Buenas a todos losMarvelitos que os estáis tomando la molestia de seguir tan fielmenteesta historia que, de verdad, surgió tan de repente.

Y recalco tanto esehecho porque es que de verdad me parece increíble la acogida que hatenido. Tendría que mirar cuantos comentarios y votos y demás tieneya a estas alturas (me refiero en wattpad. En fanfiction la cosa estámás calmada) y me ha dejado un tanto sorprendida.

De verdad, tengo quedaros las gracias a todos los que estáis leyéndola porque en ningúnmomento pensé que fuera a tener semejante acogida. De verdad teníaisque estar deseando que apareciera alguien que sustituyera a Steve(Con lo que yo lo quiero y me gusta para Tony TT.TT) para ocupar elpedazo de huevo que ha dejado junto a Stark después de la películade Civil War.

En serio, si leyeraislo que he hecho ahora en la historia de You are my destiny..... Ydigo de lo que he escrito, no lo que haya subido aun o no.

Ya. Me estoy notandoque me estoy poniendo pesada otra vez con el tema, así que serámejor que os deje con el capitulo y, como siempre, os de más elfollón al final. Así que, disfrutadlo.

CAPITULO 4

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Horas después, Tony seremovió sobre el asiento, abriendo los ojos y frunciendo el ceñocuando miró a su alrededor y nada le pareció familiar, tratando dehacer memoria.

Poco a poco, los recuerdode lo ocurrido fueron surgiendo; el ataque del Chapucero, la malditabomba que había frito su traje, el portal, perder la comunicacióncon Friday y con toda su armadura, la sensación de saber que iba amorir en el espacio, la voz lejana que le había preguntado si seguíavivo, pensando que se trataba de algún dios en el que no habíacreído hasta entonces, ver el rostro de Peter cuando le quitó elprotector facial y pudo respirar de nuevo...... Todo eso acudió entropel a su mente, haciendo que se incorporara y mirara a sualrededor.

A través de las ventanasde la nave, lo único que vio fue la inmensidad del espacio, esaenorme inmensidad que parecía extenderse ante el infinito, envueltoen aquella oscuridad, así que era un poco difícil determinar si erade día o de noche, ni el tiempo que él mismo había pasadodurmiendo. De lo que sí fue consciente fue de que se notabadescansado, más de normal cuando dormía.

¿Sería por el aire delespacio? Podría ser posible.

Echando un vistazo a sulado, vio a la figura de Peter allí, con una mano apoyada en sumejilla mientras él estaba recostado de un modo extraño sobre elasiento, con unos cascos antiquísimos puestos en los oídos.

Estaba claro que se habíaquedado dormido durante su turno, pero Tony no sabia si debíadespertarlo o no. De todas formas, la nave parecía saber hacia dondese dirigía y tenía la ruta marcada y no veía ninguna naveamenazante frente a ellos, dispuesta a dispararles.

Poniéndose en pie,dándose cuenta de que había acabado durmiendo abrazado a laalmohada, dejó esta en el asiento, y que alguien le había tapadocon una manta, seguramente Peter, ya que allí no había nadie más,así que se acercó con esta entre las manos hasta la figuradurmiente de Star Lord.

Pero, cuando trató deechársela por encima, este se removió y abrió los ojos, quitándoselos cascos de los oídos.

-Buenos días- le dijoTony, haciendo una pelota con la manta entre sus manos.

-¿Me he quedado dormido?-preguntó este, mirando a su alrededor como si tratara de asegurarsede que solo ellos dos se hubieran dado cuenta de ello.

-Eso parece.

-No sabrás, decasualidad, cuanto tiempo, ¿verdad?

-No. Lo siento. Enrealidad, ni siquiera sé como medís el tiempo aquí. Dudo que seadel mismo modo que en la Tierra.

-Dudas bien. En elespacio, los días y las noches son más largos. El calendario y elhorario de la Tierra aquí no sirven.

-Genial- comentó Tony conironía.

Ahora tendría queacostumbrarse a unos nuevos horarios. Con razón había estado tancansado el día anterior.

-Voy a despertar a Draxpara que haga su turno- le dijo Peter.-Puedes ir abajo y descansar unpoco más ahora que él va a estar despierto.

-No, creo que yo ya hedormido lo suficiente. Iré a seguir trabajando en mi armadura- ledijo Tony, viendo como este se ponía en pie como podía.

