Capítulo 12
— Entonces, querida Leyna. ¿Este dragón es tu nuevo novio?
Indarias le sonrió con picardía a la diosa menor. Ella se sonrojó hasta las orejas al igual que Neuvillette, ambos eran tímidos y eso ante los ojos de la Yaksha Pyro los convertía en la pareja ideal. No había una razón en particular, pero el solo verlos a ambos sonreír como una pareja enamorada daban una hermosa imágen.
— Sí, lo es.
El silencio reino sobre el grupo al escuchar la respuesta clara y segura de la menor. Las risas no se hicieron esperar por parte de los dos Yaksha más grandes. Anémona frunció el ceño al escucharlos e hizo un pequeño mohín en sus labios, para Indarias fue irresistible la ternura de la joven por lo que no dudo en alejarla del dragón y abrazarla.
Leviatán no dudo en mostrar su disgusto soltando un gruñido que para su mala suerte fue ignorado olímpicamente por la Yaksha. Bosacius y Menogias se acercaron al dragón para hablar con él, habían intentado hablar con él otro dragón pero aquel era más gruñón que esté o al menos ese fue Bosacius quien trato.
Ante su fallo, Menogias se burló de Yaksha diciendo que las reacciones de electro y Dendro no se llevaban de la mano debido al gran daño que podían provocar juntos. Bosacius no lo entendió en el momento pero sabía que era una especie de broma burlesca por parte de su compañero.
— No te preocupes, nuestra hermana no te robara a nuestra pequeña sobrina.
Neuvillette observó a los Yakshas de pies a cabeza en silencio, no dijo nada solo hizo un movimiento con su cabeza para asentir, aunque luego de reflexionar bien las palabras dichas por el Yaksha de cuatro brazos, observó a los Yakshas con curiosidad.
— ¿Hermana?
— En realidad somos hermanos jurados.
Cómo era su primera vez escuchando de este concepto a Neuvillette le llamo la atención este tema. Un tipo de hermandad que el desconocía, además del tema de compañeros y amigos de los cuales el solo tenía compañeros en quienes confiaba, el término "amigos" tiene un significado muy profundo para él, por lo que nunca lo ha usado para referirse a una persona como "amigo".
— ¿Qué son los hermanos jurados?
Bosacius y Menogias se miraron entre ellos, el primero se rasco la nuca sin saber que responder sobre eso, dado que explicar a él se le daban muy mal. Menogias aclaro su garganta con un carraspeo y le ofreció al dragón un asiento para que se sentará.
— Los hermanos jurados son un grupo de personas que comparten los mismos intereses o incluso que tienen las mismas aspiraciones — explico el Yaksha más al ver qué el dragón seguía sin entenderlo bien continúo con su explicación —: para que estás personas sean consideradas como hermanos jurados, es necesario hacerse una promesa, ya sea ante la muerte o ante cualquier adversidad, esta promesa se debe de cumplir ya que es una forma de lealtad. Algunos humanos lo usan para hacer alianza.
Neuvillette llevo una mano a su barbilla y pensó sobre el tema, era interesante y a su vez tenía un significado demasiado profundo. Eso le recordó al resto de dragones elementales, no tiene muchos recuerdos de ellos o si compartió algún tipo de amistad con ellos, en el fondo estaba seguro que no. Cada dragón elemental es diferente, si bien tienen sus propios sentimientos, son reservados entre ellos, así como lo es él. Ninguno parece tener interés en el otro y si alguna vez llegaran a unirse será por una sola causa, una posible guerra seguramente.
Por supuesto, que él lo que menos quiere es llegar a una guerra y ahora que ha conocido a su pareja predestinada menos quería arriesgarla.
— ¿De que hablan?
Indarias llegó junto a ellos acompañada de Anémona quién no dudo en regresar al lado del dragón del agua para tomar su mano, al cruzar miradas, ambos se sonrieron.
— Sobre el significado de hermanos jurados.
