-Lo siento... -murmuró Hoseok, avergonzado por el acto recién realizado. No terminaba de entender cómo es que habían terminado besándose, claro que probablemente la excusa de Jimin era estar borracho, pero, ¿Y él? ¿Él por qué lo había hecho? ¿Por su charla con Yoongi?

Había desviado la mirada, incapaz de mirar al menor, y por ese descuido fue tomado completamente por sorpresa al sentir nuevamente los labios de Jimin chocando contra los suyos, con desespero. Parpadeó un par de veces sin saber qué hacer, pero, al final de todo, terminó correspondiendo el beso porque no iba a negar que le habían gustado demasiado los labios que el tercer Maknae poseía.

Jadeó al sentir sus lenguas iniciar una guerra y enterró sus dedos entre las hebras de cabello ligeramente morado que el menor llevaba, queriendo sentir más.

-Sinceramente, creí que no te había gustado mi idea en lo absoluto, pero... -se separaron bruscamente respirando agitados, volteando a ver a la tercera persona, quien hablaba, encontrándolo cruzado de brazos con una ceja alzada y una sonrisa burlona bailando en su rostro-. Amigo, tú si que te luces, eh

-Mierda... -murmuró chasqueando la lengua, Jimin mantuvo su mirada sobre sus manos nerviosas, al parecer el alcohol poco a poco comenzaba a abandonar su sistema, era vergonzoso que Yoongi los encontrara en esa situación, más aún cuando el mayor estaba al tanto de todos sus enamoramientos. Se sentía humillado.

-Y-yo... -tartamudeó mordiendo su labio inferior.

-Lamento arruinar el momento -suspira el mayor de los tres-, Hobi, creo que es mejor que vayas a tu habitación -Hoseok asintió en silencio y dando una leve y simple caricia en una de las mejillas del menor, se alejó en dirección a la habitación que compartía actualmente con Namjoon.

-H-hyung... yo t-también... -hizo ademán de levantarse, pero Yoongi negó con la cabeza y le hizo señas de que lo siguiese.

-Le dejaré un mensaje a Kookie para que limpie esto por ti, vamos -dice al notar las miradas preocupadas que el menor le lanzaba al desastre de botellas y helado. Asintió en silencio, incapaz de decir alguna palabra, después de todo, eran muy pocas las veces que había interactuado con el rapero después de aquel mal impulso sucedido hace más de un año.

Se sorprendió al verse a solas con el mayor y comenzó a juguetear con sus dedos, impaciente y nervioso por lo que sea que Yoongi le dijese, aunque lo más probable era un regaño.

-¿Sentiste algo cuando te besaste con Hobi? -frunció levemente el ceño y dejó de morderse el labio.

-¿Qué? -murmuró bajo, observando fijamente el rostro pálido del rapero.

-Eso, ¿sentiste algo? -parpadeó varias veces mirando esta vez sus pequeñas manos y recordó el beso anteriormente compartido con Hoseok, su estómago se retorció levemente y lo atribuyó al alcohol.

-No sé porqué preguntas eso, hyung... pero yo... sólo tal vez -murmura sintiendo sus mejillas calentarse y frunciendo el ceño otro poco por eso.

-Mira Jiminie... yo sé que nos hemos distanciado mucho en todo este tiempo, más por Jungkook que por lo sucedido en ese entonces. Pero quiero que sepas que me preocupas, así como me preocupa todo el resto del grupo, pero sobre todo me preocupa Hoseok, porque es mi mejor amigo -Jimin asiente y sonríe ligeramente-. Yo... sé que Tae los está haciendo sufrir a ambos con esa incertidumbre de si escogerá a uno o al otro, pero yo preferiría que lo dejaran por la paz... que ustedes dos dejaran de esperar y comenzaran a buscar algo más... yo... le dije a modo de broma a Hoseok que podía intentar algo contigo, pero luego de ver ese beso, en serio sería lindo que ustedes se dieran una oportunidad

-Hyung...

-Ambos necesitan la oportunidad de sentirse queridos y sé que ambos tienen mucho amor para dar -ve como el menor tuerce sus labios inseguro, pero sus mejillas exageradamente rojas le dan una buena señal.

-No lo sé, Yoongi hyung... es demasiado complicado, para mí Tae es...

-Sólo es una pequeña idea, sólo es una pequeña oportunidad, sólo eso, nada más -Jimin asiente pensativo mientras Yoongi sonríe victorioso para sus adentros, aunque le costase la vida aquel plan, porque era casi seguro que Jungkook querría estrangularlo cuando lo descubriera.

-¿Por qué tan arrugado, Kookie? -el mencionado levanta su vista del celular con el ceño fruncido y niega mientras bloquea la pantalla del aparato para guardarlo en el bolsillo de su pantalón.

-Hyung, debo volver al departamento, ¿está bien que te deje solo? -hizo un puchero por si a las dudas, no quería tener que quedarse ahí cuando Yoongi le había pedido un favor, o bueno, simplemente le molestaba saber que su novio estaba a solas con Jimin.

-Tranquilo, ve con cuidado. Nam y Tae deben estar por llegar, pero ¿Sucedió algo malo?

-No hyung, tu tranquilo. Lo que pasa es que Suga quiere mimitos -sonríe fingiendo desbordar amor y se despide agitando una mano comenzando a caminar rumbo al departamento, debido a que estaban sólo a un par de calles.

Cuando llegó y sus ojos dieron con el pequeño desorden en el living no pudo evitar una mueca de indignación, suspiró y pensó en lo mucho que torturaría a Yoongi por pedirle limpiar el desastre de alguien más, aunque ya hubiese hecho las pases con Jimin.