Luego de que Shiro saliera de la base, Edén se contagió de su preocupación por la castaña. Mientras sus 3 compañeros seguían hablando, logro separarse y caminar un rato por la base, con la esperanza, de encontrar a la castaña. Llego a la zona donde dormían los Agentes de Overwatch. Con algo de incomodidad se disponía a regresar a la zona de entrenamientos. Pero la voz de 2 personas lo hizo detenerse algo nervioso.

—¡Edén! ¿Qué haces aquí colega? —dijo Lucio acercándose junto a Lena quienes le sonreían.

—Buscaba a Caeli ¿No la han visto?

—Hum, no recuerdo haberla visto o saber a donde fue, lo siento—dijo Lena mientras Lucio se quedaba pensativo.

—Siento que debía decirle algo, pero lo olvide por completo—Dijo el brasileño rascando su nuca.

—No pasa nada.

—Edén, te hare una pregunta y quiero que me respondas de la forma más sincera posible. —dijo Lena mientras el azabache se ponía nervioso.

—Hum, si está bien.

—¿Te gusta Caeli? — De inmediato la cara del azabache empezó a arder en rojo, Lucio contuvo la risa al ver como se coloraba en cuestión de segundos, mientras, Lena lo miraba confundida.

—No. No sé de dónde sacas eso—dijo desviando la mirada mientras Lena suspiraba.

—¡Hey! Te dije que fueras sincero.

—No puedo ser sincero si no me dices de donde sacas esas ideas—dijo algo mas calmado mientras Tracer gruñía algo molesta, pensando en como explicarle al azabache.

—Vamos a tomar algo y te explico—dijo Lena mientras jalaba al azabache y Lucio los seguía. Quería saber cómo acabaría esto.

Salieron de la base y llegaron al café donde Edén se habia encontrado con Caeli, una sonrisa algo idiota apareció en sus labios mientras Lucio se carcajeaba internamente. Era obvio que el amor que sentía lo estaba idiotizando poco a poco. Se sentaron en una mesa dentro del local, Lena pidió un Frapuccino, Edén se limitó a un americano y lucio con un jugo.

—Bien, ahora te explicare porque creo que te enamoraste de la linda de mi amiga—dijo Lena sentándose como si fuera a decir algo de vida o muerte, eso puso nervioso a Lucio.

—Cuando esta con McCree eres demasiado celoso, y antes de que me interrumpas, Shiro lo es, pero no tanto como tú, se nota babeas por ella—dijo la británica mientras Lucio se atragantaba con su jugo al ver la cara roja y sorprendida del azabache.

—Bueno...es cierto que me gusta, pero... sé que no me ve más que como a un hermano—dijo algo incómodo.

—¿Lo has intentado?

—No, pero se que ella quiere a McCree, aunque lo niegue—dijo calmado tomando de su café.

—Parece que te rompí el corazón cuando ni siquiera lo intentas—dijo molesta la británica.

—Si Hana estuviera aquí, te hubiera obligado a sonreír, ir a buscarla y decirle lo mucho que la amas.

—Lucio, no es mala idea—dijo Lena con una sonrisa mientras el azabache suspiraba.

—Aunque quiera, no lo hare—eso corto a Lena y a Lucio que lo voltearon a ver sorprendidos.

—¿¡Por qué!?—Exclamaron los dos agentes al mismo tiempo mientras el azabache sonreía de forma triste, pero con dulzura.

—Para mi primero es su felicidad, no quiero agobiarla con mis sentimientos, y menos ahora.

—Aw, vamos Edén. No pierdes nada.

—Tengo miedo de que pierda la poca confianza que me tiene. Sabes es bastante linda como para ignorar que me gusta, pero, prefiero verla feliz con otro a que se aleje de mi por decirle lo que siento.

—Solo te lastimarás—dijo Lucio algo preocupado por la forma en que el azabache decayó.

