109
Sábado 14 de octubre, por la noche
—Ponte esto –me indica Victoria, tendiéndome una pañuelo oscuro.
—¿Disculpa?
—Tengo una sorpresa para ti pero no quiero que veas nada –se encoje de hombros-. Lo averiguarías con facilidad.
Blanqueo los ojos pero la complazco. No me gusta festejar mi cumpleaños dado que mis padres nunca están pero debo admitir que las sorpresas siempre pueden conmigo.
Coloco la venda en mis ojos, lo suficientemente ajustada como para no ver pero no tanto, procurando que mi peinado no se desarme.
—¿Cuánto dedos ves?
Siento la presencia de Vicky frente a mí, pero realmente no veo nada.
—Ni idea.
—Bien, vamos.
Toma mi brazo y me saca de casa, despacio para no caer.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top