IX:Por primera vez
Después de levantar a T. Cartman o simplemente Cartman ahora y comprobar que en realidad no le había roto nada comenzó a desatarlo, lo cual no fue tan fácil como cuándo lo ató.
Había una pequeña voz en su cabeza que le decía que estaba comentiendo el peor error de su vida y solo por un capricho, pero bueno, ya había amenazado lo suficiente al gordo como para retratarse ahora... Su tía lo aniquilaria, pero al menos morirá feliz.
Le dio una mirada rápida al de pelo castaño que seguía quitándose algunos mechones de pelos encima suyo mientras murmuraba lo que Kyle creé que son maldiciones. Nunca había conocido a alguien tan grosero en su vida o a otro ser vivo humano que no fuera su tía y su propio reflejo.
El pelirrojo estaba complemente consciente de algo, y era que Cartman se iba a escapar en el momento que apartara la vista de él, no era estúpido, tal vez no sepa que era un prostíbulo o el mundo exterior pero eso no lo hacía estúpido, lo hacía ignorante. En fin. Tenía que estar mucho más atento con él y evitar que escapara, porque si lo hacia lo más probable era que viniera a buscar la bolsa.
Era gordo y segun en algunos cuento eso hace que corra menos y también lo hacía menos ágil, y si así era caso ¿Cómo logró subir aquí solo? Ya lo descubriría. La fuerza parecía que le pudiera ganar y solamente era por el hecho que Kyle era más flaco, no es tan flaco en realidad... Aun que su tía decía lo contrario... ¡Pero eso no importa! El podía simplemente pegarle con el palo de golf si intentaba escapar.
Y eso sonó horrible en su mente.
—¡¿Cómo es que tienes el pelo tan largo?!
Sus pensamientos fueron interrumpido por T. Cartman.
Con disgusto se quitaba los mechones de pelo, al mismo tiempo que limpiaba y revisaba que no hubiera piojos en él.
—Esta cosa tiene al menos siete metros de largo ¡Eso es exagerado! — volteó la cabeza para mirar al pelirrojo — ¿Por qué no te cortas el maldito cabello? ¿O es algo de judíos maricas?
Kyle fruncio el ceño ante eso ¿Este tipo no podía estar ni un segundo sin insultar? ¡Lo llamó judío marica! ¿Cómo sabía que era judío? Ni él mismo sabía que lo era.
Y pensando en realidad sus palabras anteriores, ni siquiera él sabía porque tenía el pelo tan largo, supuso que le crecía más rápido por que era "mágico" ¿Por qué nunca lo corto? Esa era la que menos sabía, en todos los libros que leyó los hombres tenían el pelo corto y no tenía nada de malo tenerlo largo pero... Era verdad. Su cabello... su cabello era un poco (Solo un poco) exageradamente largo...
No se lo podía cortar, a su tía le gusta así después de todo... Aun que tal vez él deber- ¡No! ¡No! ¡No! Ya estaba siendo lo suficientemente rebelde con esto de la escapada ¡Debe tener un límite! Y además, que le importa a este tipo, no era su problema.
—Lo tengo así porque me gusta — Respondió a la defensiva.
—Tienes gustos terribles.
El de ojos esmeralda puso sus ojos en blanco — No me importa lo que tú me digas, eres mi guía no mi tía — Cartman bufo hacia su recordatorio de que prácticamente era un esclavo, aunque al mismo tiempo se le hizo curiosa la palabra tía y no madre, pero le resto importancia.
En la mente de Cartman ya había ideado el plan perfecto:
Era simple. Solo llevaría lo más lejos posible al judío para luego fingir demencia y perderse "accidentalmente" y como Kyel es un pendejo que nesecita un guía porque no sabe dónde están las linterna, así que no encontrara el camino a casa, Cartman (Él mismo) como es super inteligente si recordará el camino y volverá, destruirá la torre si es necesario y encontrará la corona.
Pan comido.
Al voltearse para decir algo más hacía él pelirrojo no lo encontró donde estaba anteriormente. Cartman volteo una vez más para buscarlo y lo encontró revisando en un armario.
Eric estaba a punto de preguntar que demonio hacia, esta que se dio cuenta que estaba agarrando una especie de bolso largo y OHhHhhh... Se va llevar al maldito palo de golf... Eso es malo para su plan.
—Oye... Sabes, no es necesario llevar esa cosa... — Trato de convencerlo dirigiéndose hacia él de forma amigable — Normalmente la gente normal no lleva eso con eso encima, y aparentemente tu no sales mucho así que consejo de amigos... No lo lleves.
Kyle simplemente volteo la cabeza hacia su dirección levantando una ceja.
—Lo tengo para defensa personal así que sí creo que me lo llevó — Alago colocando el palo del golf en el bolso, no era grande en realidad, era pequeño y viejo pero el de ojos esmeralda no quería estar caminando todo el día con el palo en la mano.
Cartman forzó una sonrisa — Oh, no creo que eso sea la mejor arma de defensa, deberías dejarlo no pasará nada malo.
Kyle frunció aún más su ceño.
—Sí... Tienes razón, no es la mejor arma de defensa. Buscaré unos cuchillos.
La sonrisa para nada forzada de Cartman cayó rápidamente.
—¡Bien, llevate tu estúpido palo!
Kyle sonrió triunfante.
El castaño rodo los ojos—Solo ponte tus estúpidos zapatos y vámonos.
Los dos se miraron fijamente, Cartman esperando que el judío se coloque unos zapatos y Kyle sin la menor idea que hacer.
