Liyue gozaba de un hermoso clima soleado, los comerciantes gritaban las promociones de ventas del día, mientras los niños jugaban por las calles de la ciudad y los perros ladraban contentos al jugar con los niños que volaban cometas, los ancianos tomaban el té y se contaban uno que otro chisme sobre el vecino o la vecina.

La felicidad abundaba en la ciudad de Liyue y el patrono de los contratos, se sentía satisfecho con esto, mientras sus tierras brillarán como el oro durante años, la paz y la felicidad siempre reinará.

— Ustedes dos, ¿no deberían estar ayudado con la preparación del banquete?

Preservadora de las Nubes llevo ambas manos a su cintura y mira a los dos Arcontes con el ceño fruncido. No lo entendía, mientras que todos sufrían por preparar un banquete exquisito digno de dioses esos dos actuaban tan despreocupados y ¡no ayudaban!.

— ¿Estar presentes no es suficiente ayuda? — preguntó el dios del viento con una gran sonrisa con la que desbordaba su felicidad.

Preservadora de las Nubes suspiró, no se molestó en regañar al Arconte sabiendo como era este, ya se hacía la idea de que no ayudaría en nada. Miró al patrono de los contratos, quién bebía de su taza de té con una tranquilidad que le causaba desesperación a la mujer. Zhongli bajo su taza de té al sentir la mirada de la Adeptus y hablo como si supiera lo que diría.

— Anémona me encargo recibir a los invitados.

Una respuesta sencilla y aunque podía sonar como una excusa, ella sabía que no lo era, no necesito más detalles para entender el mensaje que había detrás de esto, conocía Anémona. En realidad, la hija del viento quería evitar que su papá Geo ayudará a organizar el banquete, pues el hombre es bastante exigente y gastaba Mora más de la adecuada. Está claro decir que ellos no tenían Moras, al creador de estos catalizadores no se le había ocurrido dejar una buena cantidad para ellos. Así que no quería que Liyue quedase en ruinas.

— Si es así, no tengo nada que decir.

Fueron sus palabras antes de dar media vuelta y regresar a su puesto para seguir ayudando con el banquete. Zhongli soltó un suspiro y sopló el líquido dentro de la taza que tenía en su mano. No es ignorante, sabe muy bien lo exigente que puede ser cuando quiere que las cosas resulten bien, por eso entiende que Anémona decidiera alejarlo de todo lo relacionado al banquete. Su hija es suficiente para este trabajo, no por nada la educó y le enseño todo lo que sabe sobre la historia de este mundo.

El viento sopla con fuerza en la Terraza Yujing dónde ellos están, está es la señal que solo el dios del viento y su hija logran entender. Los invitados han pisado las tierras de Liyue y no tardarían en llegar a la ciudad, el patrono de los contratos pronto recibe el mensaje de los nuevos invitados.

La taza de té a medio terminar es abandonada sobre la mesa cuando Morax desaparece del lugar, el viento va trás él un poco después, ambos dispuestos a recibir a los invitados que tanto han esperado. No es necesario tomar el papel de Arconte para ir a recibirlos, tampoco es necesario vestirse con trajes exóticos, el patrono de los contratos mantiene su elegancia y buenos modales, mientras que el dios del viento no cambia nada en su apariencia ni actitudes.

A la entrada de la Cordillera Tainheng, es donde Zhongli hace su parada, Venti va más allá de la Cordillera Tianheng para buscar a los invitados y guiarlos por el camino correcto dónde no haya peligros. Una sonrisa se dibuja en sus labios cuando los encuentra, no puede evitar mirar con curiosidad a los dos Dragones de apariencia humana que vienen junto a las dos jóvenes Arcontes, pues si bien sabía que venía uno gracias a su amada hija, no creyó que vendría uno más. Una gota de sudor se asoma por su frente, decide no tomarle importancia y arranca algunas hojas de los árboles más cercanos para guiarlos con ayuda de su viento.

Por supuesto que está acción no pasa desapercibida a la vista de los invitados, sin embargo, la mayoría no logra captar quien es la persona que ha venido a recibirlos y a guiarlos, hasta que Nahida acierta dando la respuesta.

— Es el Arconte Anemo.

