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Por favor no veas
Solamente un chico atrapado en sueños y fantasías,
Por favor mírame a mí
Intentando alcanzar a alguien que no puedo ver.

Toma mi mano, veamos a donde despertamos mañana,
Los mejores planes a veces son una salida de una noche,
Estaré maldito, cupido pide su flecha de regreso,
Así que embriaguémonos con nuestras lágrimas.

Y Dios, dinos la razón por la que la juventud se desperdicia en los jóvenes,
Es época de caza y las ovejas están huyendo
Buscan una razón,
Pero, ¿Acaso somos todos estrellas perdidas tratando de iluminar la oscuridad?

¿Quiénes somos nosotros?
¿Solo un puñado de arena en una galaxia?
¿Quién soy yo?
Si no tenemos cuidado se hará una realidad.
No te atrevas a dejar que nuestras mejores memorias te traigan dolor,
Ayer vi a un león besando un venado,
Da vuelta a la pagina, tal vez encontremos un nuevo final,
En el que bailemos en nuestras lágrimas.

Y Dios, dinos la razón por la que la juventud se desperdicia en los jóvenes,
Es época de caza y las ovejas están huyendo
Buscan una razón,
Pero, ¿Acaso somos todos estrellas perdidas tratando de iluminar la oscuridad?

Lost Stars - Adam Levin

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Hoseok bufó girando los ojos con algo de molestia mientras leía cómo trataban de convencer a Jungkook de salir con Irene. Era obvio que Jungkook no haría aquello, ¿Verdad? O... tal vez sí lo haría, después de todo Irene era una chica linda.

Comenzó a sentirse algo ansioso mientras continuaba leyendo el chat hasta que finalmente Jungkook dijo que no saldría con Irene porque tenía que ir a la casa de Hoseok. Fue hasta ese punto en el que Hoseok sintió alivio y a la vez miedo.

Hwasa

"¿A la casa de Hoseok? Es cierto, Taehyung acaba de agregarlo y no ha salido."

"Oh, me sale que está leyendo."

Jungkook el fastidioso

"Si, a la casa de Hoseok. Por eso no puedo salir con nadie."

Seokjin

"No entiendo qué tiene que ver una cosa con la otra."

Wendy

"Opino lo mismo, ¿Qué tiene que ver una cosa con la otra, Jungkook?"

Jungkook

"Soy gay."

Taesito

"O.O"

Hoseok dejó caer su celular al piso y maldijo en bajo, pero quería seguir leyendo, así que se impulsó hacia adelante hasta caer de rodillas a la par de su celular, por suerte había quedado hacia arriba.

Irene

"¿Eres gay? ¿Es en serio?"

Jungkook

"No entiendo por qué les sorprende tanto."

Wendy

"Bueno, eso no importa, Taehyung era gay y ahora somos novios."

Taesito

"¡Wendy! Quedamos de guardar el secreto..."

Hwasa

"Siento que no estoy entendiendo algo, Jungkook, ¿Qué tiene que ver Hoseok con que seas gay?"

"¿Te gusta?"

Jungkook

"Simplemente dije que no saldría con Irene porque iré a la casa de Hoseok y porque soy gay."

Irene

"No te pases Hwasa, ¿A quién podría gustarle ese amargado?"

Taesito

"Ya, hablemos de otra cosa, este tema ya aburre."

Hwasa

"Hablemos de Seokjin y su crush con el profesor Kim."

Seokjin

"¡Hwasa! ¡Dijiste que guardarías el secreto!"

Hwasa

"No puedo creer que a estas alturas me sigan creyendo."

Hoseok cerró los ojos con fuerza, cielos, por un instante creyó que Jungkook podría confesarse o algo así y él... ¿Se había emocionado? Idiota... él no podía enamorarse, él simplemente sería una carga para cualquier persona de quien se enamorara.

Ni siquiera podría serle fiel a su pareja con su padrastro violando y abusando de él.

La puerta de la casa fue tocada y Hoseok no pudo moverse, ni siquiera lo intento.

─ ¡Hoseok, es Jungkook! ─ Escuchó el grito de su madre y luego los pasos acercándose a la habitación.

Jungkook tocó la puerta antes de abrirla lentamente.

