–Oh, Chanyeol. ¿Qué haces aquí?

–Preguntó algo curioso, ya que suponía que Kyungsoo lo vendría a recoger.

–Pues, Kyungsoo tenía un asunto que arreglar pero dijo que nos encontraríamos luego, por lo que vine yo. –Dijo mientras se rascaba la nuca, acto que hizo que Baekhyun confirmara sus sospechas, era él, siempre hacía eso cada vez que se ponía algo nervioso, sin embargo no entendía el porqué de aquello. Aparte aquellas orejotas hacían confirmarlo aún más. – ¿Vamos?

–Sí. – Dijo mientras salía y ponía llave a su casa, para luego dirigirse hacia donde suponía, era el carro de Chanyeol.
Una vez dentro del carro se acomodó y dispuso a ponerse el cinturón de seguridad, ya que Chanyeol ya lo había hecho, el ambiente era algo incómodo y tenso, ya que ninguno tenía la intención de iniciar una conversación, o eso pensaba Baekhyun, ya que Chanyeol se notaba algo ansioso por decir algo.

– ¿Era en serio? – Preguntó Chanyeol de la nada, dejando a Baekhyun algo sorprendido.

– ¿De qué hablas? – Dijo mientras se removía en el asiento.

–Si yo te gustaba. – Él parecía algo inquieto mientras manejaba, pues era claro que era un tema algo incómodo.

–Pues, si te lo dije era por algo. – Dijo desviando su mirada hacia abajo, sin embargo pudo notar una sonrisa algo ¿Coqueta? por parte del contrario, la cosa es que eso había pasado hacia unos cinco años aproximadamente, ¿Por qué sonreía de esa manera? ¿Acaso él sentía lo mismo ahora? En parte, el pequeño sabía que era bastante encantador, así que no se sorprendía. –Por cierto ¿Y cómo así volviste?

–Bueno, pues tenía una promesa que cumplir ¿No?– Aquel comentario por parte del orejón hizo resaltar un leve sonrojo en las mejillas del bajito, por lo que sonreía cual estúpido. Aunque eso no duró tanto ya que recibió un mensaje por parte del ojón de su amigo diciendo que se cancelaba la salida, ya que tenía que arreglar un asunto de suma importancia con Luhan, pero que no se preocupara.

–Supongo que ahora sólo estaremos tú y yo. –Dijo Baekhyun mientras guardaba su celular en el bolsillo trasero de su pantalón.

– ¿Cómo así? – Preguntó el alto deteniendo el auto.

–Pues se canceló la salida, vayamos a mi casa, tenemos que hablar acerca de muchas cosas, aparte a mi madre le agradará mucho que estés ahí. – Sin más que esperar cambiaron su rumbo nuevamente hacia la casa del bajito. En el camino, ambos intercambiaban rápidas miradas para luego desviarlas levemente. Una vez habían llegado, bajaron y se adentraron a la casa. Allí comenzaron a dialogar acerca todas las cosas que habían ocurrido alrededor de eso cinco años, no había nada mejor para Baekhyun que conversar con aquel chico que había robado uno que otro suspiro hace algunos años, aunque unos pasaron desapercibidos actualmente, a él aún le parecía atractivo el más alto, sin embargo no estaba listo para admitirlo.

–No has cambiado en nada, Baekkie. – Aquel comentario hizo sonrojar al bajito, quien bajó su cabeza levemente, acto que fue interrumpido por la mano de Chanyeol que sostenía firmemente el mentón de Baekhyun. – Te vez adorable.

– ¡Ay, ya! –Apartó levemente su rostro mientras se reía, contagiándolo al más alto. Ambos habían conectado sus miradas, estaban tan cerca que podían percibir la respiración del contrario, estaban en una cálida atmósfera, a punto de juntar sus labios, a no ser por una persona interrumpiendo su momento, haciendo que ambos rieran.

– ¡Mi niño, ya llegó mamá! – Dijo la madre de Baekhyun sin notar la presencia de Chanyeol ya que se encontraba quitándose sus tacones.

– ¡Suegra! – Al momento, Chanyeol ya se encontraba abrazándola, si bien era cierto, él era bastante apegado a ella y a su esposo cuando era pequeño. Si él se dirigía a los padres de Baekhyun como "suegra" y "suegro", era por el mismo pedido de ambos, ya que si su Baekhyun tendría que casarse, sería con el mismo Chanyeol.

– ¡Cuánto tiempo, cariño! ¿Cómo así por aquí? – Preguntó mientras tomaba por los cachetes a un alegre Chanyeol, olvidándose completamente de su hijo.

– Bueno, pues Baekkie pensó que sería buena idea que venga a visitarla. – Dijo mientras se separaba levemente del abrazo para posar su brazo por los hombros del bajito que se había quedado viendo aquella escena. 

– ¡Oh, por supuesto que sí! – Y sin más se dedicó a cocinar, al parecer algo rápido, ya que después de unos minutos ya estaba hecha la comida, después de haber dialogado y terminado de cenar, Baekhyun y Chanyeol se dedicaron a lavar y secar los pocos platos que habían ocupado, mientras la mamá del pequeño se dedicó a tomar una ducha, pues se notaba que estaba algo exhausta ¿Qué mejor que un buen baño?

– ¿Y el señor Byun? - Preguntó el alto mientras terminaba de secar los platos.

– Está en China, ya sabes, trabajando.

– Mmh, ya veo. Por cierto, no puedo creer que tu madre me reconoció a la primera y tú no. – Dijo el alto fingiendo estar ofendido llevándose una mano al pecho, acto que hizo reír al bajito.

– ¡Hey! Me pareciste conocido a la primera, tus orejas te delataban, sin embargo, no estaba seguro. Estás mucho más apuesto de lo que eras antes.

– Mmh, ya veo. Tú no has cambiado en nada, sigues siendo una ternurita. – Dijo mientras se acercaba al más pequeño tomándolo de los cachetes.

El bajito se zafó del agarre para darle un cálido abrazo, hundiendo su cabeza en el cuello del orejón, "embriagándose" con el agradable olor que emanaba. – Realmente te extrañé, también a tu perfume.

– Desde que me dijiste que te agradaba jamás lo cambié. – Se soltó del abrazo para sonreírle al pequeño. – Creo que ya es hora de irme, hasta mañana, Baekkie. – Se despidió encaminándose a la puerta, abriéndola para así salir. Una vez fuera, se dirigía hacia su auto, sin embargo, el pequeño chico lo interrumpió tomándolo del brazo, al girarse, el contrario se puso de puntitas para así estar a la altura del alto, lo tomó por las mejillas y estampó sus húmedos labios en los del alto, al separarse susurró un leve buenas noches en el oído del otro, para así "huir" a su casa, dejando a Chanyeol algo atónito y sonrojado.