—No... Tengo calzado... — Respondió de forma indiferente el pelirrojo, esperando que no se de cuenta la vergüenza que en realidad tiene. Nunca tuvo zapato nunca lo nesecito.
Eric simplemente lo miraba con una mueca extraña — Bueno tienes un pelo que es mucho más grande que es obvio que no sabes que es pulcritud.
—¡Claro que se que es eso!
—Sí claro, dile eso a tus piojos — Comentó regalándole una sonrisa burlona que carecía más con el claro enojo del pelirrojo — ¡Oye! Te llevarías bien con Kenny, el tiene pulga de pobres y tu piojos judíos, JAJAJA.
A Kyle le seguiría doliendo la cabeza si trataba con este tipo. Por más que quisiera responder de una forma menos civilizada ya había cometido mucho crímenes en un solo día. Su tía tenía razón, tenía mal temperamento.
Inhalo y exhalo tratando de calmarse.
—Solo vámonos.
—Sí, lo que tú digas, como tu eres el que manda.
Eric se dio la vuelta caminando hacía dirección de la cerrada ventana, pero un repentino golpe en la cabeza lo hizo tambalear.
El castaño se volteo de manera agresiva frotándose detrás de su cabeza —¡AHG! ¡ENSERIO! ¡¿QUÉ MIERDA TE PASA!? — Bajo ligeramente la mirada y encontró un libro en el suelo.
—Lo siento — se disculpó caminando — lo estaba guardando y se me fue la mano.
Esto no contaba como agresión, en verdad fue un accidente. Por accidente tomó el libro y por accidente lo lanzó con todas sus fuerza a una dirección aleatoria y da casualidad que fue a la cabeza de Cartman.
Que lastima.
※
Ya había descubierto como había subido en primer lugar. Para sorpresa de todos el castaño tenía un increíble agarre.
Viéndolo bajar ya casí llegando a la mitad de la torre, ahora entiende porque es tan buen ladrón que tiene una gran recompensa. Con ayuda de unos pedazo de madera filosos que supuso que hizo para subir, bajaba el castaño a un lento pero buen ritmo a su parecer.
Una gran oleada de miedo lo invadió.
Enserio esto estaba pasando.
Fueron sus únicos pensamiento en ese momento. Miro detrás de él, fijando su vista en el dibujo que había pintado su tía ayer, si lo pensaba bien su dibujo no estaba del todo errado. Al bajar la mirada miraba nuevamente al chico de ojos de dos colores, estaba gordo, sí pero no tenía cuernos o dientes filosos, no era un monstruo o al menos eso se ve por fuera, por dentro sí parecía un verdadero monstruo pero más que uno que asusto es un monstruo que era increíblemente grosero y molesto que no da para nada de miedo pero pero provoca darle una cachetada. Ahora pensándolo bien es más como un ogro.
Pero quitando todo eso, no es simple convivencia con alguien que no conoce, es ir a un sitio que no conoce, un mundo entero que no conoce que puedo ser o no peligroso.
Y la idea simplemente se le hacía-
—¡Oye tú, pelirrojo! ¡¿Vas a bajar o ya te arrepentiste!
Emocionante.
El reciente grito del de pelo castaño había hecho que casi todo el miedo del ojos de esmeralda se fuera cambiandolo por derteminacion.
—¡Sí voy a bajar! ¡No me arrepenti de nada! — Si lo había hecho, pero el contrario nunca lo sabría.
Cartman resoplo en forma de burla continúando con su bajada.
El pelirrojo tomó su largo cabello y lo poso sobre el garfio justo como lo había hecho durante toda su vida para subir y bajar a Leslie y ahora le tocaba a él hacerlo para bajar por primera vez.
Ajeno a los movimientos que hacía Kyle, Eric pregunto—¿Y cómo diablos planeas bajar? Osea, no creo que ese palo estúpido tuyo sea de mucha ayuda ¡O al menos que quieras tirarte! Esa también es una grandiosa elección ¿Qué dices? — justo cuendo estaba por subir la mirada por el lado le paso el pelirrojo cayendo a una gran velocidad, sus ojos se abrieron como platos al ver eso.
Entre un grito de celebración y risas el pelirrojo bajaba, olvidándose de prácticamente todo, ya no importaba la torre, ya no importaba su tía, no importaba Cartman, ahora este era su momento.
Antes de poder tocar el piso freno su cabello agarrandolo con firmeza y fuerza, desde arriba escucho un "¡¿Qué carajo?! " pero no le dio importancia. Ahora mismo lo único que que lo dividía a el y el suelo, el césped era un centímetro, podía romper ese centímetro cuendo quisiera.
Se soltó y dejó caer ambos pies descalzos en el césped, se sentía tan.
—Áspero — se respondió a sí mismo con emoción — ¡Suave! — su respuesta fue tan contradictoria pero en ahora mismo no le importaba pensar en que se sentía el césped, simplemente quería sentir el césped — ¡Se siente increíble! — Se agachó ahora para tocarlo con las manos — ¡Son como las flores, pero, diferente!
Cartman desde arriba quería burlarse del judío, enserio quería hacerlo pero el hecho que en verdad no supiera cómo se sentía el césped se le hacía extremadamente raro.
Luego se burlaria pero ahora mismo se dedicaría a bajar por completo, hechando una que otra mirada a el de ojos esmeralda y sus raras acciones.
Eso le hacía preguntar si en verdad esta es su primera vez afuera o simplemente era un loco.
Se inclinaba más por la segunda.
...
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