─ ¡Hoseok! ─ El chico de cabello achocolatado se apresuró a su lado y lo ayudó colocando el celular en la cama y levantándolo delicadamente. ─ ¿Estás bien? ─ Preguntó tomando su rostro con ambas manos y obligándolo a verlo a los ojos.

Hoseok lo miró algo asustado, pero se relajó cuando Jungkook movió sus manos acariciando su rostro suavemente.

─ Solo.. el chat.. Yo. ─ Intentó explicar Hoseok.

─ No les hagas caso. ─ Le dijo el contrario con una pequeña sonrisa, ambos estaban sentados en su cama. ─ Nunca le hagas más caso a un chat que a lo que hablamos en persona.

─ ¿Entonces no eres gay? ─ Preguntó Hoseok jadeando un poco.

─ Lo soy. ─ Le dijo Jungkook sonrojandose un poco y soltando el rostro de Hoseok.─ ¿Y tú?

─ ¿Yo? ─ Preguntó Hoseok.

Jungkook asintió, su corazón estaba acelerado por el rumbo de la conversación con Hoseok, la puerta del cuarto estaba abierta, por lo que antes de continuar se levantó a cerrarla bajo la atenta mirada de Hoseok.

Regresó a sentarse a su lado.

─ Si... Hoseok, tú. ¿Te gustan los chicos? O... ¿Crees que podría llegarte a gustar algun chico? ─ Preguntó Jungkook bastante nervioso.

Hoseok bajó la mirada.

─ N-No debería... yo... no...

─ ¿Eres homofóbico? ─ Preguntó Jungkook algo decepcionado, los ojos de Hoseok se abrieron ampliamente en una expresión bastante adorable, era un desastre en su interior.

Negó con la cabeza efusivamente y respiró profundo.

─ No... no soy homofóbico... quiero decir que yo no debería enamorarme de nadie. ─ Hoseok desvió la mirada después de decir aquello.

─ ¿Qué? ¿Por qué dices eso? ─ Jungkook extendió su mano y tocó suavemente la mano de Hoseok, tal cómo había hecho hace algunas horas en la puerta de entrada.

El pelinegro se rió suavemente.

─Mirame...─ Le dijo Hoseok.

─ Lo hago.─ Le dijo Jungkook.─ Desde el primer día.

Las mejillas de Hoseok se sonrojaron.

─ ¡Chicos ya está la comida!

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Las horas pasaban rápido, pensó Hoseok, aunque hace mucho no se sentía así. Pero habían sido horas las que estuvo platicando con Jungkook sobre su vida antes de venir a Seúl, había reído mucho, a pesar de que su cuerpo se adormeciera con ello, Jungkook simplemente lo ayudaría a acomodarse y continuarían hablando.

Pero se acercaba la hora en que Jungkook probablemente tendría que irse y luego de eso estaría sólo en su realidad otra vez... tragó saliva pensando en su padrastro.

─ ¿Hoseok? ─ El pelinegro se sobresaltó. ─ Te distrajiste. ─ Le dijo Jungkook con una sonrisa.

─ ¿Yo? Pff... yo no me distraigo.─ Le dijo Hoseok mirando disimuladamente a otro lado.

─ Hoseok... yo... ─ El pelinegro se giró para ver de nuevo a Jungkook. El chico de cabello achocolatado se veía nervioso desde antes de la cena.

─ Dime...

Jungkook se mordió la lengua, si lo decía Hoseok probablemente se asustaría y lo alejaría. Pero... Jungkook desvió su mirada disimuladamente a las piernas descubiertas del chico. Tal vez Hoseok había olvidado cubrirse, un escalofrío recorrió su espalda.

Cuando Hoseok le pidió mirarlo, él lo hizo y notó que el chico vestía un short, algo que nunca había hecho en todo ese tiempo. Pero sus piernas... ¿Qué eran esos hematomas? ¿Golpes? Se miraban dolorosos... Jungkook disimuló y no había mencionado nada al respecto porque no sabía qué pensar.

─ No es nada.. Yo... ¿Quieres venir a mi apartamento? ─ Fue lo único que se le ocurrió.

