08
Armin se dedicó a visitar a la chica durante todos los días esperando a que despertara, teniendo cuidado de no ir al mismo tiempo que las demás amigas de su novia.
Fue justamente en una de sus visitas, una semana después de lo ocurrido, que ella por fin despertó. Él estaba poniendo algunas flores ahí mientras esperaba cuando sucedió.
— ¿Armin? — preguntó ella en un susurro llamando su atención.
— ________, estás despierta... — por un momento sintió unas enormes ganas de llorar.
— ¿Qué pasó?
— Lo siento mucho; tú saltaste para salvar a una de tus compañeras y luego.... una de las luces te cayó encima. — sus ojos ya podían notarse llorosos y su voz comenzó a quebrarse. — Fue mi culpa; no debí haberlos dejado hacer eso. Si hubiera insistido un poco más, incluso cuando dijeron que me iban a echar de la banda, tú no estarías así ahora.
— Tranquilo, no fue tu culpa.
— Sí lo fue; y mira como terminó eso.
— Armin, está bien; por favor no llores.
— Pero..... tal vez debería dejar la banda para que no vuelva a pasar nada así.
— No llevas ni un mes ahí; además a ti te encanta tocar música y me sentiría mal si lo dejas por mí.
— ¿Y qué se supone que haga? ¿Cómo podré ver a los chicos a la cara luego de todo lo que ha sucedido? Estoy muy cansado de ésta situación.
— Lo sé, yo también.... realmente quisiera poder ser honesta con todos, pero... no reaccionarán nada bien.
— Ya pensaremos en algo, creo. Por ahora mejor descansa y trata de moverte mucho. ¿Cómo te sientes?
— Me duele todo.
— Está bien, quizás debería ir a avisarle a algún doctor que estás despierta para que te revise; ¿te parece?
— Gracias; ¿cuánto tiempo ha pasado, por cierto?
— Una semana más o menos.
— Dormí mucho tiempo.... ¿estuviste viniendo todos estos días?
— Sí, es que estaba muy preocupado por ti.
— Que lindo... — le sonrió, causándole un pequeño sonrojo.
— B-Bueno, creo que es mejor que me vaya antes de que vengan tus compañeras y me encuentren aquí. — la contraria asintió.
— ¿Vas a volver a venir?
— Por supuesto que sí; tal vez algo tarde porque no me puedo arriesgar a que alguien me vea, pero seguiré viniendo hasta que te den el alta.
— Entonces estaré esperando.
— Nos vemos, linda. — le dejó un pequeño beso en su cabeza antes de irse.
— Hasta luego.
Armin regresó a su casa más calmado que antes; había estado tan preocupado que no había podido dormir bien. Se decidió a tomar una siesta al llegar a su casa antes de volver a hacer cualquier otra cosa; era evidente que no iba a ser muy eficiente si no estaba apropiadamente descansado.
Al llegar se recostó en su cama y se durmió casi de inmediato. Fue hasta después de tres horas que despertó y se dedicó a hacer su tarea, limpiar, y todas las demás tareas de su hogar.
Al día siguiente, llegó a la universidad y se cruzó con sus amigos; parecían estar molestos o disgustados por algo.
— Armin, necesitamos hablar un momento contigo. — le dijo Eren.
— Claro. — respondió tratando de disimular sus nervios.
— Te hemos visto; — las palabras de Jean hicieron a Armin entrar en pánico. — has estado yendo a algún lado en las mañanas y en las noches.
— Y no es por sacar conclusiones apresuradas ni nada, pero Connie te vio cerca del hospital donde está la chica esa del accidente de la semana pasada. — agregó Eren. — ¿Acaso has estado yendo a verla?
— N-No, por supuesto que no.
— Entonces, ¿dónde has estado yendo? — preguntó Reiner. — Lo que sea que hayas estado haciendo parece quitarte el sueño. — señaló las ojeras que aún se le veían a Armin.
— Esto es.... e-es que, yo... — trató de buscar una excusa creíble para no delatarse. — no estaba yendo al hospital; estaba yendo a un curso que estoy llevando desde hace poco cerca de allí.
— ¿En serio? — preguntó Connie.
— ¿Por qué luces tan nervioso, entonces? — cuestionó Eren.
— Es que... me da vergüenza de lo que trata el curso.
— ¿Y de qué trata? — volvió a hablar Eren.
— Repostería, es un curso de repostería. — dijo lo primero que se le ocurrió. — Es algo muy femenino, así que.... me daba vergüenza también considerando que la banda es de rock alternativo.
— Oh, ¿eso era todo? — preguntó Jean. — Realmente pensamos que nos estabas traicionando o algo así jajajaja.
— Jajaja, sí.... — Armin sonrió nervioso.
— Si sólo se trata de eso entonces está bien; no te vamos a juzgar. — le dijo Eren.
— Oye, ya que estás tomando ese curso, ¿me puedes traer algo de lo que hagas? — le preguntó Connie.
— Nos. — corrigió Reiner.
— A-Ah claro, pero no les puedo asegurar que esté demasiado bien; después de todo empecé hace poco.
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Luego de haber visitado a _______ de nuevo durante ese día, Armin tuvo que pasar al supermercado para comprar ingredientes y hacer un postre para sus amigos. No era un experto, pero ya había prometido que lo haría; eligió algo sencillo y que no llevara mucho tiempo hacer, es decir un pastel, compró lo necesario y regresó a su casa para ponerse manos a la obra.
Resumiendo lo sucedido, él descubrió que era muy principiante en el arte de la repostería; le llevó varios intentos hacer algo decente. La primera vez incluso olvidó poner la harina y confundió el azúcar con la sal, por lo cual el resultado fue una cosa.... bastante mala.
Cuando finalmente pudo hacer bien el pastel vino la parte realmente difícil; la decoración. Quiso mantenerlo lo más sencillo posible, pero aún así estuvo hasta altas horas de la madrugada haciendo todo detalle por detalle hasta que quedó satisfecho con el resultado final.
Una vez el pastel estuvo listo, él se encargó de guardarlo en un lugar donde estuviera seguro que no le iba a pasar nada a su creación, porque de ninguna manera iba a volver a hacer eso. El lado bueno era que gracias a su mentira estaba aprendiendo a hacer cosas nuevas, pero también aprendió la lección sobre tener cuidado con lo que dice.
🎶 Ayer estuve todo el día fuera de mi casa porque pues, resulta que mi papá cumple un día después que mi hermano, y una amiga de mi mamá dijo que fuéramos a su casa para celebrar ambos cumpleaños. Incluso tuve que hacer mi tarea allí jsahajsja
Besitos en las manos, cuídense y tomen mucha agua.
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