La señora Hunter leía un libro en la terraza cuando Mónica la mucama llegó con el teléfono.

-Señora, tiene una llamada.

-¿Quién es Mónica?

-Es su hijo.

Annie se sorprende al escuchar de quien se trata, casi incrédula toma el teléfono y después de pensarlo unos segundos contesta: -¿Jared?

-Hola mamá, es extraño encontrarte en casa, pensé que estarías en algún país exótico con tu esposo.

-No, no hijo, ya no acompaño tan seguido a Steve en sus viajes, prefiero quedarme en casa y darle un espacio, darnos un espacio en realidad, y tú ¿Cómo estás?, vaya estoy muy sorprendida que me llames, ¿Cuando fue la última vez que hablamos? ¿Cuatro años?

-En realidad son seis años mamá.

-¡Seis años! -Exclama ella. -Me da gusto que te acuerdes que existo, he estado bien si te interesa saber.

-Mamá no comiences por favor, si te llamo es porque tengo algo importante que comunicarte.

-Bueno de verdad deber ser algo importante para que te dignes a llamar.

Jared respira hondo deseando colgar y olvidar el asunto pero sabía que tenía que enfrentarlo y también sabía que Marie lo quería, aunque no le hubiera hablado más del tema, así que tomo valor y lo dejo salir: -"Me voy a casar".

Hubo un silencio bastante incómodo, Jared sólo escuchaba la respiración de su madre pero ni una palabra.

-Mamá, ¿Continúas ahí?

-Sí,  ¿Voy a ser abuela verdad?, de eso trata, embarazaste a alguien, ¡Ay por Dios lo veía venir!

-No, mamá no embaracé a nadie, simplemente me enamoré, y para tu tranquilidad es una buena mujer.

Annie incrédula responde: -En esos lugares que acostumbras frecuentar no creo que encuentres ninguna buena mujer, debo admitir que sí aspiré a que ubicaras tu vida, te casaras y me hicieras abuela, pero no estoy segura de tu elección.

-Mamá créeme cuando te digo que he cambiado, ya no soy el Jared que recuerdas, visité a Henry en Florencia, ¿Te acuerdas de Henry?

-Claro, tu amigo de la infancia, el que se mudó con sus padres a Toscana.

-Así es y en este viaje conocí a Marie. Ella es alguien increíble y transformó mi vida, la amo mamá como nunca he amado a nadie, y además me gustaría que vinieras a mi matrimonio.

Annie solloza.

Jared preocupado le pregunta: -¿Mamá estás llorando?

Annie tomaba aliento mientras con la otra mano alejaba el teléfono para que su hijo no se diera cuenta de su estado.

-"Mamá", "mamá". -La llamaba Jared sin comprender la reacción de Annie.

-Aquí estoy hijo. -Le respondió ella más tranquila. -Es que lo que me cuentas me llena de alegría, oh Jared, hay tantas cosas que tenemos que hablar, que arreglar, pero ya habrá tiempo para eso, me muero por conocerla, y te creo hijo, si hay algo que a pesar de todo no perdiste fue tu sinceridad, una madre siempre sabe y sí sería un honor acompañarte en ese día tan especial, gracias por tomarme en cuenta aún sin merecerlo.

-No digas eso mamá. -Contesta Jared algo incómodo por el rumbo que tomaba la conversación.

-Sabes que así es, no he sido la mejor madre del mundo, te descuidé, me dediqué a mí y me olvidé de ti, le di prioridad a otras cosas, tengo que ser honesta contigo, Steve me abandonó, nos divorciamos hace un año, me engañó Jared, con una mujer más vieja que yo pero con más dinero ¿Puedes creerlo? Me he sentido tan sola hijo, y el escucharte hoy me ha hecho mucho bien.

Annie lloraba desconsolada por teléfono. -Te amo Jared, perdóname por todo el daño que te causé, perdóname por haber sido tan egoísta, comprendería si me odias, y sé que así es por tu indiferencia, por tu lejanía, pero está bien me lo merezco.

Jared no supo que decir, jamás espero escuchar hablar de esa forma a Annie, la conocía, ella era orgullosa y también tenía presente lo difícil que le estaba resultando pedir perdón, su corazón se ablandó, deseó estar ahí con su madre y poder abrazarla.

-No regresemos el pasado mamá, no tengo nada que perdonarte, también te amo, ya todo está olvidado y prefiero que no toquemos más este tema, ahora escucha atentamente, la boda será en Florencia porque es el lugar de residencia de Marie, así que mejor toma asiento y acomódate para poder conversar tranquilamente.

Annie no interrumpió a Jared ni un instante y prestó mucha atención, se sintió muy contenta y prometió llegar pronto para ayudar con los preparativos de la ceremonia.

-¡Oh Jared! después de todo Dios escuchó las plegarias que hice.

