El sol estaba tan caliente como Apolo en calzones y con una guitarra en medio de sus ocho abdominales.

Unos desgraciados chicos estaban talando las ramas de los árboles para un buen vecino que estaba muriéndose, (pero no lo suficiente para desgracia de Nico) de felicidad porque ya no tendría hojas en su muy costosa y excéntrica piscina.

En donde la cual Nico pensaba orinar llegada la noche, para que al día siguiente, el imbécil rubio cara sonriente de Whatsapp, nadara sin saber nada entre su líquido amarillo.

— Ven a vamos a divertidos dijo... Ven vamos a pasarla bomba como los grandes amigos que somos. — Farfullaba Percy Jackson, mientras escalaba con cuidado un árbol para llegar hasta una rama donde su traicionero colega lo esperaba. — Sí claro, sucio traidor, embustero, cabeza de zombie con mal genio de...

— Ya deja de maldecir, idiota. — lo reprende Nico al escucharlo con claridad, al mismo tiempo que se quita el sudor de su frente con su antebrazo. — Y pásame el machete.

— Pissimi il michiti. Ñiñiñi. — Percy le remeda en tono infantil, y luego le saca la lengua con mala cara, y Nico le responde mostrándole su hermoso dedo del medio. Con un anillo adornando su dedo moreno.

Y aquí estaban ellos, Jason y Percy habían sido vilmente engañados por su "amigo", diciéndoles que iban a divertirse "muchísimo" en su departamento, pero en realidad había sido solo una ASQUEROSA trampa para atraerlos como moscas a un montón de estiércoles, a hacer trabajo forzado y para colmo ¡sin paga!

Y mientras ellos sufrían con astillas, raspaduras en los brazos y piernas. Picaduras de mosquitos y otros insectos de extraño aspecto sacados de un libro de rarezas. Con los pantalones casi bajos, y la pretina de la bóxers al aire... Observando todo eso, (especialmente la pretina del azabache con mirada de Hitler) con entretenimiento y sin parecer afectado ni por una pizca por la culpa:

Está Will Solace, sentado en un sillón desplegable de playa a pocos metros de su piscina, con una bebida fría en sus manos, observándolos sin remordimiento alguno detrás de unos lentes de sol con forma circular. Tiene una sonrisa marca Diva del infierno pegada en su bronceado rostro, que ni el mismo Nico jamás podría superar.

— ¡Vamos, muchachos! — Gritó el rubio hacia ellos, mientras Jason se balanceaba de una rama que estaba por encima de la de donde Nico estaba sentado a horcajadas. — El tiempo es oro. Cuanto más tarden, menos tiempo tendrán para disfrutar de mi piscina al terminar.

— ¡Cállate! — Le lanzó Percy mosqueado, mientras cortaba con su propio machete la rama que sospechosamente, lo mantenía a salvo, a él y a Nico de caer. Sin embargo, éste estaba demasiado distraído en maldecir a su amigo en silencio como para darse cuenta, y Nico estaba muy ocupado de espaldas a él con su propia rama para notarlo.

De nuevo lo repito para los idiotas con bajo intelecto de interpretación. Era así. La rama donde se sentaba Nico, estaba por encima de la piscina, y, era la que Percy estaba cortando. Sin que nadie se diese cuenta aún. ¿Se entiende? Sigamos.

— ¡Allá va otra rama! — Gritó Jason  arriba de ellos, tirando el objeto en cuestión, hacia el patio de Nico. — ¡Cuatro menos, falta una!

La rama cayó en el patio de Nico con un golpe sordo, y las ternitas salieron de sus orificios rápidamente, asustadas de ser lanzadas como una jabalina de forma tan repentina. Percy silbó impresionado, mientras se rascaba estúpidamente la oreja con su machete. Sin lucir preocupado de cortarse y quedarse idéntico como el tipo loco ese que pintaba y se cortó una oreja.

— ¡Hey! — Nico llama a Jason con reprimenda, frunciendo el ceño. — ¡¿Por qué lo tiras en mi patio?! Tíralo hacia aquí, hacia el patio del rubio narcisista.

— ¡TE ESTO OYENDO! — Le respondió el rubio narcisista desde su asiento, tomando un sorbo de su bebida y apuntando con un pie hacia la muralla. — ¡Bien hecho, Jason! ¡Deja las ramas en su patio! 

— ¿Para que querría ramas en mi patio? — Demandó Nico, indignado, mientras Percy seguía cortando la rama que lo estaba sujetando.

