Primer capítulo: El Día de la Boda (parte I)
Luego del resumen de las circunstancias anteriores al capítulo que mostraremos ahora mismo, el día de la boda de Jessica Drew y su esposo, acaba de llegar. Las campanas, resuenan en un radio considerable de longitud, las personas que están alrededor, asombradas y encantadas, observan la gran catedral en la que la boda se llevaría a cabo, los animales y los niños corren de un lado a otro por el bullicio y por los últimos detalles de los preparativos de último momento, al igual que muchas aves que parece que fueron sacadas de una jaula. Con estas últimas, dejamos de distraernos para observar que ya la gente que hace un momento estaba distraída está agrupando sus ojos hacia una limosina que acaba de llegar recientemente. El auto, tenía colores oscuros y claros como detalles notorios para el público conocedor.
De pronto, de esta limosina, baja un hombre vestido con un traje negro elegante y una gorra igual de brillante que se encargaría de dar unos pasos, después de cerrar la puerta que abrió para poder bajar y hacer el resto, para abrir una de las tantas puertas que, como se sabe, este tipo de movilización posee, para permitirle el paso a una mujer muy bella que viste de blanco sencillo y potente que enamora y encanta a la mirada. Una dama que hoy se entrega por completo a un señor prometido que le ha prometido, valga la redundancia, amor eterno, desde hace un buen tiempo. Una mujer, cuyos atributos resaltan más por la forma en la que estaba hecha el vestido, o sea, un escote y medidas exactas, y que aparentemente estaba llorando de felicidad desde el momento en el que el auto llegó.
Todos sabemos que, un día tan especial como lo es un matrimonio, es muy importante para una mujer. Incluso más que para un hombre.
De cualquier forma, al bajar Jess Drew, de forma algo rápida, unos niños se encargan de acompañarla en su travesía hasta el altar con unas canastas llenas de adornos de colores blancos, algo de arroz y flores para entregársela al futuro señor Jeff Daemons de Drew, quien observaba encantado, endulzado y sorprendido a la mujer que se convertiría en la futura madre de sus futuros hijos. Bueno, como el padre de Jessica falleció hace tiempo, el papel de este sería ocupado por quien sería el hombre de confianza y mejor amigo de la novia: Peter Parker o Spider-Man. Él, acompañaría a los niños de hace un momento y tenía la máscara de su disfraz puesta con un traje de vestir negro mate. Notamos otra cosa que es que había más gente en la ceremonia de hoy Domingo 27 de Septiembre; esta estaba de pie dentro de la catedral de Nueva York, admirando el momento que se estaba viviendo. Incluido el sacerdote, el señor que fue encargado de tocar el órgano y el monaguillo.
Antes de llegar a la parte en la que el sacerdote narra los votos para el casamiento, Jessica Drew mira con lágrimas en los ojos al Peter Parker enmascarado, quien corresponde, le sonríe y le seca estas lágrimas, pero sin quitar la pose del brazo masculino dando el sostén al brazo de la mujer en cuestión. Ya en el altar, Jessica debe de seguir sin Parker para pararse al lado de Jeff Daemons. Cuando esto ocurre, el sacerdote asignado por los novios y por un contrato, puede comenzar a relatar su Monición, la cual causaría una sensación de nervios que se vería incrementada por el detenimiento del órgano que estaba siendo tocado tan detallada y casi perfectamente por un muchacho de 27 años.
Sacerdote: Queridos hermanos. Estamos aquí junto al altar, para que Dios garantice con su gracia vuestra voluntad de contraer matrimonio ante el Ministro de la Iglesia y la comunidad cristiana ahora reunida. Cristo bendice copiosamente vuestro amor conyugal, y él, que os consagró un día con el Santo Bautismo, os enriquece hoy y os da fuerza con un Sacramento peculiar para que os guardéis mutua y perpetua fidelidad y podáis cumplir las demás obligaciones del matrimonio. Por tanto, ante esta asamblea, os pregunto sobre vuestra intención.
Luego de la primera parte del Rito del Matrimonio Católico, el público y los novios serían testigos de la pregunta que se hace para comprobar que el matrimonio no es un fraude y es un hecho totalmente voluntario y legalmente legítimo. La parte de El Escrutinio, sería contestada por los amados de una forma segura y un poco nerviosa. Resaltarían más los nervios de Daemons, lo cual es un poco gracioso.
Sacerdote: *sonreír sin mostrar los dientes* Esposa y esposo, ¿venís a contraer matrimonio sin ser coaccionados, libre y voluntariamente?
Jessica y Jeff: Sí, venimos libremente.
Sacerdote: ¿Estáis decididos a amaros y respetaros mutuamente, siguiendo el modo de vida propio del Matrimonio, durante toda la vida?
Jessica y Jeff: Sí, estamos decididos.
Sacerdote: ¿Estáis dispuestos a recibir de Dios responsable y amorosamente los hijos, y a educarlos según la ley de Cristo y de su Iglesia?
Jessica y Jeff: Sí, estamos dispuestos.
Y así pues, la etapa del Consentimiento llegaría para que unas palabras que el sacerdote iba a decir en unos segundos indicaran a los novios que el momento de dar el consentimiento mutuo había llegado. Acto seguido, ya habiendo unido sus manos derechas, debido a la tradición y a la costumbre, Jess y Jeff pueden comenzar con el tercer paso para la obtención del matrimonio, con un gran eco que los acompañaría.
Sacerdote: Así, pues, ya que queréis contraer santo matrimonio, unid vuestras manos, y manifestad vuestro consentimiento ante Dios y su Iglesia. *mirar a Jeff*
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top