-Harás bien. Yo iré adormir un poco más- le dijo Peter, dirigiéndose con paso vacilantehacia la sala inferior.-Buenas noches.

-Buenas noches- lecontestó este, solo por mera inercia.

Después de todo, para él,ya había llegado un nuevo día. Así que, tras asegurarse de queeste había desaparecido por completo de la sala, él se dirigió allugar donde había dejado su armadura el día anterior.

-Hombre. Vaya. Ya era horade que aparecieras- comentó Rocket, ya trabajando, nada más verloentrar en el cuarto.

-¿Cuándo te haslevantado tú?- le espetó Tony.

Que el mapache le perdonapor tener un poco de jet lag después de haber atravesado la galaxiay no saber a dónde había acabado llegando.

-Pues un buen rato. Si nohas desayunado, ahí hay barritas. No saben a nada, pero tealimentan- le explicó este.

Tony fue hacia donde ledijo, sin perder de vista al pequeño roedor, que parecía haberbuscado por toda la nave las piezas que ya no hacían falta y yaestaba trabajando en algo, con el reactor del traje apagado en lamano.

-Destornillador- dijoRocket de repente.

En un primer momento, Tonypensó que le decía a él, hasta que vio a algo moverse por el sueloy se dio cuenta de que se trataba del pequeño Groot, que se apresuróa buscar la herramienta y tendérsela a este, haciendo que su brazosse extendiera más de lo que un brazo normal podría hacer.

Tony aun no había dado unbocado a su extraño desayuno y ya se estaba encontrando con cosascomo aquellas.

-¿Para qué se supone quesirve este chisme?- le preguntó Rocket, haciendo que volviera areaccionar y se acercara a él, con una de las barritas en las manos.

-Eso es un reactor ARK, uninvento de mi padre que yo mismo perfeccioné y que le da vida a mistrajes- le explicó, sentándose cerca para poder ver lo que hacíacon sus cosas.

-Pues esto es unaantigualla. Yo me encargaré de hacer algo mejor que esto.

-¿Crees que puedesmejorar el diseño del reactor ARK?

-No lo creo. Puedohacerlo- afirmó el mapache.

Tony abrió la boca parareplicar algo, cualquier cosa para que ese ser irritante callara deuna buena vez, pero sintió un tirón en su pierna y miró haciaabajo, percatándose de la figura de ese mini-Groot a sus pies.

-Yo soy Groot- le dijoeste, con esa vocecilla que poseía.

-Sí, eso ya lo sé-comentó Tony, frunciendo el ceño.

¿Era todo lo que sabíadecir?

-Te está preguntando site vas a quedar con nosotros- le tradujo Rocket, aun concentrado enlo que fuera que estuviera haciendo.

-Oh. Vale- asintió Tony.Y, agachándose hacia él, le dijo a este.-En realidad, ni yo mismolo sé. No tengo muy claro ni a donde se supone que nos dirigimos.

-Yo soy Groot- le dijoeste de nuevo.

-Te pregunta que si vas aformar parte del equipo- le dijo Rocket. Pero, antes de que Tonypudiera responder algo a eso, el mapache se adelantó, bajando lacabeza hacia Groot.-¿Por qué le preguntas una tontería así? Sabesque está de paso.

-Yo soy Groot- le dijo elpequeño, volviéndose hacia el roedor.

-¿Y qué más da que ély Quill se lleven bien? Eso es solo porque él también es unterrícola y hace mucho que no ve a otro de su especie.

-Yo soy Groot- le siguiódiciendo aquel arbolito.

-No es tan simple entraren nuestro grupo. Eso eres tú, que te haces amigo de cualquiera- lereplicó Rocket.

Pero Tony se sentía algoperdido solo escuchando la mitad de la conversación.

Por lo que había podidoentender, el pequeño Groot parecía creer que se iba a quedar allícon ellos y formar parte de su equipo espacial.

-Yo tengo que volver a laTierra- les dijo, haciendo que ambos volvieran la cabeza haciaél.-Aunque el equipo esté dividido, tengo obligaciones allí. Soyuno de los protectores de la Tierra. Y hay demasiados supervillanoscomo para que pueda irme.

-¿Ves?- le dijo Rocket aeste.-Se irá en cuanto pueda.

-Yo soy Groot- le dijo elpequeño, sonando totalmente convencido.

