecto en cierto punto.
[...]
Sanha miraba la puerta de la habitacion, Bin llevaba casi media hora en el baño, nunca tardaba tanto. Fruncio su ceño, salió de la cama y camino hasta el baño.
- ¿Bin, estas bien? - toco la puerta - Estás hace media hora allí - tocó otra vez - Bin - llamó y se preocupó porque no respondía.
Abrió lentamente la puerta y lo vio en la bañera, unos pequeños ronquidos se escuchaban, estaba dormido.
Sonrió enternecido y triste, de verdad estaba tan cansado que termino por relajarse por el agua y quedarse dormido.
- Mi amor - susurró sin despertarlo y acaricio su cabello cuando se acercó - Si tan solo yo no hubiera aparecido en tu vida ¿Hubieras tenido tanto problemas? - suspiró.
Siguió acariciando su cabello hasta que Bin se removió y despertó.
- Oh Dios, me dormí - dijo de repente,
observando el lugar.
- Si, y me preocupaste porque no venías y luego no respondías.
- Lo siento.
- Sufrirás de tortícolis si sigues allí - Bin rió - Vamos, cámbiate y ven a la cama conmigo - sonrió y acaricio su cabello húmedo una vez más antes de
dirigirse a la puerta.
- Ahora voy, bebé.
[...]
- Que lindo es estar en mi departamento, en mi cama, contigo - suspiro Bin, acostándose y luego Sanha se acerco para que pudiera acorrucarse junto a él.
- Es cierto, ahora podre dormir tranquilo - suspiro Sanha respirando del delicioso aroma del jabón liquido en el cuello de su novio.
- Gracias, Sanhie, por ayudarme.
- Cuando Minhyuk me lo dijo juro que sentí que se me detenía el corazón, estaba seguro que jamás harías algo como eso y entonces le dije a mi padre, y pudo conseguir un abogado. No podía dejar que estuvieras allí si no hiciste nada, quería que salieras lo más pronto posible - junto sus dientes, enojado.
- Gracias, mi vida - beso su frente.
- Dios, Bin, estaba tan enojado, ¿Como alguien puede ser tan cruel para hacer lo que te hicieron?
- No lo se, bebé, pero no le deseare el mal, no seré como ella.
- Aún así espero que pague algo mínimo por lo que hizo, no fue justo. Idiota - dijo enojado y Bin sonrió y beso su mejilla.
- Esta bien, ya paso. Solo espero que no me traiga problemas con la escuela - suspiro.
- Si eso sucede, iré por esa estúpida y la
matare - Bin rió.
- Tranquilo, tigre, no hace falta que mates a nadie por mi.
- Lo haría. Todo por ti - Bin sonrió.
- Te adoro tanto.
- Y yo a ti - sonrió y subió un poco su rostro para besarlo, un largo y dulce beso - Lo siento tanto - susurro y Bin se separo para mirarlo con el ceño fruncido.
- ¿Por qué, bebé?
- Por causar tantos problemas en tu vida.
- Qué dices, Sanha, si lo que sucedió no fue tu culpa.
- Pero si yo no hubiera aparecido en tu vida, no me habrías gustado, no hubiéramos sido novios y entonces no tendrías que buscar otro trabajo por el problema del gimnasio y entonces tampoco hubieras tenido que sufrir esta horrible acusación falsa.
- Y entonces mi vida seguiría siendo sola, aburrida y monótona.
- Pero sin problemas.
- Y tú que sabes.
- Estoy seguro que hubiera sido más tranquila.
- Escuchame Sanha - se separo de él y tomo su rostro en sus manos - Cuando estaba en esa horrible y sucia celda, y después cuando estaba en la sala de interrogatorio, solo pensaba en querer estar contigo, abrazarte, besarte. Amor, te quiero y me encanta tenerte. Que estés conmigo me hace bien. No me arrepiento ni si quiera un poco el haberte conocido, ¿Esta bien? Eres mi adoración, por Dios, eres todo lo que tengo. Deja de culparte por cada problema que hay en mi vida, no eres el causante. Si, ¿Mi amor? - Sanha lo miro, su labio temblaba, sus ojos estaban cristalizados.
- ¿De verdad?
- Claro que si, precioso. Deja de culparte por mis problemas y culpate por haber robado tanto pero tanto mi corazón y lograr que desarrolle los sentimientos mas reales, sinceros y profundos hacia ti - Sanha sonrió.
- Puedo aceptar esos crimines.
- Claro que si, eres el culpable, el único culpable de hacerme sentir tan feliz y completo, no te vayas nunca.
- No lo haré, no lo hagas tampoco.
- No podría ni aunque quisiera, te adoro, te quiero, me encanta tenerte en mi vida.
- Y a mi en la mía - Bin sonrió y lo beso una vez más.
- Bueno, ahora que te tengo en
mis brazos, puedo dormir - dijo
acomodándose en la cama.
- Ahora que estoy en tus brazos puedo dormir - dejó un beso en la punta de su nariz, Bin sonrió.
- Buenas noches, bebé - besó su cabeza.
- Buenas noches, mi amor - suspiro y luego de acurrucarse junto a él una vez más ambos cayeron dormidos.
El día anterior sería olvidado, un nuevo día florecería y la vida les sonreiría una vez más.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top