Menogias llevo su mirada a los Yaksha más pequeños que venían con una bandeja de comida. No, más bien a Bonanus que venía con una enorme sonrisa mientras cargaba una bandeja de comida, Xiao se mantenía a su lado ayudándola con algunos platos.
— ¿Qué más piensas comer, Bonanus?
La Yaksha Hydro miró a su hermano sin borrar la sonrisa en sus labios.
— ¿Todo lo hay? ¡Hay mucha comida, suficiente para llenarme todo el día!
Menogias frunció el ceño, los Yaksha mayores, miraron la escena con una sonrisa nerviosa en sus labios. Anémona río ante la discusión de los hermanos, Xiao siendo el medidor en la pelea para evitar que salieran dañados o algo.
Era un poco tierno y a la vez graciosa la escena, pues era como ver la versión chibi de un mono discutiendo con un tigre y en medio, una pequeña ave tratando de evitar una pelea futura. Aunque pronto el tigre fue tomado por un dragón de ojos ámbar, bueno en ese momento Zhongli se había acercado a ellos para tomar a la Yaksha Hydro y cargarla como costal de papas.
Venti venía detrás de él, hecho un desastre de los cabellos y la ropa llena de polvo. No preguntaron la razón de su apariencia por qué sabían que Morax se había encargado de castigarlo.
— Papá Zhongli...
Los ojos ámbar pronto se enfocaron en los de su pequeña hija, no hubo necesidad de palabras para hacerle saber a Anémona que debía ir con él para recibir su castigo. Con la mirada sobre el suelo, Anémona soltó la mano de Neuvillette para dirigirse hasta su papá Zhongli quién mismo se encargo de darle una mirada al dragón de agua como advertencia para que no intervenga.
Y, ¿Quién es Neuvillette para detener al Alfa de esta familia? Porqué lo es, ¿no?. Él aún no se casa con Anémona por lo tanto el Rey del Oro es el líder de la familia, un momento... él no pensó eso, ¿cierto?. Sintió como si una especie de balde con agua fría cayera sobre él, no puede creer que vea al Arconte Geo como su líder.
— ¡Hey! ¡¿Y a mí porque me secuestras?!
Lo único que se escuchó fue el grito de la Yaksha Hydro a la lejanía, mientras que el trio se alejaba de la zona. Anémona soltó un suspiro aliviado, la presencia de Bonanus era una bendición cuando el mismo Morax estaba enojado, esto quería decir que su castigo sería menor y no grande, al menos eso esperaba.
Mientras miraba a Bonanus, se puso a recitar una oración hacia ella. Por supuesto que la Yaksha fue consciente de esto, podía escuchar como su nombre salía entre los murmuros de su sobrina, así que cuando Anémona abrió sus ojos, Bonanus se encontraba observándola con una sonrisa burlesca. La oración de la pequeña diosa fue escuchada y agradecida con la Yaksha juro comprarle panecillos de Luna.
— Anémona.
La voz de su papá la hizo volver al mundo real, ambas mujeres escucharon en silencio al Arconte.
— ¿Si, papá?
El Arconte detuvo sus pasos, con cuidado bajo a la Yaksha, en ningún momento miró a su hija. Bonanus por su parte guardo silencio sabiendo que era un tema en el que no podía meterse por ahora, así que sacando un pequeño panecillo de Luna miró a padre e hija hablar entre ellos.
— ¿Irás a Fontaine?
— ¿Eh?
Anémona miró sin entender a su padre, tuvo que tomarse un par de segundos para comprender a qué se refería pero no llegó a nada en realidad. Bonanus observo los ojos ámbar del medio dragón, ella al ser la única en poder ver su expresión dejo su postura despreocupada para poner atención, Zhongli tenía una mirada triste y preocupada algo que pocas veces podían verse, no era necesario preguntar la razón. Zhongli vio crecer a Anémona desde que era pequeña, incluso desde que estaba en los brazos de Venti, a pesar de que hubo un tiempo en el que no la quiso, aprendió a valorarla y amarla como su hija.