— Dicen que hacen buenas fogatas.— se encogió de hombros. — Son tuyas después de todo, ya te las arreglaras....— y de pronto, se tira los lentes fuera de sus ojos y se incorpora de su asiento alarmado, gritando. —  ¡¿PERCY, QUÉ HACES?! ¡DEJA ESO YA!

— ¿Qué cosa? — preguntaron Nico y Percy al mismo tiempo, y luego, un crujido proveniente de la rama que estaba cortando desde hace minutos se oyó con claridad, a la par que Nico, se tambaleaba en su rama, y se inclina peligrosamente hacia abajo.

A continuación, Nico estaba agarrándose con todas sus fuerzas a la rama, como si éste fuese lo único que lo salvaba de una piscina de lava, en vez de solo de agua. Mientras dejaba caer machete en sus manos, cayendo este en la piscina con un ligero ¡plop!

— Pero, ¿cómo...? — inició Nico completamente confundido, pero cuando se volteó cuidadosamente hacia atrás, donde Percy estaba, y lo vio... Lo entendió. — ¡PEDAZO DE IMBÉCIL! ¡¿LO ESTABAS HACIENDO A PROPÓSITO, NO?!

— CLARO QUE NO, LO JURO. MI VENGANZA PENSABA SER QUITARTE LA CARNE DE TUS HAMBURGUESAS SIN QUE TE DIERAS CUENTA CUANDO VAYAMOS AL MCDONALD'S. — Vocifero con pánico, mientras intentaba inútilmente sujetar los dos lados de las ramas con sus propias manos. Para así evitar que Nico cayera en picada. — ¡YO SOLO ESTABA MUY MOLESTO Y NO PRESTABA ATENCIÓN! ¡SOY UN TONTO!

— TOMA MI MANO, NICO. — Le indicó Jason desde su rama, con un aire de superman rodeando todo su bronceado cuerpo. — ¡SUJÉTALA ANTES DE QUE...! — Entonces la rama finalmente ya no soportó su peso y se quebró donde Percy la había estado cortando. Y cayó. Junto con él... — NICOOOOOO.  NOOOOOOOOOOOOOOO.

Cayeron la rama y Nico, abrazados fuertemente como amantes hacia el tártaro. Hasta que Nico entre su griterío se le ocurrió que estaba luciendo patético.

Nico movió los brazos por todas partes como tratando de volar o teletransportarse, lo que viniera primero. Pero él no era ningún tipo de ser sobrenatural (al menos no en este mundo alternativo) y simplemente tuvo que aceptar su destino mientras que se zambullia en la piscina duramente, con el agua entrando en sus pulmones, sus ojos y las orejas (al menos le limpiaria las ceras que tenía dentro) y se hundía hasta el fondo porque... él no sabía nadar.

Pero vagamente consciente segundos después, a su costado alguien se lanzó al agua en su búsqueda, y lo agarró como una bolsa de patatas contra su cuerpo. Otros segundos después, él estaba de nuevo en la superficie, gracias a Will Solace quien había saltado para rescatarlo.

Y ahora Nico se encontraba, penosamente, agarrado con desesperación al cuello de Solace, para evitar a toda costa volver a hundirse como una roca sin gracia. En medio de la piscina, Will lo sujetaba de su cintura, (que horror) y se río entre dientes con Nico en sus brazos.

— ¿Por qué te ries? — Exigió saber Nico, con sus ojos ardiéndole por el cloro. — ¡¿Qué es?!

— Nada. — Negó sin dejar de sonreír, y acercando sus rostros, dejando a Nico mudo y algo rojo como la sangre que le caía de la frente, por culpa de un fugaz golpe con la rama en medio de ejercicios la caída. — Solo que... No pensé que te tendría en mis brazos tan pronto.

Y se echó a reír. Y entonces Nico lo golpeó en el pecho y se soltó de él, pero cuando volvió a hundirse inmediatamente en el agua, Nico tuvo que tragarse su orgullo (y más agua) y volvió a aferrarse al cuello de Will con fuerza, para evitar ahogarse.

— Solo cállate y sácame de aquí. — refunfuñó, con las risas de sus amigos de fondo.

— Cómo ordene mi príncipe. — bromeó Will, pero internamente, aquello calentó el pecho de Nico de una forma muy agradable.

¿Cuántas personas esperan que continúe esta historia? ;v no pensé que nadie la extrañaba.

Si hay más de 10 personas :v

publicaré lo antes posible un jugoso Percabeth ;"v