Chloe en multimedia

Escuché cómo alguien entraba en la casita, me di la vuelta y vi que era la amiga de Chloe. Me agarró de los dos brazos para que no escapará.

-Ya te pillado -dijo ella.

Gritó el nombre de Chloe y entonces ella vino enojada hacia mi.

-Maldita puta, dame mi móvil.

-No te lo voy a dar hasta que me digas la verdad.

-¿¡De que hablas!?

-Tú sabes de que hablo -saque su móvil y le enseñé la conversación.

Ella leyó la conversación. Mientras leía hacia muecas con la cara.

-Yo no te escrito esto -dijo.

-Entonces ¿quien has sido? ¿Casper? -rodé los ojos.

-Yo qué se -respondió ella.

-Se que fuiste tú la que me llamaste ayer en la fiesta.

-Yo no te llamé Rebecca.

-Para de mentir, haces todo esto para verme alejada de Zack -gruñí-. Siempre me haces la vida imposible.

-Que pesada ¡¡Que yo no te llamé!!

-¿Cómo puedes ser tan mentirosa y a la vez tan zorra? -dije-. Te gusta mi hermano y mi novio.

-Oye cuidadito con esa boca ¿vale? -dijo-. No te estoy mintiendo, es imposible que hubiese llamando.

-¿Por qué es imposible?

-Estaba.... -se quedó callada por un rato.

-¿Estabas? -alcé una ceja.

-Eso si que no te lo voy a decir -respondió en seguida.

-Claro qué no me la vas a decir, estaba todo el tiempo hablando conmigo en la fiesta.

-Que no te amenacé pesada si estaba haciendo el amor con Johan en la fiesta -soltó cabreada.

-¿Te tiraste al amigo de Héctor? -fruncí-. Eres más puta.

Quitó su móvil de mis manos.

-Soy libre de hacer lo que me da la gana -me miraba con superioridad-. No te escribí ni siquiera tengo tu número

-No te creo Chloe, no tiene sentido de lo que dices -dije confundida-. ¿Porqué está la conversación en tu móvil?

-Yo que se pesada. Lo único que se es que hace una semana se me perdió el móvil, puede ser que sea cualquier idiota -gruñó-. No me importa si no me crees, no me voy a morir por eso, piensa lo que te de la gana.

Salió de la casa. Sabrina apareció cuando Chloe ya se había ido y me miró con una sonrisa.

-Sabrina ¿a donde estabas? -dije un poco enojada.

-Te estaba buscando -dijo-. ¿Qué ha pasado? Acabo de ver a Chloe salir de la casa.

-Encontré en su móvil la conversación -respondí.

-¿Y qué? -respondió seca.

-Chloe dice que no ha sido ella la que ha escrito -suspiré-. Todo esto me confunde.

-Rebecca, olvida todo esto, no te va hacer nada -me abrazó.

-Como quieres que lo olvide ¡¡Me ha amenazado en separar nuestra relación!!

-No lo hará -dijo Sabrina-. Venga, vámonos de aquí.

Salimos de la casa y nos fuimos del parque, en el camino estaba todo el tiempo pensando en lo que había pasado. Nada de lo que decía Chloe tenía sentido, si ella no era la que me amenazó entonces alguien habrá cogido el móvil de Chloe y lo habrá escrito. Estaba bastante asustada.

-¿Rebecca? ¿Estás bien? -sonrió Sabrina.

-No lo estoy, tengo miedo.

-Aún sigues con eso -rodó los ojos-. No te va hacer nada.

-¿Cómo lo sabes?

-Porque son esas típicas personas que hablan mucho pero después no hacen nada.

¿Sabrina tenía razón? Claro que sí, podía ser aquellas personas. Seguro que todo esto era una broma de la loca, esta vez iba ignorar sus mensajes.