─ Umm... es tarde, no creo que mis padres me dejen, ¿A qué hora me irían a traer? ─ Preguntó Hoseok y Jungkook rió suavemente.

─ Podrías quedarte a dormir.─ Lo invitó.

─ ¿Quedarme a dormir?

─ Cómo una pijamada. ─ Ofreció Jungkook con sus mejillas bastantes sonrojadas.

─ Y-Yo... no sé si me dejen.─ Dijo Hoseok desviando su mirada, pero sí quería, porque eso significaba no pasar la noche en casa, significaba no tener que sufrir por su padrastro. ─ ¿Podrías... preguntarle tú a mi madre? ─ Pidió algo avergonzado.─ Creo que le caíste bien.

Jungkook rió.

─ Mmm... ¿Aun está en la cocina verdad? ─ Preguntó Jungkook y Hoseok asintió. ─ Iré mientras tú arreglas tus cosas.

Jungkook se apresuró a salir de la habitación y Hoseok se levantó de su cama, suspiró mientras observaba aún su ropa extra extendida sobre ella, pero agradeció que Jungkook no preguntara al respecto. Comenzó a buscar entre la ropa qué llevar para ponerse mañana y fue hasta ese momento que Hoseok recordó sus piernas...

Volteó a verse a sí mismo y luego se apresuró a quitarse el short, se colocó de nuevo el jean que había utilizado para ir al colegio. Tomó lo primero que encontró y lo metió a una bolsa, su cuerpo temblaba de los nervios. No, Jungkook no pudo haber visto nada, ¿Verdad? Él habría dicho algo, habría sentido asco por él, no lo estaría invitando a pasar la noche en su apartamento.

La puerta de su habitación se abrió y Jungkook entró, con todas sus fuerzas intentó no enfocar sus ojos en las piernas del chico, pues había notado el cambio. Ahora Hoseok usaba nuevamente el mismo Jean de rodillas rotas, eso solamente quería decir que se había dado cuenta. Jungkook se enfocó en sus ojos, Hoseok parecía querer llorar, lo estaban evaluando también, probablemente preguntándose si había visto algo. Entonces supo, supo que Hoseok lo alejaría definitivamente, se cerraría... sus ojos se lo dijeron. Dolía maldita sea, fueron los segundos más largos de su vida.

─ Jungkook tú...

─Tu madre dijo que sí. ─ Interrumpió, pues sabía que si lo dejaba seguir, todo acabaría.

Hoseok no confiaba en él.

─ Estaba emocionada, en realidad. ─ Continuó. ─ ¿Nos vamos?

El pelinegro tragó saliva, y sintió alivio, tal vez Jungkook no había visto después de todo. Sintió alivio.

Ambos caminaron y bajaron las gradas, pasaron por la mochila de Hoseok y pronto se encontraron caminando bajo el cielo nocturno. Hoseok pensó que tal vez estaba soñando, era algo increíble para él, sentir en su piel la brisa nocturna, intentaba no emocionarse demasiado mientras miraba el cielo estrellado.

Jungkook sonreía observando al chico a su lado completamente distraído y entonces pasó.

─Mira Jungkook, chub, chub. Kggggjj.─ Hoseok rió después de hacer esos extraños ruidos mientras dibujaba algo en el aire con su dedo, juntando estrellas que Jungkook no podría ni siquiera mirar porque sus mejillas se calentaron por lo malditamente adorable que aquello había sido.

Llevó sus manos a su rostro y apretó intentando calmarse, pues Hoseok era el que tenía narcolepsia pero a él le terminaría dando un paro cardiaco.

Hoseok se giró para verlo y Jungkook observó su pálido y lastimado rostro.

─ Con que... Chub, chub... ─Dijo Jungkook y ahora fue el turno de Hoseok de sonrojarse, el pelinegro tropezó con sus piernas que se adormecieron al instante y cayó de cara al piso.

─ ¡Lo siento! ─ Gritó Jungkook apresurandose a ayudarlo a levantarse.

Sin embargo, Hoseok pensó que había sido su propia culpa, pues él había hablado primero.

─ Estoy bien. ─ Dijo el pelinegro más avergonzado que otra cosa. Jungkook suspiró y lo cargó el resto del camino. 

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