-¿Oraste por mi mamá?

-Cada noche, tienes que comprender algo, como padres nos equivocamos con nuestros hijos y no siempre somos un pilar para ellos, pero a pesar de eso los amamos profundamente y esperamos que sean felices.

-Gracias mamá, ahora tengo que dejarte, tu eres la primera etapa de mi misión, falta la más complicada.

-Tu padre. Responde Annie.

-Sí papá.

****************

Eran las 10:00 p.m. cuando el teléfono de Marlon Hunter sonó, él ya estaba acostado pero no dormía, veía televisión. Marlon a diferencia de Annie jamás se volvió a casar, vivía solo y por una oportunidad de trabajo se fue a vivir a Alemania, para no estar cerca de su ex esposa, aunque eso significó también permanecer lejos de su hijo.

-Hola papá. -Lo saluda Jared esperando la reacción de su padre, hacía ya casi diez años que no tenían ningún contacto, ni físico ni telefónico. Marlon siempre fue un hombre frío, inexpresivo, pero a su manera amaba a su hijo aunque le costará demostrar sus sentimientos.

¿Jared? -Consulta inseguro.

-Sí papá soy yo.

Marlon se levantó de la cama y camino en círculos sin saber muy bien que debía decir.

-¿Cómo estás? -Por fin preguntó Jared.

-Bien, ehh bien, todo bien¿ Y tú?

-De maravilla papá.

-Ahh pues, ehh que bueno que estés así......... -(Silencio)

-Si quieres te llamo en otro momento papá tal vez estabas durmiendo, ¿Es tarde allá verdad?

-Sí, sí son las 10:00 p.m. pero no dormía, me siento tonto es todo, hace tanto que no..... -(Sus palabras se cortan)...... -Es sólo que estoy sorprendido de que llames, yo quise hacerlo pero....... -(Silencio)

-Lo entiendo papá, lo mismo me pasó un par de veces, no te preocupes.

-¿Estás bien?, ¿Tu mamá está bien? ¿Ha ocurrido algo malo?

-No papá no necesariamente tiene que pasar algo malo para llamarte.

-Sí pero bueno.......la última vez que nos vimos discutimos y......bueno se dijeron muchas cosas...... -(Hace una pausa para continuar).... -Hirientes, yo.....dije....... -(Pausa) -No era cierto hijo, lo lamento, me alegra que me llamaras.

Jared no podía creer cómo se estaba desarrollando todo, ambos Annie y Marlon actuaban en forma contraria a lo que él imaginó, esperaba reclamos, reproches quizás hasta que le colgaran pero ellos actuaban comprensivos y al igual que él querían hacer las paces. Supadre era más orgulloso que Annie pero aún así dijo: -"Lo lamento", Jared sabía que nunca pediría perdón pero ese "Lo lamento" era suficiente.

-Papá yo también te dije cosas horribles y lo siento, ya no quiero estar más molesto contigo, ¿Puedes perdonarme?

Las facciones de Marlon se suavizaron y poco a poco su tensión fue disminuyendo.

-Hace ya mucho tiempo te perdone Jared, te quiero hijo.

Jared quedó atónico, era la primera vez que escuchaba de su padre un te quiero salir de sus labios.

-Yo también te quiero papá.  -Respondió cuando pudo reaccionar.

-Estás diferente Jared, ¿Que te ha ocurrido?

-Conocí a alguien que llegó a mi vida, para ponerme en mi lugar.

-¿Y como se llama ella?¿La podré conocer?

-Se llama Marie papá, es italiana y sí la vas a conocer ya que el motivo de mi llamada es porque deseo que me acompañes el día de mi boda, mamá y tú, ¿Crees que podrás estar cerca de ella? sé porque te fuiste tan lejos.

-¿Te casas?, oh vaya, creí que no vería este día, no te preocupes por Annie, ella y yo, bueno cuando Steve la dejó me llamó, se encontraba en un estado de ánimo deplorable y no pude colgarle o ser grosero con ella, a pesar de nuestra diferencias, fue mi esposa y además de esa unión naciste tu, nos reconciliamos al menos en el plano espiritual, nos llamamos de vez en cuando.

-Oh papá eso es, wow, una excelente noticia.

-Sí lo es, pero cuéntame más de Marie, ¿Cómo la conociste?

Jared y Marlon hablaron alrededor de dos horas y Jared sintió que una carga muy grande lo abandonaba, cuando terminaron de conversar se dirigió al cuarto de Marie que se encontraba recostada en la cama ya en pijamas. Jared se recuesta a su lado y toma sus manos besándolas, al mismo tiempo que se acercó y la besó en la frente.

-¿Cómo te fue con tus padres?

-Fue un éxito. -Agrega él, ambos sonríen y se abrazan.