1-El chico de la tienda
Emma empezaba a acostumbrarse al pueblo y ya se conocía mejor las calles. Caminaba tranquilamente en esa mañana mientras el resto del elenco dormía o estaba leyendo dentro de la casa ya que estaban aún cansados del viaje. Ella sacaba algunas fotos y se las enviaba a la familia. Aquella paz siempre le gustaba.
—Iré a comprar algo de beber—dijo al ver su pequeña botella de agua vacía.
Vio el local del chico y la madre tan fuerte. Entró y vio a éste con una escoba terminando de barrer cuando al escuchar la campanita volteó a verla.
—Bienvenida—dijo—. ¿en qué puedo ayudarte?.
—Pues...una botella de agua—respondió mientras se acercaba al mostrador.
Eligió una botella está vez más grande para no terminarla tan rápido. La madre de Tn apareció al cabo de unos pocos segundos y con esa voz tan suya le dio la bienvenida.
—Una pregunta muchacha—dijo llamando un poco la atención de Emma quien tenía la sensación de estar ante una gigante—. ¿de qué va esa serie que vais a rodar?.
—Ah...pues...yo soy la protagonista y tengo que investigar una serie de sucesos—respondió algo nerviosa al verse tan pequeña.
—La estás asustando—escuchó decir Tn a su madre quien le dio un golpe en la espalda.
—¡No digas esas cosas de tu madre!—replicó éste.
El chico se tocó la espalda, realmente esa mujer tenía una gran fuerza.
—Si necesitáis un extra, Tn quizás os pueda servir...así gana algo de dinero—le miró—. y de paso sale un poco de sus libros.
—Estoy bien con mis libros
—Así no va a tener novia nunca...igual que su padre. Ojalá hubiese salido a mí—agachó un momento la cabeza como decepcionada antes de levantar y soltar una carcajada—. ¡no hagas caso muchacha, pero si surge algo te agradecería que metieras a mi hijo!.
—Cl-Claro...—ella tragó saliva.
Emma se marchó del local y ya afuera estuvo mucho más relajada. La mujer realmente no era mala persona, pero el estar cerca de ella era bastante intimidante. Volvió a caminar y viendo los paisajes que se presentaban ante ella antes de regresar a donde estaba Asha quien le dijo que se sentase con ella a sacarse algunas fotos y cantar un poco pues se llevó su guitarra.
Ambas se pusieron a cantar las canciones de Asha y aunque a Emma se le notaba que no era lo suyo, era para divertirse. Incluso hicieron un pequeño directo donde la gente comentaba, daba like y compartió todo.
—Ha sido muy divertido—comentó Emma acalorada. Tuvo que beber agua porque estaba muy sedienta.
—¡Y que lo digas, otro día tendremos que repetir!—Asha estaba igual.
—No gracias, si quedo afónica se retrasará el rodaje—recordó ella haciendo que su amiga le diera la razón.
La noche enseguida llegaría, para Emma, el estar con ambos era increíble y el tiempo pasaba volando. Decidieron salir a cenar afuera, a un pequeño bar cercano. Casi todos eran mayores y cuando entraron simplemente los saludaron. Los actores devolvieron el gesto con una sonrisa pues eran muy amables y por el momento, tanto a ellos como a los trabajadores del set los habían tratado de maravilla.
—¡Eh Emily, un poco más de cerveza!—gritó uno de los abuelos.
—Enseguida llegará—respondió la camarera antes de llevarles algo de comer.
El grupo estaba jugando a las cartas.
Algo que les sorprendió mucho era la calidad de la comida, estaba muy buena a pesar del aspecto del lugar. Devoraron todo y no se dejaron nada.
Entonces, Tn entró con su madre. Llevaban unas cuantas cajas con cervezas y otras bebidas, entre ellas, Emma pudo ver que llevaba té. Así que decidió pedir un poco, hacia tiempo que no lo tomaba y era el mejor momento.
—Disculpe—llamó Emma—. un té por favor.
—Yo café—dijeron Asha y Zain.
—Enseguida se lo traigo.
La madre de Tn se sentó a tomar una jarra de cerveza ante la mirada atónita de los actores quienes la bebieron beber casi de un trago eso. Ahora que tenía manga corta, se mostraba unos grandes músculos.
—¿Acaso es una vikinga?—pensaba Emma quien estaba muy sorprendida.
—Que mujer tan fuerte—susurró Asha—. podría partir un árbol de un puñetazo.
Tn se sentó a su lado. A diferencia de ella, éste se tomó un café.
—¡Emily, trae otra cerveza que esta tiene un agujero!—gritó a pleno pulmón la mujer avergonzando al muchacho quien quería que le tragase la tierra.
—Eh, Joana—llamó uno de los jóvenes que entró al lugar—. deja ya de chillar que tienes una edad.
La mujer le miró y soltó una leve carcajada.
—¿Ya te ha crecido vello en las pelotas para hablar de esa manera a la mujer que te limpiaba el trasero cuando eras niño?—aquel comentario lo hizo ponerse rojo como un tomate—. anda, deja que beba tranquila.
Durante unos breves instantes, las miradas de Emma y Tn quien no quería seguir mirando debido al comportamiento de su madre, se cruzaron. La chica se le quedó viendo y por extraño que fuese...no podía apartar la mirada. Pero Tn, quien era más vergonzoso, lo hizo.
Por suerte, no hubo ninguna clase de situación similar y cuando se terminaron el café y la cerveza, madre e hijo se marcharon. Emma esperaba a que enfriase un poco el té para poder tomárselo mientras veía a éste irse del establecimiento.
—Emma—la joven salió de su mundo—. ¿estás bien?.
—Si Asha, estoy bien, me he distraído un momento—respondió ya bebiendo un poco.
—¿Es por ese chico?, ¿acaso te ha robado el corazón?, ¡un flechazo!—la joven reía mientras ella se sonrojaba un poco y le pedía que se callase.
Zain miraba todo relajado tomando su café.
La hora de marcharse llegó. La noche era algo más fría a esas horas y caminaron abrigados. Asha cantaba algo de su disco mientras Emma veía como las casas tenían pequeñas luces. Pasaron de nuevo por afuera del local del chico donde éste sacaba unas bolsas de basura y luego se volvía a meter al interior para colocar el cartel de cerrado.
—¿Eh?—Zain miró al cielo—. están empezando a caer gotas.
Echaron a correr para que no les pillase el agua y aunque luego solamente fue una fina lluvia, al menos estaban a salvo y en el interior de la casa.
Esa noche habló con Jenna para saber como le estaba yendo en su proyecto mientras Asha estaba con una libreta y apoyada en la pared. Decía que la lluvia le ayudaba a componer canciones pues le gustaba mucho aquel clima.
En dos días empezaremos a rodar, eso fue lo que le dijeron esa misma tarde. Emma tenía muchas ganas de meterse de nuevo en el papel de Pip. Pero esa misma noche, hasta que se durmió, sus pensamientos fueron interrumpidos por el rostro del chico.
Ya en la mañana, se preparó el desayuno y permaneció allí leyendo el guión que le habían preparado para estar mejor preparada. Asha y Zain estuvieron igual, querían que tuviera el mismo éxito que la primera temporada.
Continuará...
Espero que les haya gustado.
Un saludo.
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