-¿Acaso no le hasescuchado?- le replicó el mapache a su vez.-No va a cambiar deopinión. Iremos a Xandar, le contará al Cuerpo Nova lo que sabesobre las gemas y ellos se harán cargo de todo. Es posible que ellosle lleven de vuelta a la Tierra.

-¿Yo soy Groot?- le dijoel pequeño, volviéndose hacia él.

Estaba claro que aquellohabía sonado a una pregunta, pero Tony no tenía ni remota idea delo que le había preguntado, así que miró a Rocket.

-Pregunta que si es verdadque te vas a ir- le dijo este, de mala gana.

-Sí, es verdad- le dijoTony, cogiendo a este y colocándolo encima de la mesa para poderhablar desde más de cerca.-Aunque es posible que pase un buen tiempoaquí.

-Yo soy Groot- le dijoeste de nuevo.

-Dice que, al menos,mientras estés aquí, podríais ser amigos.

-Claro- afirmó Tony,-E,incluso cuando me vaya, podemos seguir siendo amigos. Vosotros tenéisuna nave espacial. Podéis visitarme en la Tierra cuando queráis.

Mini-Groot sonrió anteaquella idea, pero Rocket no estaba tan de acuerdo.

-Tenemos demasiadas cosasque hacer como para eso- replicó.

-Bueno....tampoco hacefalta que vengáis todos- le dijo Tony a su vez, dedicándole unamirada que Rocket le mantuvo.

-¿Ya estáis trabajandodesde tan temprano?- comentó Gamora, dirigiéndose a donde estabalas barritas y tomando una.

-¿Y tú por qué te haslevantado ya?- le preguntó Tony.

-Oh. Drax a relevado aPeter y ahora está roncando. Procura dormir en su turno o no podráshacerlo luego.

¿Estaban de broma?, sepreguntó, viendo como Rocket asentía, dándole la razón a esta.¿Acaso no habían oído como roncaba Drax? ¿A qué decibeliosllegaba Peter para que fuera él el que no les dejara dormir?

-Le he dicho a Peter quele construiría unas armas mejores a las que lleva- les dijo Tony alos presentes, cambiando un poco de tema.-¿Hay materiales aquí conlos que pueda trabajar?

Aquello hizo que Rocketcomenzara a reírse, aunque consideraba que aquella era una risafalsa.

-¿Planeas hacer unasarmas mejores que los subfusiles kree con tu nivel de tecnología?-le replicó el mapache, después de terminar de reírse.

-La tecnología kree escasi lo mejor en armamento- le dijo Gamora.

-Toda arma tiene susdefectos. Y, como ya le dije a Peter, mi familia y yo nos hemosdedicado ha hacer armas y mejorarlas. Solo necesito ver los planos dediseño de esas cosas y podrá hacer algo mucho mejor.

-Me gustaría ver eso-comentó Rocket.

-Cuando paremos arepostar, podrás buscar todo eso que necesitas. Pero no sé sirealmente eso es posible- le dijo Gamora.

-¡Yo soy Groot!- afirmóeste, aun subido a la mesa.

-No hace falta que le desánimos, idiota. Ya sé cree lo más él solito- le gruñó Rocket aeste.

Por lo que había podidocomprobar, no iba a poder callarle la boca a la bola de pelo hastaque le demostrara lo que era capaz de hacer.

Era cierto que tenía suarmadura entre las manos, pero le había encontrando en el peorestado posible. Si la hubiera visto en su momento, funcional y sincircuitos chamuscados, ya habría conseguido callarle.

-Vosotros solo dejadmeesos planos y yo me encargaré del resto- afirmó Tony.

..................

El resto de la mañana fueuna larga sesión de trabajo con Rocket, con aquel pequeño Grootsaltando a su alrededor, ofreciéndoles las herramientas quenecesitaban, como si estuviera encantado de ser su ayudante, a pesarde que tanto Tony como Rocket les quedaba muy poco para acabarmatándose.

-¡Te he dicho que eso nopuede ir ahí!- le gritó Tony, en una de las ocasiones.

-Y yo he dicho que ahí esjusto donde debe ir- le replicó Rocket a su vez, con unas gafas desoldar y el soplete en la mano, tratando de ignorarlo.

-¿Para qué demonios voya querer eso en el codo? ¿De qué me va a servir?

-Tú hazme caso a mí. Esotiene que estar ahí.

-Yo lo único que veo esque estás destrozando mi armadura.