— Si has elegido al Juez de Fontaine como tú pareja, no puedes quedarte más en Liyue y él tampoco puede quedarse más en este lugar.
Anémona se dio cuenta en ese momento a qué se refería su padre. Neuvillette pronto se iría a Fontaine por lo que si ella se quedaba en Liyue sería difícil para ambos verse a diario, para ninguno de los dos sería fácil verse, sobre todo y teniendo en cuenta la posición en la que se encontraba Neuvillette.
— Además de ser un Juez, Neuvillette es el corazón del Mar Primordial por lo que no siempre puede venir a Liyue para verte. En cuanto a ti, puedes ir y venir las veces que quieras, no tienes responsabilidades como él las tiene — Zhongli giró en dirección de su hija para ver su expresión, ella no lo miraba, lo único que miraba era el suelo bajo sus pies —: Anémona, la etapa en la que debes enfrentar muchas barreras, está por iniciar y debes pensar en lo que harás a continuación.
— ¿Y que debo hacer?
— No sé, es tu relación, no la mía.
Anémona miró a su padre con reproche y Bonanus cubrió su boca para reprimir la risa que quería salir de ella. Zhongli había sido inocente ante su respuesta sincera por lo que él no se había dado cuenta de que había sonado gracioso y no serio. La hija del viento soltó un suspiro sabiendo que debía pensar mejor la pregunta.
— Entonces, ¿que harías en mi lugar? — padre e hija se miraron a los ojos como si estuvieran a punto de enfrentarse a una pelea de miradas, Bonanus trato de no poner mucha atención a la conversación sabiendo que era un tema serio en el que ella prefería no salir lastimada ante la respuesta del Arconte —: ¿Llevarías a la tía Bonanus contigo o la dejarías en Fontaine?
La nombra se tenso ante su mención, dio unos pequeños pasitos para alejarse de ambos con la intención de no escuchar más, sin embargo la mano del dragón a su lado evitó que se fuera. Anémona observó el agarre de su padre en silencio, comenzaba a arrepentirse de haber metido a la Yaksha.
— ¿No debería ser Bonanus quien responda eso?
Venti llegó poco después interrumpiendo la conversación del dragón y la hija del viento, aunque en realidad había estado presente desde que la conversación inicio entre ellos, sí una vez más los había espiado. Bonanus observó al Arconte y soltó un suspiro resignado.
— En tu lugar decidiría ir a Fontaine, incluso si es difícil ver a Neuvillette por su trabajo, buscaría la forma de siempre estar presente a su lado. No sé, siempre puedes llevarle el desayuno, la comida e incluso la cena y acompañarlo. Estoy segura que él te lo agradecería ya que no hay nada mejor que el apoyo que le das a la persona que amas — Zhongli miró a la Yaksha con seriedad, en ese momento ella aprovecho para zafarse del agarre del medio dragón — Respondí tu pregunta, así que ahora me voy...
Pero una vez más, la mano de Morax la detuvo. Ella lo vio con reproche, él la ignoro solo un momento, Venti solo se reía de la escena que se presentaba frente a sus ojos, era divertido de ver. Bonanus solo bufo y se cruzó de brazos cuando Zhongli la soltó confiando en que no se iría.
Anémona sonrió avergonzada, luego se disculpará con su tía Bonanus. Levanto la mirada para ver los ojos ámbar de su padre.
— Iré a Fontaine.
Zhongli le sonrió sabiendo que esa sería la respuesta de su hija.
•••
¡Hola!
Gracias a todos los lectores por estar de nuevo aquí. La verdad es que a pesar de ser una historia corta ha tenido un gran éxito y estoy orgullosa de eso. Nuestra Anémona pronto partirá a Fontaine, un nuevo hogar y nuevos aires, además de la despedida de los viajeros ya saben, pronto se van a Natlan.
Nos vemos en la próxima actualización.
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