81 [MARATÓN 1/5]

Escuché el timbre sonar. Fui hasta ella, miré por el visor de la puerta y vi que era Zack.

-Ha venido -susurré.

-Ábreme la puerta, se que estas ahí Rebecca.

-Vete, no te quiero ver -dije.

-Venga, no seas cría -dijo-. Ábreme la puerta.

-No te abriré la puerta. Puedes estar todo el tiempo ahí parado.

Lo ignoré y fui hacia mi habitación. Mientras estaba en la habitación, escuché la voz de Zack. Bajé rápidamente las escalera y le vi en el salón hablando con Héctor.

-¿¡Qué haces tú aquí? -pregunté-. ¿¡Quien ha abierto la puerta!?

-Yo ¿que pasa? -respondió Héctor alzando una ceja.

-¿Por qué has abierto?

-Porque me sale de los huevos.

-Imbécil -espeté.

-Amargada.

-Héctor, nos podias dejar a solas -dijo Zack.

-Vale -dijo yéndose hacia la cocina.

-Te dije que no te quería ver -rodé los ojos.

-Rebecca, por favor, déjame que te lo expliqué -dijo mirándome con una expresión triste.

No pude resistir la manera como me miraba.

-Habla -dije con los ojos cristalinos.

-Siéntate primero -lo obedecí y me senté -. Bueno... el motivo porque me voy es por mis estudios.

-¿Tus estudios?

-Si -soltó un bufido-. Suspendí casi todas las asignaturas. Mis padres no estuvieron muy orgullosos sobretodo mi padre, así que mi padre decidió que seria mejor estudiar en Inglaterra, mi país natal. Mi madre no estuvo de acuerdo con la idea de mi padre pero sería mejor para mí.

-¿Por qué no me dijiste que habías suspendido?

-No lo se.

-Si que lo sabes. ¿Cuando volverás? -pregunté con la voz temblorosa.

-No lo se -al escuchar su respuesta una lagrima se me escapó-. Tranquila, creo que estaré un mes o dos meses en Inglaterra.

-"Crees", aún no estas seguro -dije-. Tengo miedo.

-¿Miedo de que?

-Miedo de que te enamores de otra chica y después te olvides de mi -dije llorando-. No quiero que eso pase

-No digas eso, nunca pasará. Siempre serás la mujer de mi vida y ninguna chica te reemplazara

-¿Lo dices enserio?

-Claro que si Rebecca, yo te quiero a ti.

-Yo también te quiero -sonreí.

-Me gusta verte sonreír -me dio un beso.

-Tonto -dije-. ¿En un mes te vas?

-Si.

-Te echaré de menos.

-Yo también.

-¿¡Como que te vas!? -exclamó Héctor interviniendo la conversación.

-¿Nos estabas escuchando toda la conversación? -pregunté.

-Calla pesada -dijo y se dirigió hacia Zack-. ¿Es verdad lo que acabo de escuchar?

-Si tío, me voy.

-¿Porque? -dijo fingiendo que estaba llorando-. Te voy echar de menos.

-Yo también.

-Mentiroso, no te importo una mierda.

-Claro que me importas, eres mi mejor amigo.

-Héctor, vete ya -dije cansada.

-Amargada -murmuró-. Después hablamos.

Cuando subió las escaleras yéndose hacia su habitación, seguimos con lo que estábamos hablando.

-¿A que horas te irás?

-A las tres de la noche.

-Pues nada.

-¿Pasa algo?

-Quería acompañarte hasta el aeropuerto, no creo que mi madre me dejará salir a las tres de la noche.

-No pasa nada, mi madre me acompañará.

-Te echaré de menos -lo abracé-. No quiero que te vayas.

-Yo tampoco, no hay más remedio.

-Te echaré de menos, pero muchísimo.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top