-Tu armadura ya estababastante destrozada sola.

-Eso es porque sufrió unpulso electromagnético que la inutilizó y se vio sometida a lapresión del espacio, para lo que no estaba preparada.

-¿Y no tienes armadurasque funcionen en el espacio?

-Claro que tengo, peroesta no es una de ellas.

-Deberías hacer que todasfuncionaran en el espacio.

-No me ocurre todos losdías que se abra un portal bajo mis pies y me mande a la otra puntadel universo.

-Pero ya no puedes decirque no te ha ocurrido, ¿no?- le dijo Rocket a su vez.

Tony estaba a punto deestrangularlo en aquellos momentos, cuando llegó Peter.

-¿Qué tal van las cosaspor aquí chicos?- les preguntó este, pareciendo bastante animadodespués de haber dormido un poco más.

-Este tío no se entera denada- le dijo Rocket.-No entiende mi ingenio.

-Eso es porque haces cosasabsurdas.

-¡No son absurdas! Yaverás como te harán falta- le dijo este de nuevo, volviendo lacabeza hacia él.

-¿Ah, sí? ¿En el codo?

-¡Es un buen sitio dondeponerlas!

-Ey, ey- les dijo Peter,tratando de poner un poco de paz.-¿Qué es lo que pasa?

-Este.....ser quiere ponercuchillas en los codos de mi traje- le dijo Tony, señalando a Rocketmientras este no dejaba de trabajar.

-Y yo le he dicho que esuna buena idea por si tiene enemigos cerca.

-Si tuviera a alguien tancerca, lo freiría con mis rayos.

-Claro. ¿Y si no puedesusar los rayos? Siempre tienes que tener un plan B

-No necesito un plan B. Séimprovisar- replicó el moreno.

-Vale. De acuerdo.Tranquilos, chicos. Queda claro que los dos tenéis modos diferentesde trabajar. Eso ha quedado claro. Pero los dos sois genios. ¿Nopodéis hacer algo al respecto?

-Matarlo- le dijo Tony sinmás.

-Bien. Creo que lo quevendría bien en estos momentos es que uno salga a tomar el aire. ¿Noos parece? Ven conmigo, Tony. Acompáñame. Vamos a hablar.

Este no pareció haberleoído, ya que él y Rocket volvía a estar dirigiéndose aquellasilenciosa mirada de guerra. Pero, finalmente, este se puso en pie ylo siguió fuera del cuarto.

-No sé como lo soportáis-comentó Stark en cuanto salieron de allí.

-Fácil. Le dejamostrabajar sin más- le dijo este, con un brazo en torno a sus hombros,ya que había temido que Tony volviera al cuarto si no le teníasujeto.

-Si consiguiera ver elmodo en el que se basa vuestra tecnología, no me costaría nadaaprenderla y mejorarla- replicó.

-Seguro que no- le dijoPeter.-Pero que los dos estéis discutiendo no ayuda.

-Pero, él siempre está....-trató de decirle.

-¡Eh!- le dijo Peter.-Losdos sois.......seres adultos y deberíais saber comportaros. Si nohubiera entrado allí, ¿qué hubiera pasado?

-Que ese roedor habríaacabado flotando en el espacio- le dijo este.

-Vaya. Que gráfico.Tienes demasiada agresividad acumulada.

-¿No me digas?

-Ey. ¿Y qué tal unapequeña carrera?- le preguntó Peter, sonriendo, soltando a estepara mirarlo a la cara.

-¿Una carrera?- repitióTony.-¿Entre quién? ¿Y cómo?

-Entre nosotros. Hay dospequeñas naves de un pasajero justo aquí debajo.¿Qué te parece?-le prepuso este, pareciendo emocionado.

-¿Qué se lleva elganador?- preguntó Tony, tras reflexionar un poco.

-No sé. Pues.....¿Quétal esto? El que pierda no puede negarse hacer una cosa que elganador le pida cuando quiera.

-¿Solo una cosa?

-Claro. Tampoco voy aabusar de ti- comentó Peter como si nada.

-Oh. Así que piensas quepodrías ganarme en una carrera, ¿eh?

-No lo pienso. Estoyseguro de ello- afirmó Peter, dirigiéndole una sonrisilla chulesca,cruzándose de brazos frente a Tony.-He conducido naves espacialesdesde que era un crío. Que no se te olvide.