—Na, lo he aguantado mucho, tarde o temprano desaparecerá.

Lena y Lucio suspiraron mientras continuaban hablando con el azabache. De regreso a la base, Lucio habia animado lo mas que pudo a Edén, Lena los miraba mientras pensaba un poco en cómo ayudar a su amigo.

—Edén tengo una pregunta, además de pertenecer y pasar gran parte juntos como grupo cuando ocurrió la crisis. ¿Qué conexión tienes con Caeli? —El azabache se detuvo y se quedó pensando con la mirada gacha, Lucio golpeo con el hombro a Lena algo molesto, pues parecía que habia vuelto a decaer.

—Lena.

—Lo siento, si quieres no contestes es que...

—Calma, entremos y les contare un poco.

Los agentes se miraron sorprendidos y siguieron al azabache, fueron a la habitación de lucio, mientras oían música, el brasileño y Lena se sentaron en la cama mientras Edén se sentaba en un sillón del dj. Se quedo pensando y con una sonrisa comenzó a contar.

Para ser sincero, recordar estas cosas me alegran el día, a veces me amargan al recordar que ella solo me ve como un hermano mayor, o bueno, eso es lo que yo siento. Apenas la rescatamos de un omnico del Null Sector. Corrió a brazos de Shiro, él le salvo la vida, inmediatamente Marc y Tamara se hicieron cargo de ella, acogiéndola como nuestra hermana. No tenía heridas, eso les alegro.

Al iniciar el camino a Suecia. Cada uno fue enseñándole cosas que Shiro nos enseño para defendernos. Tamara y Marc, en cada parada se detenían a crear habilidades para soportar la batalla, ahí es donde aprendimos nuestras Habilidades Definitivas. Eran 9, Caeli era indefensa, no poseía ninguna y Marc se negaba a enseñarle. Tamara lo hizo.

Muchas veces cuando descansábamos y me tocaba hacer guardia, encontraba a Tamara y a Caeli entrenando, tratando de que usara esas habilidades, me enternecía, y decidí ayudarles. Con el tiempo me di cuenta de que Caeli estaba decidida a dar todo por nosotros. Arriesgaba todo por sobrevivir.

No era la Caeli que conocen, no se le parece ni un poco. Pero, aun así, no puedo evitar sentir amor hacia ella. Me salvo la vida una vez. Es un recuerdo que añoro mucho, y lo añorare por siempre. Porque fue ahí cuando sentí amor por ella, no un amor de hermanos, un amor genuino, quería ser yo quien cuidara de ella en un futuro. Ser pareja.

—¡Shiro! ¡Tenemos que irnos, nos encontraron! —eran los gritos de Tamara los que nos despertaron a todos esa madrugada. Al levantarme mire, todo el bosque en llamas. Un grupo de omnicos del Null Sector venían a por nosotros.

—¡Tomen sus armas! Nos abriremos paso hasta estar seguros. —dijo Shiro tomando su arma respectiva. Ahí la mire, decidida a salir con vida, me inspiro.

Sentí que no habia pasado mucho tiempo, estaba ido, no tenía noción de lo que pasaba, me refugiaba atrás de varios arboles caídos, no me podía mover y temblaba sin control. Un OR-15 modificado me encontró y al intentar huir, casi muero.

—¡Edén, cuidado! —grito Tamara, y la vi, sus ojos, llenos de terror mientras sostenía el fusil.

El OR-15 saco la cuchilla de su brazo y araño con el todo mi pecho, una marca que no se olvida y no se quita. Fue profundo y poco a poco perdía el conocimiento de lo que me pasaba. La tormenta, fue la primera vez que la oímos y no venia del compañero que la habia aprendido, si no de Caeli.

Elimino a ese OR-15 que me habia seguido desde que logramos ponernos a cubierto. Sentía frio, la muerte se acercaba y yo la iba a aceptar. Habia olvidado el porque peleaba en ese momento.