Venti se divierte dándoles la bienvenida, juega con la ropa elegante que visten los dragones primordiales, luego guia a la Arconte Hydro con una preciosa danza, Furina rie divertida y sigue los pasos del Arconte Anemo con elegancia y fluidez. El resto se vuelven espectadores, miran a Furina bailar con el viento, sólo la Nahida mantiene una pequeña sonrisa pintada en sus labios y disfruta de la escena.

— ¡Que divertido! — Furina disfruta del baile, sus ropas ondeaban al compás de sus pasos.

La danza entre los dos Arconte se termina con una posición elegante, el viento se aleja de la diosa, y ella inclina medio cuerpo hacia los espectadores que aplauden por su precioso baile, no le importa que sea solo Nahida, el viajero y Paimon quienes aplauden por su baile, ella agradece.

Las hojas de los árboles que usa Venti para guiarlos, vuelan en dirección al norte y los invitados se dejan guiar. Tienen que caminar por unos diez minutos más para llegar a la entrada de la Cordillera Tainheng dónde Zhongli los espera.

— Este lugar... — Apep admira la nación de los contratos, puede sentir el calor que otorga el sol en la nación de los contratos y no es muy diferente a lo que se siente en el desierto, hay una diferencia. El viento que sopla en esta zona le da un toque refrescante y a su vez, cálido —: es cómodo.

La reina menor Kusanali sonríe al escuchar sinceras las palabras del dragón con apariencia humana, ella asiente estando de acuerdo con sus palabras, porque no es mentira que el lugar es cómodo, provoca un sentimiento abrazador que te lleva a querer llamarlo hogar. Puede ser una exageración, pero no lo es, el viajero sabe que este toque acogedor proviene de su famosa amiga, Anémona.

— Es el toque que Anémona ha dejado.

Al parecer la mención de esa persona llama la atención de los dragones, quienes miran al viajero con ojos curiosos. La boca de Leviathan se abre dispuesta para hacer una pregunta acerca de esa persona, sin embargo, se ve interrumpido por una segunda voz alegre e imperativa.

— ¿Are? ¡Pero si son ustedes! ¡Finalmente han llegado!

Las siete personas llevan su mirada al dueño de la voz que mueve su mano de manera energética. Paimon no tarda en corresponder el saludo cuando su mirada cae sobre Venti y Zhongli, los dragones de inmediato cambiaron sus semblantes a uno más serio cuando notaron la peculiar energía en el patrono de los contratos, una energía similar a la suya o mejor dicho, similar a la de  Neuvillette.

Un mitad dragón.

— ¡Bardo de pacotilla, Zhongli!

El viajero y su pequeña amiga fueron los primeros en acercarse. Luego las Arcontes menores los siguieron, Venti sonrió aún más cuando las vio, por el contrario, Zhongli parecía no quitarle la mirada a los dragones y parecía que los tres se lanzaban rayos a través de sus miradas. Los viajeros y Paimon se quedaron en blanco, Nahida sonrió con una gota cayendo de su frente, Dainslef y Wanderer miraron la escena sin decir nada, en realidad poco les importaba si comenzaban a pelear, Dains parecía que en parte los juzgaba con la mirada. Por otro lado, Venti y Furina sólo negaron tras soltar un suspiro agotador.

— Etto.. ¿Llegué en un mal momento?

El cuerpo del dios del viento y del patrono de los contratos se tensan al escuchar la voz de su amada hija, Lumine corre a los brazos de su amiga al igual que Paimon, ambas son recibidas por la hija del viento, Aether pronto las sigue y saluda a su amiga con un gesto de su mano. Zhongli decide alejarse de los dragones y opta por llevar su atención a su hija y las Arcontes menores.

— ¡Te extrañamos, Leyna!

La chica rió con alegría y acaricio la cabecita de Paimon.

— Yo también los extrañe, ¿cómo han estado?

El grupo se sumerge en una alegre conversación, mientras tanto, los dos Arcontes más longevos deciden conversar con sus compañeras y está vez sí recibirlas como es correcto. Los dragones permanecen en silencio al igual que los otros dos viajeros.

•••

¡Lamento la tardanza! Debido a las finales de mi semestre, tuve que tomarme un tiempo de descanso para la historia, ha sido difícil pero ya estoy de vuelta.

Muchas gracias a todos los que han esperado las actualizaciones de esta historia y por supuesto, por su continuo apoyo.

Nos vemos en el siguiente capítulo.