capítulos dieciséis

  Después de todo te habías dado cuenta de que Mark es un buen chico y fue muy amable de su parte que te ayudará a buscar la verdadera calle de Estados Unidos, quizás las personas de Estados Unidos también serian igual que él. Una vez que tus ojos se encontraron con aquella calle un gran brillo inundó tus iris, junto con un sentimiento amargo en el pecho, sentías como si tu padre aún estuviera junto a ti, lo extrañabas demasiado y no podías hacer más que sólo recordarlo.

  Mientras tanto Mark se había dado cuenta de que el ambiente había cambiado entre los dos, tu rostro se veía afligido mientras que tus manos estaban unidas con una ligera fuerza, parecía como si de verdad estuvieras aguantando las ganas de derrumbarte frente a alguien que apenas acabas de conocer.

— ¿Estás bien?— cuestionó Mark una vez que tomó ligeramente tu hombro, devolviendote la realidad en un golpe imprescindible.

— No te preocupes— respondiste con rapidez y con un ligero toque de nerviosismo, que al instante se vio reflejado—. Es solo que esto es realmente muy importante para mí.

  Lo poco que sabía Mark de ti, es que eres una verdadera jugadora profesional y que incluso estabas a la par de tus compañeros o incluso aún más, pero como era de esperarse nonsabia de tu vida personal, quizás lo que le habia llamado la atención de ti, fue que tus técnicas especiales realmente reflejaban lo que sentías y no podrías expresar. Lo único que sabía de ti era tu apellido, Koizumi.

— Gracias por llevarme hasta aquí de verdad lo aprecio mucho.

  Eran las únicas palabras que puedes pronunciar debido a la sensación amarga que comenzaba acercarse hacia tu cuello comenzando a crear un nudo en tu garganta, cosa que no había pasado desapercibida para Mark. Cualquiera sería vulnerable ante una situación parecida, estabas viendo por primera vez la ciudad donde alguna vez tu padre había estado y aunque no era mucho, sentias como si su alma estuviera aquí, aunque literalmente no estaba, la sensación te reconfortaba y eso era lo que te importaba.

  Era muy difícil crecer sin sus padres, quizás la mayor parte del trabajo lo había hecho tu abuela pero, tener aunque sea unos pocos recuerdos de tu padre y saber algo más de él, te hacía sentir como si estuviera presente en tu vida cotidiana. La razón por la que no querías estar con tu madre era porque te dolía bastante como es que ella no estaba junto a ti como lo hubieras esperado, quizás tampoco te buscó o quizás hasta ese momento se acordó que tenía una hija.

  Cuando tu padre murió todo se derrumbó sobre ti, pensaste en que en realidad si tu abuela era la siguiente ya no había nadie más para cuidarte,ñ y el momento en el que te quedaste a pensar acerca de tu madre, porque en algunas ocasiones te hablaban de ella pero no exactamente acerca de cómo era ella en verdad. Las cosas habían cambiado, tu abuela ahora una responsabilidad más.

  Primero y por haber perdido a su marido, el cual había estado junto a ella con muchos años y que había estado por mucho tiempo juntos. Era difícil estar junto a alguien que era joven y no entendía lo que estaba sucediendo, a decir verdad después de que tu abuelo falleciera las cosas se volvieron mucho las difíciles para tu padre y abuela. Después de que sucedió el terrible accidente automovilístico que le quitó la vida a tu padre, no fue nada fácil tener que contartelo, puesto que aún eras una pequeña niña.

  Las cosas fueron totalmente rápidas que tú entendiste muy rápidamente la situación. Solo recordabas que un día tu abuela había llevado al hospital a tu abuelo, te quedaste horas esperando a que te dieran alguna buena noticia y lamentablemente no fue así, ella había llegado sola y que lo volviera a hacer sólo significa una cosa.

  Tu padre había muerto.

  Tu corazón comenzó a estrujarse de manera involuntaria provocando un enorme nudo en tu garganta, y provocando que hilos de agua cayeran sobre tus mejillas. Tu semblante había cambiado a uno que irradiaba completa soledad y tristeza, yo lo que habías creado junto a tu padre, ese gran vínculo que ambos habían forjado se habían desecho con una sola noticia.

  Las cosas fueron demasiado triste para ambas y simplemente cuando pensaste en tu madre, una gran molestia apareció en tu ser. Si ella en realidad estaba con vida ¿Por qué no te había ido a buscar? ¿Por qué no estaba contigo en estos momentos de soledad? y ¿Por qué no se había presentado ante ti? Aquellas ideas simplemente se fomentaron en tu mente provocando que crearás un rencor hacia ella. 

  Por esa razón no podías dejar que tu madre regresara a tu vida como si nada de tus sentimientos hubieran existido, no podías permitir que ella llegara de nuevo cuando de verdad la necesitaste en los momentos tristes en los que de verdad necesitabas su ayuda para controlar tu inestabilidad emocional, las partidas que fueron duramente difíciles de pasar en completa soledad a lado de una banca en solitario. Todo esto debido a que tu abuela tenía que hacer demasiados trámites de defunción para tu abuelo y tu padre.

  Era completamente difícil para alguien que sólo había tenido seis años de vida, las cosas no fueron tan buenas para ti, pero igual forma tu abuela aún te seguía alentando a seguir adelante. Ella de verdad quería que fueras feliz, quería que te fueras alegre, que tratas de verle el lado positivo a las cosas y que nunca perdierás la esperanza.

  Tu semblante nunca lo demostró pero, siempre estuviste mal emocionalmente, por esa razón la mayoría del tiempo no hablabas con ningún niño en la escuela.

   Alzaste la mirada hacia el joven de cabellos rubios quién seguía analizando te en silencio, podrías admitir que era alguien sumamente atractivo. Él solo se dedicó a sonreír de una forma suave y cálida, algo que provocó que los sentimientos negativos bajarán en ti.

— No fue nada— respondió Mark, una vez que escuchó tus palabras.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top