—Esta...—dijo Shiro con cierta melancolía. Todo estaba negro no sé cómo explicarlo, pero sé que Caeli se acerco a mi cuerpo e hizo lo imposible porque reaccionara.

Lo recordé, no solo peleaba por sobrevivir, peleaba por estar con ella en un futuro. Volví a tener fuerzas y con dificultades abrí los ojos, estaba ahí, en mi pecho sollozando. Me dolió en el alma saber que yo habia ocasionado eso. Solo pude abrazarla.

—Calma pequeña. Aguantare

—Eres un idiota. No vuelvas a hacer eso ¿Lo prometes?

—Lo prometo. —sonreí de forma forzada por el dolor, creo que fue cuando nos hicimos aún más unidos.

Ya estábamos a días de Suecia. Una noche nos paramos a descansar, estaba viendo la luna, se veía linda. Me acerque y parecía que ni se habia percatado, se sentía paz y mucha calma en ese momento.

—¿Crees que nos separen?

—¿A qué te refieres?

—Pues, soy menor de edad aun, supongo que me darán en adopción, y a ustedes... no sé qué le espere a Shiro o a Dante. —dijo abrazando sus piernas, note como una lagrima escapaba por sus mejillas.

—Ven, acércate. —La senté entre piernas mientras le sonreía, me sentí su hermano en ese momento. —¿Recuerdas la promesa que te hiciste con Tamara?

—Si, de reunirnos en Overwatch cuando se pudiera—dijo algo mas animada mientras limpiaba esas lágrimas.

—Prometo, que cuando este en mis manos, iré a buscarte junto a los demás para estar de nuevo como hermanos ¿Te agrada la...

—¡Gracias, Edén! No sé qué haría sin ustedes. — sentí un enorme nudo en la garganta, iba a llorar por separarme de ella, pero si tenía que ser así, lo aceptaría.

Apenas llegamos a Suecia, un grupo de doctores, militares y gente de la ONU nos recibieron. Apenas nos contaron, supieron que algo andaba mal ¿Por qué solo 10 personas llegaron al final? Y entre ellos 2 exo. No les agrado. Se llevaron a Caeli, no nos pudimos despedir. Casi voy a parar a un reformatorio para menores por agredir a uno de los militares, quería estar con ella. Una familia noruega se interesó en mí, les conté mi historia y me apoyaron, prometí con el alma pagárselos. Talon los asesino en un ataque terrorista. Pase a manos de uno de mis tíos adoptivos, que vive en Suecia. Fue el ultimo impulso que tuve en la vida para llegar aquí, y no quiero echarlo a perder, y tampoco quiero que Caeli lo haga.

—Vaya no sabía que todos pasaran cosas tan...

—Crudas—dijo Lucio mientras Lena asentía.

—Fue bastante crudo la verdad, pero te obliga a madurar. Caeli era pequeña, así que entiendo que quiera ser linda y amable, tratar de agradarle a todos. A diferencia nuestra, desde pequeña la llamaron máquina, vio morir a sus padres en plena crisis en su ca...

—Espera, ¿Los padres de Caeli fueron asesinados frente a ella? —dijo Lena bastante sorprendida.

—Ella me lo dijo cuando la encontramos. Así que entiendo que le duela la muerte de Karen, ya lo vivió. —dijo encogiéndose de brazos.

—Vaya. —dijo Lucio dejándose caer en la cama-

—Ahora entiendo mas porque la cuidan tanto.

—Es la mas pequeña de los 6, ya es algo "normal", si se podría decir así—rasco su nuca mientras Lena le sonreía.

—Bueno ahora que me contaste todo esto ¿No crees que deberías cumplir tu sueño de estar a su lado?

—Se lo diré Lena, pero será mucho después de todo esto

—Si—dijo Lena en señal de victoria mientras Lucio y Edén reían por su forma de demostrarlo.