-¿Ah, sí? Pues yo hemanejado a Ironman- le dijo Tony a su vez.

-¿Qué pasa aquí?-preguntó Gamora, entrando en el cuarto y viendo la tensión queparecía haber entre aquellos dos.

-Oh. ¡Gamora! Nos vienesbien. Acércate- le dijo Peter.

Esta frunció el ceño,sin entender bien lo que estaba ocurriendo en aquel cuarto,observando a los dos hombres, pero se acabó acercando a ellos.

-¿Qué ocurre?

-Hemos hecho una apuesta-le dijo Peter.-Y necesitamos que alguien sea la testigo para queninguno de los dos se eche atrás.

-Yo no voy a echarmeatrás- le dijo Tony.

-Pero nunca está de mástener un testigo. Por si acaso, ¿verdad?

-¿Por qué estáishaciendo esto?- les preguntó ella.

Para esta, ya había sidobastante complicado tratar de entender a Peter Quill como para que,ahora, un factor nuevo se sumara a ese problema.

-Tú no lo entenderías-le dijo Quill.-Los hombres necesitamos desafíos de vez en cuando,algo que libere nuestra masculinidad.

-Nos has hecho sonar comosi fuéramos pavos reales- comentó Tony.

-A lo importante.Necesitamos que tú veas quién gana de los dos y que esté presentepara que el perdedor no se eche atrás.

-Esto me parece demasiadoinfantil- comentó la mujer verde, cruzándose de brazos ante ellos.

-¿Vas a servirnos detestigo o tenemos que buscar a alguien más?- le dijo Star Lord,tratando de no enfurruñarse.

Tony y él iban a teneresa carrera, quisiera esta o no. Solo necesitaban saber si les iba aayudar o si tenían que buscar a alguien más.

-De acuerdo. Jugaré aeste extraño juego vuestro. Pero, ¿no deberíais decirle antes aRocket que vais a coger esas naves suyas?

Peter y Tony se dirigieronuna mirada.

-Oh, no hace falta-aseguró Quill.

-Ahora mismo, estáocupado con mi armadura. No hace falta que le llamemos para algo comoesto- aseguró Stark.

Gamora entrecerró losojos porque en verdad temía que aquellos dos fueran demasiadosimilares. Ya era mucho tener un Star Lord emocionado por losalrededores como para , encima, ahora tener a dos.

-Pero ya podéis darosprisa con esta tontería. Tengo que suplir a Drax en un rato- acabódiciéndoles.

-Gracias, Gamora- le dijoPeter.

-No tardaremos nada conesto- le aseguró Tony.

-Porque seremos rápidos,¿no?- le dijo el rubio, mirándole.

-Eso quedaba implícito.Es una carrera, Peter- le dijo Stark, elevando la vista al cielo.

Y Gamora tuvo la brevesensación de que acabaría arrepintiéndose de haberse metido enmedio de un juego de aquellos dos.

Fin del capitulo 4

La verdad es que,cuanto más pienso sobre las personalidades de estos dos, más me doycuenta de lo parecidos que son Tony y Peter. Y hablo de laspersonalidades del UCM. De los comics tengo poco entendido, laverdad. He visto algunas cosas, otras las he visto en las series deanimación...... Vamos. Que yo saco mi información de todo y luegohago una espacie de resumen de todo.

Sin embargo, conformemás escribo de ellos, más veo que encaja que fueran pareja (Losiento, Stony. Steve ya no es el único que va a poder tocar a Tonyen mi corazón)

Pero tengo problemaspara encontrar imágenes de estos dos. He hallado un poco enpinterets, otro poco en tumblr y otro en google, pero la verdad esque no hay casi nada. ¿Dónde demonios están los artistas, quenormalmente lo petan todo? Yo no tengo más tiempo como para encimaponerme a dibujar.

Y, hablando de dibujar, aquí tengo un dibujo que le prometí que haría a MeimiCaro, cuando hablamos de la frase final del capitulo anterior, ya que se imaginó a Peter siendo un domador de circo y Tony siendo un león. No me ha dado tiempo a pintarlo, pero aquí lo tienes: 

En fin. Veré lo quepueda ir sacando de todos lados para hacerme una idea más grande de todo cuando les rodea. Pero si vosotros tenéis másimágenes y podéis pasármelas, os lo agradecería mucho.

Por ahora, me despidoya. Manteneos sanos y nos seguimos leyendo en el siguiente capitulo.